Pelea y Castigo

Klaus sostuvo del brazo a Elena mientras la miraba fríamente.

Elena por un segundo creyó que ese sería su último momento con vida, era inevitable no pensar así al ver lo enojado que Klaus estaba en esos instante.

─ ¿Por qué no me dijiste que estabas embarazada? ─ le preguntó Klaus.

Elena tragó saliva antes de hablar.

─ Ya te lo dije ─ murmuró por debajo ─ fui a Nueva Orleans pero...

─ Me refiero a cuando supiste que estabas embarazada ─ gruñó el híbrido ─ tuviste muchos meses para decírmelo y no lo hiciste ─ la miró con molestia.

El doppelganger cerró sus ojos tratando de tranquilizar su respiración y su corazón que parecía que en cualquier momento se le saldría de su pecho.

─ Klaus...

─ ¡ME OCULTASTE A MI HIJO, MALDITA SEA!, ¿CÓMO PUDISTE HACERME ESTO? ─ gritó Klaus furioso mientras la soltaba para evitar hacer algo que luego se fuera a arrepentir.

En ese momento se sentía impotente, matar a Elena sería una forma de bajar su enojo pero no lo haría, no era capaz de matarla, mucho menos al saber que era la madre de su hijo.

Elena se sintió mal al verlo así, realmente lo entendía un poco, sabía que todo no iba a ser fácil para Klaus, él se había perdido casi toda la vida de su hijo, además se enteraba que Nik tenía un padrastro, eso último aún le seguía pareciendo raro y confuso a Elena.

─ Tenía miedo, de ti, de tu problemática familia y de tus miles de enemigos ─ confesó Elena.

Esa era una de las razones por la que Elena no le había dicho desde un principio a Klaus la verdad.

─ ¿Tenías miedo de mi? ─ Klaus la miró mientras le preguntó.

Sabía que él no había sido lo mejor en la vida de Elena sin embargo ellos habían quedado bien cuando se fue de Mystic Falls.

─ De cómo reaccionarias ─ aclaró Elena mirándolo ─ tenía miedo, cuando acepte tener a nuestro hijo quería protegerlo de todo, no sabía cómo ibas a tomar esto ─ le dijo ─ tú en ese momento querías recuperar Nueva Orleans.

─ Nueva Orleans no es nada comparado con mi hijo ─ gruñó Klaus al escucharla.

─ Klaus, yo tenía miedo, entiéndeme, no podía arriesgar a mi hijo, ¿Qué hubiera pasado si te lo decía y no me creías? ─ le preguntó Elena ─ incluso tú dudaste cuando supiste que estaba embarazada, no creías que fuera tuyo, dímelo, ¿Me hubieras creído si te lo hubiera dicho en ese momento? ─ lo miró fijamente.

Klaus respiró profundo mientras pasaba sus manos por su cara con desesperación.

─ Probablemente no ─ respondió con sinceridad Klaus.

─ ¿Lo ves?, hay está la respuesta... No iba a arriesgar a mi hijo ─ le dijo Elena.

Klaus la miró a los ojos mientras apretaba su mandíbula.

─ Nuestro hijo ─ aclaró Klaus ─ que no se te olvide Elena que Nik es nuestro hijo ─ le dijo mirándola ─ cuando todo esto termine, él sabrá de mí, no voy a permitir que le diga padre a otro sujeto que tú le quieras imponer como padre

Elena frunció su ceño porque sabía que ella jamás obligaría a su hijo a aceptar a alguien más como padre.

─ ¡Jamás haría eso! ─ ella lo miró furiosa.

─ Pues eso no es lo que vi, dejaste que le llamará padre a otro hombre cuando el verdadero padre soy yo ─ dijo Klaus.

Elena no pudo replicar ante las palabras de Klaus ya que por lo que vio, Nik si llamaba padre a su futuro esposo desconocido.

Klaus aún seguía frustrado y molesto por eso por lo cuál salió de la habitación para evitar hacerle algo malo a Elena en ese momento.

Elijah miró con un poco de pena mezclado con preocupación a su hermano Klaus.

─ Niklaus por favor detente ─ pidió el mayor al ver a Klaus caminar de un lado al otro mientras murmuraba en voz las cosas que haría.

─ No lo voy a permitir, antes muerto que dejar que mi hijo le diga padre a alguien más ─ juró Klaus.

Elijah se le acercó, le agradaba el hecho de que su hermano quisiera a su sobrino en su vida pero le preocupaba lo que Klaus pensaba hacer, no quería que Nik terminará odiando a Klaus y que después su hermano terminará peor que antes por esa razón.

─ ¡Cálmate! ─ Elijah puso sus manos en los hombros de Klaus.

─ ¿Cómo pretendes que me calme con todo esto? ─ gruñó Klaus.

El mayor respiró profundo antes de volver a hablar nuevamente.

─ Mira, hablé con Qetsiyah sobre esto, Elena tuvo razón cuando dijo que no sabía quién era la persona que Nik llamaba padre, al parecer en un año ella lo conocerá y se casará con ese hombre y Nik lo verá como su figura paterna ─ le contó Elijah aún confundido al saber que Elena se casaría tan rápido ─ con esa información sabemos que Nik aún no lo conoce por lo tanto cuando salgamos de aquí puedes estar con él, demostrarle que lo quieres y que eres su padre biológico, Niklaus puedes tener lo que quieres pero piensa antes de actuar, no cometas un error que luego te salga caro, no puedes ir contra Elena como hace momentos me dijiste que querías hacerlo, ella es la madre de Nik, estuvo con él toda su vida, si él debe elegir entre ustedes dos va a elegirla a ella, y si planeas matarla, Nik va a odiarte toda la vida ─ dijo el original.

Klaus miró con sorpresa a Elijah al saber que lo que Elena dijo era verdad sobre que no conocía a ese hombre aún. Saber eso lo alivió porque podía estar con su hijo sin que Nik viera al otro hombre como padre.

El original también proceso las otras palabras de su hermano, iba a hacerle caso, todo lo haría por su hijo, solamente por él y para estar en su vida como tanto deseaba hacerlo.

Klaus asistió hacia Elijah haciendo que el mayor sonriera con alivio.

A la mañana siguiente todos hicieron la rutina que últimamente hacían desde que habían llegado ahí.

Luego de desayunar, todos fueron a la sala y se acomodaron en sus lugares diarios.

─ Bien, vamos a comenzar ─ les dijo Qetsiyah.

Todos miraron hacia la pantalla para mirar lo siguiente que pasaría.

Nik frunció el entrecejo mientras miraba a uno de sus compañeros de clase.

─ ¿Sucede algo, Nik? ─ le preguntó un niño cerca de él.

─ Si, sucede que quiero sacarle los ojos a ese niño que no me deja de mirarme mal ─ murmuró entre dientes el rubio.

Algunos abrieron sus ojos más de lo normal al escuchar a Nik en la pantalla.

Kol soltó una risa.

─ Si, definitivamente Klaus es su padre, salió igualito a él ─ soltó el original después de escuchar a su sobrino.

Rebekah asintió con su cabeza en acuerdo con Kol.

─ ¡Genia!, Ahora tenemos a un Klaus en miniatura ─ murmuró Damon mirando de reojo al híbrido.

Por otra parte Elijah miró a Klaus, le sorprendió un poco la genética fuerte que Nik tenía de Klaus.

Klaus sonrió mirando a su hijo en la pantalla, cada vez que veía algo de él lo amaba más que antes.

El otro niño abrió sus ojos a lo grande al escucharlo.

─ Nik...

─ Ven conmigo, vamos a hablar algunas cosas con ese niño ─ dijo Nik antes de caminar.

─ Ya sabemos quién da las órdenes ahí ─ mencionó Caroline con sorpresa, sobre todo por la edad de Nik.

─ Es hijo de Klaus ─ le recordó Stefan a su lado.

El otro niño siguió a Nik a su lado.

─ Esto no terminará bien ─ mencionó Elena preocupada por su hijo.

─ Es un Mikaelson, apuesto que mi sobrino le rompe la nariz al otro niño ─ dijo Kol sonriendo.

─ No deberías estar feliz por algo así, es un niño, Kol ─ le dijo Elijah mirándolo.

─ No seas aburrido Elijah ─ murmuró Kol rodando sus ojos ─ ni que fuera a matarlo.

Klaus tragó un poco de saliva al escuchar las últimas palabras que dijo Kol.

Su hijo tenía su mismo temperamento y no dudaba que fuera a hacer algo imprudente, Klaus en su mente rogaba que no pasará nada malo.

Nik estaba sentado en frente del director de la escuela, Elena por otra parte estaba a su lado ya que había sido llamada por todo el escándalo que hubo con su hijo.

─ Como le decía, Nik no solo le rompió la nariz a su compañero si no que también lo dejó tan atemorizado que su compañero ya no quiere volver a la escuela ─ le dijo el director a Elena.

La mayoría abrió sus ojos como plato al saber lo que había hecho.

Algunos a pesar de saber que Nik era hijo de Klaus no podían creer que él fuera capaz de hacer eso con la edad que tenía.

─ ¡Oh, por Dios! ─ Elena llevó sus manos a su boca con sorpresa ya que su hijo no había hecho eso antes.

Kol sonrió.

─ ¡Lo sabía! ─ él estaba feliz de haber acertado a lo que dijo minutos atrás ─ Mikaelson tenía que ser ─ dijo el original.

Klaus miró con impresión la pantalla, la verdad no podía culpar a su hijo, después de todo él le heredó esos genes.

Aunque no lo dijera en voz alta, a Klaus le gustó saber que Nik no se dejaba intimidar por nadie a pesar de la edad que tenía.

─ Dominante como el padre ─ murmuró Freya aún con sorpresa al saber lo que su sobrino hizo.

Elena miró de reojo a su hijo haciendo que esté bajará su cabeza.

Jeremy apretó sus labios para no reírse de su sobrino, sabía que Elena lo castigaría prohibiendole algo ya sea la televisión o los videojuegos.

─ Lo entiendo, ésto no volverá a pasar director, se lo aseguro ─ mencionó Elena.

─ Dudo bastante que eso no vuelva a pasar, Elena ─ mencionó Elijah mirándola.

Elena se preocupó al escucharlo, esperaba que los genes problemáticos de Klaus no salieran tan rápido en su hijo.

─ Eso espero, porque de lo contrario me veré en la necesidad de expulsar a su hijo del colegio ─ advirtió él.

─ Ni que lo hubiera matado, estos humanos exageran todo ─ gruñó Klaus.

Algunos de la pandilla lo miraron como si tuviera tres cabezas encima.

Elena asistió mientras se levantaba de su asiento al igual que Nik.

─ Gracias por todo, y pierda cuidado, él no volverá a hacer eso jamás ─ le dijo Elena.

Luego de esa conversación tanto Elena como Nik salieron de la oficina del director.

─ Mamita... ─ Nik murmuró mirándola.

Jeremy se rió de nuevo.

─ Se viene el castigo, ¿Qué será? ─ preguntó hacia su hermana.

─ Creo que adiós a los videojuegos ─ dijo Bonnie.

Elena asintió de acuerdo. Esperaba que su yo del futuro lo castigará quitándole los videojuegos para que aprendiera a no meterse en problemas.

Klaus miró a Elena, él esperaba que ella no le hiciera eso a Nik.

─ Castigado por una semana entera sin videojuegos ─ le dijo Elena con seriedad.

Klaus miró mal a Elena.

─ No debiste ser tan dura con él ─ dijo Klaus en dirección de ella.

Elena levantó sus cejas mirándolo.

─ Yo educo a mi hijo como bien me parezca, lo que menos quiero es que termine como tú, todo un patán ─ soltó Elena.

Klaus reprimió sus ganas de gruñirle al escucharla.

─ Mejor sigamos viendo ─ propuso Elijah al ver las miradas matadoras que Klaus le lanzaba a Elena.

Qetsiyah asistió en acuerdo con él.

─ Pero... ─ Nik intentó replicar.

─ Pero nada ─ lo interrumpió Elena ─ lo que hiciste estuvo mal.

Varios de la pandilla estuvieron de acuerdo con ella.

Nik asistió cabizbajo mientras seguía a su madre al auto. Al subirse en el vehículo ninguno de los dos habló por un buen rato hasta que el menor rompió el silencio.

Klaus se sintió mal al ver a su hijo cabizbajo por lo que había pasado.

─ ¿Y papá? ─ preguntó Nik.

Elijah miró de reojo a Klaus en ese momento, el otro original respiró profundo para intentar tranquilizarse y para su sorpresa pudo controlarse en ese instante.

─ En casa, él estaba muy preocupado y un tanto decepcionado por lo que hiciste ─ le dijo Elena.

Klaus gruñó sin poder evitarlo. Estaba furioso con ese tipo desconocido.

«¿Quién se creía que era para que se decepcionará de su hijo?». Pensó Klaus demasiado molesto.

─ Más drama ─ murmuró en voz baja Kol.

Nik tragó saliva mientras seguía manteniendo su cabeza baja.

─ Pero no dejaba de mirarme, ese niño me miró bien feo ─ se excusó Nik.

─ Me da pena pobrecito pero merece un castigo por lo que hizo ─ dijo Rebekah.

Elijah asistió en acuerdo con su hermana, a él también le daba pena su sobrino por la situación en la que estaba pero sabía que merecía algún castigo por lo que le había hecho al otro niño.

─ No puedes golpear a todos los que te miren mal ─ mencionó Elena.

─ ¿Cómo qué no? ─ Kol frunció su ceño.

─ Claro que sí, papá lo hace todo el tiempo, mamá ─ susurró Nik.

Elena abrió sus ojos más de lo normal al escuchar a su hijo.

─ ¿Qué? ─ preguntó Elena en shock.

Más que nunca, Elena quería saber con que salvaje se había casado en el futuro.

Klaus miró en dirección de Elena.

─ Lo que faltaba, ese tipo es una pésima influencia para mi hijo ─ gruñó Klaus.

Todos miraron a Elena.

─ ¿Pues con quién te metiste Lena? ─ Jeremy la miró confundido.

─ No tengo idea ─ dijo el doppelganger.

─ Deberías ir considerando desde ahora el no casarte con él ─ mencionó Bonnie.

─ ¡Claro!, Es una pésima influencia ─ soltó aún molesto Klaus.

Algunos lo miraron con incredulidad porque él no era precisamente la persona con mejor influencia.

Kol soltó una carcajada tomándose de su estómago con sus manos, parecía que en cualquier momento iba a llorar de la risa.

Después de escuchar a su sobrino, para Kol varías cosas tuvieron sentido.

─ Kol, ¿Por qué te ríes? ─ le preguntó Rebekah confundida.

Kol tranquilizó su risa un poco.

─ E-s q-ue... Kla-us... e-s e-l.. ─ Kol intentó hablar en medio de su ataque de risa pero apenas se le entendió de lo que habló.

Algunos rodaron sus ojos al ver que el original empezó a llorar en medio de su ataque de risa.

Qetsiyah no pudo evitarlo y se rió junto con Kol en ese momento.

Ver a Qetsiyah reírse junto con el original un poco sorprendió al resto de los presentes.

La primera en dejar de reír luego de unos minutos fue Qetsiyah ya que debía seguir con lo que los demás estaban viendo.

Después fue el turno de Kol de tranquilizarse, el original quitó algunas lágrimas de sus ojos y luego se acomodó en su lugar como si nada hubiera pasado.

─ ¿Listo? ─ Qetsiyah le preguntó mientras formaba una sonrisa en sus labios.

─ Si, darling ─ Kol asistió.

Para varios fue raro todo eso, algunos quedaron con la duda de lo que Kol quería decir hace unos momentos atrás.

Elena lo miró de reojo mientras seguía conduciendo su auto.

─ ¿Si tú padre se tira a un pozo, tú harías lo mismo? ─ le preguntó levantando sus cejas.

─ Tampoco exageres Elena ─ mencionó Bonnie.

─ Soy niño, no tonto ─ dijo Nik apretando sus labios para no reírse.

Klaus sonrió al escucharlo.

─ ¡Ese es mi hijo! ─ soltó Klaus orgulloso.

Elena no pudo evitar reírse en ese momento aunque luego se arrepintió y volvió su cara sería.

─ ¿Por qué siempre tienes que demostrar que eres el alfa? ─ le preguntó Elena.

Klaus sonrió mientras dirigía su mirada hacia Elena.

─ Casi todos los lobos se creen alfas ─ murmuró Matt.

─ Cosas de licántropos ─ Damon rodó sus ojos.

Elena miró hacia Klaus al recordar que una vez le había preguntado lo mismo a Klaus en medio de una discusión que tuvieron luego de que él le sacará sangre para sus híbridos.

Nik sonrió mirándola de reojo.

─ No tengo que demostrar nada, yo soy el alfa ─ habló con seguridad Nik.

Elena se sorprendió bastante al escuchar las mismas palabras que Klaus le dijo una vez pero ahora en Nik.

─ Ya no necesitamos más pruebas. Nik es cien por ciento hijo de Klaus ─ mencionó Rebekah.

Klaus por otra parte volvió a sonreír.

─ ¡Es mío!, ¡Mi hijo! ─ dijo el original aún sonriendo.

¡CAPÍTULO 4!

Hola, ¿Cómo estan?, Espero que estén todos bien.

Tardé bastante en actualizar pero aquí estoy de nuevo.

Ya se acerca
el final de ‘SZIVEM’.

😭💔