Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

━THAT'S NEW


┍━━━━━━━┙◈┕━━━━━━━┑

DESPUÉS DE TRES ARDUAS horas de impetuoso trabajo la compañía de bomberos número 5 de Nueva York logró acabar con el gran incendio que afectó a una cafetería "Starbucks" de la Avenida Virginia esta mañana. Por suerte no hubo ningún muerto o gente herida de gravedad. El misterioso origen del incendio sigue en Investigación de la policía ya que ninguno de los presentes se dio cuenta de donde venían las llamas, pero la posible suposición es que haya sido por una de las estufas en mal estado de la cafetería...

Tony apagó la televisión ya harto de esa noticia mientras todos observaban confundidos.

Posteriormente del incidente y de la gran sorpresa que se llevaron con Astrid, los tres Vengadores llevaron a la aturdida muchacha a escondidas hacia el auto, evitando a todos los reporteros que habían afuera; Obviamente Tony se encargó de pagarle a los bomberos para que no dijeran nada en lo absoluto sobre lo visto.

Cuando lograron llegar a la camioneta Steve subió al frente con Natasha y Tony y su hermana en la parte de atrás; salieron lo más rápido posible de vuelta al complejo evitando cualquier otro malentendido.

Ninguno habló, nadie se atrevió a decir o preguntar algo. La joven Stark solo se abrazó a su hermano mientras temblaba y suspiraba entrecortadamente. El millonario no dudó en responderle con sus brazos abiertos y su calidez. Tony pudo notar el temblor de la chica, el calor y sudor que su cuerpo emanaba

Cuando llegaron, Natasha acompañó a Astrid a cambiarse ropa, ya que las de ambas estaban sucias. Luego de eso la rusa guió a Stark hacia la sala de reuniones en donde el resto de los Vengadores ya se enteraron de lo ocurrido por parte de Tony y Rogers.

Y ahora se encontraban en silencio meditando lo visto en televisión.

El millonario masajeó su barba mientras intentaba procesar algo que decir.

Astrid por su parte permanecía en una silla rodeada por todos, ocultando el miedo que sentía y las ganas de llorar que contenía.

—Astrid...—susurró a penas su hermano acercándose a ella— ¿Qué sucedió?

La castaña bajó su mirada haciendo la conversación más difícil. El silencio de la chica obligó a Tony a recurrir a Natasha.

—Nosotras...—comenzó a hablar— Sólo fuimos por un café, todo iba bien hasta que sentimos el peculiar olor del fuego...Yo escapé, pero les juro por mi vida que en ningún momento me fui como una cobarde dejando a Astrid sola, yo creí que ella iba detrás de mi, pero...No fue así. Te lo juro Tony yo...

—Calma Nat— le dijo el ingeniero— Te creo, sé que no fue tu intención— Tony, al notar que la consciencia de la rusa estaba en calma y de que no podía sacar más información de ella, dirigió su vista nuevamente a su hermana— Asye...Por favor dinos que sucedió.

La chica suspiró pesadamente antes de decir:

—Yo intenté escapar- dijo en un susurro— Pero me empujaron y me golpeé la cabeza— señaló ésta con una mano temblorosa— Luego desperté ahí...Entre el fuego y...

Su voz se cortó rápidamente al no saber que decir, por que literalmente no tenía respuesta.

—Astrid...—le susurró el Capitán Rogers posando una mano sobre su hombro con suavidad— Vimos que las llamas...No te hicieron nada, ¿Cómo fue eso posible?

Los cortos pero agitados suspiros de la agente neoyorquina comenzaron a ser escuchados por todos los presentes, cosa que hizo la situación más incómoda y difícil.

—Les juro que no lo sé...No lo sé— se limitó a decir.

—Astrid...Por Dios, ¿Eres consiente de lo que hiciste?— Tony ya comenzaba a perder los estribos— Atravesaste unas llamaradas de fuego como si fuera...Aire.

—Hermano, por favor, te juro que no lo sé yo...

Astrid fue interrumpida nuevamente por su hermano que seguía insistiéndole en hablar, la situación fue defendida por Steve y Natasha que le instaban a Tony Stark en dejarla tranquila.

—Tony por favor, mantén la calma— le decía Clint Barton.

—Lo lamento, lo lamento...Pero de verdad no logro comprender como demonios sobreviviste a eso Astrid— dijo alterado otra vez— En serio hermanita, debes decirnos como es...

—¡No lo sé Tony!— exclamó ya alterada la joven Stark agitando sus brazos— ¡Te juro...Que no...Lo sé!

Y como si fuera un truco de magia Astrid extendió sus brazos haciendo que estos desprendieran llamas de fuego, sin consumir ni su ropa ni su piel.

Los Vengadores retrocedieron espantados y asombrados ante tal hecho que parecía imposible para la joven. La morena aterrorizada comenzó a gritar intentando apartarse de ahí. En una medida desesperada se abrazó a sí misma procurando que ese terrible fuego desapareciera, y entre quejidos y súplicas mágicamente el fuego cesó.

Cuando finalmente todo acabó Tony Stark se abalanzó sobre la castaña revisando si tenía alguna quemadura o herida.

—Nada...—concluyó al ver que estaba limpia.

Todos estaban atónitos al darse cuenta que la chica no tenía ni una quemadura, ni siquiera tenía olor a ceniza. Astrid estaba limpia.

Tony pasó sus manos con temor sobre los brazos de su hermana, estos estaban tibios pero fuera de su temperatura normal.

Stark se volteó y miró al resto del equipo que estaba completamente espantado y sobre todo preocupado. La joven no dejaba de mirar su cuerpo completamente limpio, su cabeza ardía, ardía como las mismas llamas de sus brazos. No podía entender como era posible que eso le sucediera, y se aterraba a cada segundo de las posibles respuestas.

—Vamos al laboratorio— le dijo su hermano a Astrid ayudándola a levantarse del suelo, en donde se había mantenido. Stark y el Capitán ayudaron a la chica a caminar hacia el laboratorio, en donde el Doctor Banner, Thor y Clint ya se habían adelantado para preparar todo.

Al llegar Steve dejó cuidadosamente a Astrid en una camilla regalándole una sonrisa al irse.

Rápidamente el doctor Banner empezó a preparar todo para hacerle una revisión a la joven afectada.

El doctor tomó varias agujas y eligió una para tomar una muestra de sangre de Astrid. Al obtenerla la puso en un frasco para proseguir con unos parches en el cuerpo de la chica.

Cuando este procedimiento estuvo hecho todos rodearon a Astrid, en silencio, como si todo el ajetreo anterior se hubiera esfumado.

—¿Y ahora qué Bruce?— le preguntó el millonario asustado.

—Bueno, ahora los parches neuronales harán su trabajo de calmarla un poco y además nos avisará de movimiento neuronal que no sea común— dijo señalando una computadora que estaba almacenando todos los datos— Y ahora...—Banner suspiró— Haré un análisis panel metabólico básico con la muestra de sangre que le tomé-

—¿Qué es eso?— le preguntó Nat al doctor con voz suave.

—Es un examen que mide la existencia de químicos en la sangre a través del plasma en esta. Obtendremos información sobre el equilibrio químico del cuerpo de Astrid. Y si eso no nos arroja nada sospechoso, el examen de ADN lo hará.

Todos asintieron a las palabras del doctor esperando que los exámenes estuvieran listos. La joven Stark por su parte se encontraba más tranquila, los parches neuronales le habían servido para nivelar su presión arterial y su mente. Su hermano se mantenía fiel a su lado, acariciando su mano y dándole ánimos, diciéndole que todo estaría bien mientras esperaban los exámenes.

Pero en la mente de Tony habían muchas cosas dando vueltas. Él intentaba en su mayor esfuerzo disimular sus nervios, ya que en su corazón...Sabía lo que estaba sucediendo.

Un pitido llamó la atención de todos los presentes haciéndolos voltear. El doctor Banner rápidamente fue en busca de los resultados de los exámenes y los observó un tiempo, en silencio.

Todos esperaban ansiosos la respuesta del doctor, la respuesta a sus dudas y problemas, la respuesta que quizás...Podría desencadenar algo peor.

Después de unos minutos en los que Bruce se dedicó a analizar los resultados, se levantó de la silla y desplegó un holograma de los resultados. Se veía nervioso y confundido, se rascaba la barbilla con frecuencia como no sabiendo que decir.

—Los resultados ya están...— susurró con la mirada baja— No son buenos.

La sala volvió a quedar en silencio, solo se podía percibir las agitadas respiraciones de los presentes. El rostro de Astrid comenzó a desfigurarse poco a poco en tristeza y desesperación.

—¿Nos vas a decir que sucede?— le preguntó Tony desesperado a Banner. Este pasó saliva y se dispuso a hablar.

—El análisis de sangre salió...Negativo nivel 3— al ver que nadie entendió eso agregó— Alterado...—nadie habló, el silencio se mantuvo— La química de tu sangre no está...En su estado natural y no, no, no...Lo entiendo.

El doctor Banner comenzó a desesperarse, no podía entender como era eso posible siendo que hace tiempo atrás los exámenes de Astrid estaban limpios.

—¿Qué...?— susurró Astrid con voz temblorosa— ¿Cómo es...Cómo es eso posible?— pequeños sollozos escapaban de sus labios siendo calmados por los abrazos de su hermano.

—No lo sé Astrid...

La verdad, sí lo sabían.

O lo suponían.

Todo el equipo era consiente de lo que Astrid sufrió y quizás era una de las opciones para encontrar respuestas, pero obviamente no lo hablaría ahora.

—¿Qué más dice el informe?— le preguntó Natasha al doctor.

—Pues...Algo en el ADN de Astrid se alteró— Bruce amplió el holograma de una cadena de ADN en constante movimiento— Hay algo fuera de lo común, las cadenas de nucleótidos no están estables están en una especie de...Cambio constante.

—¿¡Qué?!

—¿Es una broma?

—¿Cómo es eso posible?

Dijeron Tony, Steve y Clint al unísono.

—Chicos calma— les habló el especialista— Soy doctor pero no Dios ¿De acuerdo?, no lo sé todo en el mundo, pero lo que sí sé es que hay algo fuera de lugar...Observen.

—Los nucleótidos...— susurraba asombrado y asustado el doctor— Están moviéndose.

—¡Cómo demonios es eso posible!— exclamó Astrid que se había mantenido en silencio— ¡Yo debería estar muerta! ¡Eso es imposible!

Astrid comenzó a tocar su cuerpo desesperada, queriendo saber como era todo eso posible

Bruce soltó un pesado suspiro.

—Lo sé, tu ADN está en constante cambio...Es algo imposible, necesito entenderlo...Necesitamos entenderlo y...

Una fuerte alarma hizo que todos se pusieran alerta y perdieran la concentración del asunto de Astrid.

—¿Qué es eso?— cuestionó el Capitán asustado

—JARVIS...¿La alarma por qué?— preguntó Tony Stark justo al momento en que tres pantallas se desplegaron rodeando a los presentes con signos de alerta.

El reconocimiento facial que me ordenó hacer sobre el individuo Kurse nos arrojó una coincidencia de 98%...— un gran mapa se mostró y una ubicación comenzaba a ampliarse— Está en Yakutsk, Siberia...-

—Espera...¿Eso es ahora?— preguntó Romanoff acercándose a una pantalla.

Así es— afirmó JARVIS

—Y no está solo— señaló Thor— Esos son los mismos de las fotos anteriores...Los elegidos.

—No es cierto...— se quejó Tony— Lo que me faltaba...Iremos de inmediato, no dejaremos que se nos escape.

—Espera, ¿Qué hay de mi?— cuestionó Astrid— ¿Me quedaré aquí sola?

—Yo me puedo quedar con ella— le dijo Banner a su amigo— Puedo terminar aquí los chequeos, además, no creo serles de mucha ayuda.

—Te lo agradezco— le dijo Stark al doctor con agradecimiento y yéndose del lugar seguido de Thor y Clint.

Natasha se acercó a su amiga rápidamente antes de seguir al equipo.

—Volveremos lo más rápido que podamos— le dijo Nat sacudiendo el castaño cabello de su amiga. Astrid se limitó a asentir mientras veía como ella y el Capitán que se había mantenido a su lado, se iban.

—Oigan— les habló la castaña a ambos, ellos se voltearon sincronizadamente— Regresen vivos...Todos

Dichas esas palabras, Romanoff y Rogers se retiraron con el resto del equipo para dirigirse a Siberia.

Kurse había sido visto en unas viejas instalaciones al sur de Yakutsk junto a sus tres elegidos, y no se había sabido de ellos desde su aparición en la mansión Stark. El equipo no sabía cual era su propósito allí o que pretendía buscar, pero algo en sus adentros les gritaba que no era nada bueno

Todos los Vengadores empezaron a prepararse para el viaje que duraría un par de horas a la velocidad del jet. Cada uno llevaba lo necesario, preparados para lo que fuera.

Luego de unos minutos el jet partió siendo pilotado por Clint.

Mientras tanto Astrid permanecía en el laboratorio mirando por la ventana y viendo al jet irse y desaparecer en el nublado cielo. Sus finos dedos acariciaban el cristal blindado siguiendo al jet con ellos. Luego de suspirar y asimilar la ausencia de sus amigos caminó de vuelta hacia donde estaba el doctor Banner, quien aún estaba generando algunos resultados de su examen.

—¿Encontraste algo nuevo Bruce?— le llamó ella con el tuteo que el mismo Doctor había sugerido. El pelinegro se volteó para mirarla con una mueca en los labios.

—La verdad no mucho...Sigo sin entender como es que tu ADN está sufriendo esas modificaciones. Siento que se están tomando este asunto muy a la ligera...Y no es así

—Yo no lo hago— le respondió Astrid— Y dudo que el resto haga...Es mi cuerpo, es mi salud, es...Mi vida, y créeme que estoy poniendo cada partícula de mi ser para no tirarme al suelo y llorar— frustrada y triste, la castaña se dejó caer en una silla junto al doctor— Mi vida era perfecta, era genial...Y sigo sin entender que la echó a perder.

Banner prefirió no hablar más del tema por lo que se mantuvo en silencio en frente de la computadora.

Las horas pasaron y el equipo llegó velozmente a Siberia. Junto con la ayuda de JARVIS lograron identificar el lugar de Yakutsk en el se había visto a Kurse.

El blanco color de la nieve pintaba el territorio como si fuera una sábana gigantesca y los pequeños copos de nieve caían sobre esta, adornándola.

El jet aterrizó de manera furtiva usando los paneles auto reflectores de Stark, así el vehículo parecía un simple manchón más de nieve.

Los pasos sigilosos de los Vengadores les abrieron el paso hacia el interior de las instalaciones de lo que parecía un laboratorio, no algo abandonado como lo señalaba JARVIS.

Se deshicieron fácilmente de la seguridad y lograron escabullirse dentro del lugar. Se dividieron en dos grupos y comenzaron a buscar señales de Kurse.

Steve, Nat y Clint iban juntos y decidieron ir a buscar en una especie de sótano. Al bajar pudieron oír unos murmullos que los mantuvieron alerta.

—Por Dios que es esa cosa...— susurró Natasha asustada

Steve y el arquero se voltearon en la dirección de la rusa para ver que era lo que la tenía así. Entre medio de los barrotes de la escalera pudieron observar una alta figura con un casco con cuernos.

—Kurse...— el susurro de Steve hizo estremecer al equipo, incluso a Thor y Tony a través del micrófono.

¿Dónde?— preguntó el millonario por medio de este

—Un sótano, escalera norte, puerta metálica.

Los murmullos que se oían comenzaron a hacerse cada vez más fuertes, no sabían si se llevaba una conversación o una discusión.

Y la pregunta era, ¿Con quién se estaba llevando a cabo?

Con mucho cuidado, los tres involucrados comenzaron a bajar las escaleras lentamente, hasta un punto donde el Capitán les ordenó detenerse para ver mejor la situación.

Al posicionarse de mejor manera lograron ver a Kurse de espaldas y en frente de el un sujeto que se les hacía familiar.

—¿Ese es...?

—Sí— interrumpió Rogers al arquero— El doctor Vladimir Herczog

—...Lo que te ofrezco es más de lo que tu podrías imaginar...Más que la vez anterior— la gran voz de Kurse resonó en toda la sala

—No me convences...Esto es mucho más arriesgado que la vez anterior— la voz de Vladimir Herczog fue la segunda en oírse junto a su pequeño pero notable acento

—Pero...Podrías continuar lo que no terminaste...Y poseer el arma más grandiosa del universo...

El científico rió

—No me engañas, yo no poseería esa arma...La poseerías tú.

Ahora quién soltó la risa fue Kurse, suave, pero potente.

—Tienes razón...Pero tú serías quien la creó, y te daría todo lo que quisieras a través de ella...

Hubo un momento de silencio en la conversación

—Si yo aceptara tu oferta...Tú tendrías que aceptar mis términos— habló el doctor hacia la criatura después de unos segundos

—A mi nadie me pone condiciones humano— le respondió Kurse con voz imponente

—Tranquilo— Vladimir sonrió— Mis términos de trabajo también te favorecen...

—Oigan...— habló Natasha en susurro— Ahí están, los elegidos— dijo mirando a dos de ellos que estaban parados a un lado

—Así es— le respondió Clint— Pero ¿Qué no eran tres...?

Un silencio se produjo entre dudosas miradas de ellos.

—El soldado...

De entre las sombras la estrepitosa figura del Soldado del Invierno apareció tomando del cuello a Natasha y aventándola hacia adelante, cayendo por las escaleras, cosa que produjo el desenfreno de toda la situación

Rápidamente el Capitán y Clint comenzaron a atacar al soldado el cual corrió lejos velozmente, Steve comenzó a perseguirlo y Barton fue a ayudar a Nat.

Al darse cuenta que habían intrusos, Kurse y la gente a su al rededor detuvieron su charla, la bestia estaba furiosa y ordenó a los dos elegidos restantes ir a atacar a los Vengadores.

Mientras tanto, las cosas en las instalaciones estaban prácticamente estáticas: Banner seguía investigando sobre el caso de Astrid sin encontrar algo más allá de lo conocido; le era imposible descubrir como es que todo lo que ocurría con el ADN de la chica era posible

La castaña, mientras tanto se encontraba viendo televisión en la sala contigua al laboratorio. Le había ofrecido su ayuda al doctor pero el se negó diciendo que no era mucho lo que ella podía ayudar. Así que resignada, se acostó en un sofá a disfrutar de el primer programa de televisión que encontró.

Hasta que en la pantalla del televisor comenzó a parpadear con un anuncio y a la vez, interrumpiendo la serie que Astrid estaba viendo.

—¿Qué rayos es eso?— la pantalla dejó de parpadear y una voz comenzó a sonar una voz, una voz conocida.

Chicos...Tenemos problemas

—Tony— al reconocer la voz de su hermano, la joven corrió al laboratorio en busca de Bruce para informarle lo escuchado— ¡Bruce!— gritó al entrar, encontrando a el doctor frente a una computadora— ¡Es Tony, ellos...!

—¡Lo sé!— respondió un tanto alterado también— Estoy intentando no perder la conexión.

En una de las pantallas del laboratorio, la cara de Tony Stark apareció desde el visor de la máscara del traje. Su rostro tenía algunos rasguños y sudor.

—Tony, ¿Qué es lo que sucede?— le preguntó Bruce

Tuvimos un pequeño problemita...— respondió intentando ser sarcástico

—¿Qué ocurrió?— le habló Astrid ya entrando en grados de desesperación.

Nos descubrieron...Están aquí, Kurse, sus tres elegidos, al parecer venían en busca de...Alguien— Tony se silenció al instante al darse cuenta que estaba entrando en un terreno peligroso de conversar— Nos están atacando, y digamos que esta pelea es como 1 contra 10.

—¿Qué es lo que necesitas?— habló rápidamente el doctor.

Necesito que actives a Verónica...Tanto tiempo sin usarla que la desconecté, pero ahora necesito que la enciendas por los parlantes se pudo oír el sonido de disparos y explosiones- ¡Rápido!

Inmediatamente Bruce comenzó a buscar el sistema operativo de Verónica con los sonidos de disparos de fondo. De vez en cuando se le oía regañar al fracasar en alguna contraseña. Pero al fin y al cabo logró activarla de nuevo.

—Ya está Tony— le informó su amigo— Ya está operable

Se oyeron unos murmullos y disturbios, pareciendo que se encontraban peleando aún.

G-Gracias amigo...— respondió la cansada voz del millonario— Si esto no funciona nos iremos de aquí...— su voz se oída abatida, rendida— Thor está herido y nos superan en número a cada segundo, debo decirles que esto está difícil, y hubiéramos necesitado de su apoyo...Honestamente no sé si...

De repente, la comunicación se cortó dando paso a solo un sonido vibrante, como cuando se corta una llamada.

—No, no, no, no...— Astrid empezó a perder los estribos mientras intentaba buscar como regresar la comunicación— No ahora...

Los dedos de Astrid corrían por el teclado buscando maneras de restaurarla, había algo en todo aquello que no le gustaba y necesitaba saber que ocurría, no llenarse la cabeza con dudas y suposiciones que más tarde le podrían pasar la cuenta.

—Okey, okey, Astrid— el doctor comenzó a calmarla, alejándola de la computadora— Recuerda que no te debes alterar.

Ella se separó y empezó a hacer ejercicios de respiración, los cuales estaban mal hechos debido a la desesperación, lo que terminó agitándola mucho más.

Comenzó a caminar y se apoyó en el cristal de la ventana cerrando los ojos y pidiéndole al cielo que su hermano y sus amigos estuvieran bien.

—Por favor que estén bien, que estén bien, Dios por favor, tráelos de vuelta...

Los susurros de Astrid se volvieron casi mudos y Bruce Banner se encontraba detrás de ella mirando la escena. Hasta que algo empezó a preocuparle.

—Astrid...

La chica se volteó al oír la voz del doctor, este estaba pálido, con un nudo en su garganta que le impedía decir cosa alguna. Pero no fue necesario, La joven lo vio todo a través de los lentes de Banner. Ese reflejo...Ese particular reflejo.

—Corre

La voz débil de Astrid al darse cuenta que era lo que ocurría con su cuerpo, le dio a entender al doctor Banner que ella estaba demasiado asustada, nuevamente.

—No, déjame ayudarte— le dijo con voz firme

—Vete....¡Vete de aquí!— le gritó mientras el fuego empezaba a subir de su mano a su brazo, y de su brazo a su hombro.

Las desesperación coloreó su rostro y un dolor punzante se hizo presente en su cabeza, tanto así que el cuerpo de la chica cayó al suelo mientras seguía llenándose de fuego sin consumirse.

—¡Astrid debes calmarte!— le gritaba el doctor intentando escapar de el calor abrasador de las llamas, atrayendo a sí papees, computadoras o cosas de valor que podían ser quemadas.

Fallidamente intentó acercarse a Stark pero las llamas seguían impidiéndoselo.

—¡Por el amor de Dios! ¡No me puedo acercar más! Astrid...Astrid respira, calma, tu hermano y el equipo estarán bien, pero debes calmarte.

Las llamas de Astrid comenzaron a consumir unos mesones y el cortinaje de la sala, todo se iba a teñir de un color rojo abrasador.

La menor de los Stark se abrazó a sí misma mientras intentaba respirar normalmente, convenciéndose de que su hermano estaría bien y que ella debía calmarse.

Nadie moriría, nadie moriría...

—¡Astrid!— seguía gritando Bruce.

—Por favor paren...Paren...Por favor.

Sus susurros eran temblorosos pero a la vez fuertes, en el sentido de que ella comenzó a ordenarle a su cuerpo, y al fuego, obedecerla.

Como si fuera arte de magia, las llamas que envolvían a Astrid empezaron a disminuir, ella seguía repitiendo esas palabras y su cuerpo le obedecía. El doctor se encontraba a lo lejos observando la escena, asombrado.

Hasta que al final, el fuego emanente de la castaña se apagó.

Ella empezó a suspirar pesadamente tendida en el suelo, pero ahora con una sonrisa de alegría, ya que el fuego y el dolor habían cesado.

Sin embargo, seguía habiendo fuego a su al rededor, pero de repente, y bastante tarde, los sensores de incendio se encendieron y comenzaron a regar todo, aplacando las llamas.

Bruce comenzó a acercarse lentamente a Astrid que ahora estaba hincada observando sus brazos mientras en un suspiro terminaba de susurrar sus órdenes.

—Deténganse...Por favor...

Con la cara empapada por los rociadores miró a Banner con una sonrisa cansada.

—Tony debe revisar los rociadores, eso fue algo totalmente nuevo

┍━━━━━━━┙◈┕━━━━━━━┑


***

HOLAAA BUENAS

MIREN QUIEN VOLVIÓ (tengo poco tiempo)

SE QUE ME QUIEREN MATAR PERO LO LAMENTOOOOOOO, SOY LA PEOR, LO SÉ.

PERO LO PROMETIDO ES DEUDA, SO, aquí está esta belleza

Gracias por todo y lo lamento otra vez :c

LOS AMO

Natalia x

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro