Se paro de la cama y se puso sus zapatos, tomo una chaqueta y salió del departamento, al parecer su hambre lo estaba venciendo y no encontró de otra mas que salir por aquellos pastelillos de chocolate que tanto amaba.

Camino con lentitud hasta la tienda, cuando llego al lugar las brillantes luces de este lo cegaron un poco, haciéndolo despertar. No le presto mucha atención a lo que pasaba a su alrededor y con pesadez se dirigió al estante donde estaban los dichosos pastelillos.

Tomo un paquete y camino directo a la caja a pagar, pero rápidamente pensó que un paquete no le alcanzaría para toda la semana, así que con pesadez regreso a donde se encontraban tomando otra caja.

Ya con ambas cajas de pastelillos fue directamente a la caja a pagar antes de que su impulso lo hiciera tomar una tercera, la chica de la caja lo observo con amargura, parecía estar enojada con medio mundo, cosa que no le importo. Ya pagados sus productos salió de la tienda y se dispuso a volver a su departamento.

Pero antes de que pudiera dar un paso lejos del lugar pudo escuchar como alguien gritaba, no iba a prestar mucha atención de no ser que un lloriqueo lastimero se escucho, podía ser huevon y flojo, pero nunca aceptaría algo tan inhumano como la violencia, volteo su mirada y pudo observar a la chica que unos instantes antes le atendió agrediendo verbal y físicamente a un chico.

Frunció el cejo y se acerco a donde ambos omegas, o eso quiso suponer por los fuertes aromas que desprendían ambos.

—¿No te parece que eres muy cruel? —interrogo cruzándose de brazos, la escena delante de el le hacia querer vomitar.

—¡ PUEDES NO METER TU NARIZ DONDE NO TE LLAMAN ! —exclamo la pelinegra —. ¡ LARGATE ! —le grito.

—No voy a dejar que maltrates a este pobre chico —hablo con firmeza —¿acaso no tienes corazón?

—Sabes que, si tanto lo defiendes, ¡ QUÉDATELO ! —aventó el pequeño cuerpo del chico hacia el pelinegro, el cual no tuvo tiempo de sostenerlo haciendo que ambos cayeran.

El omega ante esto empezó a llorar aun mas fuerte, se sentó en el suelo y contemplo sus manos, se las había lastimado al igual que sus rodillas las cuales rápidamente empezaron a sangrar, provocando que su llanto aumentara.

Taehyung ante todo esto se había quedado con una gran impotencia, que acaso la gente de hoy en día ya no tenía corazón, se levanto del suelo y limpio sus ropas, removió un poco su cabeza y se percato del omega.

Se agacho hasta la altura del otro y lo llamo.

—¡ Hey ! —exclamo —¿cuál es tu nombre?

Poso su mano en el mentón del otro conectando sus miradas, y fue ahí donde sintió todo su cuerpo temblar, su lobo corría por todos lados emocionado, no entendía que pasaba pero en el instante que conecto su mirada con el otro sintió algo que jamás, era como si hubiera descubierto algo nuevo.

—S-soy Jungkook... —musito el castaño, aun entre llanto, pues sus manitos le ardían y sus rodillas no dejaban de sangrar, y ni decir de lo que le había pasado antes de que ese chico lo salvara.

Taehyung se levanto nuevamente y extendió su mano hacia el omega el cual la tomo con algo de miedo.

—Ven conmigo... —mascullo el pelinegro, con algo de cuidado llevo al chico hacia su departamento, lo cual no pensó mucho, no era como si aquel tierno y pequeño omega le fuera a hacer algo.

Llegando a hogar dejo al omega sentado en el sillón de aquella sala, este todo el camino se la había pasado llorando, cosa que llamaba la atención de las pocas personas que los veían, pues quien demonios estaba despierto y en la calle a las 3 de la mañana, bueno solo Taehyung claro.

El pelinegro se dirigió rápidamente al baño de su habitación, donde lavo rápidamente sus manos y saco un pequeño botiquín que tenia, en caso de que fuera muy estúpido y algo le pasara, con rapidez regreso a la sala donde estaba el chico que momentos antes había "salvado" por así decirlo.

Se agacho un poco y vio las heridas del menor, a pesar de que ya no sangraban tanto se podían notar que no serian algo fácil de tratar.

—Voy a curar tus heridas, va arden un poco, pero pasara —dijo, esto no debía ser tan difícil.

—O-okey... —musito el omega.

Taehyung mojo un poco la gasa con algo de agua para tratar de limpiar la herida y con lentitud la acerco a la rodilla del castaño, cuando por fin la gasa toco la nívea piel del omega este grito de dolor, las lagrimas no se hicieron esperar y rápidamente quito su rodilla de aquella tela mojada que tanto daño le hacia.

—¡Arde! —exclamo —¡Arde mucho, alfa!

El pelinegro se congelo en su lugar, ese chiquillo había dicho algo que no esperaba, nadie nunca lo había llamado así, ni siquiera las novias que había tenido, quería decirle algo al menor ante este apodo pero lo mejor era seguirle el juego para que se dejara curar, sino nunca terminaría.

—Se que arde, pero si no te curo podrá empeorar y te ardera más —intento convencer, cosa que funciono, pues el omega había bajado sus piernas dispuesto a ser curado.

Minutos después termino de curar al menor, por suerte tenia esos tontos curitas de osos en el botiquín si no no hubiera logrado relajar al omega, guardo las cosas en su lugar nuevamente y se dirigió al omega. 

¿Qué se supone que haría con el?

—¿Tienes donde quedarte? —interrogo, estaba algo aturdido por todo lo que había pasado.

—N-no —balbuceo —me echaron de casa, y no tengo a d-donde ir —lloriqueo recordando la situación.

Su madre siempre le decía que no podía dejar que extraños invadieran su hogar, pero, el omega ya no era un extraño, a demás seria algo sumamente cruel dejarlo a su suerte, no sabia realmente lo que le había pasado y no seria tan malo para no dejarlo dormir en su casa.

—Puedes quedarte hoy aquí, dormirás en mi cama, yo me quedare aquí en el sillón. —Realmente estaba siendo muy amable, nunca dejaba que nadie durmiera en su cama pero podía hacer una pequeña excepción.

—¿A-alfa no dormirá con omega? —cuestiono, sus ojos brillaron y las lagrimas amenazaban con volver a salir.

—No creo que sea correcto que duérmanos juntos —explico.

Y nuevamente el omega empezó a llorar lastimero, esta vez con mas descontrol que las anteriores veces, rasco su cabeza con desesperación y dijo algo de lo que no estaba seguro.

—E-esta bien...

፧ ♡ ፧

Estaba acostado en su cama, lo común, excepto que esta vez un bonito omega lo acompañaba, en todo el tiempo que llevaba viviendo solo jamás había llevado a alguien a su casa y mucho menos dormido con alguien.

Giro su cuerpo a donde el omega y pudo ver su rostro con mas detenimiento, tenia las mejillas rojas y no por algo natural, mas bien parecía como si alguien lo hubiera golpeado sin control alguno, observo todo su cuerpo y sintió un nudo en su garganta al ver algunos moretones en sus muñecas y cuello, lo peor de esto era que parecían estar por todo su cuerpo, porque mientras mas observaba mas descubría nuevos golpes.

Taehyung solo pudo removerse mirando hacia el techo, su mente solo pensaba en que habría pasado con el omega sino hubiera tenido ese tonto antojo.

Hola, esta es una historia que llevo escribiendo desde hace tiempo y no me animaba a subirla, no he tenido todo el tiempo suficiente para terminarla así que puede ser que las actualizaciones sean un poco lentas, espero poder traerles al menos un capitulo a la semana, gracias hermosas personitas que se animaron a leer mi historia, nos vemos.

Pd: Si tengo errores o tienen alguna sugerencia me gustaría saberlo.

Pd²: El edit de la portada está en mi IG por si quieren ir a verlo, mi user es Samgrxphics.

Kimnjteaa~