Stu y Astrid 1960

"¿Quieres que hagamos qué?"  preguntó Stuart, con el pincel suelto en la mano.

John, quien estaba leyendo un libro a su lado, también miraba boquiabierto a Astrid.

La mujer los miró fijamente, "Me escucharon".

John soltó una carcajada, “¿enserio?  Porque sonó como si quisieras que, que folláramos"

Astrid se acercó con una sonrisa, "Así es".  Ella dijo.

Stuart dejó su pincel, "Pero... ¿por qué?"

“Porque sería muy caliente ”.  Ella dijo de manera práctica.  "He estado pensando en eso durante meses".

John sonrió, "¿En serio?"

Stuart golpeó su brazo, "¡John!"

El hombre más joven se frotó el brazo, "Ow, ¿qué?"

Astrid se rió, “Me alegro de que estés intrigado, John.  Porque tú eres el que me gustaría ver abajo”.

John hizo una doble toma, "¿Por qué yo?"  No pudo evitar sentir curiosidad.

Stu se rió entre dientes, "¿Tienes que preguntar?"

John lo golpeó esta vez.

Astrid tomó el libro de John y lo dejó.  Pasó una fina uña por su mejilla, "¿Estás dispuesto a hacer esto, John?"

El joven la miró a ella y luego a Stu, ¿estaba listo para tomarlo por el culo?  Claro, había besado y manoseado a algunos tipos, pero ¿esto?

Al ver su vacilación, Stuart sintió que la confianza fluía a través de él.  Lo golpeó y le dijo: “No te preocupes, bebé.  Sere gentil."

John lo fulminó con la mirada, pero se sonrojó al hacerlo.  Finalmente, asintió hacia el suelo.

Astrid se volvió hacia su novio, "¿Y tú?"

Stuart suspiró, pero también asintió.  Con toda honestidad, la idea era encantadora e hizo que su polla se contrajera.

Astrid sonrió mientras se ponía de pie, “Muy bien.  Desnúdense, los dos.”

John se rió, "¿Solo vas a mirar?"

"No."  Ella respondió, sorprendiéndolos.  “Ve a pararte ahí, John.  No te necesitamos todavía.  Stuart, quédate sentado."

Ellos la obedecieron, divertidos y curiosos.  Stuart observó con curiosidad cómo ella caminaba hacia él, moviendo las caderas.  Podía sentir que se endurecía simplemente al verla.  Finalmente, ella lo alcanzó.

Stuart estaba vestido solo con sus bóxers ahora, pero ella se agachó y comenzó a quitárselos.  Se incorporó para ayudarla y dejó que los tirara al suelo.  Él jadeó cuando ella tocó su pene, comenzando a frotarlo.

John se estaba quitando los pantalones ahora, sintiéndose endurecido por la exhibición.  Con razón Astrid quería mirar, era electrizante.

Stu jadeó y gimió cuando ella le hizo una paja, haciendo que su polla se elevara y doliera.  Él anhelaba la liberación cuando ella detuvo sus movimientos.  "¿Amor?"

Se puso de pie y fue a buscar un pequeño frasco de un cajón.  Luego volvió con él y cubrió su pene con el lubricante, asegurándose de que el viaje fuera suave.  Le dio un beso a Stu en los labios y se levantó.

Dirigiéndose a John, sonrió, "Ahora es tu turno".

John la miraba boquiabierto.  Astrid no solo quería que Stuart lo follara, no, John tenía que follarse a sí mismo en la polla de Stu.  La idea lo excitó increíblemente, pero seguramente no sería fácil.

Stuart habló, “Vamos, Johnny.  Por favor."  Estaba agarrando los brazos de la silla con fuerza.

John caminó hacia él, no del todo seguro de qué hacer.

Astrid se sentó en su cama, "Siéntate sobre él".  Ella ordeno.

John se estremeció pero se dio la vuelta para darle la espalda a Stuart.  El hombre mayor lo agarró por las caderas y lo acercó, John tuvo que abrir las piernas para colocarse encima de él.

El cantante jadeó cuando sintió el roce de la polla de Stu contra él.

Stuart extendió su mano para frotar su estómago, “Está bien, amor.  Relájate."

Lentamente, Stuart ayudó a John a bajar.  John sintió un ardor mientras lo estiraba, pero el lubricante lo ayudó enormemente.  Cerró los ojos mientras caía, gimiendo.  Finalmente, estaba sentado completamente en el regazo del chico mayor, su gruesa polla enterrada dentro de él.

"Permanezcan allí."  Dijo Astrid con voz entrecortada mientras se levantaba y buscaba su cámara.

Los chicos estaban quietos mientras los fotografiaba, John agradeció el tiempo para acostumbrarse a sentir a alguien dentro de él.

Astrid bajó su cámara, "Muévete".  Ella dijo.

Quedó claro que John era el que se suponía que debía moverse, y lento pero seguro, comenzó a moverse ligeramente hacia arriba y hacia abajo.

No fue suficiente para Astrid, "Más".

John, con las manos en los reposabrazos, se empujó más hacia arriba, lo que provocó que la polla de Stuart se hundiera más cuando volvió a caer.

Stu gemía en su espalda, acariciando sus caderas.

"Más rápido."  Ordenó Astrid, acostándose de lado en la cama.

John obedeció, subiendo y bajando sobre la polla dura.  Sus brazos estaban haciendo mucho ejercicio.  John estaba gimiendo y gimiendo, pero un aullido salió de su garganta cuando Stuart empujó hacia arriba justo cuando estaba cayendo.  "¡Argh, haz eso otra vez!"  gimió.

Stuart lo complació, haciendo temblar la silla cuando empujó sus caderas hacia arriba.

Astrid se estaba tocando mientras miraba, agradecida de haber tenido la confianza suficiente para pedirles que hicieran esto.

John jadeó entrecortadamente después de un empujón particularmente fuerte y sus manos resbalaron de los reposabrazos.  Ahora Stuart era quien lo levantaba y lo bajaba, manejando a John como un muñeco de trapo.

John apoyó la cabeza en el hombro de Stu, gimiendo y aullando cuando su próstata era golpeada repetidamente.

"Estoy cerca."  Stuart jadeó.

Astrid dijo lo mismo.

Juntos, se corrieron.  Stuart bajó a John con fuerza y ​​se corrió dentro de él, mordiéndole el hombro.

John jadeó cuando se llenó, pero no fue suficiente para que se corriera todavía.  Gimió, su pene estaba duro y dolorido.  "Por favor, tócame".  No estaba seguro de con quién estaba hablando.

Stuart hizo ademán de obedecer pero Astrid apartó su mano de un golpe.  "No."  Ella dijo y tocó los costados de John.  "Ponte de pie."

John gimió pero obedeció, con las piernas temblando.  Stuart estaba agotado, se puso de pie detrás de John y se dirigió hacia la cama, desplomándose en ella.

Astrid le sonrió a John, asustándolo.  Caminó detrás de él y tarareó aprobación cuando vio que él estaba apretando, manteniendo el semen de Stu dentro de él.  Fue a su cajón y sacó dos cosas.  Luego volvió con John.  "¿Todavía quieres complacerme, John?"

Stuart los miraba desde la cama, con los ojos muy abiertos.

John curvó los dedos de los pies pero asintió, "Sí, sí".

Astrid sonrió, besó su hombro justo donde Stu había dejado la marca de su mordedura y preparó un juguete.

John gimió cuando sintió que un plug se deslizaba dentro de él, manteniendo el semen de Stu atrapado dentro de él por quién sabe cuánto tiempo.  Luego, Astrid caminó hacia su frente, se rió en voz baja por su expresión excitada y se apresuró a ponerle un anillo en el pene a John.  Afortunadamente, estaba menos endurecido que antes y fue más fácil ponérselo y ajustarlo.

Stuart se levantó entonces y admiró a John.  “Mierda, amor.  ¿Ahora qué?"  Le preguntó a Astrid.

Astrid azotó suavemente el trasero de John, haciéndolo saltar.  "Tienen un show, ¿no?"

John levantó las cejas, "T-¿quieres que yo, hmm, actúe así?".  El plug se hacía muy presente cada vez que se movía.  Y el anillo del pene era una tortura.

Astrid agarró la ropa de John, "Sí".

Stuart se puso su propia ropa, riendo con anticipación.

John no pudo evitar estar emocionado, así que agarró sus cosas y comenzó a vestirse.

Astrid le sonrió, "Tal vez, si tienes suerte, Stuart se apiadará y te follará de nuevo en el baño".

John y Stuart gimieron.

John jadeó cuando su polla encerrada fue agarrada y apretada.

"Pero", comenzó Astrid, "no te vendrás hasta que ustedes dos estén de vuelta aquí".  Se volvió hacia Stu, "¿Entendido?"

Stuart asintió, "Oh, sí".

Y se compadeció de John y lo folló rápidamente en el baño entre actuaciones, dos veces.  Siempre volvía a colocar el plug después y no quitaba el anillo del pene, incluso cuando John le rogaba que lo hiciera.  Los demás pudieron ver que John estaba un poco más desquiciado que de costumbre, pero dejaron que las drogas se lo explicaran.

Y finalmente, después de una noche de trabajo de seis horas (más corta de lo habitual, gracias a Dios), Stu y John regresaron a Astrid, prácticamente corriendo.

Sí, definitivamente les gustaría volver a jugar.

Créditos a DemonDean10 en ao3 ♡
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