"La Navidad es una época hermosa, donde las familias se reúnen para convivir, lo más fantástico de esas fechas decembrinas es cuando todos comienzan a adornar sus aposentos y llenan las sucursales para comprar los adornos navideños."

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Hermaonie llevaba un abrigo de color beige que cubría su cuerpo del frío, traía un vestido largo que le llegaba arriba de la rodilla y unas botas de color negras con sus media negras. Se veía hermosa, eso es lo que le decía su atractivo novio cada que la veía.

Kim Taehyung, el famoso empresario y soltero codiciado del país, aunque eso era algo que creía la sociedad. La castaña llevaba siendo pareja del azabache hace dos años, ambos se conocieron en una de las tantas tardes de balada, donde se reunían parejas o simplemente las personas pasaban la tarde para despejar su mente.

—¿Tarde mucho? —pregunta Taehyung en un susurro.

La fémina dió un respingo y su piel se erizo al escuchar la voz ronca que tanto amaba del azabache.

—No, acabo de llegar igual, ¿nos vamos?. —su novio asintió y tomó su mano para ir al departamento de su mejor amigo, Jungkook.

En el camino conversaban sobre cómo les había ido en el trabajo, incluso le platicó sobre la boda de su amiga, algo que puso nervioso a Taehyung y un poco tímido. Él sabía que ya era tiempo en que formalizara su relación, pero el miedo era algo que lo atormentaba.

—¿Amor, estás bien? —pregunta la castaña ante el silencio que se habitaba hace unos minutos.

Estaban a unas pocas cuadras de llegar a su destino.

—No, solo son unas cosas importantes que tengo que realizar, no te preocupes. —ella asintió y se alzó de puntitas para darle un beso en la mejilla.

El azabache se ruborizo y sonrió. Amaba tanto que ella lo besara desprevenido.

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Al llegar, tocaron la puerta y una hermosa pelinegra apareció, se abalanzó hacia Hermaonie para estrujarla entre sus brazos, mientras Taehyung saludaba al pelinegro que se encontraba atrás de la fémina que abochornaba a su novia.

Ella era la mejor amiga de Hermaonie, aquella de la que le platicaba sobre la boda a la que irían. Ese día estaba llena de felicidad por ella, había congeniado tan bien con Jungkook el día que se la presentaron en la cita doble, que había formado una bonita relación y actualmente
estaban comprometidos.

El pelinegro les dió la bienvenida luego de que Marjorie dejara de abrazar a su amiga y pudieran entrar a su hogar.

—No puedo creer que me voy a casar, estoy tan emocionado. —comenta Jungkook, mientras ayudaba a su novia con la cena.

—Ya era hora que sentaras cabeza Jungkook, era hora que terminaras de andar de fiesta en fiesta y conocieras a una buena chica. —las féminas asintieron y Jeon las miró ofendido, causando risas entre ellos.

—Por cierto, ¿ya fijaron fecha?—pregunta la castaña.

—¡Si! después de que Jeon me propusiera matrimonio... —enseña su anillo entusiasmada. —le dije que nos casáramos en Navidad, no sé, es algo que siempre he soñado desde pequeña.

—¡Wow! , eso es increíble. —comenta la castaña.

—Obviamente ustedes serán nuestros padrinos. —la pareja asintió entusiasmada.

—Claro, cuenten con ellos.

Ambos sonrieron y convivieron con aquella pareja, esa tarde fue llena de risas y algunos chistes por parte del pelinegro, pero Taehyung estaba pensativo, él también quería vivir ese momento con su novia, verla con su vestido blanco y llevarla de luna de miel, era algo que siempre soñó después de conocerla.

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Luego de aquella cena con su mejor amigo, ambos regresaban a su casa, ahora se encontraban en el coche de Taehyung, en un silencio un poco incómodo, a veces le daba una mirada a la castaña, para volver a mirar a la carretera.

Ella soltó un suspiro y decidió tomar una siesta en el camino, Taehyung colocó su mano en su muslo y la acarició un poco.

Las luces de las calles alumbraban el rostro de ambos, ahora que su novia había dormido, pudo tener un poco de silencio un poco cómodo, quería pensar en como seria su propuesta para casarse con ella y algo se le había ocurrido.

Al ver su casa a pocos metros, estacionó su coche en el estacionamiento y salió de este para dirigirse hacia donde estaba su novia. La observó unos minutos y grabó cada detalle de su rostro, sus cejas perfiladas y un poco gruesas, sus largas pestañas hasta sus bellos y finos labios. Era muy hermosa, como una princesa.

Le dió un beso y la tomo con delicadeza para llevarla adentro de su casa. Tomó el pomo de la puerta al ingresar su contraseña y de inmediato las luces se prendieron.

Llevó a Hermaonie a su habitación, la colocó sobre la cama y buscó una manta para taparla. Tomó asiento a lado de ella y acarició su cabeza.

—No sabes cuánto te amo. —susurró bajo y le plantó un beso.

Estaba dispuesto a dejarla descansar, pero sintió el agarre de la fémina, volteó a verla y ella le dió una sonrisa.

—No me dejes sola, quiero que duermas conmigo.

—De acuerdo, solo iré a cambiarme.

—No, te quiero aquí, conmigo. —ella se levantó, dejando la manta a un lado y tomó de la camisa a su novio para acercarlo a ella y besarlo con ansias. —Hazme el amor. —susurró sobre sus labios.

Kim observó detenidamente como la fémina tenía sus labios entreabiertos y miro su vestido que traía aún puesto junto con sus medias negras, levantó su mirada conectándola con la de ella, sus respiraciones se oían en aquella habitación y el zumbido de sus corazones latiendo frenéticamente, hasta que decidió romper aquella tensión y besarla con deseo.

Ella tomó su nuca profundizando el beso aún más, Taehyung bajo sus manos hacia el trasero de su novia y los apretó, sacándole un gemido, él sonrió satisfecho por lo que lograba sacar de la fémina, que con solo un roce de él, podía notar el desastre que causaba.

—¿Puedo follarte duro? —ella lo miro atónita y luego asintió.

Tomó por los muslos a Hermaonie y rompió su medias.

—Eran nuevas. —comenta la fémina.

—Te compraré más, ahora sólo quiero estar dentro de ti y sentir como me aprietas. —dijo con la voz ronca, mientras su novia suspiraba de deseo.

Eran pocas las veces en que su novio era rudo en la cama, pero amaba cada faceta de él, su voz era algo que la volvía loca, con solo un susurro podía mojar sus bragas.

Taehyung sonrió ladino y volvió a besarla, bajo la cremallera de su vestido, dejándola solo con aquel tanga de color rojo, logrando excitarlo aún más. Su novia no era de un cuerpo tan robusto, pero aquellas proporciones que tenía, como sus pequeños senos se acoplaban a su boca, lo enamoraban demasiado.

La fémina no estaba a gusto con que solo ella estuviera desnuda, así que fue despojando la ropa de su novio, hasta dejarlo completamente desnudo.

—Cuando nos casemos, quiero hacerte el amor todos los días, hasta que me dejes la polla seca.

Su novia río complacida, abrió sus piernas permitiéndole ver la humedad entre sus bragas, dándole una excelente vista a su novio, este masturbo un poco su miembro para dirigirlo a la entrada de la fémina, deslizándose de arriba abajo, haciéndola retorcer del placer y frustración. Hizo a un lado su tanga para meter su miembro, estaba lubricada lo suficiente para que él pudiera entrar con facilidad.

La fémina enrolló sus piernas en la cadera de Kim para que entrará aún más, logrando que tocara su punto dulce, este se movía lento pero duro.

—Ah... más. —gimió la castaña, agarrando el cuello de su novio para luego besarlo.

Una, dos, tres estocadas, había perdido la cuenta de cuantas embestidas daba su novio, escuchando los sonidos lascivos de sus cuerpos chocando, incluyendo sus testículos golpear contra su trasero.

—¡Ah, justo así!

—Me aprietas tan bien cariño, que me quedaría dentro de ti cada vez que quisiera.

Ellos conocían las valiosas costumbres de sus familias el tener intimidad después de la boda, pero ellos se amaban tanto, que poco les importaba entregarse a su deseo.

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Los días habían pasado y con ellos, la boda de sus amigos había llegado. Hermaonie llevaba un vestido azul pegado a su cuerpo, era largo y tenía un abertura en la parte derecha que mostraba su pierna. Ese había sido el regalo de su mejor amiga, quería que lo llevara el día de su boda porque la
hacía ver hermosa igual que ella con su vestido blanco.

Había terminado la ceremonia, por lo que ahora se encontraban en la fiesta donde celebrarían el matrimonio de Jeon y Marjorie.

Taehyung se encontraba en la mesa donde estaban sus demás amigos.

—Quien diría que Jungkook sería de los primeros en casarse. —comenta Jimin.

Los demás asintieron y ofrecieron un brindis con el pelinegro cuando se acercó a ellos.

—Haber cuando uno de nosotros da el siguiente paso. —dice Jin mientras comía un pedazo de carne.

El azabache tragó saliva, aunque no haya sido una indirecta hacia él, sentía qué él tenía que dar ese paso con su hermosa novia. Volteó a verla y se deleitó con su belleza, mordió su labio inferior al ver ese vestido que le quedaba tan bien, su cuello se veía apetecible al haberse recogido el cabello.

Hermaonie sintió su mirada, por lo que le dió una sonrisa.

—¡Todas las chicas al centro, la novia tirará su ramo!—informó una rubia que estaba en el centro de la pista de baile de los novios.

La fémina movió su pie por lo nerviosa y emocionada que estaba, su novio le dió una señal dándole a entender que fuera para que se divirtiera, ella no lo dudo ni un segundo y le plantó un beso para dirigirse hacia el pequeño grupo de chicas que querían tener la suerte de ganar aquel
ramo y ser la siguiente en casarse. Ella quería ser esa próxima.

—Una, dos y... ¡tres!

Todo pasó en cámara lenta, era como una película de acción cuando sucede algo que cambiará la vida del protagonista. Hermanonie había agarrado el ramo, lo había logrado.

Miró a su alrededor y captó las miradas de todos, le sonreían como si ella fuera la protagonista de la boda, su amiga le susurró que diera la vuelta, así que lo hizo.

Su vista se volvió borrosa al ver a su novio que inclinado hacia ella con una caja en forma de noche buena, portando un hermoso anillo.

—Señorita Young, ¿me daría el placer de casarse con este hombre que no para ni un segundo en el día en enamorarse de usted?

Ella asintió frenéticamente, llorando de felicidad.

—Claro que sí.

Él se levantó para tomarla por la cintura y besarla, escuchando el bullicio de los invitados y los aplausos.

—Por fin este par de tórtolos se casará.—comenta la pelinegra, para tomar la mano de su actual marido y llevarlo a bailar.

Por otro lado, Kim Taehyung sonreía complacido al haberle propuesto matrimonio a la mujer de su vida y que mejor momento, en plena Navidad.

𝑭𝒊𝒏

¡Hola! Hoy les traigo un OS del guapísimo Tae, esto fue creado en una dinámica por su cumpleaños, lamento publicarlo después Jsjsj, así que ahora es el momento de al menos tener un OS de él aquí.

Espero les guste mucho, esta historia también lo hice para una personita especial para mi YaretziYaretzi030 💗.

Nos leemos pronto, besos 💋.

Mil gracias por la portada dorasilove 💗