Chapter 01
«Copa Mundial de Quidditch»

Aquél día tan esperado había llegado en un abrir y cerrar de ojos. Harmony estaba que explotaba de la emoción y ni se preocupó en disimularlo frente a su padre. Aún que claro, él ya sabía el entusiasmo que tenía su hija. Desde hacía ya meses que no paraba de hablarle de otra cosa que fuera solo sobre el Campeonato Mundial de Quidditch. Desde pequeña su sueño había sido convertirse en jugadora de Quidditch. Poco le importaba el puesto que le tocase, tan solo quería poder estar sobre una escoba y volar. Jamás se lo había mencionado a su padre, pensaba que aquel entusiasmo era tan solo fanatismo, bastante equivocado estaba. Ella sabía que si se lo contaba él se opondría de inmediato. Según él, las mujeres que jugaban al Quidditch eran "poco femeninas". Además, no podía permitir que la hija de alguien tan importante como lo era él fuera una simple jugadora de Quidditch.

Salieron temprano de su casa para poder llegar tranquilamente al transportador que los llevaría al Campeonato. Harmony estaba emocionada al saber que allí se encontraría a sus amigos, aquel verano no había podido verlos tanto como quería debido a que se había estado concentrando en entrenar con su escoba. Como su padre pasaba la mayor parte del tiempo fuera de la casa, no se enteraba de lo que hacía su hija durante su ausencia.

Antes de finalmente poder llegar a la zona donde estaban los demás magos tuvieron que caminar un largo camino hasta llegar junto a una pequeña casa, donde allí había un muggle que se encargaba de recibir a todos los magos, claro que este no tenía ni idea de lo que estaba sucediendo. Al padre de Harmony junto con otros magos más, no les hizo nada de gracia encontrarse con aquel señor muggle.

Una vez que estuvieron en el lugar donde ocurriría el evento, Harmony tuvo que aguantarse las ganas de comenzar a saltar y gritar de la emoción. Cada minúsculo detalle del lugar estaba perfectamente preparado para el torneo. El lugar se encontraba lleno de tiendas donde todos los magos podían dejar sus pertenencias y permanecer durante el tiempo que tenían libre. Muchas de las tiendas estaban decoradas con detalles de Irlanda o Bulgaria, según el equipo al cual apoyaran.
Lo que menos quería la chica era estar encerrada dentro de una tienda, por lo que en cuanto llegaron, luego de dejar sus cosas, le avisó a su padre que iría a dar una vuelta.

Salió de la tienda en la que se encontraba y comenzó a caminar por el lugar tranquilamente. De fondo se escuchaba una música alegre que se mezclaba junto con risas y la voz de todos los magos que se encontraban en aquel campamento. Aquel ambiente resultaba realmente agradable de presenciar y se alegraba de tener la oportunidad de disfrutarlo.

Unos pasos más adelante de ella se encontraba un muchacho mirando en su dirección. Tenía una sonrisa de lado observando como aquella castaña estaba distraída mirando sus alrededores. Comenzó a avanzar hacia ella y no fue hasta que quedó a un metro de ella que Harmony pudo darse cuenta de la presencia del chico.

ー¡Theo! ーexclamó y en seguida una gigante sonrisa se asomó en sus labios.

Sin dudarlo se lanzó a los brazos de su amigo y lo estrechó con fuerza. En esos momentos se dió cuenta cuanto lo había extrañado durante el verano. Le había hecho mucha falta su compañero de estudios y su mejor amigo. El chico correspondió el abrazo de su amiga sin dudarlo ni un segundo. Sonrió de forma divertida ante la euforia de la castaña, aun que en verdad él también la había extrañado mucho.

ー¿Cómo has estado todo este tiempo? ーeso fue lo primero que preguntó Theodore una vez que ambos se habían separado y habían comenzado a caminar por el lugar.

ーMuy ocupada. He estado entrenando la mayoría del tiempo. Este año lograré entrar al equipo ーuna sonrisa soñadora apareció en sus labios durante unos instantesー. No pienso dejar que me vuelvan a rechazar.

Los primeros tres años Harmony había hecho la prueba para entrar al equipo de Quidditch de su casa y los tres años la habían rechazado. No por que jugara mal, si no que la única razón por la que no le permitían entrar al equipo era por ser una chica. Le parecía una razón muy tonta e injusta, ella era tan buena como cualquiera de los otros integrantes del equipo. Por eso mismo, aquel verano se había propuesto entrenar la mayor cantidad de tiempo posible. Quería llegar a ser tan buena que fueran incapaces de rechazarla.

ーEste año lo lograras, estoy seguro ーHarmony sonrió al escuchar las palabras de aliento de su amigo. Esperaba que fuera así.

Continuaron el resto del paseo juntos. En el camino se encontraron con el señor y la señora Nott, por lo que en seguida Harmony se acercó a saludarlos con amabilidad. Ella tenía una buena relación con los padres de sus amigos, aun que muchos de ellos no le agradaban. Tenía un pensamiento muy diferente a la mayoría de ellos, incluso a sus hijos. Ella no sentía aquel rechazo por los hijos de padres muggles, tampoco creía que por que ellos tuvieran la "sangre limpia" significaba que fueran superiores ni nada por el estilo. Claro que no era algo que podía ir diciendo. Si su padre se enteraba de que ella no odiaba a los "sangre sucia" o que se juntaba con algunos de ellos, en seguida se convertiría en una "traidora a la sangre" y una deshonra para todos.

Su paseo se había visto interrumpido ya que la hora del primer partido había comenzado. La castaña se despidió de su amigo y fue nuevamente a su tienda para cambiarse de ropa. Cuando estuvo lista salió y se encontró con su padre impaciente esperándola fuera.

Ambos fueron rumbo al estadio y al quedar frente a éste, la sorpresa de la chica fue inmensa. Le entregaron sus boletos a la señora que se encontraba en la entrada del lugar y luego de que les indicaran por donde debían de ir comenzaron a avanzar. Tuvieron que subir varias escaleras ya que el lugar que tenían era uno de los más altos. Su padre era muy buen amigo de Cornelius Fudge, quien les había conseguido entradas en el palco principal.

Al llegar vieron que ya había gente en aquel espacio, que era un lugar para veinte personas. Se sentaron en la segunda fila, y mientras su padre fue a saludar a Fudge, ella aprovechó para saludar a Harry, Ron, Hermione, Charlie y los gemelos, quienes se encontraban en la primera fila.

ー¡Qué sorpresa verlos aquí! ¿Cómo han pasado las vacaciones? ーpreguntó con una sonrisa alegre.

Ninguno de los chicos pudieron alcanzar a responderle algo ya que en ese momento su padre se sentó junto a ella. Sus amigos sabían como era él, por lo que no dijeron nada y se dieron vuelta como si nada hubiera pasado.

ー¡Lucius! ¡Narcissa! ーla voz de su padre hizo que se volteara justo para ver como los Malfoy hacían su entrada triunfal.

Como siempre luciendo impecables con su cabello rubio platinado y su aura superior. Aquella familia era una de las más devotas a los pura sangre y por eso sentían un gran desprecio hacia aquellos que no lo eran. Su padre mantenía una buena relación con ellos, y por lo tanto ella también debía de hacerlo. Aun que ella veía al señor Malfoy como un hombre despreciable, Narcissa podía llegar a ser bastante amigable cuando se lo proponía.

Justo detrás de ellos pudo ver a Draco Malfoy, su hijo. Harmony no sabía exactamente que era lo que pensaba de aquel chico. Siempre se mostraba despreciable frente a sus compañeros en Hogwarts. Siempre andaba con sus aires de superioridad, creyéndose mejor que el resto. Rechazaba totalmente a los que no eran "sangre pura", al igual que su familia.

A pesar de aquello, Harmony mantenía una relación de amistad con él. En realidad, no estaba segura de si definir su relación como amistosa. Varias veces que habían hablado terminaron siendo charlas interesantes para ambos. Pero también, varias otras habían terminado en discusiones. La chica sabía que el rubio era el mejor amigo de Theodore y Blaise, sus también dos mejores amigos, por lo que aquellos vínculos provocó que finalmente ella también haya formado un lazo amistoso con el rubio. Aun que lógicamente, no podían llevarse bien del todo cuando sus ideales respecto a la pureza de la sangre eran muy distintos.

Decidió girar sobre su asiento y volver la vista al frente. No tenía ganas de saludar a los Malfoy, y si podía evitarlo mejor, a pesar de que su padre probablemente la obligaría. Además, el hecho de que estuvieran allí presentes los Weasley, Hermione, Charlotte y Harry, sabía que el ambiente terminaría por resultar tenso e incómodo.

Mientras observaba las demás gradas de aquel estadio, sintió como alguien se sentaba en el asiento que estaba vacío junto a ella. Dirigió la mirada a su izquierda para encontrarse el perfil derecho de Draco Malfoy.

ーEs de mala educación no saludar, ¿acaso tu padre no te lo enseño?

El rubio giró su rostro encontrándose con el de la castaña. Harmony elevó una ceja al oír las palabras del rubio, y no pudo evitar soltar una sonrisita.

ーNo los vi llegar ーmintióー. No eres el centro del mundo, Malfoy. Estaba prestando atención a otras cosas más importantes.

Draco estaba a punto de replicar algo, pero justo en ese momento una voz retumbó por todo el estadio anunciando el inicio del evento.

(...)

Todos festejaban la victoria de Irlanda en la final. Muchos de los magos allí presentes se encontraban felices y satisfechos con el resultado, otros no tanto. Harmony y su padre se encontraban entre esos que sí lo estaban. Luego de que el partido terminara, la chica le avisó a su padre que iría a buscar a Theodore para cenar con él. Su padre iría con los Malfoy y no tenía ganas de aguantar a Lucius.

No tardó mucho en encontrar la tienda donde su amigo estaba parando. Saludó al señor Nott y se sentó junto al chico. No pasaron más de unos pocos segundos que el padre de Theo se marchó de allí.

ー¿Has visto a Blase? ーpreguntó la castaña con bastante intrigaー No lo he visto en ningún momento.

Su amigo negó con la cabeza. Tampoco lo había visto en ningún momento, pero sabiendo como era no le extrañaba. Si había ido probablemente había estado haciendo de las suyas.

ーNo, pero he visto a Luke.

Theo sonrió de forma pícara. Luke estaba en la misma casa que ellos e iba a su mismo año. Era uno de los mejores amigos de Blaise y uno de los mejores estudiantes en cuanto a las calificaciones. Theodore estaba convencido de que Harmony tenía una pequeña atracción hacia él ya que la había atrapado varias veces mirándolo. Ella siempre había negado aquello y hasta el día de la fecha seguía haciéndolo. A Theo no le importaba, él seguiría molestandola hasta que admitiera la verdad.

ーSigues pesado con eso ーla chica rodó los ojosー. El día que comprendas que solo es un idiota más será un milagro.

El sonido de gritos proveniendo fuera de la tienda provocó que ambos se miraran. Salieron de la tienda y se sorprendieron al ver como unos magos cubiertos por una capa negra y antifaz estaban prendiendo fuego varias tiendas. Además, de que con las varitas llevaban flotando a la familia muggle del lugar.

Theo tomó su mano y rápidamente salieron hacia donde todos estaban dirigiéndose; al bosque.
En el camino se encontraron a varios compañeros de la escuela que estaban corriendo igual que ellos. Todos estaban confusos y asustados, aquel ataque había sido muy repentino para todos.

Aquella confusión desapareció cuando pudieron ver entre las copas de los árboles como en el cielo había una luz. Pero no era cualquier luz. La marca tenebrosa estaba claramente dibujada en el cielo, horrorizando a todos los que estaban allí presentes.

Harmony y Theo se miraron. Aun que ninguno se animara a admitirlo en voz alta sabían que eso era obra de nada más y nada menos que de los mortifagos. Pero lo que en verdad los atormentaba era la sospecha que tenían de que sus padres estuvieran entre aquellos que habían causado semejante lío aquella noche.

( créditos de los preciosos gifs a mxnstxrrrm )