Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

03

CAPÍTULO TRES
• LLEGADA A HOGWARTS •

═══════════════

— ¡Todos los niños de primer año vengan junto a mí! — gritó el semigigante.

Eris entró en una pequeña crisis sin saber para dónde ir ya que no es de primer año pero sí es nueva estudiante, por lo que no sabe si puede ir igual en bote o debe ir junto a los alumnos más grandes.

— Puedes venir con nosotros en la carroza — ofreció Regulus.

— Yo te aconsejaría tener la experiencia completa e ir en bote, es genial pasar por el lago negro.

La chica giró hacia la voz desconocida encontrándose con un chico blanco de cabello castaño oscuro al igual que sus ojos quien colocó su brazo en los hombros de Regulus.

— Bartemius Crouch Jr, pero puedes decirme Barty — se presentó.

— Eris Macmillan.

— Lo sé, Malfoy me dijo que hay una chica nueva y por curiosidad vine para ver de quién trata.

— ¡Los de primero por aquí! ¡No más de cuatro por bote!

Eris observó hacia el semigigante y vio que la mayoría de los niños ya subieron a los botes y con eso se decidió a ir por el lago porque sería la primera y última vez, luego solo utilizaría la carroza.

— Seguiré tu consejo Barty — el susodicho le sonrió con suficiencia — Nos vemos en el comedor chicos.

— Intenta quedar en Slytherin — le pidió Regulus aún sabiendo que eso no sucederá, con lo poco que la conoció en el tren apostaría porque queda en Ravenclaw.

— No seas pesado Reg, sea cual sea la casa que quedes seguiremos siendo tus amigos — le dijo Narcissa sonriéndole con ternura — Ahora ve antes de que te dejen y cuídate del calamar gigante.

La rubia asintió y se despidió cortamente para luego ir hacia los más pequeños con cuidado de no tropezar y caer, con la oscuridad apenas puede ver bien su camino.
Cuando llegó al instante se sintió enana al lado del hombre y para llamar su atención le dio unos toquesitos en su brazo.

— Hola señor — saludó educadamente — Yo soy nueva estudiante y me preguntaba si podría ir también en los botes.

— ¡Eris Macmillan! Por supuesto, Dumbledore me comunicó sobre ti, súbete a cualquier bote que no tenga cuatro niños. Y por cierto, soy Rubeus Hagrid.

Le pasó su enorme mano y la chica lo estrechó con una sonrisa contagiándose de la alegría del hombre.

— Un gusto Hagrid.

Minutos después ya todos estaban sobre un bote y emprendieron el viaje con las emociones a flor de piel, ansiosos por llegar y conocer para muchos lo que sería su sueño desde que se enteraron que tienen magia y podrían asistir al famoso Hogwarts. Y para nuestra protagonista no era diferente, quería llegar y si es posible conocer cada rincón del colegio, incluso aquello que algunos no conocen, pero aún así está muy nerviosa y siente un poco de miedo por lo que pueda pasar más adelante, lo único que la tranquiliza y la hace feliz es que consiguió amigos que por el momento no la juzgan.

— ¡Desde aquí ya podrán ver el castillo! — exclamó Hagrid.

Se escucharon varios sonidos de asombro y la rubia sonrió enorme al sentir el ambiente cargado de una energía bastante bonita.
Observó maravillada la primera plana que le entregó el castillo y en ese momento agradeció haber elegido venir en bote ya que por ello está viviendo esta increíble experiencia que se quedará por siempre grabado en su mente.
Ni siquiera ha visto del todo el colegio y ya sabe que le encantará.

— ¡Todos bajen la cabeza! — advirtió.

Los botes se movieron directo hacia el túnel oscuro cubierto con una cortina de hiedra que los condujo a un muelle en donde de a poco fueron bajando todos. Eris al ser más alta que los pequeños le ayudó a algunos a bajarse con cuidado para que no caigan hasta que se aseguró que todos quedaron fuera de los botes y siguió a la aglomeración hasta que llegaron a una gran puerta de roble, ella al estar última y por su obvia edad mayor resalta entre todos los demás.

La puerta se abrió dejando ver una mujer de cabello recogido oscuro y túnica verde con la expresión seria.

— Gracias por traerlos Hagrid, desde ahora yo me encargo.

El semigigante se fue y la mujer dio una rápida repasada a todos los alumnos deteniéndose por unos segundos en Macmillan para luego indicarles que la siguieran y así pasó, entre mucho ruido todos se desplazaron por el vestíbulo hasta llegar a una habitación aparte en donde la profesora dio la bienvenida y les explicó sobre las casas y todo el sistema.

— Señorita Macmillan, usted irá primero — la chica asintió rápidamente — Ahora iré por un momento y cuando la ceremonia esté todo listo vendré a buscarlos.

Minutos después ya estaban entrando en fila al gran comedor para ser seleccionados, y así como todos Eris también estaba mirando fascinada a su alrededor, pero sin duda alguna lo que más le encantó fue el techo estrellado y los cientos de velas flotantes que iluminan el lugar. Tenía ganas de quitar su cámara mágica y grabar todo ese magnífico momento para tenerlo de recuerdo, pero solo se tuvo que conformar con grabarlo en su memoria como un nuevo y apreciado tesoro.

Estaba tan inmersa en su mente que ni siquiera notó las miradas de curiosidad en ella ni tampoco oyó la canción del sombrero seleccionador, solo salió de su atontamiento cuando escuchó su nombre y apellido siendo exclamado, en ese preciso instante cayó a la realidad y se puso bastante nerviosa caminando hacia la silla rogando por no tropezar y caer frente a toda la población estudiantil.
La profesora le dio una minúscula sonrisa de lado antes de ponerle el sombrero en su cabeza y ella no se asustó cuando le habló porque sus padres le advirtieron de ello.

Mmm...Que tenemos aquí, una Macmillan, interesante...Sí, tienes un poco de valentía pero definitivamente tu casa no es Gryffindor...Leal como un Hufflepuff pero no....Vaya, podrías encajar en Slytherin perfectamente con tu ingenio, determinación y astucia. Sin embargo tu curiosidad, creatividad, inteligencia y necesidad por saber todo puede más...Ya tengo tu casa niña, pero antes te digo que tendrás que ser muy fuerte para enfrentar lo que se avecina — hizo una corta pausa y luego gritó — ¡RAVENCLAW!

La casa azul se llenó de aplausos y Eris se quitó el sombrero yendo a su mesa con la mente perdida en lo que le dijo, preguntándose qué es lo que se avecina y por qué ella tiene que ser fuerte, ciertamente le preocupa pero por ese momento decidió dejar de lado para después y centrarse en el presente.
Se sentó en una esquina, casi alejada de la mayoría buscándole con la mirada a Regulus y Narcissa pero sus ojos se detuvieron en otros grises que la miran fijamente, el famoso Sirius Black. Desvío su mirada al chico de al lado y sonrió saludándole con la mano, Peter le respondió con timidez al recibir su atención ya que pensaba que no se acordaría de él o en todo caso que lo ignoraría, por otra parte el Black mayor se quejó.

— ¿Por qué me ignora a mí y no a ti? — le reclamó.

— Ehh...no sé — respondió inseguro, de hecho hasta él se sorprende.

— Quizás porque no te conoce y le diste una primera mala intención, además ¿desde cuándo te importa tanto tener la atención de una chica en específico? — preguntó Remus mirándolo con extrañeza.

— Pues...

— ¿De qué hablan? — interrumpió James perdido porque estaba muy ocupado acosándole con la mirada a Lily Evans.

— Del extraño interés "no sexual ni romántico" de canuto hacia la chica nueva.

James la buscó y la encontró compartiendo miraditas y sonrisas con Narcissa y Regulus Black, aquello le sorprendió ya que nunca antes le había visto a esos Slytherin's en particular demostrar emociones faciales.

— Pues al parecer se lleva bien con tu hermano y tu prima.

— No me jodas, ahora si que estoy ofendido. ¡Cómo puede hacerle caso a ellos!

Remus resopló irritado ante tanto drama. Toda su amargura y mal humor proviene de que falta tres días para la luna llena y ya le empieza a afectar, lo que significa que no soporta ningún drama innecesario y ridículo como el que está haciendo su amigo, en realidad no soporta nada, lo único que desea es ir a su cama y dormir para apagar toda irritabilidad y dolor muscular.

— Si tanto quieres ser su amigo o lo que sea acércate a ella mañana y háblale como una persona normal, o pídele a Peter que te ayude y listo.

— O podríamos hacerle una broma de bienvenida para llamar su atención.

Remus se golpeó la frente frustrado llamando no solo la atención de sus amigos, sino también de los que estaban a su alrededor.

— A veces realmente me pregunto si tu cerebro funciona bien.

James soltó una risota dándole un codazo a Sirius quien se ve bastante ofendido ante la agresividad del chico.

— ¿Cuánto falta para la luna llena? — le preguntó en un susurro a James.

— Tres días.

— Eso explica todo — susurró.

— No sabes el tipo de persona que es, así que no puedes simplemente hacerle una broma, quizás podrías hacerle sentir mal o de lo contrario te va tirar una maldición, pero todo llevará a que no te soporte — dijo con la máxima paciencia que tiene en estos momentos.

— En eso estoy de acuerdo, además es muy buena, no se merece ninguna clase de broma — habló Peter.

— Ya, está bien, no lo haré — se resignó dando un gran suspiro.

═══════════════

— Hola compañera de habitación.

Automáticamente Eris dejó de tomar su jugo de calabaza para voltear encontrándose con una chica morena que tiene una sonrisa pícara plasmando en su rostro y de cierta forma le hizo sentir un poco incómoda por la lenta repasada que le dio.

— Hola...¿Cómo ya sabes que seremos compañeras?

— Vengo de la habitación porque odio estar presente en la selección, es muy aburrido, pero vi tu nombre y supe que eras nueva así que vine rápidamente para verte. Para tu suerte, o más bien nuestra, este año solo seremos nosotras dos en la habitación.

— Emm...Supongo que está bien.

— No solo está bien, sino que es grandioso porque desde primero hasta el año pasado tuve que soportarle a tres chicas con las que no me llevaba bien, pero los astros se alinearon y escucharon mis plegarias cambiándome este año.

Lo último llamó por completo la atención de Eris quien dejó de comer para prestarle verdadera atención.

— ¿Astros? ¿Te gusta la astronomía?

— Obvio.

— ¿Y la astrología?

— ¡Por supuesto que sí! Yo soy leo ¿y tú?

Las dos se sonrieron emocionadas de por fin encontrar alguien que le guste esos temas y están ansiosas de poder conversar sobre ello.

— Acuario — respondió animada.

— Los raros del zodiaco — la rubia hizo una mueca ante el término— Hey, no lo tomes a mal porque yo amo a los acuarios, además fuego y aire son súper compatibles por lo que seguro seremos mejores amigas. Y ser raros no es nada malo, yo creo que eso les hace muy especial e interesante.

La morena hablaba tan rápido y energéticamente que Eris tenía que prestarle suma atención para poder oír bien todo lo que dice, aún así le encanta oír sobre estos temas así que no es un problema.

— Ay que tonta — se reprendió a sí misma — Soy Eloise Brown, pero por favor, te lo ruego, no me digas por mi apellido porque detesto que todos en el mundo mágico me digan así. Por algo tengo nombre y es tipo "Hey, mi mamá se tomó nueve meses para elegir mi nombre ¡Llámenme por mi jodido nombre idiotas!".

Eris rio cautivada por su excéntrica personalidad y supo que ese tipo de persona lo quería en su vida, así que accedería completamente a ser su amiga, aunque obviamente va a costar un poco abrirse como siempre, solo espera que Eloise le tenga suficiente paciencia.

— ¡Por Dios! Perdón por hablar tanto, a veces se me olvida dejarle hablar al otro, pero no me culpes, algo de ti me hace tener completa confianza y es extraño. De igual forma cuéntame algo de ti...¿De dónde vienes? ¿Qué edad tienes? ¿Eres sangre pura? ¿Dónde estudiaste antes? ¿Eres heterosexual?

— No te preocupes, y nací en Inglaterra pero fui a vivir unos años en Francia y ahora he vuelto otra vez. Tengo dieciséis años, si soy sangre pura, estudié en Beauxbatons cuatro años, luego el quinto lo hice en mi casa y soy heterosexual — respondió pacientemente — Si quieres puedes responder tus propias preguntas para conocerte.

— También soy de Inglaterra, tengo quince años, soy como lo llaman sangre sucia, estudié desde el principio en Hogwarts y soy lesbiana...¿No eres homofóbica?

— No, creo fielmente que todos deben ser libres de expresar sus emociones y sentimientos sin que otros lo critiquen, porque al fin y al cabo son personas que sienten lo mismo que un heterosexual por lo que no debería ser catalogado por algo malo cuando es completamente normal y se debería respetar.

— Creo que ya te amo — fingió limpiar sus lágrimas invisibles — Deberían haber más personas como tú porque no sabes lo doloroso que es cuando las personas de aquí me dicen cosas malas o me híper sexualizan por ello. Y es realmente triste ver que muchos se esconden por miedo a lo que te puedan decir.

Eris le sujetó la mano percibiendo su verdadero dolor y Eloise se sorprendió cuando empezó a sentirse tranquila ante su toque pero lo tomó como algo sin importancia, sin saber que eso ya sería una pequeña pista de lo que la rubia tiene.

— Desde ahora yo te defenderé si es necesario y si quieres también te ayudo a formar un club en donde podrán participar todos aquellos que se esconden por ello, incluso los que no se sientan a gusto con su sexo biológico.

— Joder chica ¿Dónde estuviste todo este tiempo?

— Escondida salvando y hablando con animales — bromeó.

— Eres una ternura y creo que estás muy avanzada mentalmente para esta época.

═══════════════

Eris se encontraba mirando fijamente cada rincón de lo que sería su habitación por dos años y algunos meses y le gustó lo que vio, más aún porque su color favorito es el azul y casi todo es de ese color, desde las sábanas, las cortinas, almohadas, alfombra y el techo que es acompañado con pequeños puntos blanco que dan la ilusión de ser estrellas.

— ¡Pero que gato más bonito! — chilló agarrándole a Neo quien se dejó querer al instante — Y mira, tiene el color de ojos igual a los tuyos.

— Sí, se llama Neo. ¿No te molesta si descargo mis cosas ahora?

— Nah, yo apenas y duermo, así que tienes mucho tiempo.

Y mientras Eloise se entretiene con el gato Eris empezó a quitar sus cosas del bolso, empezó con su maleta llena de ropas y lo abrió haciendo un hechizo para que estos se acomoden en el mueble por si solos, luego quitó las pilas de libros e hizo el mismo hechizo, pero al llegar a la caja de cristales, inciensos y velas lo sacó con cuidado y empezó a acomodar ordenadamente en una mesa, al igual que los frascos con hierbas de distintas clases, también colocó algunos objetos de adornos en esa misma mesa.

— ¿Para qué son todas esas cosas? ¿Puedo tocarlos?

— Para hacer trabajo de limpieza energética y otras cosas. Y te agradecería que no toques los cristales.

— No entiendo nada de lo que hablas pero bueno.

La rubia dejó de acomodar sus cosas para verle entre sorprendida y extrañada a la chica que sigue atenta a darle mimos al gato.

— ¿No te parece extraño ni me juzgarás?

— Obvio no, así como tú no me juzgaste yo tampoco lo haré, pero si me encantaría escuchar la explicación de todas esas cosas porque me da curiosidad.

Eris volteó con velocidad rompiendo el contacto visual para que no vea como sus ojos se aguaron ante su respuesta. Por primera vez alguien no le dice cosas hirientes y la juzga por ello como antes lo habían hecho, aunque ruega por dentro que todo no se arruine si es que se entera de sus dones porque cada uno de ellos fueron anteriormente el motivo de la exclusión y causas de insultos.

— Está bien, mañana lo haré— respondió finalmente.

— Genial, yo te mostraré todo el colegio y desde ahora seremos E&E, las más diosas de Ravenclaw.

— No creo que sea una "diosa".

La morena se levantó de la cama con seriedad y fue hasta Eris y la sujetó de sus hombros llevándola frente al espejo, ahí ambas se miraron a través del reflejo.

— Tan solo mírate Eris, eres jodidamente hermosa, toda una diosa digna de admirar, y no te conozco lo suficiente pero ya presiento que tu manera de pensar también es hermoso, así que cariño, valórate y ámate más.
Ahora quiero que digas lo que somos.

— E&E, las más diosas de Ravenclaw — dijo riendo.

— Exacto nena.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro