RADIO TELEVISORES AM/FM DE MORTY ENTREGAS

Cinco miró el letrero por unos segundos. Las cámaras arriba de ese edificio había llamado su atención. Tomó impulso y se teletransporto adentro, seguido de eso subió las escaleras con cuidado.

MONTER GUSSMAN, ODÓNTOLOGO

Observó un rato el interior y tocó la puerta. En lugar de abrirse la puerta que tocó, la de al lado fue la que lo hizo.

━━¿Qué quieres? ━━le dijo un hombre que parecía apurado o más bien nervioso.

━━Hola, vendo enciclopedias para los exploradores, me preguntaba si-

Pero no pudo continuar, porque él le cerró en sus narices. Cinco resoplo y se volvió a teletransportar hacía el interior; el hombre gritó y rebusco entre el cajón de la alacena sacando un pequeño cuchillo. Número Cinco no pudo evitar pensar que Melissa hubiera soltado una carcajada en ese momento.

━━¿Co-Como lo hiciste?

━━No tengo tiempo para explicarlo.

━━¿Eres del pentágono, eh?

━━Decididamente no.

━━¿La CIA? ¿FBI? ¿La KGB?

━━¿Recién hecho? ━━preguntó sin prestarle atención, teletransportándose al lado de la cafetera. El hombre volvió a gritar. Cinco camino hasta el espacio abierto y lo observó. ━━¿Colombiano?

━━Mezcla propia. ━━respondió aún temblando.

Cinco giró en sus talones y empezó a observar todo lo que tenía al rededor. Papeles colgados, información del estado, aunque la mayoría era falsa y él lo sabía

━━¿Oíste hablar del Área 51? ¿Roswell?

El hombre apretó los dietes y empezó a reír emocionado.

━━¡Diablos! ¡Wu! Siempre supe que no éramos los únicos. Eleanor pensó que mi cabeza tenía algo flojo pero es cierto ¿si? Los ovnis, circulos en los cultivos.

━━Pues, la verdad esta ahí.

━━No, no, no, no. La verdad.. ━━empezó acercándose, Cinco se puso en alerta. ━━ está aquí. Frente a nosotros. Dime, ¿Por que la sonda es anal siempre?

━━Da un paso más y te derretiré el cerebro. ━━amenazó.

El hombre puso las manos a sus lados en son de paz.

━━Necesitas espacio, entiendo. ━━dijo con miedo nuevamente.

━━Esos artefactos en el techo... ━━se acercó a una mesa. ━━¿Son tuyos, verdad?

━━Oh, sí, yo los hice. Para registrar anomalías en la atmosfera. ━━Cinco le prestó atención. ━━Esperando.

━━¿Esperando qué?

━━A ustedes.

Cinco achino los ojos sin entender.

━━A todos ustedes. ━━agregó. ━━Todo comenzó en 1960, el año en que lanzaron el Silrveton Omega. Estaba en medio de una venta cuando pasó algo muy extraño. En los últimos tres años, he sido testigo de cinco estallidos de energía en el callejón trasero. Lo mismo, cada vez: Una brillante luz azul y algo aparecía.

Se dio la vuelta y observó las imágenes tras él.

━━¿Viste bien a alguno de ellos?

━━Sí, al primero. Y luego al grande sensible.

━━¿Sensible? ━━repitió viéndolo nuevamente.

━━Sí, lloró mucho. Volvió mucho al callejón, estaba horas gritando el nombre de una mujer. Ahm... ━━chasqueo los dedos. ━━¡Allison!

━━Luther. ━━dijo dándose la vuelta nuevamente. Si Número Uno estaba allí, Melissa también.

━━Y no fue el único, los otros también volvieron varias veces a través de los años buscándose, hasta que dejaron de venir. Excepto esa niña, ella no volvió.

Cinco se volteó bruscamente y se acercó a él. El hombre se puso nervioso por la cercanía y la mirada del chico que reflejaba desesperación.

━━¿Dónde está ella? ¿Estaba bien? ¿Dijo algo? ¿Gritó algo? ¿Qué le pasó?

━━Y-yo no sé donde está, se fue corriendo. ━━recordó luego algo se le vino a la cabeza. ━━Pe-pero siempre pensé que podría estar involucrada con esto.

El hombre se acercó a sus cajones con cuidado y más de diez periódicos completos. Cinco se acercó rápido y frunció el ceño al ver la primera plana.

CHICA RUBIA ROBA BANCO EN LA QUINTA AVENIDA

CHICA PELIRROJA LOGRA ROBAR EN LA CASA BLANCA.

DESCONOCIDA ROBA BANCO NACIONAL.

PREMICIA: ¿SIMILUTUDES EN LAS PERSONAS QUE REALIZARON ATAQUES EN LOS ÚLTIMOS AÑOS?

¿Qué rayos? Cinco tomó los periódicos y los examino. Todas, a simple vista, eran mujeres diferentes: Con pecas, sin pecas, altas, bajitas, morochas, pelirrojas, rubias, delgadas, con sobre peso. Pero él fue el único que encontró una verdadera igualdad en ellas: los ojos. Eran los mismos, no sabía si eran del mismo color pues el periódico estaba en blanco y negro, pero la forma no cambiaba. Las pestañas incurvadas naturalmente, una pequeñísima herida en la frente casi indetectable, además de que en una de ella salía con un pequeño camisón, él reconoció un pequeño lunar cerca de su ombligo y lo más importante, una pulsera en su muñeca derecha. Era Melissa.

Por inercia sacó una pulsera que traía en el bolsillo en el que parpadeaba un verde brillante, seguía viva. Pero aún no le cabía en la cabeza el por qué de sus acciones ¿Tendría algo que ver el chico que le dijo cariño?

¿Dónde estaba Melissa?

(...)

Sus piernas corrían todo lo que podía, atrás suyo estaban dos hombres el doble de altos que él y sus intenciones no eran nada bonitas. En sus manos tenía un fajo de billetes gigante que segundos después se guardo en el bolsillo.

━━¡Creo que ya debes hacerlo, Mel! ━━le gritó a lo que aparentemente no había nada, oyó una carcajada burlona. ━━¡Anderson no estoy jugando!

━━¿Qué pasa? ¿Ahora necesitas ayuda de esta niñita?

━━¡Sólo fue una broma! ¡No creo que seas una niñita!

━━¿Sabes? Creo que debería dejar que esos te rompan la cara.

━━¿Qué clase de novia eres?

━━Una con superpoderes, cariño.

Mateo sintió como caía para adelante, uno de ellos se le había tirado encima.

━━¡Ya lo tengo, George! ━━le gritó a su compañero despreocupado, ese mocoso no era una amenaza, sin embargo aún no entendía como había logrado abrir la caja fuerte.

Otro gran hombre apareció en la escena, sonrió satisfecho; hasta que sintió un golpe en su parte baja, específicamente, una patada. Se tiró al suelo y empezó a retorcerse, Mateo lo miró con una sonrisa.

━━¡¿Como hiciste eso?! ━━le gritó al adolescente.

━━¡Yo no fui! ¡Yo estoy acá!

━━Yo fui. ━━dijo una tercera voz.

El hombre levantó la cabeza, pero aún así no había nadie, solo su amigo retorciéndose y mirando a la nada asustado.

━━¡Dereck! ¡Una niña! ━━le gritó su amigo asustado. ━━¡Pero ya no está!

━━¿Qué rayos...?

━━¡Hola!

Una chica de cabello azul estaba frente a él. Traía una maleta en los hombros, también tenía puesto unos jeans rasgados, un camisón corto y un chongo arriba de la cabeza con el cabello suelto. Algo no visto normalmente. Era alta, pálida y tenía pequeñas pecas cerca de la nariz.

Pero de pronto, desapareció. Dereck se sobresaltó, se puso de pie y miró todo asustado.

━━¡Qué mierda! ¡Qué eres!

━━Soy un fantasma. ━━dijo a su lado, él se alejo lo más posible.

━━Ahora no me ves.

Un pequeño aire le puso los pelos de punta, como si le hubieran soplado en el cuello. Tembló.

━━Y ahora sí.

Luego la chica volvió a aparecer, esta vez frente a él, le propinó un buen golpe en la cara haciéndole sangrar la nariz y cayendo de espaldas.

━━¡Ustedes son los hijos del diablo! ━━gritó corriendo para alejarse, tomando a su amigo del brazo para irse.

Cuando ya no estaban a la vista, Melissa se agacho para ayudar a poner de pie a Mateo, quién metió los fajos de dinero en la maleta.

━━Mi espalda. ━━murmuró adolorido.

━━Se supone que tienes super fuerza. ━━le dijo burlona, ambos empezaron a caminar hacía un callejón.

━━Con un treinta por ciento. ━━añadió bufando. ━━En cambio tú, has mejorado en tu transformación.

━━Lo sé. ━━comentó riendo, sacando una llave de su bolsillo que usó para abrir una pequeña puerta al final del callejón que aparentemente no servía. Esta se abrió y ambos entraron. ━━Es divertido que piensen que hemos hecho un pacto con el diablo.

━━Si te sigues camuflando, es normal que lo hagan.

Mateo cerró la puerta y miró la gran casa en la que estaban. Nunca se iba a cansar de mirarla, gracias a todo el esfuerzo que habían hecho podían tener ese lugar para ellos, escondido, pero lindo.

Melissa boto la mochila en uno de los sofás allí, se sacó los zapatos y volvió a su forma natural. Mateo admiró como su cabello se volvía nuevamente rojo, su tamaño aminoraba y su tono de piel volvía a la normalidad, ahí estaba. Su Melissa.

Corrió hasta ella y la abrazó por la espalda colocando sus brazo al rededor de su cintura y su mentón en su cuello aspirando el delicioso aroma a coco de su cabello.

━━Hey. ━━murmuró dándole un beso en el cuello.

━━Hey. ━━le respondió soltando una pequeña risa.

━━¿Sabes que te amo, Lissa?

Entonces sintió como se tensaba, y su sonrisa desapareció. Mierda.

Melissa, por su parte, se tocó la cabeza adolorida por el pequeño mareo. Lissa, había escuchado eso en otra parte. Por instinto miró su pulsera, que a pesar de los años aún parpadeaba un color verde.

━━Debes botar esa cosa. ━━le dijo Mateo, tratando de llamar su atención, caminando hacía la cocina para servirse jugo en dos vasos.

━━Es lo único que tengo, Mat, no lo voy a botar. ━━respondió echándose sobre el sofá haciendo circulos en su cien con ambas manos. ━━Oye, ¿Por qué me llamaste así?

━━¿A qué te refieres?

━━Me llamaste Lissa. Tú no lo haces. ━━recordó. Lo extraño era que cuando él lo dijo, no escuchó su voz. Si no otra que le causaba cierto cosquilleo en el estomago. ━━Me llamas Mel, o fantasmita, o Anderson, a veces me dices-

━━Simplemente me apeteció. ━━mentira. ━━¿Te molesta que te llame así?

━━Un poco, no sé, es extraño. ━━soltó una carcajada.

Mateo le dio el vaso de jugo y subió las escaleras con la excusa de cambiarse de ropa.

Mierda, sabía que no era una buena idea. Tenía que ser más discreto. Si seguía así Melissa recordaría todo.

Se adentro en su cuarto y de abajo de la cama sacó una caja, la observó por un momento meditando.

No le gustaba mentirle, pero era necesario. Desde que la conoció sabe todo sobre ella, literalmente, lo de The Umbrella Academy, el viaje en el tiempo, el fin del mundo. Pero lo que más le dolía, un tal Número Cinco, su novio, o mejor dicho ahora, ex novio. Se lo iba a decir, en serio le iba a contar la verdad. Qué le engaño solo para que le ayudara a ganar dinero y que le mintió cuando le dijo que en realidad ella había escapado al igual que él y que no lo recordaba solo por la anestesia. Pero no pudo, en todo ese proceso se enamoró. Se enamoró profundamente de ella. Querer es una palabra corta con sus sentimientos hacía ella.

Abrió la caja y sacó los papeles.

Club nocturno Singapore

Ahí debían ir, es en donde se encontraba Luther Hargreeves. Hace unos días que formó un plan; provocaría que Melissa robara lugares en donde estaban los Hargreeves, los había investigado, y cuando ellos la vieran la dejarían de buscar. Como el tal Diego que seguía persistente en encontrarla desde que por casualidad le robaron, o Klaus que había hecho un anuncio en el periódico a nombre del gobernador, también estaba Allison quién la buscaba en la policía. Y si ellos la odiaban, cuando Melissa recuerde lo que pasó realmente no le quedaría otra opción que quedarse con él.

Un plan maestro.