Capítulo 24
"All the bad boys would be good boys
If they only had a chance to love her"
. ゚*✩‧₊˚.
ALESSIA
Semana de carrera, iba a ser mi primera aparición pública con Charles desde que descubrió lo mío con Carlos, así que debía disimular bien, sonreír todo lo que pudiese, y por último pero no menos importante, evitar a Carlos a toda costa, ya que tal y como suponía, intentaría hablar conmigo.
Tanto yo como Charles nos encontrábamos entrando al paddock, Charles entrelazó nuestras manos, y cuando los fans nos vieron los gritos se hicieron mucho más presentes, fans nos pedían fotos tanto a el como a mi, y sin dudarlo nos acercamos a ellos.
Fotos, flashes y gritos inundaban mi cara, pero con una sonrisa nos hicimos todas las fotos posibles, hasta que llegué a una fan en concreto:
—Hola, como te llamas?— le pregunté a la vez que sostenía su teléfono para hacernos la foto
—Elizabeth— dice la pequeña niña que traía una gorra de Ferrari— soy muy fan tuya y de Charles, eres mi actriz favorita— dice toda roja la pequeña
Eso llena mi corazón de ternura y no puedo evitar sonreír, una sonrisa sincera.
—Muchísimas gracias, significa mucho para mi— le doy un abrazo a la pequeña y nos hacemos la foto sonrientes
—Me encantais juntos, tu y Charles, sois mi pareja favorita, tengo muchas ganas de ver las fotos de la boda— habla la pequeña con un brillo en sus pequeños ojos acompañado de una dulce sonrisa.
—Gracias— hago lo posible por no perder la compostura
—Queda muy poco para la boda, cierto?— dice quien supongo que era la madre de la pequeña
Esa pregunta me provoca un golpe de realidad en el que actualmente no había caído:
—Si, una semana...— digo hablando más para mi que para ella
Mi cara se descompone un poco, y eso la señora lo nota
—Estás bien?— pregunta la niña preocupada
Cuando la escucho hablar, vuelvo a mi, y pongo una sonrisa, esta vez fingida, pero era lo que tenía ser actriz, nadie notaba cuando fingias o cuando no.
—Si, todo está perfecto— le coloco bien la gorra de Ferrari y me alejo un poco— espero verte por el paddock— y con esto me despido dirigiéndome hacía Charles quien me esperaba con la mano abierta para entrelazarlas de nuevo.
Juntos caminamos hacía su garaje en Ferrari, y mientras llegamos no puedo dejar de mirar el gran cartel al lado del de Charles, el cartel con la foto y nombre del español que no podía salir de mis pensamientos, quería verlo, anhelaba uno de sus abrazos, y deseaba besarlo con todas mis fuerzas, pero no podía, y menos aquí, lo nuestro era imposible y tendría que acostumbrarme fuese como fuese.
—Estás bien?— pregunta Charles
Yo asiento sin más y junto a el continúo mi camino hacía el garaje de Charles.
—Charles!, te estaba buscando— dice Xavi, el ingeniero de pista del monegasco— Fred te está buscando, hay reunión de equipo— comenta el hombre
—Estará el?— pregunta Charles en un tono un poco hiriente, obviamente sabía que se refería al español.
—Leclerc, sabes que si, Carlos forma parte del equipo tanto como tú— contesta Xavi
Charles me mira y susurra un poco:
—Te parece mal si te dejo sola un rato?— pregunta preocupado
—No te preocupes, iré a dar una vuelta— contesto sin más
El asiente y me da un corto beso, para dar media vuelta e irse hacía dentro del garaje.
Yo me quedo ahí, viéndole desaparecer entre piezas de monoplaza y ruedas, y sigo mi camino por el paddock, sin saber realmente hacía donde podría ir, pero una pequeña caminata no me vendría mal para despejar la mente, así que sigo mi camino sin mirar atrás.
A medida que avanzo por el paddock, logro ver los garajes negros de Mercedes, y de uno de ellos, específicamente del de Lewis, sale un rubio alto, con camiseta blanca de Mercedes, a quien claramente reconozco como Mick Schumacher, quien el divisarme planta una
sonrisa y se dirige hacia mi.
—Alessia!— saluda el chico sonriente—Que tal estás?— cuestiona el rubio.
—bien!, me alegro de verte — contesto entusiasmada.
Siempre me habia llevado bien con Mick, le consideraba un amigo, y el con sus gestos y simpatía, demostraba que el tmb me consideraba una.
—Hacia tiempo que no te veia por el paddock, estaba incluso a punto de preguntarle a Charles si te había pasado algo— dice inocentemente.
Eso cambia un poco mi "mood", ya que la razón por la que había faltado a tantos GP's, más allá de mi indisponibilidad debido a mi trabajo, era obviamente, mi relación "secreta" con Carlos.
—Si— digo alargando un poco la "i" incómodamente— simplemente he tenido mucho trabajo, pero mis rodajes han terminado por una temporada— digo excusándome.
En este momento solo quería que pudiésemos cambiar de tema.
—Me alegro— dice el alemán rodeando mis hombros con su brazo— tengo cosas que contarte, o mejor dicho— dice parándose en seco— preguntarte— dice creando en mi una expectación
Yo paro a su vez, y le miro curiosa, preguntándome que sería eso que Mick podría querer preguntarme.
—Y de que se trata exactamente?— le pregunto
—Es sobre Audrey— dice nerviosamente
—Audrey?, que pasa con mi prima?— le cuestiono al rubio.
Audrey era ni más ni menos que mi prima favorita, estaba estudiando en la universidad y tenía 2 años menos que yo, por lo que nos habíamos criado casi como hermanas, y además de primas, eramos las mejores amigas. Ella siempre había tenido un gran amor por el deporte de motor ya que debido a nuestra familia siempre habíamos estado en contacto con el, razón número uno por la que estaba estudiando ingeniería mecánica. Más de una vez yo la había llevado conmigo a algún que otro GP, en el que nos quedábamos en el garaje de Mercedes junto con mi padre, y posteriormente, en el de Ferrari cuando empecé a salir con Charles.
Eventualmente, presenté a Mick y a Audrey, y poco a poco, empecé a darme cuenta del flechazo que tenía el alemán hacia mi prima.
Instintivamente sonrío, recordando las veces que mi prima me había preguntado "discretamente" acerca del rubio.
—No sé si esto suene descarado, pero...— Mick intenta encontrar las palabras correctas para preguntarme lo siguiente: — sabes si tiene novio, o si le gusta alguien?— cuestiona finalmente.
Yo empiezo a reírme por lo obvio que era el hecho de que Mick estuviese enamorado de mi prima.
—Que pasa?, que te parece gracioso?— pregunta el, divertido.
—Nada nada, cosas mías — recupero la postura y lo miro directamente a los ojos— verás, se la respuesta a ambas, no, no tiene novio, y respecto a lo de si le gusta alguien, no soy yo quien debe decirtelo— le confieso— si quieres saber si le gusta alguien, es ella quien debe decirtelo—
Mick simplemente asiente y sonríe tímidamente.
—Está bien...— dice sin saber realmente que decir
—No quiero incomodarte, pero, no se si es porque somos amigos, o porque eres muy obvio, pero se nota de lejos lo mucho que te gusta Audrey— digo sonriente.
A mis ojos Mick era el chico perfecto para mi prima, y me haría muy feliz verlos juntos, así que si podía hacer algo para que eso pasara, iba a hacerlo.
—Tu crees?— pregunta asustado— crees que ella se ha dado cuenta?— dice con clara preocupación en su voz.
—Créeme, conozco a mi prima, y no se ha dado cuenta ni de coña— digo tranquilizandolo— mi prima nunca se da cuenta de estas cosas—
El simplemente asiente y se queda pensativo.
—Bueno, yo me voy a seguir dando una vuelta, e imagino que tu debes tener cosas que hacer— le digo empezando a caminar— me ha alegrado mucho hablar contigo, Mick— digo sonriente
—A mi también me ha alegrado, Alessia— dice despidiéndose.
Estaba ya caminando cuando de repente Mick corre de nuevo hacia mi.
—Crees que debería hablarle a Audrey?, no se, llamarla o algo— pregunta tímidamente.
Yo le pongo una mano en el hombro a modo de apoyo y le contesto:
—Sin duda, de hecho creo que la harías muy feliz—
El me sonríe y finalmente nos despedimos, el yéndose de vuelta al garaje de Mercedes, y yo siguiendo mi caminata por el paddock.
. ゚*✩‧₊˚.
Después de unos minutos caminando, finalmente llego a los garajes de redbull, donde está su monoplaza aparcado fuera y un par de fotógrafos tomándole fotos, lo que supongo que sería para la pagina oficial de redbull.
Un grito ahogado sale de mi cuando siento a alguien colocar sus manos en mis hombros.
—Vaya, menudo susto te he dado— dice un Max burlón cerca de mi oreja
—Joder, que tenéis todos con asustarme?— pregunto sarcasticamente
El se rie un poco y me rodea en un abrazo
—Cuanto tiempo— dice el separándose del abrazo
—Si, tenía ganas de verte— le contesto
Max era otro amigo mío del paddock, ya que debido a todos los años que he estado por aquí debido a mi padre, he tenido el tiempo suficiente de hacer algún que otro amigo.
—Y yo a ti— dice sonriente— que estás aquí, para pasarle información a tu novio?— pregunta sarcasticamente
—Si si, muy gracioso— le respondo rodando los ojos.
Ambos reímos y observamos unos minutos a los fotógrafos tomar fotos, hasta que Max me toma delicadamente del brazo y me hace mirarle directamente a el.
—Necesito decirte algo, Alessia— dice esta vez, muy seriamente
—Si claro, que ocurre— digo asintiendo, también yo poniéndome seria.
—Necesito que sea un sitio privado— dice el dirigiéndome dentro del garaje de Redbull, y metiéndonos a ambos dentro de lo que parecía su driver room.
Una vez estamos dentro, le miro desconcertada sin entender que era eso tan importante que tenía que decirme, tan importante como para no querer que absolutamente nadie nos escuchase.
—Por qué tanto misterio, Max?, que ocurre?— pregunto ya poniéndome nerviosa.
—Mira, te lo voy a decir sin rodeos— dice sentándose en el sofá, por lo que nerviosa, decido sentarme también— se lo tuyo con Carlos— dice de sopetón.
Mi corazón deja de latir por unos segundos, y siento mi respiración muy acelerada, cosa que el Holandés nota enseguida y pone una mano en mi brazo.
—Pero no pasa nada, no pasa nada— dice tranquilizante— osea, si pasa, por que no me agrada Carlos para ti, a decir verdad, pero no se lo voy a contar a absolutamente nadie, entiendes?— confiesa Max
Yo asiento nerviosa y me quedo mirando a la nada.
—Perdón por decírtelo así de la nada, pero creo que lo correcto era decírtelo — dice dando pequeñas caricias en mi brazo
—Y como te enteraste?— le pregunto curiosamente
—Lo cierto es que lo sospechaba, quiero decir, somos amigos, te veía rara cuando el estaba cerca, y tenía mis sospechas, pero en la fiesta privada de pilotos, cuando le pregunté a Carlos acerca de eso, su forma de actuar y como reaccionó a ello me le dio a entender todo— dice sinceramente
—No te voy a mentir, si es cierto que he tenido una aventura con Carlos— le confieso al rubio— pero por favor Max, sabes que eres de mis mejores amigos aquí, no le cuentes esto a nadie, me puede arruinar la vida— le digo asustada
El cambia su expresión comprensiva a una de preocupación y toma mi cara son sus manos.
—Jamás en la vida te haría eso, Alessia— dice acariciando mis mejillas suavemente— eres muy importante para mi aunque no te lo diga seguido, nunca podría hacerte eso, no a ti— confiesa con una pequeña sonrisa en su rostro
—Gracias— digo más tranquila y dándole un abrazo
El corresponde sin dudarlo a mi abrazo, y nos quedamos así unos minutos.
Max fue una de las primeras personas con las que establecí amistad aquí hace años, y no lo cambiaría por nada del mundo, sin duda era uno de mis mejores amigos.
—Una pequeña pregunta— dice separándose de mi— por que sigues con Charles?, se ve claro que no le quieres como el a ti— pregunta curioso
—Lo sé, es difícil de explicar, pero es mejor tanto para mi imagen como la de el que me quede a su lado— digo con una sonrisa triste
—Por que te quedarías con alguien que no amas solo por su imagen?, por que te conozco lo suficiente como para saber que a estas alturas lo que piense la gente de ti te da absolutamente igual, por que hacer realmente esto?— pregunta Max.
Y es que me conocía tanto que todo lo que había dicho era cierto, mi imagen no era la que me importaba en esta situación, era la de otra persona, y no precisamente la de Charles.
—Es por Carlos verdad?— pregunta con una expresión que realmente no sabría explicar, por alguna razón parecía dolido.
Yo no puedo mentirle, no a Max, así que con toda la vergüenza del mundo, asiento.
—Y que podría afectar tanto a Carlos como para que no podáis estar juntos y tengas que estar con Charles?— vuelve a cuestionar el Holandés
—Si la prensa descubre lo que ocurrió entre yo y Carlos, le quitarían algún que otro sponsor y eventualmente terminarían echándolo de Ferrari, y no puedo permitir eso— me tapo la cara con las manos, no podía seguir mirándole a la cara.
Max parece entenderme, y en lugar de juzgarme o decir algo al respecto, siento sus brazos rodearme en un abrazo y agradezco profundamente tenerlo de mi lado.
. ゚*✩‧₊˚.
NOTA DE LA AUTORA:
Este es uno de los capítulos más largos que he escrito, y aunque no ha habido mucho salseo, he introducido un par de cosillas que aunque ahora no lo veáis, van a armar un par de dramas en el futuro🫣
Si has llegado hasta aquí, gracias por leerme🫶🏻
Nos leemos en el próximo capítulo🫂
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro