━BURN IT ALL
┍━━━━━━━┙◈┕━━━━━━━┑
CUANDO ASTRID Y STEVE VOLVIERON a la base un ambiente algo sorprendente los rodeó.
Ambos llegaron entre risas y chistes, cosa que llamó bastante la atención de los agentes y algunos Vengadores que estaban ahí como Natasha Romanoff y Clint Barton.
—Eso es raro...— comentó Clint al verles— Tony me dijo que se odiaban.
La agente Romanoff miró al rubio y a la morena caminar por el pasillo llena de confusión.
—Eso es nuevo...— susurró.
El resto del día fue normal para cada uno, pero al menos sus conciencias estaban tranquilas al no estar mal con nadie.
Al día siguiente Astrid Stark se levantó normalmente y se dirigió al baño para asearse y vestirse. Y como cada mañana su tía Sarah llegaba a su habitación con un vaso con agua y los medicamentos, pero Astrid se dio cuenta que eran unos cuantos más de lo normal.
—¿Nuevos medicamentos?— le preguntó Stark a su tía mientras terminaba de ponerse su blusa.
—Creo que sí...La doctora que trajo Tony de Seúl te los mandó, dijo que eran buenos para el proceso post-coma.
La respuesta de la mujer le fue suficiente a la joven la cual con un poco de asco se tomó los remedios que no tenían un sabor muy agradable.
Woods le hizo compañía a la chica un buen rato hasta que Astrid decidió ir a la cocina por algo para desayunar, se despidió de su tía y se fue.
Cuando llegó a los comedores notó que allí ya se encontraban reunidos los Vengadores al rededor de una mesa redonda. La joven caminó allí dispuesta a saber que ocurría.
—Buenos días— saludó ella amablemente, pero fueron algunos solamente los que la saludaron, todos estaban completamente sumidos en la investigación que se llevaba a cabo en la mesa.
Incluso, Tony Stark intentó tapar lo que se encontraba sobre la mesa. Al notar el rechazo la menor de los Stark suspiró.
—Okey...—susurró— Esperen ¿Esa investigación es sobre el ataque? Genial, ¿Que han averiguado? ¿Sabemos algo importante o...
Astrid fue interrumpida por el propio silencio y las miradas del equipo sobre ella, las cuales le dieron a entender solo una cosa.
—Oh...Ya veo...Cosas de Vengadores, perdón por interrumpir— dijo ella mientras retrocedía lentamente— Yo...Me degradaré a mi lugar...Por allá—señaló la cocina— Por si me necesitan.
Y sin más que agregar la morena se fue.
Al ver la decepción de su hermana Tony Stark rápidamente le pidió con la mirada a la agente Romanoff que le echara una mano, cosa que ella aceptó sin dudar.
—Hey Astrid— saludó suavemente la pelirroja mientras observaba como la joven buscaba comida en el refrigerador— Oye me preguntaba si quieres ir a desayunar a Starbucks, yo invito.
La propuesta de Natasha hizo que Stark dejara lo que estaba haciendo y le pusiera atención.
—Pero...¿Que tú no estabas en reunión con tus amigos héroes?— preguntó señalando la mesa en donde estaban reunidos.
—Sí pero...Ya sé de que están hablando, en todo caso me puedo poner al día más tarde...Así que tengo tiempo para salir contigo— respondió Nat lo más serena posible
Astrid le regaló una sonrisa a su amiga.
—De acuerdo, vamos
Ambas mujeres comenzaron a caminar fuera de los comedores para dirigirse a Starbucks, pero antes de irse Tony le agradeció disimuladamente con la cabeza a Romanoff por su ayuda.
Cuando la sala por fin quedó sin ellas Tony volvió a desplegar los papeles que había escondido con la mirada confusa de todos.
—Perdón— se disculpó el millonario— Pero no quiero que Astrid se entere de esto
Al pronunciar esa frase dejó al descubierto otro papel que dejó escondido y que nadie, además de él y Banner entendían.
—¿Qué es esto?— preguntó el Capitán tomando el papel en sus manos sin mucho que comprender.
Además de una foto.
—¿Quién es el hombre?— preguntó Clint Barton.
—Su nombre es Vladimir Herczog— respondió Tony— Y él tiene una correlación...Con Astrid.
La sala permaneció en silencio así que Stark prosiguió.
—Ayer cuando tú y mi hermana fueron al cementerio— apuntó a Steve— Con Bruce nos encargamos de analizar una interrogante que se me presentó viendo los vídeos de Astrid...En sus vídeos ella mencionó a un tal Herczog...Pero sólo eso, nada más claro. Entonces, después de partirme la cabeza investigando se me ocurrió que podría buscar algo sobre el Neuranio, que todos sabemos que...Estaba en la cabeza de Astrid— la gente asintió— Y pues...Si encontramos algo
Tony volvió a tomar la hoja que tenía Steve y señaló una parte específica del documento.
—Vladimir Herczog es el creador del Neuranio y él estaba en Rusia cuando capturaron a mi hermana.
Las miradas de sorpresa se repartieron entre los presentes.
—Por eso no quieres que ella se entere de tu investigación— preguntó el dios del trueno a lo que Stark asintió.
—Quedamos en mantener el secreto ¿No?— preguntó este a los presentes los que lentamente asintieron.
—Pero...¿Cómo le vas a ocultar ésto?— cuestionó el Capitán apuntando la mesa cubierta de papeles e informes
—Es distinto intentar ocultarle lo que sucedió; pero éstos papeles los podría encontrar fácilmente— siguió. Tony pasó sus manos por su cara completamente frustrado.
—Lo sé...Por eso tendremos cuidado, mi hermana ha estado bien emocionalmente y no quiero que nada la tire abajo
Todos asintieron estando de acuerdo con la petición del millonario.
Mientras tanto, Astrid y Natasha ya iban en una camioneta negra de SHIELD de camino a desayunar a un Starbucks que había a unas calles de la torre. Cuando llegaron Natasha que iba conduciendo estacionó y ambas bajaron para entrar a la cafetería.
Hicieron una corta fila para esperar y hacer sus pedidos que demoraron sólo unos segundos en los que la cajera les pidió sus nombres y las dos agentes fueron a buscar una mesa.
—Entonces...¿Cómo van con la investigación? Sé que no debe de importarme pero...Sólo quiero saber si han avanzado
La pregunta de Astrid causó que Natasha guardara silencio pensando que decir. Pero la cosa era que Romanoff no sabía lo de Herczog y lo del Neuranio.
—Pues...La verdad no estamos vacíos del todo, y perdón si te molestó que te hayamos exclui...
—No— interrumpió Stark a la agente—Tranquila, perdónenme a mi por meterme en donde no debo.
Ambas sonrieron al momento que la cajera decía sus nombres y Nat fue en busca de los cafés.
La pelirroja regresó con ambos cafés grandes en ambas manos, uno para ella y otro para su amiga.
—Salud— le dijo Romanoff alzando su café y Astrid hizo lo mismo.
—Salud
Aunque la alegría del primer sorbo no fue agradable para la menor de los Stark.
—Aguarda...Esto no es lo que pedí— decía ella asimilando el sabor en su boca— Esto no es un latte de vainilla.
—Pues...Espera— le dijo su amiga mirando el lugar en busca de alguien—¡Disculpe!— llamó a una vendedora—¡Disculpe!— al oír el llamado de Romanoff la muchacha de cabello rizado se acercó amablemente— Hola— saludó una vez que estuvo junto a la mesa— Disculpa mi amiga pidió un latte de vainilla pero ese no es, es un...
—Creo que un descafeinado— le dijo Astrid de la manera más amable que pudo.
—Oh, de acuerdo, yo lo cambio y se lo traigo no hay ningún problema y lamento la confusión— le respondió la chica cuyo nombre estaba escrito en su placa: Cherryl
—Muchas gracias— agradecieron ambas chicas mientras la rizada tomaba el café erróneo y se retiraba.
Mientras esperaban charlaron sobre distintos temas obviamente alejados de la misión, y entre estos surgió uno muy inusual.
—Oye, me contaron que ayer saliste con Steve— le dijo Natasha de con voz juguetona lo que causó las risas de la morena.
—Calma Romanoff sólo me acompañó al cementerio por que tú y los demás tenían "Cosas más importantes que hacer"— respondió imitando sus voces del día de ayer
—Pero cuéntame— insistió— ¿Cómo fue?
La risa de Astrid ya no se pudo contener.
—En serio amiga, basta, sólo me acompañó y punto— frunció el ceño
—Pero me contaron que ustedes, bueno, no se llevaban tan bien— se defendió la pelirroja
—Pues no...Yo lo odiaba— Nat asintió—Pero me dio la oportunidad de conocerlo mejor y bueno...Ahora no hay problemas
Ambas rieron y en eso ven que la chica venía de vuelta con un latte de vainilla en la mano. Pero por un paso torpe esta chocó con una mesa y esto hizo que el café, que estaba bastante caliente, volara hasta el regazo de Astrid haciendo que la morena gritara del dolor.
Natasha se levantó rápidamente para atender a su amiga con unas servilletas al igual que Cherryl, la vendedora.
—¡Dios mío!—se disculpaba—Cuanto lo siento, de verdad, perdóneme señorita...
La chica no pudo terminar sus palabras al ver de cerca quien era.
—Stark— la pronunciación de su apellido hizo que Astrid se desesperara aún más— Santa Madre una Stark, mi padre trabaja en Stark Industries y...
—Linda— la interrumpió la rusa— La señorita Stark se está quemando y te agradecería si pudieras traer una toalla empapada de agua fría, por favor
La joven de rizos rápidamente obedeció mientras algunos se percataban de la desesperación en los ojos de Astrid Stark y sus quejidos de dolor.
—Tranquila— le decía Nat— Tranquila, respira
—Demonios...De verdad duele, quema mucho— se quejaba respirando entrecortadamente.
La joven vendedora llegó rápidamente con una talla fría la cual puso inmediatamente en las piernas de la chica Stark y esto hizo que un gran suspiro de alivio se escapara de sus labios.
—Frío...—susurraba— Que bien se siente.
—De verdad lo siento señorita Stark— siguió disculpándose Cherryl— Fue un accidente, perdón...
—Okey— la interrumpió Astrid más calmada— Fue un accidente—dijo repitiendo las palabras de la vendedora— Ve tranquila y no te preocupes por el café
Cherryl sonrió calmada y se fue lentamente al notar que la gente la estaba mirando, y además su jefe la estaba esperando en el mostrador con una expresión poco amigable.
—Pobre joven— musitó la agente Romanoff levantándose de donde estaba arrodillada y sentándose nuevamente. Astrid la miró mal— ¿Qué?
—Oye yo fui la que se quemó—reclamó
—Lo sé, lo sé— respondió Nat mirando hacia los mostradores— Pero creo que su jefe le dará un castigo.
Luego del incidente ninguna de las dos dijo nada más. Natasha terminó de tomarse su café mientras Stark seguía quejándose por el ardor en su pierna, que a pesar que masajeaba con la toalla mojada, el dolor poco disminuía. Y para colmo le picaban los brazos sin razón alguna.
Pero algo llamó la atención de ambas agentes
—¿Hueles eso?— le susurró Nat a Astrid, quien empezó a imitar los gestos de la rusa percatándose del olor, y de donde venía.
—¡Fuego!— gritó Astrid asustada alertando a todos en la tienda.
La alerta se causó que el mantel de la mesa de las dos agentes comenzó a arder y a expandirse de manera inexplicable que lo único que atinó a hacer la gente fue correr.
Debido a esto, la gente que salió corriendo empujó la silla de Astrid Stark haciendo que esta cayera al suelo mientras veía como las llamas se extendían de una mesa a otra sin poder encontrar aún la fuente de todo eso.
Con el poco dolor que le quedaba Stark intentó ponerse de pie, cegada por el humo que comenzó a aparecer. Una vez de pie miró a su alrededor y las llamas habían crecido bastante.
—¡Astrid!— Natasha, la cual había salido del lugar jurando que la morena iba detrás de ella, comenzó a gritarle al no verla.
Los bomberos no habían llegado aún pero se escuchaban las bocinas a lo lejos, pero unos policías que allí estaban le impidieron el paso a la agente que quería ir en busca de su amiga
—Déjenme pasar ¡Mi amiga está adentro! ¡Hay alguien allí!
El policía al oír eso se alertó, pero no dejó pasar a Nat. A lo lejos los bomberos llegaron corriendo al lugar en donde el oficial les dio la pasada rápidamente y Romanoff aprovechó esa distracción para entrar a escondidas junto con los bomberos.
Las llamas estaban tan altas y el humo tan denso que les era muy difícil ver si Astrid estaba allí, por lo que la rusa comenzó a pensar lo peor.
En la torre el resto de los Vengadores aún se encontraban trabajando en la investigación cuando Jarvis encendió el televisor por el protocolo de emergencia, el cual alertó a todos.
—J, ¿Que sucede?— preguntó el millonario mientras todos veían la televisión, en el canal de noticias en donde se anunciaba el incendio.
—Es una alerta de incendio Señor, es en la cafetería a la que fueron la señorita Romanoff y la señorita Stark
La voz de Jarvis hizo que todo el equipo se preocupara.
—No puede ser— dijo Stark en casi un susurro— ¡Maldición!...Iré por ellas, por Dios, por favor que estén bien— dijo este rápidamente para salir hacia el estacionamiento.
—Voy contigo— le dijo Steve igual de preocupado que le empezó a seguir hacia el estacionamiento.
Al principio ambos iban trotando, pero la desesperación y los malos pensamientos de lo que podía ocurrir los hicieron correr y tomar las escaleras en lugar del ascensor.
Cuando llegaron tomaron una camioneta que Steve condujo a toda velocidad con Tony a su lado.
El millonario solo iba nervioso pidiéndole al cielo que ambas estuvieran bien, no dejaba de ver por la ventana y pensar que eso no hubiera pasado si no hubiera rechazado a su hermana.
Aunque en todo caso, no era buena idea no hacerlo.
A lo lejos divisaron los camiones de bomberos, los policías y la conglomeración de gente que les impidió el paso, por lo que tuvieron que estacionar una cuadra atrás.
Bajaron lo más rápido que pudieron y corrieron a lo poco que quedaba del Starbucks.
Rápidamente entraron omitiendo las órdenes de la policía y los bomberos. Las llamas habían bajado un poco gracias a los extintores que portaban los oficiales de bomberos, pero aún así no veían ni a Natasha ni a Astrid. El humo y el fuego causó que ambos hombres comenzaran a toser y a marearse.
—Tony salgamos, quizás ya están afuera— le insistió el Capitán viendo que se estaban poniendo en peligro ellos mismos.
—¡No!— se negó mientras evadían unas barras de madera que cayeron del techo— No las vi afuera, tienen que estar aquí...Astrid debe estar aquí.
Mientras seguían caminando pudieron escuchar una voz a lo lejos.
—¡Steve! ¡Tony!— a pesar de la poca visibilidad pudieron distinguir una cabellera pelirroja a la distancia.
—Es Nat—susurró Steve esperanzado. Ambos comenzaron a correr hasta llegar donde su amiga que los abrazó.
—Gracias a Dios, gracias a Dios— susurraba.
—¿Estás bien?— le preguntó Tony y ella asintió una vez que se separaron— ¿Y Astrid?— la voz de Tony surgió nerviosa y el rostro de Natasha lo hizo temblar aún más.
—No la han encontrado— respondió haciendo que Stark quisiera gritar— Ella no escapó...Por alguna razón
—No es cierto...— susurraba Tony
Para él era doloroso pensar que había perdido a su hermana nuevamente y más aún por una torpeza suya, se maldecía una y otra vez en su interior por no ver a su hermana.
—Aguarden— habló el Capitán con la voz cansada y agitada— ¿Qué es eso?— apuntó en frente de ellos, detrás de unas llamas y unas mesas se veía algo, una figura.
—No es posible...
A lo lejos se podían divisar unas llamaradas que obviamente los bomberos aún no habían apagado en donde unas mesas y unas vigas estaban en el suelo. Pero no era lo único que estaba allí.
—¡Astrid!— comenzó a gritar su hermano
La chica yacía en el suelo, probablemente inconsciente, tenía algunos moretones en el rostro y sangre en los costados de su cabeza, lo que hizo que el millonario entrara en desesperación.
—Llama a los bomberos— pidió el Capitán a la agente en un susurro. La rusa no lo pensó dos veces y corrió en busca de los oficiales evitando las vigas que seguían cayendo sobre ellos.
—¡Astrid!— Stark intentó acercarse pero las llamas le decían que no— ¡Hermana despierta! ¡Por favor!— el ingeniero se volteó y tomó unas cucharas que estaban en una caja que aún no se había quemado y comenzó a lanzar unas cuantas hacia la joven— ¡Astrid! ¡Por favor!
Para su muy extraña suerte, dos de las metálicas cucharas cayeron sobre la cabeza de la morena y esta comenzó a mover su anatomía dándole esperanzas a Tony.
—¡Nat, los bomberos!— apuró Rogers a la agente que aún no había llegado con la compañía.
Los sentidos de la menor de los Stark comenzaron a despertar nuevamente, su vista se activó poco a poco y visualizó en donde estaba. Cuando lo hizo el miedo la invadió, las lágrimas de desesperación decoraron su rostro en una capa de absoluto terror al verse en medio de un incendio
Y probablemente a punto de morir
—Despertó...Despertó...—le habló rápidamente Tony a Steve, captando su atención— Se está levantando...¡Astrid!— volvió a gritar.
—Tony...—susurró la muchacha.
Justo en ese preciso momento llegó Natasha con la compañía de bomberos que de inmediato empezaron a apagar las llamas que rodeaban a la hermana del millonario.
Pero de repente, las pocas vigas que quedaban en esa área comenzaron a desprenderse cayendo al rededor de Astrid, impidiendo el trabajo de los bomberos que se vieron obligados a retroceder ya que las llamas volvieron a crecer...Envolviendo a la chica Stark.
—¡No!— gritó su hermano— ¡Astrid, no!— Tony intentó correr a buscarla entre las llamas pero los bomberos lo sujetaron con fuerza impidiéndole seguir— ¡Suéltenme!— gemía— ¡Mi hermana! ¡Debo ir por ella!
—Señor, por favor guarde la calma— le dijo un bombero a Stark, el cual estaba muy desesperado— Iremos a verla pero dudamos que siga viva después de la caía de las vigas.
—¡¿En serio Señor?!— exclamó Tony a punto de golpear al bombero de no ser por que Steve y Nat lo sujetaron— ¡Gracias por el ánimo, animal!
—Tony por favor relájate ellos...
La voz del Capitán se vio interrumpida por una exclamación de parte de uno de los bomberos al ver algo inusual entre las llamas.
Los encargados del fuego y los tres Vengadores presentes comenzaron a acercarse con mucho cuidado al ver a algo o mejor dicho a alguien de pie entre las llamas.
—¿Astrid...?— el susurro de Tony Stark fue lo único emitido por todos los presentes al ver como la joven Astrid estaba de pie entre las llamaradas de fuego.
Era algo que ninguno, ni siquiera la misma joven podían comprender. Estaba parada y se acercaba hacia ellos como si nada le afectara, con una mirada de pura confusión de su misma parte.
—No es posible...
Los bomberos ni siquiera tuvieron que apagar las llamas para abrirle paso. Lo hizo ella misma sin saber por que. Sus ropas estaban intactas, no estaban quemadas o dañadas por pasar entre el fuego, Astrid estaba intacta.
Y sus ojos no solo reflejaban confusión.
Reflejaban algo más.
┍━━━━━━━┙◈┕━━━━━━━┑
***
LOOK WHO'S BACK
Y TEMPRANITOOOO
NO ME DEMORÉ 892847294 AÑOS COMO SIEMPRE.
Hola, hola, como andan, espero que bien yyyy espero que les haya gustado este capítulo que marca una nueva etapa en esta historia...
La verdad estoy un poco apurada así que esto será algo breve jiji
Déjenme en los comentarios sus dudas o lo que crEAN QUE VAYA A PASAR AHORA, HIJOLE
Anyway los amo y gracias por todo su apoyo
Natalia x
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro