Había llegado el día donde Frankie se iba a reunir con su vieja amiga de la infancia, Josephine Magnin. Sin duda si alguien podía animarla y olvidar los sucesos 11recientes, era Jojo.

La de cabello corto se da cuenta de Frankie -Francisca! Por aquí!!- avisa y se sienta -años que no te veo. No vives tan lejos y aún así no te dignabas a visitarme- bromea.

La castaña ríe -una disculpa, Jojo. Mi antiguo empleo me mantenía muy ocupada y cuando llegaba a casa lo único que quería hacer era dormir- admite.

-No te preocupes. Te comprendo- le da un trago a su whisky -ahora, hablemos de ese Martin traidor- pide Josephine dando paso a la breve historia de Francis -para mi que hubo injusticia por parte tuya. Tu saliste herida y él ileso!

Frankie sonríe -eso fue mi culpa. Mis sentimientos me cegaron por completo.

-Estabas emocional! No te culpes! Terrier es un hijo de puta!- gruñe.

Jojo se disculpa con su amiga pues iría al baño. Francis en lo que espera, se pone a mirar en la televisión del bar un partido de fútbol, este le recordó el día anterior y con ello su mente la hizo pensar en el chico Lucas que conoció, y por pura coincidencia era el mismo tipo que jugaba en el partido transmitido.

-Volví. Ya sabes qué ordenar?- pregunta Jojo.

Francis seguía clavada en el partido -no... oye, de casualidad no sabes qué partido se está jugando?

La rubia le regala una mirada extraña -claro que no. No veo ningún deporte.

El mesero llega a pedirles la cuenta -disculpe, sabe cuál es el partido que se está transmitiendo?- la ojiazul señala.

-Es Lyon contra Clermont. Es la repetición- le responde y en eso pasan un gol anotado por Lucas. Aquello hace que la castaña se le escape una leve sonrisa.

-Mochas gracias, chicas. Que tengan un buen día- agradece el mesero cuando Jojo le paga y se va.

Jojo chasquea sus dedos -hey! Francisca! Todo bien?

Francis reacciona -qué? Si.

Josephine alza una ceja -por qué de repente demuestras interés en un partido de fútbol?

Ante la pregunta, Frankie se deshizo de sus pensamientos -yo? No. Cuánto fue de la cuenta.

Su mejor amiga suelta una risita -Déjalo así. Ya luego me recompensa con lo que te pasa.

-Cómo? No! Nada me...- los ojos de Francis se desvían en el mismísimo Lucas que estaba a poco metros de lejos en el bar. Solo que esta vez se le veía decaído.

La rubia se da cuenta de todo -ah ya veo! Te dejo que te diviertas con tu novio- empieza a irse de la mesa.

-Espera, Jojo! No! No me dejes sola!

-No es que quiera, Francisca. Mi niñera me habló cuando fui al baño y dijo que me estaba esperando.

-Puedo ir contigo...

Josephine recarga una mano en el hombro de su mejor amiga -te lo agradezco, pero hay unas cosas que tengo que lidiar con mis hijos. Además que no quiere irrumpir en lo que sea que traigas con ese chico de por allá- confiesa y sale del bar.

Frankie se gira para seguir viendo a Lucas quien estaba recargado en el bar, no movía mas que su brazo para seguir bebiendo. La ojiazul no tenía intensiones de ir con él pues no quería transmitirle las vibras negativas al brasileño.

De repente, el moreno se levanta encontrándose con Francis mirándole, la escocesa se gira de inmediato y sale del restaurante lo más rápido que puede. Para su mala suerte, tenía que pedir un Uber para regresar a su casa.

-Hola por ahí- la cabeza de Lucas se asoma a un costado de Francis. Ella se mantiene quieta -noté dentro del bar que me estabas mirando. Quieres hablar conmigo?

Esta traga saliva -no! Yo venía con una amiga.

-Oh ya veo- su tono de voz se oía relajada y feliz -una disculpa por pensar otra cosa, juraba que me estabas viendo...

-Si lo hacía- interrumpe Frankie sorprendida -estaba comparando notas pues te vi en la tele. Pasaban un partido de fútbol y ahí estabas. Quería saber que no estaba alucinando y confirmar que eras tú- excusa.

Lucas ríe causado por la ternura que le hacía sentir Francis -tenías razón. El del partido era yo.

-Que genial que seas un futbolista profesional- felicita con un toque de celos discretos al recordar que su ex pareja era también un futbolista -de seguro tienes tu vida hecha a tu talla y no tienes que preocuparte por si algo no sale a tu manera porque todos te admiran y harán lo que sea para consentirte.

El brasileño empieza a sentirse extraño -Te sientes celosa de que crees que tengo una vida "perfecta"? Es por eso que no te agrado?- pregunta dolido.

Frankie lo mira sorprendida -cómo? No! Desconocía que eras un atleta- niega rápido -Tampoco te tengo algún tipo de rencor- da una pausa -es solo que... he atravesado por mucho estos últimos días que la verdad es que no las he superado.

Ante la revelación sincera, ambos sintieron una sensación de confianza y cariño pues lo que Paquetá atreve a compartir, hace que Frankie se de cuenta que había juzgado erróneamente a Lucas.

-Comprendo lo que sientes. Creía que también lo tenía todo. Y al como dijiste, pensaba que nada o nadie podía estropearlo. Sin embargo me dejé llevar y no me percaté de las señales.

-Lo siento, Lucas.

Este le sonríe -No te preocupes, Frankie- se le pasa la depresión -si algo positivo me ha pasado es el estar contigo. Estos últimos días has hecho olvidarme de mis problemas.

-Me alegra ser de ayuda. Todo este tiempo me he estado sintiendo que soy una carga para cualquiera. Créeme cuando te digo que 'me alegra poder ayudarte" me haces recuperar mi confianza que perdí- Francis se sentía cada vez más segura con el brasileño.

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La escocesa baja a la cocina pues se encontraba motivada para iniciar un nuevo día. Anoche la conversación que tuvo con Lucas le ayudó bastante -papá?

-Aquí!- Cillian avisa apurado -ay! Que bueno que te veo! Ven, tendrás que ayudarme a llevar estos papeles a la academia que necesitan- y procede a explicarle para que servían y qué tenía que hacer.

Con ello, los Shelby partieron a las canchas de fútbol. Francis tenía que encargarse de este asunto pues su padre tenía que hacer otras cosas y ya partía tarde. Una vez que entra, un chico le ayuda con la puerta y se presenta como el otro creador de la academia.

-Es un placer conocerte formalmente, Frankie. He oído muy buenas cosas de ti- revela Houssem.

La ojiazul se pone nerviosa -Lucas habla de mi?- le pregunta al novio de su más reciente amiga.

-Mmh si. Me alegra poder ver a Lucas feliz- confiesa el francoargelino provocando que el corazón de Frankie palpite más rápido.