Para su suerte, Quackity los ayudó a hacer todo mucho más rápido, y a las 3 semanas, todos estaban de nuevo en su hogar.

____ estaba de nuevo en Reino Unido, Samantha en México y Roier, bueno, el no se fue de Estados Unidos.

Con ____, Tommy y Wilbur ya la esperaban en el aeropuerto, emocionados por verla luego de casi un mes. No mentirían, llevaban esperándola desde hace 2 horas y media. Estaban demasiado ansiosos que salieron de casa apenas desayunaron y estuvieron listos.

-¡____!- Gritaron los dos al verla entrar. Corrió con una sonrisa en el rostro. -¿Cómo te fue?-

Rio entre dientes, abrazando a Tommy.

-Te lo dije todos los días. ¡Bien!, ¡y mucho mejor ahora, por fin soy libre!- Ambos dieron pequeños saltitos, celebrando.

-Me alegra que pienses así.- Habló Wilbur, palmeando la espalda de Tommy. -Pero es mi turno.- Los tres rieron de nuevo. -¿Quieren ir a cenar?, Philza ya va en camino al restaurante.-

-Quisiera dejar mis cosas en mi casa antes, ¿podriamos?, para no estar cargando las maletas, ya saben.

El de lentes asintió, tomando las maletas ahora el y los tres caminaron hacia el auto.

‐¿Hiciste algo interesante?- Pregunto Tommy cuando estuvieron en el coche. -Además de casi agarrarte a golpes con tu ex, claro.-

-Oh, pues, fui a varios lugares que Quackity me ha recomendado. Dijo que tenía que ver lo más lindo para al menos irme con un recuerdo bonito.

-¿No te basta con...¡Separarte!?- Los dos mayores rieron y Tommy solo miró de nuevo la ventana. -Digo, ¡ellos eran muy malos contigo!-

-Yo igual lo fui.

-Pero ellos eran dos.

-Samantha tuvo que huir literalmente. Roier tenía que ir a terapia y yo no me preocupaba por ellos. Nos dañabamos entre todos, igualmente.- Suspiró. Se preguntaba si Roier algún día podría cambiar su actitud. -Yo digo que igual debí apoyarlos en vez de empeorar todo siendo inmadura.-

-Por su culpa tu brazo está lleno de cortadas.- Wilbur habló ahora, y extrañamente eso le dolió demasiado a ____. -Perdón... No, no quería decir eso.-

-¡Pero es cierto!- Interrumpió el rubio, frunciendo las cejas antes de mirarla. -Oh... ____ l-lo siento.- Hizo un puchero por la incomodidad, debería cerrar la boca de vez en cuando.

Secó las lagrimas que amenazaba con salir de sus ojos y negó.

-Entiendo lo que dicen, solo que es algo feo recordar lo malo que pasaba.- Mordió su labio. -Yo, los extraño- Sollozo, cubriendo su rostro con ambas manos. -. Fue mi culpa.- Wilbur siguió conduciendo, aunque ahora solo deseaba abrazar a su amiga, que parecía necesitar apoyo en un momento como este.
Pero Tommy se encargó de aquello, dejando que la pobre llorará en su pecho.

Pasa a veces, es normal. Pronto pasará. Solo quería asegurarse de que ellos estén bien y ella iría por su cuenta. Si, eso haría.

-No es tu culpa, enana. Al menos no la es toda.- Tommy acarició su cabello. -Ya llegamos, tranquila, ¿si?-

La chica asintió, sonriendo. Como amaba a esos chicos.

-Si, gracias.- Bajó del auto y el de lentes fue corriendo a abrazarla. -¡Wil, no puedo respirar!- Rio, palmeando su espalda.

-¡Lo siento!, ¡pero necesitaba abrazarte!- La dejo con total cuidado en el suelo y fue al maletero para dejar las maletas de ____ en su departamento. -Las subiré, ustedes esperenme.-
Ambos asintieron y subieron de nuevo al auto.

-Yyy, ¿tienes fotos o algo?

-Tomé algunas con Quackity y Sam, ella es la que mejor maneja las situaciones, así que nada de rencor con ella.

-Es la única que me podría caer bien de ambos, si te soy sincero.- ____ rio, palmeando su cabeza. -Mira, estas son.- El menor tomó el teléfono con cuidado y paso las fotos.

-Me tienes demasiada confianza sabiendo como soy.

_____ rio nuevamente.

-Ok, no hagas que me arrepienta.