11. ¡𝐕𝐀𝐌𝐎𝐒!
Se veía una mujer de cabello rubio que caminaba por aquellas instalaciones, se veían varios niños trabajar en aquellas instalaciones.
- oye, ¿Quien nos puso aquí? - Pregunta una chica pelirroja de unos 14 o 13 años mirando una pantalla estando asustada.
- Eso no lo sabemos. - Le responde el chico rubio a su lado.
Se veían pequeños flash que lo levaron hacia una chica pelinegra con los ojos azules, aquella chica le regala una sonrisa al pelicastaño.
- Teresa, ¿Por qué hacemos esto? - Pregunta Thomas mirando a Teresa.
- Excelente Thomas. Ven conmigo. - le susurra la misma mujer rubia.
Se veía a él mismo encima de una especie de camilla, unos doctores estaban junto a él observando.
- Cruel no es bueno. - Susurra Teresa.
- Thomas... Cruel es bueno. - Le dice a Thomas la mujer rubia.
- ¿Cómo podría ser mi culpa? - Murmura aquel chico mientras miraba a varios adolecentes gritar debajo del agua, viendo a una chica pelirroja quien golpeaba el vidrio algo enojada.
- ¡Tu hiciste esto!
- ¡Te ví!
- No puedo verlos morir.
Teresa hace una mueca mientras ve hacia adelante.
Thomas abre sus ojos sintiendo la luz del día pegarle en la cara.
- Hola. - Dice Teresa mientras Thomas despertaba. - ¿Estás bien?
- ¿Por qué rayos hiciste eso? - Pregunta Chuck al ver que el novato despertó.
Thomas se levanta viendo a Minho, Astrid y Newt afuera del pozo, mientras que Teresa y Thomas estaban dentro de éste, el ya mencionado miro a todos confundido por lo que estaba sucediendo.
- ¿Que paso? - Murmura Thomas.
- Gally tomo el control. - Comenta Astrid. - Dijo que debíamos elegir. Unirnos a él o ser desterrados contigo al atardecer.
- ¿Los demás estuvieron de acuerdo?
- Gally convenció a todos de que todo esto es tu culpa. - Responde Teresa.
- Hasta ahora, ha tenido razón.
- ¿De que hablas? - Cuestiona Minho.
- Este lugar. No es lo que creíamos que era. No es una prisión es una prueba. - Empieza a hablar Thomas haciendo que Astrid prestará atención junto al restó. - Todo empezó cuando éramos niños. Nos daban unos desafíos. Experimentaban con nosotros. Y luego, comenzamos a desaparecer. Cada mes, uno tras otro, sin falta.
- Lo enviaban al laberinto.
- Si, pero no a todos.
- ¿Que quieres decir, Thomas? - Pregunta Astrid algo confundida.
- Chicos, soy uno de ellos. Yo trabajaba con quiénes los pusieron aquí. Los mire durante años. Todo el tiempo que llevan aquí, yo estaba mirándolos del otro lado. - Thomas mira a Teresa. - Y tú también.
- ¿Qué?
- Teresa, nosotros les hicimos ésto. - Murmura Thomas de forma triste.
Teresa niega repetidamente, sabiendo que no era así. - No puede ser verdad.
- Lo es. Lo ví. - confirma.
- ¿Entonces por qué los enviaron aquí? - Pregunta Astrid tratando de entender la situación.
- Eso ahora no importa.
- Él tiene razón. - Habla Newt. - No importa. Nada de ésto. Porque las personas que éramos antes del laberinto ya no existen. Los creadores se encargaron de eso. Pero lo que si importa es quienes somos hoy y que hacemos ahora. Fuiste al laberinto y encontraste una salida.
- Si, pero si no lo hubiera hecho, Alby seguiría con vida.
Astrid mira a Thomas bajando su vista mientras suspira. - Tal vez. Pero se qué si él estuviera aquí, estaría diciéndote lo mismo. Muevete y termina lo que empezaste. Porqué si no hacemos nada, Alby habrá muerto en vano, Thomas.
- Bien. Pero primero debemos resolver lo de Gally.
Dicho ésto, Astrid asiente aquellos tenían un plan, ojalá funcione porque Astrid tiene que tratar de sacarlos a todos de aquel laberinto para que puedan sobrevivir cueste lo que cueste.
[...]
Thomas y Teresa eran llevados por dos chicos quienes los llevaron hacia la puerta del laberinto, donde habían dos postes mientras que todos se empezaban a reunir. Uno de los chicos tiró al suelo a Thomas quien estaba "inconsciente" mientras que q Teresa la asujetaban para que no escapara.
- Es un desperdicio. - Murmura Gally mirando al novato.
Astrid estaba alado de Minho mirando todos, mientras que Winston llama la atención de Gally, este último se da vuelta para mirar.
- Gally. No es correcto, amigo. Si, ¿Y si Thomas tiene razón? - Cuestiona Winston.
- Quizá puede llevarnos a casa.
- Estamos en casa, ¿Está bien? no quiero seguir tachando nombres en ese muro. - Dice Gally haciendo que Astrid rodará sus ojos.
- ¿En serio crees que desterrar a Thomas y Teresa va a solucionar algo? - Cuestiona desafiante Astrid mientras se cruza de brazos, llamando la atención completa de Gally.
- No. Pero no es un destierro para ellos dos. Es una ofrenda. - Dice Gally haciendo que Astrid mirara a Teresa quien estaba asustada.
- ¿Que? ¡Espera! Gally, ¿Que estás haciendo? - Habla Teresa quien está empezando a ser amarrada al poste.
- ¿Crees que permitiré que Thomas vuelva al laberinto tras lo que hizo? ¡Mira a tu alrededor! ¡Mira el área! Es la única manera.
Astrid mira a Minho quien asiente lentamente para luego la chiva dirija su vista hacia el rubio quien asiente de igual forma. Chuck quien fue mandado a buscar algunas cosas junto a varias armas entre ellas las navajas de Astrid, estaba empezando a llegar sigilosamente para que el plan siguiera su rumbo.
- Cuando los penitentes tengan lo que vinieron a buscar, todo volverá a ser como antes.
- ¿Lo están oyendo? ¿Por qué se quedan ahí parados? ¡Está loco! - Alza la voz Teresa.
- Tu cállate.
- Si se quedan aquí, los penitentes volverán ¡Volverán una y otra vez hasta que todos estén muertos!
- ¡Cállate! ¡Atenlo! - Alza la voz Gally viendo que nadie le hacía caso. - ¿Me oyeron? ¡Dije que lo aten!
Ambos chicos toman a Thomas de los brazos levantandolo, mientras que esté le pega en el estómago a uno de los chicos haciendo que retrocediera quitándole su arma, el chico trata de defenderse pero el novato le pega con el palo en la cabeza haciendo que cayera al suelo.
Astrid toma uno de los palos que tenía en la mano acercándose a uno por detrás pegándole en la cabeza, noqueando a éste. La ojiverde al ver qué Gally trata de ir a ayudar toma su machete el cual tenía en su mochila, tocando el hombro de Gally con éste haciendo que se detenga.
- Yo no me movería si fuera tú. Ya sabes que nunca falló. - Dice Astrid mientras alza una ceja mirando al chico levantando su machete el cuál lo tiene contra su cuello.
Sartén ayuda a Teresa, mientras que Chuck corre hacia donde están los demás chicos. Lucas veía todo así que decide ir hacia donde estaban todos, sabiendo que era lo correcto, no iba a dejar a Astrid sola en ésto. Astrid empieza a caminar alrededor del chico para luego alejarse lentamente dejando a este perplejo por lo que acababan de hacer. Chuck se acercó a la rubia pasándole unas armas, está sonríe agradecida.
- No dejas de sorprenderme.
- No tienes que venir con nosotros, pero nos vamos. - Habla Thomas. - Si alguien más quiere venir, es su última oportunidad.
- ¡No hagan caso, intenta asustarlos! - exclama Gally hacia el resto que estaba mirando algo confundidos.
- No, ya están asustados. Bueno, yo estoy asustado. Pero prefiero arriesgar mi vida allá que pasar el resto de ella aquí. Este no es nuestro lugar. No es nuestro hogar. Nos pusieron aquí, nos atraparon aquí. Al menos allá afuera tenemos una opción. Podemos salir de aquí, eso lo sé.
Todos veían a Thomas mientras que dudaban si ir o no pero luego Winston tomo la iniciativa empezando a caminar hacia el grupo haciendo que varias personas empezarán a unirse a ellos.
- Gally, se acabó. Ven con nosotros. - Habla Astrid mirando al chico.
- Suerte con los penitentes.
Dicho ésto Astrid da media vuelta enojada por aquellas palabras y por la persona en que se había convertido Gally empezando a entrar en el laberinto siendo seguida por todos mientras corrían por los pasillos.
- ¡Todos por acá!
El grupo corría por los pasillos buscando la salida de aquel laberinto, Thomas los guiaba mientras que el resto los seguía.
- ¡Falta poco!
Llegaron a la sección de la salida de aquel lugar, todos se escondieron detrás de una pared, viendo a un penitente haciendo que varios se asustarán.
- Toma esto, Chuck. Quédate detrás de nosotros. - Minho le pasa el dispositivo a Chuck quien lo toma con su mano.
- No pasa nada. Quédate conmigo. - Dice Teresa amarrandose el cabello en una cometa.
Astrid miraba todo para luego tomar un palo que le pasaba Lucas sonriendo por aquel detalle.
- Saldremos de está, ¿Si? Y podremos hacer todo lo que siempre prometimos hacer juntos. - Murmura Astrid dándole un beso cortó a Lucas.
Lucas sonríe por aquel beso sabiendo que quizá sería el último, pero se niega a pensar en aquello, saldrían de aquel problema y podrían cumplir todo lo que prometieron.
- Cuando entremos, se activará y la puerta se abrirá. - Explica Thomas. - Si permanecemos juntos y unidos, lo lograremos. Saldremos ahora, o moriremos en el intento, ¿Listos?
Todos se preparan mientras que Astrid saca su machete el cual había guardado en su mochila.
- ¡AHORA! - Grita Thomas mientras empieza a correr hacia el penitente.
Todos lo siguieron mientras se preparaban para pelear, el penitente los iba a atacar pero antes de que sucediera todos estiraron sus palos habiendo que el penitente volará por encima de ellos, todos con sus armas trataban de que el penitente no los atacarán.
Cómo el penitente era más fuerte, este extiende su tenaza agarrando a uno de los chicos tirandolo hacía un lado haciendo que se cayera por el especie de barranco. La bestia empezaba a tratar de picar a todos, pero estos los esquivaban mientras que Astrid con Teresa le rompían una de las patas con sus machetes aún que fue en vano.
De pronto vieron que la llave salió volando, casi cayendo al fondo de aquel lugar, Chuck al darse cuenta esquiva al penitente. Llendo tras la llave.
- ¡Iré por la llave! - Exclama Chuck.
- ¡Chuck! ¡Cuidado con la orilla!
Chuck alcanzó a agarrar la llave mientras que veía a varios penitentes llegar desde abajo. Teresa ayuda a subir a Chuck mientras que esté le agradecía. Mientras tanto, los chicos estaban peleando para poder acabar con el Penitente, tirandolo al vacío mientras celebraban.
Astrid miro a Chuck y a Teresa, quienes empezaban a escapar del resto de los Penitentes. Todos empezaron a defenderse de los Penitentes mientras que Chuck y Teresa corrían hacia la entrada.
- ¡Funciona! - Habla Chuck.
- ¡Teresa, ve!
- ¡No sé rindan! ¡Sigan empujando! - Dice Astrid mientras ataca a los penitentes.
- ¡Juntos!
Teresa con Chuck estaban buscando la salida mientras que los demás peleaban para sobrevivir, Astrid estaba cansada pero no podía rendirse no ahora.
- ¡Debe de haber una salida!
Todos estaban luchando, viendo que uno de los chicos sale volando siendo picado por el penitente, muriendo gracias a la caída al abismo, Astrid sigue peleando contra aquel penitente, no iba a rendirse, a su lado estaba Lucas y al otro estaba Newt quienes seguían luchando a su lado sin parar.
- ¡Thomas! ¡Hay un código! ¡8 dígitos! - Avisa Teresa llamando la atención de éste.
- Ocho secciones del laberinto. ¡Minho! ¿Cuál es la secuencia?
- ¿Qué?
- Las secciones del laberinto, ¿Cuál es la secuencia?
- ¡Siete! ¡Uno! ¡Cinco! ¡Dos! ¡Sies! ¡Cuatro! - Empezaba a dictar.
- ¡Cuidado! ¡Está bajando un penitente! - Grita Astrid mirando hacia arriba siendo arrastrada por Newt.
El penitente cae encima de Minho quien lucha por no ser picado.
- ¡Minho! - Grita Astrid.
- ¡Quítate!
Uno de los chicos toma la valentía mientras corría hacia el penitente clavándole el machete en la cabeza al penitente, salvandole la vida a Minho, el chico antes de poder irse es picado por aquella bestia y lanzado hacia el abismo al igual que el resto.
- ¡Jeff! - Grita Winston tratando de ayudar a su amigo pero Thomas no se lo permitió..
- ¡La secuencia, rápido!
- ¡Seis! - Empezaba a dictar mientras que retrocedían con sus armas en alto. - ¡Cuatro! ¡Ocho! ¡Tres! ¿La tienes?
- ¡Sigan deteniéndo!
La puerta ya se había abierto, haciendo que las paredes bajarán encerrando a los penitentes o matandolos por estar debajo de estás. Uno de estas bestias iba a atacarlos pero Thomas le lanzó su lanza llegando justo a la boca haciéndolo retroceder aplastandolo con la pared.
Todos miraron con asco la escena para luego ver qué la puerta en dónde estaban ellos se cerraban, viendo todo oscuro.
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