07.𝐈𝐋𝐔𝐒𝐈𝐎𝐍𝐄𝐒
Astrid estornudaba mientras trataba de buscar su linterna la cuál prendió. Viendo todo a su alrededor.
— ¿Están bien? — Pregunta la pelirroja mirando a ambos chicos.
— Si.
Responden ambos mirando a su alrededor viendo que estaban encerrados.
— ¿Cómo iremos con los demás? — Pregunta Thomas mirando a Brenda.
— Relájate. Hay que salir de aquí.
Astrid miraba a Brenda algo confundida.
— ¿Por qué nos ayudan? — Pregunta está mirando a la otra chica.
— Creeme, no es mi idea. Jorge cree que ustedes son nuestra entrada al refugio.
— ¿A dónde?
— Ya sabes, al paraíso. A salvó del sol, sin la infección. — Explica Brenda mientras carga su mochila. — Supuestamente, hace años que el brazo derecho lleva chicos allá. Bueno, inmunes.
Astrid escuchaba lo que decía la chica para luego pararse del lugar en donde estaba.
— ¿Sabes dónde está? — Inquiere Thomas.
— No. Pero Jorge conoce a alguien, Marcus. Él llevaba chicos a las montañas. Si Jorge escapó con éxito, allá llevará a sus amigos. — Explica Brenda sacando algunas cosas del camino.
— ¿Si escapó con éxito? — Pregunta está vez la pelirroja.
— Hacen muchas preguntas, ¿pueden ayudarme con esto?
Astrid suspira rendida para luego ir a ayudar a Brenda junto a Thomas, tirando la tapa de una alcantarilla. Los tres se miraron.
— Esto no me gusta nada.
— Si, aquí deben estar en la fase final. — Habla Brenda. — Vamos.
Dice Brenda tirándose cayendo en la alcantarilla, Thomas y Astrid se miraron asintiendo para luego se Astrid quién siga a Brenda siendo el último en tirarse Thomas.
Los dos últimos chicos seguían a Brenda, esperando a que los llevará a algún sitio mejor o aún que sea a alguna salida. Llegaron a un especie de túnel, alumbrando con sus linternas hacia los rincones de este sitio.
— Creo que es por aquí. — Dice Brenda mientras caminaba hacia el lado opuesto a dónde alumbraban los chicos.
Ambos se miraron para luego seguir a Brenda por el túnel.
— ¿La gente vive aquí abajo?
— Las tormentas solares obligaron a la gente a vivir bajo tierra. Jorge dice que hay asentamiento en todos estos túneles.
— ¿Que hay de Jorge? ¿Es tu padre?
Astrid escuchaba la conversación entre Thomas y Brenda, la rubia iba un poco más atrás de ellos mirando hacia su alrededor.
— Algo así. La verdad es que no se que es. Siempre ha estado conmigo. Y siempre he hecho lo que me pide, por más tonto que sea.
— ¿Tu no crees que el brazo derecho existe?
Astrid siente un ruido haciendo que se detuviera, alumbrando hacia atrás, tenía un mal presentimiento sobre ese lugar.
— Creo que la esperanza tiene sus riesgos. La esperanza ha matado a más de mis amigos que el Desierto y la Llamarada. Creí que Jorge era más inteligente.
Los tres chicos siguieron caminando mientras que alumbraban hacia adelante viendo otros dos pasillos a su alrededor.
— No puede ser. — Suspira Brenda.
Todos estaban viendo un pasillo buscando una salida. Thomas era seguido por Astrid metiéndose en uno de los pasillos junto al chico, viendo una luz en este.
— Brenda, creo que es por acá. — Dice Thomas viendo solamente a Astrid cuando se voltea. — ¿Y Brenda?
— No lo sé, estaba detrás de mi hace unos minutos. — Dice la rubia mirando hacia atrás.
Ambos chicos empezaron a caminar hacia afuera del pasillos.
— ¿Brenda?
— Aquí estoy. — Dice ella. — Miren ésto.
Habla la chica haciendo que los chicos fueran hacia donde ella, viendo unas cosas extrañas en los muros, no sabían exactamente que era pero era extraño.
— ¿Que mierda eso esto? — Murmura Astrid viendo a su alrededor lleno de lo mismo.
— Ni idea.
Alumbraban hacia las cosas en las paredes cuando derrepente se escucha un chillido proveniente de las alcantarillas haciendo que los tres apuntaran sus linternas hacia donde provenía el sonido, viendo salir una rata de está. Astrid alzó sus cejas al ver la rata para luego patearla, alumbrando hacia donde estaba la rata, de la nada algo atrapa a la rata entre sus manos haciendo que todos se asusten, comiéndose está, eran los muertos vivientes despertando, habían como 10 de esos mounstros, haciendo que Astrid se asustara agarrándose del brazo de Thomas, esté último mencionado toma un especie de machete que tenía Brenda en su mochila y le pega al muerto viviente, dándole algunos segundos para escapar, Astrid reacciona para luego empezar a correr junto a ambos chicos.
— De nuevo, no. — maldice en voz alta. — Corran. — Decía Astrid mientras corría por los pasillos.
Los tres corrían escapando de los mounstros, siguiendo la luz del pasillo en dónde Astrid y Thomas habían estado anteriormente.
— Ya casi llegamos, vamos. — Animaba Thomas.
Thomas llega al borde de la salida deteniendo a las dos chicas antes de que se cayeran al abismo, viendo que no tenían escapatoria. Brenda de la nada les hace una señal para escalar el ripio que había a su costado, así que empezaron todos a escalar como podían tratando de escapar de los muertos. Seguían escapando, y de la nada veían como más muertos salían de la nada, de pronto Brenda pasa a patear uno de los bloques haciendo que esté se cayera.
— Cuidado.
Dice para luego ver cómo Thomas y Astrid esquivan ese bloque, viendo cómo algunos muertos vivientes se caían gracias al bloque.
Los tres escalaban, Thomas ayudaba a Astrid como podía mientras Brenda iba adelante de ellos. Iban subiendo por unas escaleras en ruina, cuando uno de los mounstros casi ataca a Thomas pero Astrid le pega una patada haciendo que cayera por las escaleras.
— Vamos, suban. — Dice Astrid volviendo a subir junto a los chicos.
Brenda iba subiendo, cuando se agarra de unos de los fierros pero este estaba suelto haciendo que se cayera en un cristal, pero por su suerte no se ha roto.
— Brenda, ¿Estás bien? — Pregunta Astrid mientras mira a la chica.
— Si. — Dice está estando consiente.
— Buscaremos la forma de bajar.
Brenda miro hacia abajo, viendo el cristal apoyándose en éste pero estaba empezando a romperse, empezando a entrar en pánico.
— Brenda, no te mueva. — Dice Astrid tratando de sonar calmada.
Thomas baja primero, asujetandose de los primero que encuentra, mientras que Astrid empieza a bajar con cuidado, tratando de no aterrizar en el cristal. Brenda se para en una de las barandas que asujetaba el cristal, mientras que Thomas trata de ayudarla alcanzando su mano, pero de la nada sale uno de esos muertos vivientes y se tira atacando a Brenda.
— Mierda. — Dice Astrid para luego ayudar ir a ayudar a Brenda sacando un fierro.
Astrid se tira tratando de llegar a la baranda del vidrio, agarrando la mano de Brenda para luego pegarle con el fierro al cristal rompiendo esté haciendo que el mounstro se caiga, agarrando firme a Brenda, siendo ayudada por Thomas quién la afirma para que no se caigan.
— Te tengo. — Dice Astrid suspirando mientras agarraba a la chica.
[...]
Luego de aquella travesía, los tres bajaron con cuidado del edificio. Astrid suspira aliviada al saber que no perdería a nadie aquel día, Brenda de la nada se sienta sacando un pedazo de tela haciendo que Astrid la mire confundida.
— ¿Estás bien? — Pregunta está yendo hacia la chica.
La chica se levantó su pantalón con cuidado dejando ver una mordedura del mounstro haciendo que Astrid la mirara atenta.
— Brenda...
— Si, lo sé. Vamos a buscar a Marcus. — Dice está parándose.
Astrid la miraba, sabía que no se conocían mucho pero ella les había salvado la vida a Thomas y ella. Lo único que quería era encontrar la forma de salvarla.
Los tres caminaron un poco más hasta encontrar un callejón dónde había varias personas.
— Bien, no llamen la atención. — Dice Brenda.
Thomas y Astrid asistieron, siguiendo a Brenda, viendo a su alrededor mucha gente pobre la cuál estaba cocinando algo parecido a la carne.
Se acercaron a un edificio donde había mucha gente, caminando por éste Thomas miraba con desconfianza, mientras que Astrid tenía su mirada hacía al frente.
— ¿Segura que es aquí? — Pregunta Thomas.
— ¿Vienen por la fiesta? — Pregunta una chica detrás de ellos.
Astrid la analiza, alzando una ceja.
— No. Buscamos a Marcus. Este lugar es suyo, ¿no? — Inquiere Brenda
— Este lugar es mío. — Dice un hombre tomando algo parecido al alcohol.
— ¿Tu eres Marcus? — Pregunta Thomas.
— Marcus ya no vive aquí.
— ¿Sabes dónde está?
— Claro. Está en la zona B.
— ¿Y que es la zona B? — Pregunta Astrid confundida sintiendo la mano de la chica por su espalda.
— Es dónde queman los cadáveres. — Le susurra una chica a su oído, haciendo que Astrid retrocediera un poco.
— Bien, de acuerdo. ¿Alguien más ha venido a buscarlo? — Insiste Thomas. — ¿Unos chicos de nuestra edad? Y tres chicas, dos de cabello oscuro y una pelirroja.
— ¿Sabes? Quizás estén adentro. — Dice el hombre mientras saca una botella de su bolsillo. — ten, toma ésto.
— ¿Que es? — Pregunta Thomas.
— El precio de admisión.
Thomas mira desconfiado para luego ver qué Astrid le arrebata la botella al hombre.
— Quiero salvar a mi familia, cueste lo que cueste.
Dicho ésto la chica toma del contenido de la botella, haciendo una mueca al tomarlo. Thomas al ver ésto bebe un poco al igual que Brenda para luego ser empujados hacia dentro del lugar.
Astrid miraba a su alrededor, viendo a mucha gente, sintiendo como si todo el mundo diera vuelta.
— Vamos a separarnos, no tomen nada. — Habla Brenda.
Astrid ve como Thomas se aleja para luego verse a ella misma, bailando junto a un montón de personas para luego detenerse viendo que varias personas tenían un muerto viviente amarrado a unas cuerdas, para luego retroceder un poco sintiendo a alguien detrás de ella, viendo a Derek detrás de ella.
— ¿Derek? — Murmura ella viendo al chico de pelo claro.
— Astrid, no están aquí. — Dice él mientras mira a la chica.
— Entonces, hay que seguir buscandolos. — Astrid miraba al chico delante de ella sin poder creer lo que veía mientras todo le daba vueltas.
— ¿Por qué? Jamás vas a poder encontrar al brazo derecho. No sin Marcus. Tus amigos desaparecieron, se acabó. Solo quedas tú. — Dice el chico acercándose a la rubia pasando su mano por su cintura. — Intenta relajarte. Déjate llevar, Asty.
Hablaba el chico mientras Astrid solamente miraba sin decir nada cuando derrepente el chico se agacha un poco besando a la chica, Asty no reaccionaba de primera, pero derrepente se encontraba a ella misma besando al chico que tanto amo en su padado pasando sus manos por sus mejillas, pero cuando se estaba separando abrió despacio sus ojos viendo a Lucas enfrente a ella haciendo que reaccionará.
— No son reales. — Murmura la rubia mientras ve como Lucas empieza a irse.
Astrid al notar aquello empieza a seguirlo por instinto, tratando de pasar entremedio de toda la gente. Viendo a Winston cómo un muerto viviente.
— Astrid. — Dice una voz detrás de ella.
Astrid se asusta al ver aquello, para luego tirarse hacia atrás pero antes de hacer cualquier movimiento ve a Newt convertido en un mounstro haciendo que gritara cayendo al suelto, sintiendo como el aire empezaba a faltar en pulmones, empezó a arrastrarse por el suelo tratando de salir viendo derrepente uno de los penitentes para luego desmayarse por completo en el suelo.
Thomas junto a Astrid caminaban por unos pasillos donde guardaban la información de CRUEL, encontrándose con Teresa quién los saluda a ambos.
— Hola. — Dice Teresa mientras que Astrid le sonríe un poco.
— ¿Alguien te vio entrar aquí? — Pregunta Thomas mientras la mira preocupado.
— No, ¿De que hablas? — Pregunta Astrid.
— No tenemos mucho tiempo. — Dice Astrid mirando a Teresa.
— ¿Que ocurre? — Inquiere Teresa.
— Solo... Necesitabamos verte e intentar explicarte las cosas antes de que...
Antes de que pudiera terminar de hablar Thomas vio a unos guardias en el lugar en donde se encontraban. Astrid toma el brazo de Teresa haciéndo que se mueva.
— Escuchame, ¿bien? Digan lo que digan sobre nosotros, necesito que sepan que tuvimos que hacerlo. — Explica Thomas mientras Teresa no entendía lo que decían. — ¿Bien?
— ¿Que hicieron? — Murmura Astrid.
— No podiamos seguir viéndolos morir. — Termina de hablar Astrid para luego sentir que un guardia aparece.
Esté los agarra del brazo a ambos siendo arrastrados por más guaridas, Astrid no pelea como había hablado con Thomas unos minutos antes, no iban a dar lucha, sabían que lo que ambos hacían era lo correcto.
— Thomas, Astrid. — Habla Teresa mientras Astrid mira a Teresa.
— Estaremos bien, Tess. No te preocupes. — Habla Astrid viendo a la chica para luego ser arrastrada por los guardias.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro