𝟎𝟎𝟎 ━ 𝐓𝐇𝐄 𝐏𝐀𝐍𝐃𝐄𝐌𝐎𝐍𝐈𝐔𝐌

──¡MAMÁ!──El grito de cierta pelinaranja resonó por toda la casa hasta llegar a la habitación de una ojiazul que muy a su pesar se levanto de su cama para dirigirse a las escaleras y comenzar a descender de estas.

──¡Lo has conseguido, bien!──La Fray mayor se acerco feliz a su hija.

──¿Tú también sigues a Simon?──Le respondió sonriente la menor de las chicas.

──Solo tiene noventa y tres seguidores, necesita retweet's.

Desde el último escalón la rubia habló──:Que se los des tú, Jocelyn, es levemente deprimente──Comenzó a caminar en dirección a la barra de la cocina y se recargo el la misma.
──. Muchas felicidades zanahoria, aun que no me sorprende.

──Hastag madre acosadora──La ojiverde se volteó en dirección a su hermana y le susurro un sincero gracias que a la chica no le quedó de otra que responder con una leve sonrisa ladina.

Jocelyn saco una pequeña caja en donde se encontraba el regalo de la menor, esta lo aceptó gustosa para pronto abrirlo y dejar a la vista lo que parecía ser un fallido intento de lapicero solo que color plata y con símbolos raros an su agarradera. Sacó el objeto extraño para observarlo mejor pero al no entender que era miro a su madre.

──¿Qué es? ¿Un pisapapeles?

──¿Una pluma quiza?──Clarissa levantó el objeto en dirección a la rubia y después negaron descartando esa idea.

──No, es mucho más que eso──La ojiazul puso suma atención a cada palabra que la pelirroja decía sintiendo la duda crecer en ella y también otro sentimiento de necesidad──. Es muy antiguo, llévalo siempre encima. Es una reliquia familiar.

──¿Los Fray tenemos reliquias?──Preguntó riendo levemente a la vez que observaba a su hermana.

──Aparentemente──Contestó sin saber demasiado logrando que la pelinaranja frunciera el ceño, había pensando que ella al ser la mayor también tenía una.

──Algunas──Jocelyn respondió a la pregunta anteriormente hecha.

──Esta mañana dibujé algo similar──La zanahoria acariciaba su regalo de manera delicada, observando cada detalle posible──. Lo habré visto alguna vez por la casa──Sasha solo se encogió de hombros ya sin importarle el tema.

──Cielo, tengo que decirte...──La voz de la mujer mayor se vio interrumpida por el tono del teléfono de su hija menor, la cual no dudo en revisar.

«Mal educada» Pensó la rubia.

──Es Simon, viene a buscarnos──Habló viendo a la chica que ahora avanzaba al sofa.

──¿Buscarnos?──Se detuvo y volteó a ver a la menor──¿A ti y a quién más? ¿A Jocelyn?

──Pero tenemos que hablar──El tono de voz de Jocelyn parecía suplica cosa que extrañamente divirtia a la rubia.

──Vamos Sasha, quiero pasar mi cumpleaños con mi hermana mayor—La mencionada termino aceptando tras la mirada de la pelirroja que le obligaba a ir, a demás de que no quería que Clarissa hiciera una escena así que asintió logrando que la chica sonreirá con emoción──. Lo siento mamá, pero tenemos que cambiarnos, vamos al concierto de Enema de Champagne.

──¿Qué?──Preguntó una confundida pelirroja a la vez que la chica de cabellos dorados soltaba un gruñido.

──Es el nombre de la banda──Explicó Clary──. Después saldremos con Simon y Maureen──Dijo ella ganándose otro gruñido de la mayor de su hermana. Ignoró los quejidos de Sasha y tomó su maletín para luego colgárselo en el hombro.

──Pero, es tu décimo octavo cumpleaños y ahora todo va a cambiar para ti, incluso para Sasha.

──Jocelyn, solo cumple dieciocho, no significa que el fin del mundo se acerque o que ahora vaya a tener sexo, si así lo quiere hacer lo hará sin importar la edad, como yo──Habló Sasha soltando información de más mientras que se encogía de hombros. La ojiverde la veía levemente sorprendida ya que ella nunca le había contado al respecto, aun que siendo honestas, su hermana mayor nunca le contaba demasiadas cosas. No eran las confidentes que cualquier película de Hollywood te vende──. A demás, ¿yo qué tengo que ver con eso?

──Tenemos que hablar de algo distinto y más importante──Jocelyn tomó a la cabellos de zanahoria de las manos.

──¿Más importante que el sexo?──Preguntó Sasha divertida, aun que fue ignorada por ambas chicas.

──Y lo haremos──Afirmó──. ¿Puede ser desayunando?—Clary se acercó a su madre y la beso en la frente──. Te quiero.

Clarissa se separó y comenzó a subir las escaleras dejando atrás a Sasha la cual levemente fastidiada estaba a punto de seguirla hacía arriba pero fue detenida por la voz de Jocelyn cuando ya le daba la espalda.

──Cuídala Evolet──La chica gruñó levemente ante la mención de su segundo nombre pero volteó a verla con una tranquilidad demasiado creible que después se convirtió en una sonrisa cínica.

──Me lo has pedido tantas veces que parece que es mi propósito de vida en vez de un favor, madre──Remarcó la última palabra y comenzó a caminar hacia su cuarto sin dar lugar a que Jocelyn le contestara algo.

★

La chica de ojos azules y cabellos amarillentos se miraba en el espejo analizando bien su vestuario para esa noche sabiendo que el verdadero destino para esa noche era el club pandemonium. Llevaba puesto un top de tirantes verde olivo acompañado con pantalón negro de cuero negro y sus botines de tacon. En su pecho posaba un cuarzo verde brillante siendo sostenido por una dorada cadena que pasaba por su cuello, mientras en su mano derecha estaba un anillo negro con verde que a pesar de no saber de donde provenía o cuando lo había comprado nunca se lo quitaba de encima. Una vez se coloco su labial avanzó hacia la cocina topándose con Luke dandole una amenaza de broma a Clary.

──Si veo pintura en alguna pared tendré que detenerte──La mayor de las hermanas no lo dudó ni un poco y se acercó sin emitir sonido alguno por detrás de el moreno adulto, abrazándolo cuando se encontraba cerca intentando que sus brazos rodearan por completo la anatomía del otro pero fallando en el intento.

──Oh, vamos lobito, no seas aguafiestas──Llevaba llamándolo así desde que tenia memoria aunque realmente no entendía porque. El mencionado le sonrió en forma de saludo a la vez que la traía hacia enfrente para abrazarla el también y de paso revolver un poco su lindo cabello.

──No te preocupes, es para la furgoneta de Simon, voy a hacer que cambien de nombre.

──Si, por favor──Pidió Jocelyn.

──Concuerdo──Apuntó a su madre pero rápidamente bajó su mano sintiéndose extraña por apoyar a la pelirroja en algo, por más insignificante que fuera──. Olvida que que dije eso.

──¿Te ha hablado tu madre sobre eso?──Una vez que rompió el abrazo Luke señaló al objeto que la pelinaranja guardaba en su suéter.

──¿De la reliquia?──La sacó del bolsillo──Si es hermosa.

──Clary, tienes dieciocho años y...──La mencionada hablo sin dejarlo terminar.

──¿Qué les pasa a los dos? Cumplo dieciocho, ya lo dijo Sasha, no se acerca el fin del mundo.

El mejor amigo de su hermana hizo presencia en el lugar consiguiéndo que la rubia se restregara la cara pensando en el porqué había aceptado ir.

──Pero si que vas a...

──Vas a venirte al Lombardi's a celebrar tu cumpleaños después del concierto, junto con Sasha, claro──La ojiverde rió junto con el chico de lentes quien saludo con una sonrisa a la mencionada y esta le regresó el gesto a duras penas, soltando un gruñido por lo bajo que al moreno policía a su lado no le sorprendía escuchar.

De ahí en adelante Evolet dejo prestar atención a la conversación entreteniéndose con su anillo, haciendolo girar sobre su dedo como lo hacia cada que una emoción fuerte la inundada, también cuando se ponía a pensar o se aburria; en realidad era un gesto que hacía casi siempre. No podía estar sin el objeto y no comprendía el porque pero tampoco buscaba resolver esa duda.

Regresó a la realidad cuando estaba siendo arrastrada por su hermana hacía la puerta de la casa, intentando no ser tan brusca con la chica rompió el agarre con un movimiento rápido el cual dejo levemente sorprendida a la ojiverde que después negó restándole importancia, luego se subió a la espalda de Simon con la rubia tras ellos.

Y así se fue, sin despedirse y sin ganas de ir.

★

Después de escuchar a ambos chicos cantar──cosa que admitía no lo hacían mal──se encaminaron hacía el club Pandemónium. Maureen junto con los mejores amigos discutían acerca del nombre de la banda, que, por cierto, estaba igual de malo o peor que el anterior. Sasha se sintió fastidiada con la presencia de la morena así que gruñó una vez más por lo bajo, podía estar tranquilamente con su hermana y con Simón ya que lo venía haciendo desde niña pero la otra chica no era alguien a quien pudiera tolerar aun que tampoco tenía el corazón para echarla sin más.

La pelinaranja tomo una lata de pintura en aerosol que el oficial de policía le había dado, se dirigió hacía un costado diciendo que se sentía inspirada causando que la rubia viera eso como su escapatoria y la siguió para observar su proceso, ya que si algo le gustaba mucho era ver a su hermanita menor dibujar.

──¿Y esa firma?──Preguntó curioso Simon viendo lo que Clary había dibujado, la chica se quedó pegada a esa figura extraña que la ojiverde podía jurar que había visto en algún lugar. Mientras los demás chicos debatían que era la ojiazul se acercó a la camioneta delineando con la mano derecha la forma casi como su mente la reconociera, luego, por pura inercia, con la mano izquierda se toco la parte baja de la espalda.

──Oye, mira por donde vas──Salió rápidamente de sus pensamientos al escuchar a Clarissa quejarse.

──¿Puedes verme?──Sasha levantó su mirada hacia donde su hermana, ella hablaba con un rubio atractivo.

──Ni que estuviera ciega.

──Posees la visión──La mayor llegó a un lado de la ojiverde sintiéndose como un robot.

«Protege a Clary» Eran las palabras de Jocelyn las que resonaban en su mente casi guiando sus movimientos sin pedirle permiso. La pelinaranja la volteo a ver en busca de respuesta alguna deduciendo que la rubia ya estaba atrás suya pero la mayor solo se encogió de hombros sin comprender realmente que sucedía.

──¿Qué poseo el qué?──Preguntó riéndose Clary.

──¿Por qué no sé quienes son?──Se cuestionó el chico cayendo en cuenta de que la zanahoria no era la única que podía verlo.

──¿De verdad te funciona esa frase?──la Fray menor habló──¿Alguna vez?

«Espera, ¿la zanahoria cree que el está coqueteando con ella?» Se cuestionó la rubia y después asintió para si misma dándole respuesta a sus pensamientos.

──¡Jace!──Se escuchó un grito a la distancia y el, dándoles una ultima mirada a las hermanas, se fue en dirección al local.

──¿Qué les parece ese tipo?──Clary se acerco a sus amigos levemente divertida.

──¿Te refieres al tipo imaginario con el que hablabas?──Preguntó Simon.

──No, el que esta entrando al club──Lo señalo su mejor amiga.

──Ahí no hay nadie──Habló Maureen confundida.

Sasha se acerco a los chicos con una mirada confusa, a demás del ceño fruncido, ella también lo había visto y estaba bastante segura de que no estaba loca──en realidad era la más racional del grupo──, así que no saber que pasaba no le gustaba para nada.

──¿Podrías dejar de hacerme quedar como una loca?──Pidió la pelinaranja comenzando a molestarse.

──Deja de decir cosas raras──Contestó Maureen provocando que la ojiazul alzara una ceja, mostrándose a la defensiva.

──Tú deberías dejar de hablar completamente──Le retó la rubia con molestia dejándola sin respuesta, la chica no era alguien con quien la morena se metería.

──Clary, ¿qué llevaba tu cafe?──En respuesta a Simon la mencionada se quitó su suéter y se lo aventó al chico.

──¿A dónde vas?──Cuestionó la ojiazul haciendose una idea de lo que contestaría.

──A buscar respuestas.

La mayor no creyó que alguna vez en su vida diría algo como lo que estaba a punto de salir de su boca, pero aun así habló con bastante determinación sintiendo la duda surgir de su vientre bajo y expandirse por todo su cuerpo.

──Te sigo──Le respondió con seguridad.

La chica pelinaranja esperó a que su hermana estuviera a su lado para ambas dirigirse en dirección al club dejando solos a los dos restantes. El chico de lentes gritó algo que Sasha no entendió demasiado bien y no se esforzó por descifrarlo así que mejor siguió caminando cruzando la entrada sin problema alguno. Una vez dentro del lugar la rubia siguió a Clary sin saber realmente que demonios hacian. En el camino observaba el lugar topandose con diferentes personas bailando o bebiendo pero entonces su mirada cayo en un extravagante tipo con mujeres y hombres a su alrededor, este levantó su mirada por presentimiento viendola tambien, el pecho del extraño se estrujo de pronto mientras que algo resonó en la mente de la chica, o mas bien un nombre.

Magnus Bane.

Si no fuera por que la ojiverde la jaló se hubiera quedado viéndolo durante demasiado tiempo e incluso quizá hubiera ido en si dirección. Avanzó regresando a la realidad, visualizaron al tipo de antes entrando a lo que según las Fray era la zona VIP, por lo que para entrar Clarissa se enganchó del brazo de un hombre que parecía ir para allá. La mayor la vio divertida y los siguió por detrás sin tener inconveniente alguno al pasar.

Una vez dentro Evolet tomó del brazo a su hermana para esconderla con ella tras una columna del lugar pero sin perder visibilidad. En la escena se observaba a el tipo rubio hablando con una chica de vestido rosa con rayas negras mientras que una hermosa chica de cabello negro y vestimenta blanca bailaba en el centro del escenario; al otro lado, escondido viendo todo pero sin percatarse de la presencia de las chicas estaba un chico con los mismos tatuajes que los dos anteriores.

El tipo de cabellos dorados sacó de pronto una espada demasiado brillante confundiendo a la ojiazul, el levantó el arma a punto de atacar con ella a la chica con la que antes conversaba y lo hubiera logrado de no ser porque Clary se entrometio sin darle lugar a la ojiazul de reaccionar.

──¡Cuidado!──Sasha intentó tomar a su hermana de su extremidad superior al ver su intención de avanzar pero fue demasiado tarde ya que la menor de las Fray había llegado a un lado de los otros dos empujando a la chica al sofa en un intento acertado de protegerla. La rubia soltó un bufido desesperado.

La chica de vestido volteó dejando ver que de su cara salían horribles tentáculos inexplicables que de no ser porque tenía que reaccionar la mayor se hubiera cuestionado si eso era un sueño──o una pesadilla mas bien──. Sasha no lo pensó ni un segundo más y salió de su escondite dejándose guiar por sus instintos, empujó levemente a Clarissa para atrás provocando que esta cayera al suelo.

Sin necesidad de ningún arma Evolet se enfrentó a lo que sea que aquello fuera, esquivando y regresando los golpes sin dejar que le hicieran daño alguno pero sin que sus golpes los afectará demasiado, siguiendo inconscientemente la melodia que de fondo sonaba. En un agil movimiento lanzo a la mujer hacía atrás provocando que fuera atravesada por el objeto brillante, la chica se evaporizo dejando a la vista al rubio teñido que sentía la curiosidad crecer en el.

Más de aquellas criaturas aparecieron desconcertando a ambas hermanas, la pelinaranja tomo el mango que se le había caído al ojiazul y de este salió un cuchillo que ante su tacto se iluminó, la menor lo vio entre sorprendida y curiosa mientras que Sasha avanzó hasta quedarse junto a ella para protegerla. La rubia se centraba unicamente en que Clary no se involucrará en la pelea, salvandola por inercia de uno que otro golpe que pudiera recibir, cosa que la chica agradecía ya que se sentía en completo shock.

Durante el ajetreo su vista cayó fugazmente en la chica de cabello negro que ahora se dedicaba a matar criaturas con un latigo plateado, pasó de largo hasta que decidió hacerle caso a aquel movimiento arritmico de su corazón y volvió la mirada a ella. Su pulso se aceleró de golpe haciendo sentir a la joven tan viva como no lo había estado antes, ni siquiera cuando se dedicaba a seguir el ritmo de una canción con sus pies. Por un momento creyó que su reacción era debido a que la chica le había atraído pero no fue hasta que esta buscó a la rubia haciendo que sus ojos chocaran entre si que concluyó que no era por eso. Ambas frunciron levemente el ceño olvidando la realidad que las rodeaba, se vieron con una rara sensación de por medio pero con la extraña necesidad de avanzar en dirección a otra, tal como a Evolet le había pasado con el extravagante tipo; era como sentirse completa.

Sin embargo, una criatura hizo volver a la realidad a la ojiazul y con eso también a la pelinegra. Lo último que la rubia pudo observar fue a un hombre desaparecer después de que los dos chicos lo atravesaran con su espada dejandola intrigada. Cuando todo comenzaba a calmarse la menor de las hermanas salió corriendo sin esperarse a nada.

──¡Clarissa, espera!──La mencionada solo la tomó de la muñeca y la jaló yendo tan rápido como le era posible para tomar un taxi que las llevara a su casa. Evolet volteó la cabeza buscando a la pelinegra pero en su lugar se terminó topando con unos ojos avellanas que las veía de manera sería para después concentrar su atención en la rubia hasta que esta se perdió de su mirar...

Pero pronto se volverían a encontrar.

Mil años después hemos vuelto con el prologo wujuuuu. Y pues nada, aquí en realidad no hay gran cambio ya que esto está por venirse fuerte pero no importa.

Espero les haya gustado, no olviden votar y si gustan dejar una opinión yo encantada de leerlxs.

Baisitoooo estrellitas.

DARK
28/09/20