Al caer la noche, Yeonjun llegó a su residencia bastante cansado. Ni siquiera había realizado un esfuerzo físico considerable, pero todos los descubrimientos de hoy lo dejaron tan mentalmente agotado que solo deseaba acostarse en la cama y no despertar hasta el día siguiente.

No obstante, al observar la puerta del baño entreabierta con las luces encendidas, resultó más tentador dirigirse allí con total confianza después de dejar su bolso en la entrada, encontrando a Soobin en medio de lo que parecía ser un baño relajante con velas aromáticas y una película cualquiera reproduciéndose en la tablet colocada en el borde de la tina.

Al notar su presencia, Soobin se sobresaltó━. No te escuché entrar ━dijo, y Yeonjun se acercó para darle un casto beso de bienvenida━. ¿Cómo te fue con Beomgyu?

━Es más agradable de lo que pensaba ━respondió el delta, tomando asiento encima del retrete para poder conversar cómodamente━. Él… me contó sobre tu familia ━confesó y vio cómo los músculos de Soobin se tensaron repentinamente━. Solo fue un resumen de todo, pero me ayudó a comprender algunas cosas.

━Los eliminé de mi vida tan pronto como pude independizarme. Ni siquiera sé sus números de teléfono ni dónde viven ━agregó Soobin y miró al chico orca con cautela━. ¿Estás decepcionado?

━¿Por qué lo estaría?

━No soy un alfa tan fuerte como piensas ━admitió con vergüenza━. En realidad, me he dejado pisotear desde que nací, y cuando por primera vez mostré algo de superioridad, acabé arruinando la vida del único que me enseñó lo que es tener una verdadera familia…

Debido a la ausencia de omegas entre los tiburones, es bastante común que esta especie solo se relacione con betas y alfas. Su familia paterna era bastante tradicional en ese sentido y, aun así, su padre alfa acabó siéndole infiel a su madre beta con un omega cualquiera utilizando la excusa de que Soobin había arruinado la belleza natural de la mujer debido al embarazo cuando, previamente, tuvo otros dos hijos más. Aunque es cierto que él fue el único que vino por cesárea, la cicatriz no hizo a su madre menos bella.

Todos sabían que era un argumento estúpido para justificar el divorcio y, sin embargo, la culpa de la separación familiar recayó única y exclusivamente en él cuando tan solo era un niño inocente incapaz de procesar el rechazo de sus supuestos protectores. Luego, Beomgyu y Mingyu lo acogieron y fue entonces cuando se dio cuenta de lo agradable que es tener a personas en las que sí podía confiar.

Pese a ello, pasó gran parte de su vida desarrollando cierto repudio interiorizado hacia los omegas a raíz de ver a su padre manosear a su pareja delante de todos.

Sus hermanos ya eran mayores de edad para ese entonces, pero él era menor, así que, por temas legales, debía pasar al menos una semana al mes en casa de su progenitor. Este era un completo descarado que le metía mano a su pareja omega en cualquier momento y lugar. Y no solo eso, dicho omega parecía tenerle un rechazo descomunal a Soobin por ser, según sus propias palabras, «el hijo de la guarra que le quitó a su alfa».

Aparentemente, su padre y su padrastro eran predestinados, pero eso no podía importarle menos al pequeño Soobin, odiaba a ambos por igual. Por eso es que a él no le gustan los omegas, y había subestimado el nivel de esa repulsión hasta que Beomgyu, a quien consideraba su hermano, se presentó como omega.

Siempre fue consciente de que Beomgyu se sentía muy desorientado al respecto porque no debería ser posible que un tiburón fuera un omega, pero la aversión que tenía Soobin hacia ellos explotó, haciendo que, en vez de ayudarlo a sobrellevar esa situación, expresara abiertamente lo extraño que era el hecho de que uno de sus mejores amigos fuera un omega. Sin embargo, en el fondo sabía que Beomgyu no merecía ese trato porque no es vulgar como su padrastro.

Posteriormente, Beomgyu le confesó que estaba enamorado de Kai, y Soobin se sintió muy mal. Primero, un omega le arrebató a su padre, arruinando la familia en el proceso y poniéndolo a él como el blanco al que todos podían disparar. Por si fuera poco, sus hermanos le robaban todo bien material que apreciaba, incluyendo sus viejos peluches que solía atesorar porque Mingyu se los había regalado por su cumpleaños.

Soobin siempre se aferró a su enamoramiento por Kai porque era lo único medianamente estable que podía mantener. Por eso, tuvo miedo de que Beomgyu se lo arrebatara, por mucho que este creciera en un ambiente agradable con mejores valores que los suyos, se le hizo inevitable no estar ansioso al respecto. Y luego sucedió lo que sucedió.

Es por Beomgyu que llegó al límite de lo que podía soportar, pero también es por él que ha intentado sanar ese lado suyo que aborrece a los omegas. Tuvo que arruinarle la vida a un inocente para que su sistema procesara que realmente no todos los omegas son escoria y se niega a volver a cometer el mismo error, pero tampoco quiere ir al extremo de convertirse en su padre, un infiel incapaz de controlar sus impulsos sexuales.

No importa que Sunoo y él sean predestinados, no lo va a aceptar porque ama a Yeonjun y es bastante firme con sus sentimientos. Simplemente, está intentando ser lo más cuidadoso posible con el omega para no dañarlo como hizo con Beomgyu, siendo esta la principal razón por la cual apenas lo reprende por su acoso excesivo. Piensa en que en algún momento se le pasará, y tenerlo alrededor le está ayudando a aprender a convivir pacíficamente con omegas siendo un alfa, aunque sea una situación un tanto turbia.

━No estoy decepcionado ━soltó Yeonjun luego de una larga reflexión, sacándolo de sus pensamientos━. Más bien aliviado. Creía que yo te avergonzaba y por eso cambiabas de tema cada vez que te propuse invitar a tu familia para Navidad.

━¡No! Para nada ━dijo Soobin con rapidez, exaltado por las ocurrencias del mayor━. Estoy muy orgulloso de tenerte. Lo gritaría a los cuatro vientos si no fuera porque ahora mismo, mi reputación es mala. No quisiera que mis errores pasados te afectaran.

━No tienes que preocuparte por eso. A nivel legal, no se nos considera una unidad, así que nada de lo que hagas me va a afectar ━aclaró Yeonjun, acariciando el cabello mojado del tiburón con una cálida sonrisita en su rostro━. Sé que el instinto de alfa nos hace querer ser más independientes, pero puedes apoyarte en mí. Recuérdalo. No hay nada que no pueda manejar; por algo me eligieron para ser líder de una manada.

━Y eres el mejor, sin duda. No sé qué haría sin ti.

Sus palabras ocasionaron que el mayor se sintiera satisfecho. Adora ser confiable y que la gente reconozca su esfuerzo━. Por cierto, ahora que Beomgyu tiene a Taehyun, ¿crees que pueda marcarte?

La repentina pregunta hizo que Soobin alzara una ceja. ━A pesar de todo, ¿quieres hacerlo? ━había pensado que Yeonjun querría algo de distancia para procesar bien todo, así que esto estaba tomando un rumbo inesperado.

━El Soobin del que me enamoré no es el mismo Soobin del pasado, y acepté ser tu novio aun sabiendo lo ocurrido. Has demostrado a lo largo de los años que nunca fue tu intención causar tanto daño. Supongo que Beomgyu también es consciente de ello. Aunque dejó más que claro que no planea una reconciliación, está siendo demasiado bueno contigo. No voy a dejarte mientras sigas respetando a los omegas como ahora ━aclaró Yeonjun antes de apartar la mirada y juguetear con sus dedos, nervioso por lo que iba a mencionar a continuación━. Eres el único alfa al que amo seriamente y, no te voy a mentir, me está poniendo ansioso saber que lo dejaste todo. Temo que la situación pueda contigo y seas tú quien me deje a mí.

Asustado por ese pequeño malentendido que se estaba formando, Soobin inclinó la cabeza hacia un lado, dejando su cuello descubierto y lo señaló━. Adelante. Márcame.

━¿Hm? ━eso había pillado a Yeonjun muy desprevenido.

━Es lo único que puedo ofrecerte para garantizar que seguiré contigo, así que hazlo.

━¿Así, sin más? ━preguntó el mayor con un tenue rubor apareciendo en sus mejillas. Llevaba tanto tiempo queriendo marcar a Soobin que la rapidez con la que lo aceptó ahora era surrealista.

━También puedes meterte en la tina para bañarnos juntos, nos damos unas caricias y luego de marcas.

Una sonrisa se formó en los labios de Yeonjun━. Eso suena mejor ━entonces, se despojó de sus prendas y se metió en la bañera, quedando en el espacio que había entre las piernas de Soobin. Una vez allí, se permitió acomodarse al inclinar la cabeza hacia atrás, quedando totalmente apoyado en el torso y el hombro del tiburón━. Woah, necesitaba un baño relajante ━expresó luego de exhalar sonoramente, dejando que el agua caliente y los brazos de Soobin pasándole a su alrededor calmaran su sistema.

━En ese caso, me alegro de haberlo organizado. Fue bastante improvisado ━omitió mencionar que él también tenía la urgencia de una larga sesión de relax después de un día con tanta carga emocional.

En la mañana, el enfrentamiento directo con Heesung fue muy intenso. A pesar de que hubo gritos y golpes, lo catalogó rápidamente como el recuerdo de la vez que perdió la confianza y la amistad del ángel marino.

Lo ha decepcionado, y el líder tiene todo el derecho a sentirse molesto. Su esposo Jake, con quien tuvo tres niñas recientemente, es un omega que, por lo poco que sabe Soobin, ha tenido algún que otro problema en el pasado precisamente por el hecho de ser omega, lo que vuelve a Heeseung especialmente comprensivo y protector con ellos, así que la agresividad con la que reaccionó está muy fundamentada. Es por eso que Soobin aceptó los golpes y los insultos sin rechistar.

Posteriormente, la conversación con Jungwon terminó de quebrarlo, aun cuando este no le puso ni un dedo encima. El omega estaba casi tan molesto como Heeseung y, sin embargo, se mostró mucho más maduro, hablando sabiamente y brindándole consejos que no estaba seguro de merecer, pero que los tomó como si fueran el empujón que necesitaba para empezar a caminar de nuevo.

Gracias a él, Soobin pasó toda la tarde reflexionando sobre sí mismo, sobre su vida y sobre cómo ha permitido que los fantasmas de una infancia trágica lo influenciaran lo suficiente como para ser un completo imbécil incapaz de conservar sus amistades sin cagarla.

Jungwon tiene razón. Ha pasado toda su vida agachando la cabeza y llorando en silencio por todo. Por mucho que a veces finja ser fuerte, no lo es. Pero ya era hora de levantar la cabeza y seguir adelante, porque Beomgyu no quiere pisotear a alguien que ya estaba pisoteado, sino a un tipo que realmente pudiera aguantar su pisotón de su parte sin sentir que se va a romper en cualquier momento.

Toda esta situación lo ayudó a comprender un poco mejor las decisiones del castaño y por qué insistía en ocultarlo todo cuando era más beneficioso para él contarlo. Quería salvarlo de la violenta reacción que habían tenido casi todos al enterarse de lo ocurrido, porque Beomgyu siempre fue así, poniendo la seguridad de los demás por encima de la suya propia.

Ya no más. Ahora son dos tiburones ballena que nadan por distintos caminos hasta que alguna corriente los una de nuevo por cualquier motivo, pero dejó de esperar un milagro y aceptó que su amistad con Beomgyu ha muerto y no es posible revivirla.

El problema es que eso es precisamente lo que le dolía. Beomgyu estaba aprendiendo a superarlo, pero él no sabía cómo hacerlo. Aún se sentía estancado en el momento en el que llevó al omega con Heechul. La imagen de él siendo violado por un grupo de orcas y las consecuencias de todo ese suceso seguían tan presentes en su mente que le resultaba imposible dejar ese tema de lado.

━Yeonjun, amor, estaba pensando… ━habló en voz baja y con gran cautela━. Ahora que lo dejé todo, quizás yo debería… eh… ¿Ir a terapia o algo así? ━no es algo que le agrade mencionar en voz alta porque significa aceptar que tiene problemas, que los tiene, pero le resulta complicado conversar sobre salud mental.

Yeonjun se giró con sorpresa para poder verle la cara━. Eso sería un buen comienzo ━animó con una sonrisa honesta.

━Es probable que me internen ━murmuró Soobin━. Lo haré si me lo aconsejan, pero eso significa que no podré ayudarte con los temas de la manada.

━No te preocupes, ahora Beomgyu es mi asistente. El dolor emocional es más complicado de sanar, así que tómate el tiempo que necesites. Tendrás mi apoyo durante todo el proceso ━prometió Yeonjun, agradecido con este avance. Llevaba tiempo queriendo llevar a Soobin a un psicólogo porque no era normal que llorara casi todas las noches, ya fuera en sueños o despierto. Le preocupaba demasiado, pero cada vez que le proponía hacer algo por su salud mental, Soobin gruñía o evadía el tema━. Cuando te den el alta y te sientas listo para continuar, podrás volver a la manada.

━No, buscaré trabajo de limpieza o de camarero.

━Aunque suena bastante sexy eso de vestirte de camarero, ¿no deberías optar por algo relacionado con tus estudios de ayuda social?

━Yo no quería dedicarme a eso, lo estaba haciendo por ayudar a Beomgyu, pero ya tiene a Taehyun. En unos meses ha logrado lo que nadie en cuatro años ━admitió Soobin a regañadientes━. Además, intenté tomar otros casos para dedicarme a ello, pero es devastador tener que tratar con personas que han sido maltratadas, ¿sabes?

━Entiendo ━Yeonjun asiente en señal de comprensión y se vuelve a apoyar en su pecho━. Bueno, aún es pronto para hablar de ello. Estamos bien económicamente, así que tienes tiempo de sobra para experimentar hasta encontrar tu vocación. Por ahora, céntrate en mejorar, ¿sí?

Soobin giró la cabeza y depositó un sonoro beso en la sien del mayor como respuesta.

No conforme con algo tan simple, Yeonjun volvió a girarse para quedar de nuevo cara a cara y se inclinó hacia delante, tomando los labios de su pareja en un beso húmedo que se fue intensificando mientras pasaba los dedos por los grandes brazos del tiburón.

Le había dado permiso para marcarlo y, por muy cansado que estuviera, Yeonjun no iba a desaprovechar la oportunidad, así que las cosas se pusieron un poco calientes poco después.

  
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Beomgyu se encontraba de pie en la avenida en medio de la noche, luchando por no perder el equilibrio mientras su cabeza daba vueltas, lo que le hacía ver el mundo un tanto diferente de lo habitual.

Luego de la charla con Yeonjun, aclararon algunas cosas sobre su nuevo trabajo como asistente. Se dirigió al hospital para recibir un tratamiento adecuado para el brazo roto y que la herida fuera desinfectada por profesionales.

Por supuesto, no esperaba un milagro. La medicina no ha avanzado lo suficiente como para eliminar la marca sin sufrir una cantidad absurda de efectos secundarios, por lo que descartó esa idea cuando se la propusieron. Se niega a quedar hospitalizado con la incertidumbre de no saber cuáles de los 300 posibles síntomas iba a sufrir tras la eliminación artificial del lazo.

He escuchado testimonios de omegas que terminaron en silla de ruedas o incluso fallecieron debido a lo peligroso y complejo que es ese procedimiento. Además, tiene a Taehyun como su principal solución y este también se mostró reacio a que optara por esa intervención tan arriesgada. Incluso pareció ofendido de que los doctores mencionaran primero esa opción mucho antes que otras alternativas más seguras.

Por obvias razones, Beomgyu optó por una de ellas. No le importa drogarse con medicamentos a diario con tal de no sentir las consecuencias del lazo. Mejor eso a arriesgar su vida en un procedimiento poco desarrollado. Ahora cuenta con alguien que lo motiva a vivir; tiene todo un futuro a su lado que piensa planear meticulosamente para que sea perfecto, así que va a ser más cuidadoso con respecto a su salud.

Es así como, tras una extensa charla con los doctores, llegaron a una solución adecuada. Para empezar, le inyectaron una fuerte anestesia con el fin de evitar que se retorciera de dolor ante la corta intervención quirúrgica que le realizaron para quitar las pequeñas áreas infectadas de la herida en el cuello. Gracias a eso es que aun ahora que había pasado una hora desde ese momento, Beomgyu seguía sin sentir absolutamente nada relativo a la marca.

Le habían advertido de que el efecto iba a ser bastante fuerte debido a que fue inyectado justo en la glándula de feromonas, en una zona muy específica del cuello, demasiado cerca de las vértebras.

Recuerda haber escuchado al médico decir que estaría atontado por al menos unas 16 horas, pero no se esperaba esa sensación de somnolencia, mareo e embriaguez fuera tan intensa, aunque no se queja porque siente su cuerpo super ligero.

Si no podía mantener el equilibrio era porque la cabeza le daba vueltas, pero no hay nada de qué preocuparse mientras se mantenga quieto.

Lamentablemente, un par de niños revoltosos pasaron corriendo mientras gritaban no sé qué cosa de que sus madres se iban a enfadar por haberse escapado en medio de la noche. No es que chocaran con él, sino la sorpresa de ver dos cuerpecitos pasando a gran velocidad por sus ojos mientras el resto del mundo estaba algo borroso y rotatorio lo llevó a un nuevo nivel de mareo donde tuvo que sostenerse la cabeza al tener la sensación de que en cualquier momento se desprendería de su cuerpo. Sin embargo, al inclinarse hacia adelante para ello, terminó por perder el poco equilibrio que le quedaba, mas no se dio cuenta de que estaba cayendo al suelo hasta que un fuerte brazo lo rodeó por el torso antes de que se estampara.

━Cuidado ━escuchó la voz de Taehyun y lo ayudó a enderezarse para que permaneciera de pie.

━Esa inyección me dejó bien tonto ━refunfuñó el omega entre pucheros mientras volvía a luchar contra su propio equilibrio.

Taehyun no pudo evitar resoplar divertido━. Piensa que estarás durmiendo mientras se pasa el efecto. Cuando despiertes, todo volverá a la normalidad ━alentó y alzó una bolsa con el logotipo de la farmacia━. Aquí está la medicación.

━Ah, cierto… ━murmuró Beomgyu al recordar por qué estaban allí, en la avenida, frente a la única farmacia de guardia a esas horas.

La opción segura ante su lazo roto era la medicación. Le recetaron un tratamiento bastante fuerte, pero aparentemente funcional, donde tendría que tomar al menos cuatro medicamentos a diario. Uno se encarga de aliviar los escozores de la marca y debe tomar dos dosis al día, una por la mañana y otra por la noche. Otro sirve para forzar la cicatrización de la herida y evitar ese sangrado constante, pero solo es efectivo con ayuda de una crema especial que se debe aplicar directamente en el lazo roto. La única que tan solo debía consumir durante unos pocos días se trataba de un antiinflamatorio para aliviar la hinchazón que le generó el pequeño procedimiento quirúrgico de hace un rato. Y finalmente, la que más le había molestado cuando escuchó su función: el denominado anti-supresor, un medicamento a base de hormonas que tiene el efecto contrario al supresor.

Básicamente, lo va a forzar a soltar feromonas como un desquiciado y a ser más propenso a tener celos seguidos, porque es la única forma de forzar una relación más cercana con su propio animal. Como consecuencia, su cuerpo y mente, acostumbrados a vivir como alfa, se regularán para ser un omega lo más saludable posible antes de recibir la mordida de Taehyun, pues si lo mordiera en su estado actual sufriría un descontrol hormonal gravísimo. Sí, lo consultó cuando Taehyun lo dejó a solas con el doctor.

En parte, todo ese tratamiento es genial porque Beomgyu ya estaba harto de fingir y sabe que su actuación de alfa le había hecho daño en muchos sentidos. Finalmente podría corregir ese daño, ser el omega que siempre debió haber sido y ser marcado por el único alfa que tiene derecho a marcarlo. No obstante, eso de que va a tener ciclos irregulares y que probablemente llegue a sufrir hasta dos o tres celos al mes por culpa de la jodida medicación lo puso de muy mal humor.

Al menos agradece que, ante su odio por las pastillas al asociarlas directamente con drogas, su doctor fue muy amable al buscar que todos sus medicamentos sean jarabes o sobres con polvitos de sabores que debes revolver en un vaso de agua.

Aun así, eso no le impidió estar malhumorado imaginando lo cohibido que se va a sentir cuando empiece a tener más días en celo que sin él. Por fortuna, esa medicación evitaba que fueran tan intensos y dolorosos como lo fue su último celo. Aun así, ese proceso hormonal requería confinamiento para evitar conflictos con los alfas que pasaban alrededor y odiaba pensar en encerrarse ahora que finalmente tiene la oportunidad de conocer a Yeonjun correctamente y ser amigos.

Si bien el trabajo con el líder es una sanción, le ilusiona que ahora vaya a trabajar con él, pero toda esa experiencia va a estar parcialmente arruinada debido a sus circunstancias.

━¿Qué tanto piensas? ━interrumpió Taehyun con un atisbo de diversión en su tono.

━En que, a partir de ahora, voy a pasar medio mes confinado por culpa del celo ━confesó el omega, pues no le importaba ser honesto con el tiburón blanco, especialmente cuando este está al tanto de todo y expresó que lo ayudaría a manejarlo así como él le ayudó inconscientemente a controlar el salvajismo de su naturaleza de enigma.

━No tiene por qué. La base de Yeonjun es una zona segura.

━¿Cómo voy a trabajar al lado de un alfa estando en celo?

━Sabes que no lo permitiría si fuera peligroso. Los deltas no se ven influenciados por el celo de los omegas, así que es seguro estar con Yeonjun. Además, acorde a las normas de Hawaii, es estrictamente ilegal aprovecharse de un omega en celo y, como líder, no me cabe duda de que va a garantizar tu seguridad ━habló Taehyun con total firmeza y confianza depositada en Yeonjun. Si bien el joven orca ha cometido algunos errores, considera que él y Heeseung están justificados debido a la gran ignorancia que ambos tenían sobre el tema de Beomgyu. Ahora que lo saben, parecen colaborativos y dispuestos a tratarlo mejor, sobre todo con el cambio de actitud que ha tenido el omega. Así que sí, confía en ellos━. De todos modos, siempre me tendrás ahí en caso de que ocurra algo.

Si fuera el Beomgyu de hace unos meses, habría soltado el típico discurso de «soy independiente, no necesito a nadie». Y aunque en cierta parte es cierto, estaba empezando a disfrutar de apoyarse más en Taehyun, no tanto como para hacerle cargar con todo el peso de sus problemas, pero sí lo suficiente como para dejarse ayudar y sentirse más liberado sabiendo que no tenía por qué afrontar los problemas solo.

━No sé cómo te las ingenias para hacerme sentir bien con simples palabras ━murmuró con sinceridad y los ojos brillantes.

━Soy naturalmente persuasivo ━bromeó Taehyun con una amplia y divertida sonrisa que Beomgyu no pudo evitar replicar, viéndose influenciado por el agradable ambiente.

Acto seguido, acercó su mano a la bolsa que Taehyun tenía. El enigma se había ofrecido a comprarle las cosas porque las luces de la farmacia lo mareaban y no pudo permanecer mucho tiempo dentro sin chocar con absolutamente todo.

Por hoy, había terminado la labor de Taehyun. Beomgyu no quería seguir ocupando su tiempo, pues es consciente de que, por su culpa, el tiburón blanco llevaba más de un día sin pisar su hogar. Claro, entre el celo, las dos visitas al médico, la charla con Yeonjun y la improvisada cita donde se confesaron y comenzaron su noviazgo, el enigma no ha tenido ni un minuto de descanso, y Beomgyu sabe que está exhausto aunque no lo exprese y lo disimule muy bien.

Digamos que lo pilló cabeceando de sueño en uno de los asientos de la sala de espera cuando salió del breve procedimiento quirúrgico. Aunque Taehyun se había levantado repentinamente, rebosando energía por todos lados, sus ojeras, las cuales aún están presentes, lo delatan.

No importa cuán fuerte, resistente e inhumanamente veloz sea, incluso los enigmas pueden sentir cansancio y estar abatidos, así que lo dejaría marchar para que descansara.

Sin embargo, Beomgyu subestimó el efecto de la inyección. Podía hablar bien y procesaba una conversación sin problemas, pero su sistema motor parecía no estar funcionando correctamente, porque no lograba cerrar los dedos en las asas de la bolsa, por mucho que se esforzara.

Lo intentó de nuevo con la otra mano, pero solo consiguió hacer el ridículo con los dedos temblorosos. Sacudió las manos en un desesperado intento por hacer que sus articulaciones siguieran sus órdenes, pero cuando logró sostener la bolsa, la soltó sin querer y al agacharse para tomarla, cayó de rodillas.

Cansado de su esfuerzo en vano, simplemente inclinó la cabeza hacia adelante hasta apoyar la frente en la pierna del menor y murmurar: ━Esto es frustrante.

Taehyun resopló, mas no se burló de él, sino que le acarició la cabeza a modo de ánimo━. Solo será hasta mañana.

Eso no animaba al omega. Tal y como se encuentra ahora mismo, «mañana» suena a demasiado tiempo, principalmente porque está en una avenida un poquito lejos del vecindario de acogida y va a ser todo un reto llegar cuando es incapaz de llevar la bolsa y le marea estar de pie. Es probable que ni siquiera pueda abrir la puerta de su hogar porque no siente que tenga la fuerza que requiere meter la llave en las múltiples cerraduras.

Pensó en inventar una excusa para que Taehyun se fuera e ir arrastrándose hasta el vecindario y quedarse en casa de Jungwon hasta que se le pasara ese extraño efecto de la inyección. No obstante, antes de siquiera poder planear la excusa, Taehyun le colocó la bolsa entre las manos y lo cargó en brazos al estilo nupcial, dejando al castaño con un notable rubor en las mejillas.

━¿Quieres quedarte a dormir en mi casa? ━propuso el menor, pues le preocupaba dejar a Beomgyu solo en ese estado.

Por suerte, esa idea sonaba mucho mejor para el omega porque al menos así podría asegurarse de que Taehyun descansara, así que accedió con un tímido asentimiento para luego esconder su rostro en el cuello del enigma, avergonzado por la posición, pero incapaz de forcejear para liberarse de sus brazos.

El trayecto fue agradable y silencioso. Únicamente se escuchaban las pequeñas olas rompiendo en la orilla y unos pocos transeúntes que aún estaban en la calle.

Para cuando llegaron al humilde hogar de Taehyun, este se percató de que Beomgyu se había quedado dormido en sus brazos. Pensó en dejar que se bañara, darle un par de bóxers nuevos que aún estaban sin usar y prestarle uno de sus pijamas para luego sentarse los dos en el sillón a ver algún kdrama de los que a ellos les gustan hasta quedarse dormidos, pero le pareció tierno que Beomgyu adelantara todo el proceso.

No iba a despertarlo. Entiende que ha sido un día bastante ajetreado para él. Demasiadas emociones y situaciones que debió afrontar en menos de 24 horas sin un intervalo adecuado para procesarlo todo.

Ambos estaban exhaustos en ese sentido, así que dejó los medicamentos en la cocina y se dirigió directamente a la cama del altillo para dejar el cuerpecito de Beomgyu cómodamente acostado sobre ella y arroparlo con la manta, sin importarle que el omega siguiera con la misma ropa que había llevado todo el día.

Nunca ha tenido novio y es la primera vez que trae a Beomgyu a su casa por la noche estando sobrio y con su previo permiso, así que se siente un poco torpe al respecto. ¿Debería cambiarle la ropa? Pero suena muy indebido desvestir a un omega dormido en su cama y no sabe si la confianza entre ellos es lo suficientemente alta como para llegar a ese nivel.

Una de las enseñanzas de su madre es que el cuerpo de los omegas es como una obra de arte suave y frágil, que puede romperse ante el cruel tacto de las sucias manos de esos depravados que prefieren corromper el arte mucho antes que apreciarlo.

Recordar sus palabras lo llevó a mirar sus propias manos, analizando seriamente si él era considerado un corruptor o un apreciador. Ahora que era un adulto, comprendía mejor a lo que se refería. Era un mensaje donde, discretamente, le estaba haciendo romantizar el tema para que respetara a los omegas y, siendo honestos, lo consiguió. Pero era precisamente el hecho de tener ese mensaje tan incrustado en su mente que no sabía qué debería hacer en este caso.

Si le quita la ropa a Beomgyu, es para cambiarlo. No haría nada que él no quisiera ni lo tocaría indebidamente mientras está inconsciente, aunque no va a negar que probablemente su imaginación vuele un poco porque no puede evitarlo. Es natural fantasear con un contacto más íntimo y carnal con el omega al que ama. Sin embargo, se lo guarda para sus adentros porque es vulgar y de mala educación hablar de ello en voz alta cuando desconoce los límites que hay en su relación.

A pesar de sus buenas intenciones, le da miedo que el omega malinterprete sus actos.

La última vez que trajo a su casa a Beomgyu, ni siquiera eran novios todavía y tuvo que cambiarlo porque se había vomitado encima debido a la embriaguez. Pero cuando el omega despertó, estaba a la defensiva, así que no quería arriesgarse a hacerlo de nuevo por si eso ponía en peligro su relación. Al contrario que en esa ocasión, ahora sí había una afinidad importante en riesgo.

Por otro lado, ¿puede dormir junto a él o es demasiado? Aunque sean predestinados, solo llevan un día de relación, así que no estaba seguro de si el noviazgo eliminaba esa barrera o también tenía un proceso como el cortejo.

En el caso particular de Beomgyu, es un omega que desde un inicio ha mostrado una fuerte aversión a la invasión de su espacio personal. Técnicamente, esa limitación se destruyó ese mismo día con Beomgyu siendo quien tomaba la iniciativa para mantener la cercanía, mostrándose como un omega mimoso, una faceta de él que estaba empezando a adorar. Sin embargo, en su estado físicamente anestesiado, podría tener una reacción violenta al despertar, especialmente cuando se quedó dormido en el trayecto y no fue consciente del momento en que llegaron ni de cómo acabó en su cama. Seguramente sea confuso despertarse con alguien a su lado.

Es así como, eliminando el fuerte impulso de mandar todo a la mierda y simplemente acurrucarse junto a él, decidió bajar las escaleras a regañadientes y acomodarse en el sillón, dejando la tele encendida pero sin volumen para que hiciera la función de su lamparita de noche, la cual estaba al lado de la cama, mas no iba a volver a subir por ella para no interrumpir el sueño del omega.

Afortunadamente, el altillo donde se encuentra su habitación no tenía pared, sino una barandilla por la cual podía ver todo su hogar desde lo alto. Aunque desde abajo no lograba ver absolutamente nada, es gracias al espacio abierto que sí percibe tanto el aroma de Beomgyu como su respiración. Suficiente para hacerle cerrar los ojos e ir adormeciéndose poco a poco, gustoso por la presencia del omega en su hogar.

No sabía en qué momento se había quedado dormido ni cuánto tiempo había pasado desde entonces, pero se despertó medio sobresaltado al escuchar un golpe y se encontró con Beomgyu de rodillas en el borde de la alfombra. Probablemente, se tropezó con ella, pero su expresión adormilada y porte cansado le daban a entender que no le importaba, algo que demostró al gatear hasta quedar frente al sillón.

Se quedó allí, observando a Taehyun con una expresión indescifrable debido al cansancio. La tenue luz de la televisión iluminaba un lado de su rostro, haciendo que sus suaves facciones se marcaran con un contraste de sombras que lo hacía ver como esa obra de arte que la madre de Taehyun mencionaba en sus metáforas sobre los omegas. Pero cada día que pasaba, Taehyun solo confirmaba que quizás no era tan metáfora como creía. Los omegas son naturalmente hermosos, y Beomgyu era el que más.

━¿Hyung? ━preguntó en voz baja y algo ronca al ver que este no se movía━. Es peligroso que bajes las escaleras en tu estado.

━Perdón ━murmuró el omega con la voz igual de ronca━. Quería dormir contigo…

Entonces, Taehyun esbozó una leve sonrisita. Con esas palabras, le acababa de brindar una respuesta definitiva a una de sus múltiples dudas. Por lo que, utilizando la poca energía que le quedaba, se levantó del sillón y volvió a cargar a Beomgyu entre sus brazos. Esta vez, se encontraba lo suficientemente adormilado como para avergonzarse, así que simplemente pasó los brazos alrededor de su cuello mientras el enigma subía al altillo para luego hacer que ambos cayeran en la cama.

El menor se acurrucó junto al omega tal y como quería y ronroneó gustoso cuando sus fosas nasales se vieron invadidas por ese agradable aroma a mango. Beomgyu hizo lo mismo, pegándose lo más que pudo hasta enterrar la nariz en el cuello del enigma y dejarse dormir mientras disfrutaba del olor a lluvia.