"Aquí vamos"
Pienso seguido de un lastimero suspiro, mientras observo la estructura del edificio que bien podría confundirse con una prisión de máxima seguridad, los colores grises y sombríos que decoran su fachada y los barrotes en los amplios ventanales no son de ayuda para evitar tener esta primera impresión.

Las bicicletas estacionadas a cada costado de la entrada principal y el parqueo designado para los estudiantes de últimos grados, me recuerdan, que me encuentro frente a mi nueva escuela.

No puedo creer que mis padres aceptaron inscribirme a una escuela semi-pública, tuve que utilizar todas las artimañas posibles para lograr convencerlos, quizás aceptaron porque Corea del Sur no es necesariamente un país completamente extraño o ajeno a los que conocí previamente en mis cortos quince años; pues verán, este es mi país de origen, nací en la ciudad de Seúl un quince de noviembre en una de sus zonas más privilegiadas.

Mis padres pueden considerarse prodigios en las áreas de especialización que eligieron para desarrollar en su vida adulta.

Mi padre, dedicado a los negocios e inversiones y mi madre, a la medicina e investigación, mi hermano mayor Jaehyuck sigue orgullosamente sus pasos y es un flamante estudiante de medicina en Londres, Inglaterra.

Gracias a sus exitosas carreras, mi familia corrió una suerte de gitanos sin patria ni Estado, desde que tengo uso de razón, nos trasladamos constantemente de ciudades, países en incluso, hasta de continentes.

Sin embargo, ambos me prometieron que estos dos años serían diferentes, Corea del Sur se convertirá en nuestra residencia hasta que termine la secundaria y decida el rumbo que tomará mi vida adulta.

Retomando el tema de mi nueva escuela, estoy seguro de que mi rutina por los siguientes dos años no variará significativamente a la rutina de mi última escuela en Brisbane, Australia.

No faltarán los profesores a los que solo les interesa llegar a fin de mes para cobrar el sueldo, mi curricula escolar estará repleta de materias innecesarias, que no me servirán de nada en la vida adulta y que ni por si acaso, aplicaré en mi formación profesional o crecimiento personal.

Ya puedo imaginarme a los delimitados y selectivos grupos de "amigos" mejor conocidos como "castas sociales" estratégicamente jerarquizadas y conformadas por personas que estadísticamente comparten los mismos gustos e intereses y por supuesto, los olvidados y excluidos como yo, los pocos seres autónomos e independientes que aprendieron a camuflarse cual camaleón para poder sobrevivir y que solo quieren que los dejen vivir en paz. ¿Es que acaso eso es demasiado pedir?

Suspiro una vez más antes de ingresar al imponente edificio de paredes color gris; mi primera tarea, es encontrar la oficina del Director General ¿Qué tan difícil puede ser? Sin importar el lugar, todas las escuelas a las que pertenecí parecen estar estructuradas de una manera similar.

Espero tener las fuerzas y la voluntad necesarias para poder sobrevivir a mis últimos años de secundaria, mi nombre es Sim Jaeyoon y sí, estoy cansado de tener que empezar de cero una y otra vez, sin tener un lugar al cual llamar "mi verdadero hogar".

Aprovechando que hoy no tuve mucho trabajo, me animé a actualizar esta historia 😙

Muchas gracias por leerla y apoyarla , hasta la próxima actualización ❤️🥰🌻