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𝟎𝟎𝟏 ━ 𝐀𝐋𝐋 𝐓𝐇𝐄 𝐋𝐄𝐆𝐄𝐍𝐃𝐒 𝐀𝐑𝐄 𝐓𝐑𝐔𝐄
❝𝐇𝐚𝐛𝐢́𝐚 𝐮𝐧 𝐭𝐢𝐞𝐦𝐩𝐨 𝐞𝐧 𝐞𝐥 𝐪𝐮𝐞 𝐲𝐨 𝐞𝐬𝐭𝐚𝐛𝐚 𝐬𝐨𝐥𝐨. 𝐂𝐨𝐧 𝐧𝐢𝐧𝐠𝐮́𝐧 𝐥𝐮𝐠𝐚𝐫 𝐚 𝐝𝐨𝐧𝐝𝐞 𝐢𝐫.
𝐍𝐢𝐧𝐠𝐮́𝐧 𝐥𝐮𝐠𝐚𝐫 𝐚𝐥 𝐪𝐮𝐞 𝐥𝐥𝐚𝐦𝐚𝐫 𝐡𝐨𝐠𝐚𝐫❞ .
Lᴏsᴛ Bᴏʏ ── Rᴜᴛʜ B.
SUS REBELDES CABELLOS RUBIOS QUE LE CUBRÍAN EL ROSTRO FUERON QUITADOS POR SU MANO, se levantó del suelo con una ligera molestia en la espalda que la caída le había causado y sacudió su ropa para remover toda suciedad que hubiera podido acumular. Tomó la mano de su hermana para ayudarla a levantarse fijándose velozmente que no tuviera daño alguno y al comprobar que era así levantó su rostro con el ceño fruncido viendo el lugar en el que se encontraban dándose cuenta que estaba en la comisaría.
«¿Cómo mierda llegamos aquí?» Se cuentionó intentando procesar lo que acaba de pasar.
Habían bajado del taxi que las llevó a su casa y tan pronto como vieron a Jocelyn la ojiverde comenzó a gritar a punto de entrar en pánico dando vueltas por el lugar sin detenerse, también empezó a buscar respuestas a la vez que creaba teorías extrañas como que a ambas chicas las habían drogado aún sin que hubieran bebido algo del lugar, sin embargo, a pesar de las exigencias que ambas daban no recibieron respuesta concreta ya que la mayor parecía no escuchar nada de lo que decían eso hasta que su reliquia familiar fue pasada sobre su antebrazo revelando el mismo tipo de tatuajes que anteriormente ellas habían visto en los chicos del club, extrañando a ambas, pero antes de que les fuera posible preguntar algo más la morena que trabajaba abajo llegó indicandole a su amiga que la habían encontrado.
La mayor de las Fray le dio a su hija menor un collar con una piedra morada que según sus palabras la protegería, después de que le pidiera a la ojiazul seguir sus instintos siempre las hermanas fueron empujadas a la par al extraño objeto del mismo color que se formó tras de ellas el cual si bien Sasha no tenía idea de lo que era no le causaba buena espina ni aquello ni toda la situación.
──¿Chicas?──Llamó la compañera de Luke en el trabajo.
──Capitana Vargas──Respondió Clary aun desorientada por todo lo que acababa de pasar.
──Son las dos de la mañana ¿Qué hacen aquí?──Preguntó entre confundida y curiosa.
──Luke dijo que podría llevarnos a casa──Mintió rápidamente Sasha sonando lo suficientemente convincente para que la mujer le creyera.
──Aun no confían en los taxistas──Sonrío divertida la mayor.
──No planeo hacerlo──Respondió de la misma manera la rubia comprobando una vez más su efectividad a la hora se mentir, aun que en realidad odiara hacerlo.
──Luke esta interrogando a alguien, puede que tarde.
──Bien, lo esperaremos en la cafetería──Contestó Clarissa por lo cual su hermana se alivió, ya que anteriormente en situaciones similares a esa ella lo había arruinado todo.
──Oigan chicas──Las llamó de vuelta la compañera de Luke causando que estas voltearan──, ¿tienen algún problema? ¿Algún chico? ¿O chica?
──Si, problemas con chicos, ya sabes lo normal──Se despidieron con un gesto de su mano y comenzaron a caminar juntas. Bajaron las escaleras pero se detuvieron cuando escucharon la voz de alguien llego a sus oídos. La rubia tomó a su hermana del brazo y la escondió junto a ella tras la barda que se encontraba en el lugar.
──En cuanto supimos que Jocelyn Fairchild estaba viva fue fácil encontrarte──Uno de los hombres le habló a Luke con tono amenazante pero divertido, casi como si creyera que tenía el control de la situación.
──¿Fairchild?──Miró un segundo a Sasha la cual sin tener respuesta a la anterior pregunta solo negó.
──Parece que tú y Jocelyn nunca se alejaron. El círculo ya la tiene, es cuestión de tiempo para que atrapemos a sus hijas.
──Mierda──Maldijo en voz baja la mayor de las hermanas Fray. Ciertamente ella no quería a Jocelyn como una madre, ni algo parecido pero era ella quien a una manera retorcida la había criado, a demás de que no pensaba dejar que le tocarán un solo cabello a la zanahoria.
──Puedes salvar a las tres──Habló la mujer de vestido.
──Las tres me dan igual, no son nada para mi──Clary se obligó a contener la respiración sin querer escuchar más──; especialmente Sasha, ella no es nada para nadie.
«Golpe bajo» Pensó la mencionada pero aun así se negó a creer que las palabras de Luke eran ciertas e hizo oídos sordos a aquello último
──Mátenlas si así lo quieren, los míos quieren la copa. ¿Por qué creen que he estado aquí tantos años? Y cuando la encuentre me la quedaré──La pelinaranja dejó caer una lagrima que rápidamente quitó, Evolet por el contrario no mostraba sentimiento alguno, su rostro era lo más neutro que se podía mientras intentaba comprender algo──Díganselo al círculo y a Valentine.
──Nadie a mencionado a Valentine.
──No hace falta──Contestó Luke.
──¡Escúchame!──Gritó uno de los hombres.
──No, escúchame tú──Soltó un manotazo a su escritorio que generó un gran estruendo──, ¡fuera!
Pocos segundos después la menor se paró de golpe y comenzó a correr en dirección a su casa conociendo perfectamente el camino, Sasha se vio en la obligación de seguirla alcanzandola de manera rápida mientras que las gotas de agua caían del cielo perdiéndose con las lágrimas de la menor. La rubia terminó con la ropa y el cabello mojados pero fuera de que guardo su collar entre su pecho y su ropa no hizo nada para evitar que algo se arruinara. La pelinaranja entró a su hogar soltado un grito desesperando.
──¡Mamá!──Se tiró al suelo de rodillas sintiendo que no podía más.
──¿Qué diablos paso aquí?──Se preguntó a si misma sabiendo que nadie contestaría y vanzó levemente por el lugar dejando a su hermana tirada pero viendo de reojo cualquier acción que hiciese. Veía todo analizandolo mientras que, como siempre en su vida, caminaba de manera sigilosa sin provocar ningún ruido. Todo estaba roto y desordenado, sin Dot ni Jocelyn a la vista.
Clarissa tomó un hacha que estaba en el suelo y aunque la ojiazul estuvo a punto de decirle que era mejor si ella la portaba lo dejó pasar al ver que la chica comenzaba a subir, la siguió por detrás asegurándose de que no hubiese peligro visible. Una vez arriba la mejor salto en dirección a Dot cuando la visualizaron en el salón principal de la casa.
──Se llevaron a Jocelyn──Comunicó la que era su amiga.
──¿Enserio?──Preguntó la rubia sin poder evitar el tono sarcástico en su voz──Ni se nota.
──¿Quienes?──Cuestionó la zanahoria queriéndose acercar pero, haciéndole caso a lo que su cuerpo le griataba, Sasha la jaló del brazo sin dejarla avanzar. Algo de todo aquello no le daba confianza, la historia estaba demasiado incompleta.
──Shadowhunters rebeldes que buscan la copa mortal──Respondió tal como un robot lo haría, confirmando la teoría de la rubia acerca de que más de una cosa no estaba bien.
──¿De qué estas hablando?
──Piensa Clary, ¿te habló alguna vez tu madre de una copa de oro, parecida a un cáliz?──La chica morena se acercaba más a ambas chicas, especialmente a Clarissa encendiendo aun más las alarmas de la hermana mayor.
──No sé nada de ninguna copa, Dot. Sera una de las antigüedades de abajo.
──¿Tú Sasha? ¿Sabes algo de la copa mortal?──La mencionada río de manera sarcástica.
──Claro, Jocelyn y yo éramos confidentes tan cercanas──Contestó con ironía molestando a la morena en el proceso.
──Saben más de lo que creen. Especialmente tú Evolet──Tras aquellas palabras que ambas chicas intentaban descifrar en rostro de la mayor cambió repentinamente pareciendose a las mismas cosas que se habían topafo en el club.
La mayor no dudo un segundo en hacer a su hermana para atras y al ver que la cosa se acercaba rápidamente para atacarla se colocó en posición para hacerle frente, sin embargo después de unos segundos de lucha fue empujada a la pared pegándose en la nuca y soltando maldiciones en murmuros. Clary sintió la necesidad de ayudar a la rubia que se encontraba tirada en el piso luchando por quedarse consciente pero aquello la mordió tan pronto como intento hacer algo, en respuesta ella atinó a encajarle su reliquia familiar aún que no sirvió de nada. Viendo los apuros de la menor, Sasha uso toda su voluntad para pararse y defender a la zanahoria andante, se acercó desviando la atención hacía ella pero a pesar de sus esfuerzos por dar golpes con la suficiente fuerza terminó siendo una víctima fácil por lo débil y desorientada que estaba. Su costillas del lado izquierdo sufrieron las consecuencias con una herida que le estaba robando rápidamente la sangre.
Justo cuando pensó que ya no podría más el demonio frente a ella se desvaneció de pronto dejando a la vista los orbes azules del rubio que se volvieron a conectar los suyos.
──Se te esta haciendo costumbre salvarme──Habló divertida con una ligera sonrisa de lado mientras se dejaba caer en el piso apoyándose en la pared a la vez que presionaba su herida con fuerza intentando no desangrarse.
──¿Qué, ni un gracias? ──Preguntó de la misma manera el rubio.
──Gracias teñido──Agradeció con sinceridad cerrando los ojos pues estos le pesaban demasiado.
──Soy rubio natural──Sasha no pudo evitar reír siendo ese su último momento del todo despierta que podía recordar a demás de sentir unos brazos cargándola estilo princesa, después de eso se desmayo.
★
Desde que tiene memoria ha añorado el silencio ya que este le daba un poco de tranquilidad en una vida tan ajetreada, especialmente conviviendo con su hermana, eran de los escasos momentos que podía utilizar para pensar mientras involuntariamente comenzaba a tararear una canción que rompía la ausencia de ruido, sin embargo, en este caso no sabía si le agradaba.
Sintió como su conciencia volvío hacía ella pero se obligó a si misma a no abrir los ojos, sospechaba no estar en casa así que planeaba descubrir que lugar era ese a base de sonidos. Luke siempre le decía que tenía que confiar en todos sus sentidos y entrenarlos por igual ya en algún momento uno de ellos podría ser imposible de usar, ella a pesar de no comprender del todo los motivos de esas lecciones que tenían lo consiguió permitiéndole conocer su al rededor sin verlo, pero en ese momento no había nada que le incitaraá algo. Pasaron lo que ella pensaba eran cinco minutos y estaba apunto de dejar notar que estaba despierta hasta que un ruido se escuchó.
──Auch──Se quejó una femenina voz desconocida para las hermanas que sin que la otra lo supiera estaban en la misma habitación──Soy Izzy. Nunca había visto a Jace tan distraído por unas mundanas.
──¿Quién es Jace?──La voz de Clarissa resonó en su mente estando por primera vez en mucho tiempo feliz de escucharla. A diferencia de la pelinaranja la mayor no tardó demasiado en conectar los puntos.
«Jace es el tipo del club, el rubio que nos salvo». Se dijó a si misma y por un momento se sintió un poco más tranquila.
──No sabes mucho ¿Cierto?──La otra chica ignoró por completo la pregunta anteriormente hecha.
──Lo único que sé es que unos lunáticos secuestraron a mi madre y ahora ustedes nos secuestraron a mi y a...──Dejó las palabras en el aire para voltear en busca de su hermana mayor──¿Qué le paso?
──Si con secuestrarlas te refieres a salvarlas──Sasha tenia que admitir que tenía sentido pero no por eso le generaba confianza──, y respecto a ella, es buena peleando, pero aún así sufrió una herida que la dejo sin mucha sangre, pronto despertara.
El sonido de la puerta fue lo siguiente que distinguió Evolet sin permitirse fruncir el ceño con curiosidad.
──Unas mundanas no deberían estar aquí──Una voz con tono molesto de un hombre desconocido para ella hizo presencia en el lugar al igual que sus pasos y los de alguien más.
──¿Dónde es aquí exactamente?
──Ella no es una mundana──Contestó el que idéntico como Jace ignorando por completo a la implicada, cosa que a la 'desmayada' ya le estaba comenzando a hartar──, y de la rubia no lo sé.
──¿Cómo estas tan seguro?──Preguntó el otro chico que tenía la voz autoritaria.
──El cuchillo serafín se iluminó cuando lo toco──Se escuchó como alguien se levantó de una silla levemente lejana y caminaba hasta sentarse de nuevo en la cama donde la ojiazul estaba.
──Deberíamos hacerle la runa──La chica desconocida le hablo a los demás analizando a la chica.
──No sabemos si es una de nosotros──Contestó el chico en su lugar advirtiendo que no era una buena idea.
──¿De ustedes?──Cuestionó la pelinaranja completamente perdida y con la preocupación creciendo en ella──¿Qué van a hacerle?
──Su hermana lo es, ¿por qué ella no?──La chica a lado de la rubia volvió a ignorar a la menor de las Fray.
──Bien Izzy, hazla.
Por un momento todo se volvió a quedar en silencio, el par de chicos se vieron rápidamente esperando que no se convirtiera en una repudiada, Clarissa intentó replicar pero la mandaron a callar y extrañamente obedeció sin saber realmente que estaba pasando mientras que la otra chica se encontraba sacando su estela para utilizarla en el cuerpo de la joven que desde su perspectiva seguía inconsciente. Evolet sintió como se acercaba la mano de la mujer reduciendo la distancia entre ambos cuerpos, algo en ella le gritaba que no se dejara marcar por aquel objeto extraño que de alguna manera sabia que la otra portada, así que obedeciendo a sus instintos, antes de que la otra pudiera comenzar a trazar la runa de curación alzó rápidamente su mano tomándola por la muñeca con fuerza para así detener el movimiento a la vez que se abrían de golpe unos hermosos ojos azul brillante, provocando así que la pelinegra diese un brincó del susto.
Sasha pasó su vista de manera veloz por el rostro de la contraria──la cual no sé había movido de la impresión──su piel era de un tono aperlado contrastando con su oscuro cabello, sus cejas eran un poco delgadas y negras pero bien maquilladas mientras que su boca tenía un labial rojo intenso que incitaba a ver sus labios e incluso era capaz de decir que podría generar el impulso de besarla; sin duda atractiva.
──Buenos reflejos──Isabelle terminó rompiendo el silencio una vez tan bien la analizó sintiendo otra vez un sentimiento sin identificar, la rubia decidió soltarla al percibir que no era alguien a quien debía temer y se levantó de la cama sentándose en la misma con la chica de ojos cafes a un lado suyo.
──Soy Jace Wayland──Se presentó el rubio devolviendo su mirar a la joven de cabello naranja.
──Yo soy...──Fue interrumpida por el.
──Clary Fray, lo sabemos.
──Sasha──Habló ella levantando la mano tal como si estuviera en un salón de clases, y la pelinegra junto a ella no pudo evitar soltar una sonrisa divertida que ella no dudo en corresponder, ante estos actos Clary frunció el ceño.
──¿Soy al único al que le parece raro?──Cuestionó el chico desconocido que por fín podía ver. Era muy guapo ante los ojos de la rubia, alto y cuerpo bien formado con cabellera negra contrastando con sus ojos claros que resaltaban de su piel a perlada.
──A ti todo te parece raro Alec──Contestó Jace sin tomarle verdadera importancia.
«Con que así se llama el chico guapo».
──Tengo que informarle a la clave.
──¿Sabes qué? Relájate un poco──El ojiazul habló de nuevo.
──Mi hermano no sabe como relajarse──Isabelle se levanto de la cama para pararse frente a el dejando a la chica rubia viéndolos a los dos con detalle y así notando el parecido que físicamente tenían──. Te amo Alec, pero siempre tienes un pie en el acelerador.
──Yo también te amo, pero esto es...
──Dame un segundo, te dire algo que nunca digo. Por favor──cortó el rubio mirando en dirección la puerta. Sasha no sabía si le molestaba o le divertía que el rubio interrumpiera tanto a los demás.
──¿Qué pasa contigo?──Preguntó Alexander ligeramente indignado para luego dirigirse a su hermana──. En serio ¿qué pasa con el?
──Vamos hermano mayor──Izzy lo jaló hacia la puerta causando una leve risa de la rubia que llamó la atención del chico pelinegro.
Por inercia la chica chocó su mirada con la del chico frunciendo ligeramente el ceño con curiosidad por el mientras que el contrario la veía sin expresión alguna, intentando descifrar si era un peligro para sus hermanos o para su raza. Ninguno quisó despegar la vista del otro en un intento de demostrar quien tenía más autoridad advirtiendo de futuras dispuestas. La ojicafe jaló al joven del brazo interrumpiendo el momento, le regaló una última sonrisa a las nuevas que la rubia correspondió y después se fueron ambos del lugar.
Una vez que ellos salieron dejando solos al par de rubios y Clary la cual no podía esperar más para comenzar a formular todas las preguntas que tenía en mente. Sin embargo Jace comenzó a hablar──:La herida está curada.
──¿Cómo es eso posible?──Preguntó la zanahoria asombrada después de ver su piel expuesta.──¿Entonces qué? ¿Estoy milagrosamente curada y todos ustedes tienen poderes mágicos?
──No──Rió levemente──, no me confundas con un brujo.
──Disculpa, ¿un qué?──Se metió en la conversación Evolet sin comprender y sin acercarse aún.
──Un brujo es uno de los subterráneos.
──Lo que dices no tiene sentido──Se notaba lo confusa que estaba la pelinaranja, pero Sasha esta vez no podía hacer nada para ayudarla ya que tampoco tenía idea de lo que sucedía.
──Brujos, vampiros, sillies...
──Detente──Le advirtió la ojiazul.
──Literalmente mi cerebro esta a punto de explotar──La mayor se puso de pie y avanzó junto a la cama donde su hermana se encontraba al verla entrar tan alterada.
──Tranquilizante zanahoria, no te sirve de nada ponerte de esa manera──Se puso de cuclillas y con ayuda de su mano le volteó la cabeza ckn delicadeza para que la viera──. Primero escucha lo que dirá, ya después vemos si lo desmayamos.
El hombre puso una cara de indignación mientras la menor se reía calmandose solamente un poco, Evolet decidió ver al rubio que esperaba una disculpa pero no recibió más que una mirada burlona. La pelinaranja respiró recordando que su hermana estaba ahí y está no dejaría que nada le sucediese, había sido así desde siempre.
──Bien, lo hare sencillo──Jace retomó la conversación ganándose la atención de las chicas──. Todas las leyendas son ciertas. Somos Shadowhunters, protegemos el mundo humano del mundo de los demonios.
«Genial» Pensó Sasha sonriendo levemente.
──Así que esa gente que vieron asesinada en Pandemónium, no era gente en absoluto, eran demonios cambia formas.
──No estamos interesadas en ser parte de club de pelea sobre natural──Clary habló──, solo queremos encontrar a nuestra madre. Lo demás nos da igual, por favor.
──Yo estoy dentro──Si bien era cierto que esperaba encontrar a Jocelyn, no con la misma desesperación que la menor. A demás, por más descabellado que sonase, ella si quería conocer sobre este mundo, quería formar parte de el, por que si, Sasha creía en cada palabra que el rubio dijó.
──Yo soy la mejor opción que tienen──Contestó el a las suplicas de la ojiverde.
──Ni si quiera te conocemos──Aclaró con obviedad Clarissa. Una sonrisa se escapó de la boca de la rubia admitiendo que aquel era un muy buen punto, pero aun así ella no tenía inconveniente alguno con eso. El teléfono de la menor comenzó a sonar, ella luego de ver quien era contesto
──Simon──Se levantó de la cama alejándose y dandole lugar a la ojiazul. El rubio tomo el cuaderno de dibujos de la chica comenzando a hojearlo viendo con claridad todo lo plasmado en las hojas.
──No he visto nunca algo más bello que a ella dibujando──La sinceridad en el tono de Evolet era notable, una sonrisa sin dientes hizo presencia en su cara a la vez que veía los trabajos hechos por la menor de las Fray──Jace──El nombrado subió la mirada en su dirección──, agradezco que quieras ayudarnos pero que sepas de ante mano, que ambos un poco difíciles de tratar a su manera.
──Algo me dice que no será un problema──Ella lo vio un tanto insegura de esa respuesta pero lo dejó pasar, después ambos se pararon cada uno junto a Clarissa logrando ver a Simon a las afueras del edificio.
──Dame cinco minutos, tengo que vestirme──Ante lo dicho por la pelinaranja Sasha levanto una ceja de manera divertida pues aquello se podía mal entender.
──¿Vestirte? ¿Que haces desnuda en una iglesia abandonada?──De manera inevitable Evolet soltó una risa que no alcanzo a ser escuchada por el chico de lentes al otro lado de la linea.
La rubia dirigió su atención al exterior percatandose de una sombra que pasó justo detrás del amigo de su hermana, frunció el ceño intentado enfocar mejor cualquier cosa que ae moviera pero a pesar de que su vista era extremadamente buena no consiguió percibir nada.
──¿Viste eso?──Le preguntó en un susurró al chico, el la volteo a ver y asintió, luego le indicó que se alejaran, volviéndose a sentar uno frente a el otro.
──Mmm... ¿Qué paso con mi ropa?
──Veneno de demonio, ¿recuerdas?──La cara de la zanahoria en ese momento era digna de retratar──. Isabelle te dejo esa──Apuntó hacia una silla en la cual había un cambio de un hermoso cuero negro──. A ti también te dejo un cambio Sasha.
La mencionada se paró extrañada para ver con detalle su ropa. Su conjunto se encontraba manchado de sangre que según lo que pensaba era de ella misma. También notó la gasa en el costado izquierdo de su abdomen la cual sintió el impulso de quitarla sin importarle demasiado, sin embargo, se contuvo.
──Es una broma ¿verdad?──Clarissa sostenía una bota que seguramente llegaba arriba de la rodilla.
──Ella esta muy cómoda con su cuerpo──Respondió el chico sin tomarle importancia.
──Con un cuerpo como el suyo ¿quién no lo estaría?──Se relamió los labios al sentirlos resecos y luego siguió──Vamos zanahoria, pruébatelo, sal de tu zona de confort. Se te vera hermoso, lo prometo──La empujó cin delicadeza para que pudiera cambiarse sin ser vista.
Sasha se dirigió al otro lado con su cambio en mano, se coloco una falda completamente negra que se parecía a las de colegiala, un top verde oliva que a ella le encantaba pir las tiras cruzadas que tenía en el escote y por ultimo unos botines negros cin tacon. En su dedo medio reposaba su hermoso anillo y el cuarzo relucía sobre su pecho desnudo. Su rubio cabello suelto de forma levemente desordenada haciéndola lucir sexy.
──Izzy pensó que tal vez tu eras más demostrativa y que te gustaría──La voz de Jace se hizo presente al ver a la chica de rubios cabellos ponerse la chaqueta de cuero que la mencionada había dejado para ella.
──Dio justo en el clavo.
Clarissa salió y se comenzó a ver en el espejo, mientras que Sasha sin aguantar más se quito la gasa que le cubría la herida ya que──según ella──quitaba lo atractivo del estilo. Esperaba encontrarse puntos en su piel, sin embargo, la herida ya estaba sanada por completo sin necesidad de colocarle una runa.
──¿Y esto en mi cuello?
──Yo lo dibujé──La respuesta despreocupada de el teñido le dio gracia a la mayor de las chicas y no se preocupó poe ocultarlo.
──Bueno, escucha──Se acercó a el──Todavía no entiendo lo que esta pasando aquí pero no tatúes mi cuello, eso da miedo.
──Ya te escuche, supongo que la próxima vez dejare que mueras──Clary cambio su expresión facial a una incredula.
──Es una runa──Soltó Evolet de repente sin ser consiente de donde provenía aquella información. Su hermana menor volteo a verla sin comprender a la vez que el chico se levantó de su lugar viéndola atento, esperando que dijera algo más──, no es un tatuaje, es una runa.
──Exacto──concordó el extrañado──y tiene un gran poder para los Shadowhunters, letal para los humanos. Pero tu ya sabes a cerca de las runas──Tomó el cuaderno de la pelinaranja enseñándoselo──, ¿no es cierto?──Tras el silencio de la ojiverde el volvió a hablar──O no... ¿Qué es lo que te hace tan interesante, Clary Fray?
Como diez mil años para subir un capítulo que nada más tenía que editar, JAJAJA, lo lamentoooo.
Sigue sin llegar lo realmente interesante pero pues bueno, no todo llega de golpe.
No olviden votar y comentar estrellitas. Si notan algún error díganmelo sin problema alguno, por favor.
DARK
12/10/2020
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