[Arriba hay una música para ambientar la lectura]

El lugar fue hecho para muchas personas, incluso más adelante se encontró con jaulas que estaban enumeradas junto a una letra del alfabeto. Todo estaba sucio y empolvado, el corredor apenas era iluminado por unas lámparas incandescentes.

—No deberías estar aquí —Dijo la voz detrás de ella, causando un sobresalto en la pelinegra, volteó a ver a Tydar que ahora estaba más calmado, sin su abrigo y usando una camisa roja de mangas largas.

—Me dio curiosidad —Se encogió de hombros.

—La curiosidad mató al gato —Dijo la famosa frase y se acercó a uno de los casilleros.

—Me impresiona que ninguno se haya perdido en este lugar —Expresó—. Hay muchos pasillos y habitaciones que se ven iguales...

—Tengo mucho tiempo libre, además tengo un mapa que te enseña todos los pasillos.

— ¿No sabes si alguien más estuvo aquí? Se nota que muchos trabajaron en este lugar.

—Estaba un hombre que trabajaba aquí, nunca supe que fue lo que sucedió en esta pocilga, debió ser tan malo que hizo que huyera y quemara todos los documentos...

—Espera, ¿No hay algún documento intacto? Tiene que haber otro.

—Sí, pero no tiene ninguna pista —Abrió el casillero y le entregó un diario viejo—. Algunas páginas fueron arrancadas, supongo que esas contenían información —Suspiró.

—Hay algunos esquemas de las partes del cráneo de una persona —Mencionó, señaló el esquema que había visto anteriormente. Tydar se acercó, no parecía ser la primera vez que lo vió.

—Lo único que logré deducir de todo, es que antes se había hecho un experimento que tenía que ver con la mente humana —Contó, luego abrió una de las jaulas y se sentó en la cama de esta—. Y ya hicieron pruebas con personas...

Tsuki ojeó el diario buscando alguna cosa que confirmara lo que Tydar estaba diciendo.

— ¿Por qué piensas que tenía que ver con la mente humana? —Cerró el diario y volvió a fijarse en el esquema.

—Hay más esquemas como ese, y en la habitación del fondo encontrarás una camilla y muchas fotografías de la actividad cerebral de una persona —Respondió, con la mirada clavada en el piso, pensando que es lo que querían lograr con aquel experimento—. Debemos volver —Se levantó y ella lo siguió hasta la superficie, no se había dado cuenta del tiempo que pasó.

— ¿Cuántas horas estuve merodeando el lugar? —Preguntó.

—Dos horas desde el almuerzo, ¿No tienes ningún reloj o algo? —Respondió, todavía estaba nublado, los niños salieron a jugar, Twil y los demás no estaban allí, solo Rage.

—A pesar de la aterradora historia del lugar, ¿Por qué decidiste traerlos aquí a todos? —Preguntó, empezaron a caer algunas escarchas.

— ¡Niños todos adentro! Otra vez... —exclamó Rage e hicieron caso a pesar de que no les gustó la idea de volver adentro.

—Este lugar se encuentra lejos de todo, de las personas... —Respondió mientras bajaban las escaleras—. Cada año hay más inestables, y entre nosotros hay diez y siete. Es seguro para todos mientras aprenden a controlarse, igual cuando tienen control total nos quedamos, a veces es mejor ocultarse por el bien de los demás.

—Tampoco es bueno hacerlo Tydar —Dijo, se quedaron en la sala de estar junto con los demás niños—. Yo intenté eso, y solo lo empeoras... —Rage comenzó a prestar atención a lo que ella decía—. El poder de los clanes es inmenso, los nueve representamos a nueve elementos. Este poder empieza por la mente; en mi caso, cuando apenas nacieron mis poderes, estaba tan pensativa que en cierto punto sentí como las pequeñas moléculas en el aire se congelaban formando un cuerpo frío y sólido, cuando abrí mis ojos había un copo de nieve que poco a poco descendió. Me emocioné y les enseñé a mis padres lo que podía hacer, hasta que surgió la pregunta: ¿Se congelará todo cuando me enoje? Miles de ideas de lo que podía pasar, causó una inmensa ansiedad en mí, que me ahogaba... Entonces fue cuando me di cuenta de que todo se estaba congelando, lo que yo sentía me desconcentraba y no tenía el control sobre mí poder —Recordó aquel día.

Recuerda que en la noche se encerró en su habitación con el temor de que se vuelva a descontrolar y su familia salga herida, recordó, que al intentar escapar de su casa ese sentimiento se desvanecía, pero cada vez que trataba de reactivar sus poderes y volver a su hogar, volvía a salirse de control. Su familia fue quién la había ayudado a salir de aquel agujero oscuro en el que estaba, eran las emociones que controlaban su concentración y poder, y al sufrir de ansiedad mientras que trataba de usar sus poderes perdía toda concentración y no podía evitarlo.

En los clanes un inestable era un peligro para la sociedad, esta también era una de las razones por las que tenían miedo de los Eoduun.

—A ti y a tu amiguito de segunda clase con sólo ponerles guantes de cuero ya los tienen domados —Espetó, ella frunció el ceño por la manera en que lo dijo—. A nosotros no, ni un bozal nos puede parar —Se levantó y se dirigió a su habitación.

—Deja que se vaya —Sugirió Rage, mientras se recostaba en el sofá—. Él era un inestable —Reveló. Tsuki se sorprendió, eso justificaba algunas cosas, él quiso alejarse de todos para no lastimar a nadie—. Tydar creció en las cavernas aleluya, investigué mucho y me enteré que tenía una madre, pero un día tuvo tanta hambre y su madre su había cortado con un cuchillo mientras cocinaba..., reaccionó muy tarde y ella estaba perdiendo mucha sangre.

—N-no lo sabía —La historia la dejó algo perturbada, pero no podía dejar de pensar en cómo debió sentirse Tydar todos estos años.

—Él cree que el experimento que se había hecho en este lugar, era quizás un modo de conseguir que los inestables no pierdan el control; pues en una celda, encontrarás rastros de fuego y en otra, vegetación, a pesar de que ese lugar está bastante aislado que el hormigón no permitía que ni una sola hierva crezca —Los niños también comenzaron a prestar atención—. Cuando va a las ciudades a ver los que se han ido de aquí, también busca a aquel hombre que cuando escapó fue al pueblo y luego de quedarse unos días se fue, pero la gente sabía a donde iría, desde entonces Tydar lo está buscando.

—Por más que sea una gran idea tardará mucho en encontrarlo, ya debió haberse ido o algo peor —Supuso, si este lugar realmente buscaba la cura para un inestable, no tendría que haber celdas.

—Deberías descansar, mañana partiremos temprano y el pulgoso ya está en tu habitación —Mencionó refiriéndose al lobo, se levantó del sofá dejándola con los niños quienes ahora estaban jugando a las escondidas.

No había visto al lobo en todo el día, el animal tenía algo extraño, como el búho la siguió y como el ave tenía ojos verdes. Comenzaba a preguntarse qué era lo que la había estado acompañando. Pensaba:

"Si era un miembro del clan Kemono como Tydar y los demás decían podría tratarse de Kendra, no, no era ella, Kendra ni se enteró que su hermano esta... ¿Y si Shigo sobrevivió? Siempre me ha protegido; sin embargo, es imposible salir ileso de una caída de varios metros mientras todo se derrumba. Debo deshacerme del animal, si es un traidor la misión estará condenada." Abrió la puerta de su habitación, el animal que estaba durmiendo despertó al escuchar que entró.

Pensó en probar algo, se quitó el brazalete que Shigo le había regalado y lo colocó sobre la cama, salió de allí encontrándose con Tydar en el pasillo.

—Oye tus amigo vinieron a buscarte —Mencionó, esbozando una sonrisa de ironía.

— ¡¿Cómo?! —Rápidamente fue a la superficie junto a él.

Noah y Kori estaban envueltos en los tentáculos de Noctus, ambos estaban forcejeando para liberarse, los niños estaban allí riéndose de ellos. Ivar estando transformado jugaba con ellos, fingía que trataba de morderlos mientras ellos lo esquivaban y golpeaban.

— ¡Noctus déjalos ir, por favor! —Pidió, las risas pararon y todos miraron a la pelinegra.

— ¡Tsuki! —Exclamaron al unísono antes de que Noctus le cubriera la boca con los tentáculos.

—Sabes, casualmente Ivar los escuchó hablando sobre un tema interesante —Decía Tydar mientras se trasformaba y se acercaba a los dos—. ¿Bradley es un traidor? —Era la primera vez que lo escuchó hablar estando así, su voz era grave y algo distorsionada, estaba furioso y se notaba.

— ¿Qué?... —Susurró, se quedó congelada y con la mente en blanco al escucharlo. Era imposible, algo estúpido de creer para ella. Noah mordió el tentáculo de Noctus para liberarse y exclamó:

— ¡Solo es una suposición!

—Pero se escuchaban muy seguros de lo que decían —Mencionó Ivar, se acercó a Noah.

— ¿Es verdad? —Preguntó Tsuki saliendo del trance.

— ¡No lo sabemos, Kageshi lo sospecha! —Respondió.

—Tydar por favor, deja que hablen —Él lo pensó por un momento y aceptó, Noctus los dejó caer al suelo. Kori se levantó rápidamente a comprobar que Tsuki no tenga heridas—. Estoy bien —Afirmó. Los dos procedieron a contar lo que Kageshi había dicho.

Todos los Eoduun mayores comenzaron a reír escandalosamente, incluyendo a Tydar quien había vuelto a su forma humana.

—Bradley no traicionaría a Rujarquia, debe estar confundido por lo de... Hogomi —Insistió, ella confía plenamente en Bradley.

—Pensé lo mismo —Confesó Noah.

—Pero no voy a descartar la idea de que hay un traidor entre los altos mandos y que podría estar entre los generales y Capitanes —Añadió, los demás ahora dudaban más acerca de ir con Tsuki.

—Teniendo en cuenta lo que acaba de pasar, creo que sería mejor armar un plan —Propuso Tydar, todos se acercaron para escucharlo—. Debe haber más de un traidor y si nos ven, informarán a Kaleb que los estamos ayudando.

—Tengo una idea, Bradley debe haber notado que ustedes dos no están —Refiriéndose a Kori y Noah.

Rebecca estaba preocupada por su mejor amiga después de haber escuchado las suposiciones de Kageshi, los dos estaban con Bradley dentro de una especie de cueva, tenía distintas cavidades, no soltaron los rifles en ningún momento. La entrada al lugar era un agujero enorme situado a veinte metros de donde fue el derrumbe del acantilado, traían algunas linternas, el lugar fue obra de las nuevas bestias que aparecieron, Ivanova los llamó Taiga—Topo, por la descripción que la mayoría dio sobre ellos.

— ¿Sabrían reconocer alguna señal que sus compañeros dejarían si se perdieran? —Preguntó el General sin despegar la vista del camino, a lo que Rebecca responde:

—Claro. Tsuki, Kori y Miraiki dejan cristales de hielo pequeños —Kageshi la miró con sorpresa.

— ¿Qué hay de Shigo?

—Deja flores anaranjadas —Antes de continuar, sin que el General se diera, Kageshi la detiene.

— ¿Por qué le contaste sobre eso? —Susurró.

—Kageshi confío en él, ¿Por qué habría ido a buscar a Tsuki y Kai al castillo antiguo si era un traidor? —Cuestionó, Kageshi no respondió.

—No se queden atrás —dijo el General, quien ya estaba bastante adelantado.

Rebecca se adelantó para alcanzar al General. Estuvieron caminando por un largo rato, los agujeros generaban en Bec una sensación de mareo, tantos patrones en las paredes, casi se desmaya, Bradley reaccionó antes y la sujetó, Kageshi se acercó a ella.

— ¡¿Bec, estas bien?!

—Si... —Se tambaleó un poco—. ¿Cuánto falta?

—Solo unos metros más —Respondió el General, continuaron caminando mientras que Bradley sostuvo a Rebecca a lo largo del camino, Kageshi se mantuvo detrás de ella en caso de que caiga.

Apresuraron el paso al ver luz a lo lejos. Un agujero que daba al barranco.

—Kageshi, sujétala —Kageshi sostuvo a Bec, el General se asomó por el agujero.

Sin dudas estaban en el mismo lugar donde Shigo había caído, volteó, detrás de ellos había otro agujero, este lugar ya estaba así y cada camino fue cuidadosamente planeado. En el suelo, había pequeñas hojas, siguió cada una de esas y a pocos centímetros había una flor naranja.

—No quiero adelantar conclusiones, pero puede que Shigo siga vivo —Confesó, los dos sorprendidos no supieron que decir.

De vuelta en el aviario, Kori y Noah siguieron a Tsuki a aquella parte donde se había practicado los experimentos.

—No creo que este sea el único lugar —Supuso Noah—. Debe haber más...

— ¿Cómo es que casi nadie sabe de este lugar? —Preguntó Kori.

—Debieron mantenerlo en secreto, no creo que aquí hallan hecho cosas buenas, algunas cosas parecen más viejas —Mencionó la pelinegra, sacó un diario que estaba muy maltratado y solo se podía distinguir algunas letras—. Puede que este lugar esté aquí desde hace mucho... —Entrecerró los ojos y observó la el año en el diario—. 1884.

—Es demasiado tiempo para que este lugar siga en pie —Murmuró Noah.

—Quizás hicieron algunos mantenimientos —Supuso el otro.

Algunas cosas del diario eran visibles como: aguja, líquido, flor, mente, sujeto, fuego, entre otras. A parte de la antigüedad, tenía manchas visibles de café, algunas páginas parecían haber sido mojadas, el resto del diario estaba empolvado y roto. Buscaron otras cosas que podrían dar algún indicio de todo, pero no tuvieron éxito. Las únicas cosas que habían encontrado eran la portada de un periódico, una vieja computadora y una carta.

El periódico tenía en su portada una noticia del 30 de octubre de 2023, titulada "Rey del egoísmo", en ella la imagen del Rey Einar II, hace 5 años él había tratado de negociar con Kaleb para que no lo mate, no era la primera vez, pues en ese 2023 no sólo iba a entregar a los clanes, sino también iba a aliarse a él y Rujarquia iba a pasar a ser una isla del territorio Norcraniano. La mayoría estuvo en contra, ¿Cómo iban a entregar a unas personas a su misma muerte? En aquellos años la mayoría en el ejército eran miembros de los clanes, la rebelión militar causó la desvinculación de la realeza del ejército militar. En la única cosa que si podían intervenir los guardias reales era en la enseñanza de las academias militares y que si algún padre trataba de llevarse a su hijo sin el consentimiento de este irían a buscarlo de su propia casa. No parecía tener ninguna relación con todo el lugar, pero al dorso, se podía leer algunas notas que estaban en otro idioma, el de Alaquía y sólo una persona en el grupo hablaba ese idioma, Tiago. Tsuki guardó el periódico en su bolsillo para enseñárselo al volver.

La vieja computadora no encendía. En Rujarquia no lograron tanto avanzar en tecnología, debido a los problemas de la guerra, casi nadie tenía un teléfono celular, de hecho algunos ni siquiera sabían que era eso, los impuestos eran alto y lo usaban para crear armas y bombas, desde que la realeza se desvinculo el pueblo se encargó de pagar la compra de armas y materiales.

La carta también estaba en el mismo idioma que las notas detrás del periódico, pero el año en el que fue redactado si era entendible, 2024, un año después.

—Tiago puede decirnos que significa —Murmuró la pelinegra.

—Partiremos en unos minutos —Se escuchó detrás de la puerta.

— ¿Tsuki, confías en ellos? —Preguntó Kori, Noah observó atentamente su expresión, buscando en ella alguna desconfianza.

—Si —Respondió con firmeza—. Tydar demostró ser confiable.

— ¿Y si no es así? —Cuestionó Noah, ambos confiaban plenamente en Tsuki, encontrar en ella una pequeña señal de desconfianza era imposible, de alguna manera la suerte de confiar en las personas correctas.

—Si no es así, él habría muerto —Dijo y se retiró sin decir más.

Fueron por un camino distinto, más seguro en palabras de Tydar, ya que por el principal hay encuentros indeseables. Kori había estado contando todas las veces que se acercaron a un animal peligroso y este se alejaba de ellos, también recuerda que los niños reían ante la acción de los animales, probablemente esas bestias sabían lo que les pasaría si se acercaban unos metros.

Tydar iba al frente cargando con un niño, los demás lo seguían en fila, pasando por donde el pasaba, ya que la nieve en la montaña era espesa sería difícil para los niños pasar, solo cinco niños eran muy jóvenes, estos eran cargados por cinco de los grandes, de ese modo bajar sería más cómodo para los pequeños.

El lobo caminaba junto a Tsuki, cuando notó su presencia recordó lo que había sucedido.

Ella fue a su habitación a recoger sus armas, estaba por salir cuando el lobo se le acerca y le entrega el brazalete. Confundida toma en sus manos el objeto, ahora todo estaba más claro.

Shigo le había contado hace unos pocos años que podía controlar y ver a través de los animales y que eso de la metamorfosis solo era una exageración de las personas, los miembros del clan Kemono no pueden convertirse en animales. Los únicos capaces de cambiar su forma a voluntad, siempre fueron los del clan de la oscuridad. Esto significaba, que Shigo sigue vivo y está en alguna parte, o tal vez no y el lobo junto con el búho solo seguían las últimas órdenes que él les había dado.

Miraiki estaba en la entrada del cuartel esperando alguna señal de su prima, hermano y compañero, habían pasado horas desde que no se sabe sobre ellos, el funeral de los capitanes sería mañana. Kageshi se encontraba en la morgue junto a su madre y hermana, querían ver a Hogomi por última vez antes de que su cuerpo sea llevado a la cámara de cremación.

— ¿Todavía nada? —Preguntó Bec a Miraiki, ella niega.

—E-espero que estén bien y lleguen a-antes del funeral —Murmuró, con su mirada triste que siempre la caracterizó—. S-sé que Tsuki también quiere d-despedirse de Hogomi...

Entonces la morena recordó lo de Shigo, pero no se lo dijo, como Bradley no quería adelantar conclusiones. Bradley envió a Rebecca y Kageshi de vuelta al cuartel y con un escuadrón irían a buscar a Shigo, o al menos una señal de él, siguiendo las flores. No se dio cuenta de que Miraiki estaba hablándole estando tan metida en sus pensamientos.

— ¿R-Rebecca? —La morena se dió cuenta y se disculpó—. H-has estado muy p-pensativa desde que volvieron, d-díganme que pasó —Pidió amablemente

—No pasó nada, solo estaba pensando en Shigo, en Hogomi y toda esta situación —Dijo—. Fue nuestra primera semana y ya perdimos dos... —Cubrió su rostro con ambas manos y dio un gran suspiro, las lágrimas no tardaron en salir.

—Oigan, será mejor que entren —Ordenó una voz detrás de ellas.

—Ya v-vamos —Dijo Bec.

Siguieron al rubio, solo un poco atrasadas.

—Sabes, él dijo que conoce a Tsuki, pero jamás lo vi —Mencionó Bec.

—Quizás es un a-amigo suyo de hace años —Dijo.

—Puede ser...

—Chicas —Las llamó Tiago, quien venía detrás de ellas—. Kori dijo que están por llegar —Avisó, ambas sonrieron.

—Alguien debe esperarlos en la entrada entonces —Dijo Bec.

—No, ellos no entrarán por ahí, quieren que esperemos en el sótano —El rubio se fue para avisar a los demás.

— ¿Y qué hay de Bradley? Hay que avisar que están llegando.

—Mejor esperemos a los demás y después le avisamos —Sugirió y fueron a las escaleras más cercanas al sótano.

El sótano tenía diez entradas y tres salidas, una de las cuales iba hacia el bosque, esto era una precaución en caso de un ataque. Estando abajo se ve un salón enorme que podría albergar a 200 personas; aunque por ahora estaba un poco llena de cajas con municiones, piezas de armas, chalecos antibalas, granadas de gas, entre otras cosas.

Los tres tuvieron que usar linternas que había allí, ya que las luces no funcionaban muy bien, por lo que Kori le había dicho, tuvieron que ir hasta el fondo del salón, donde se encuentra una trampilla que conectaba la habitación de abajo con el salón, después de la habitación hay un pasillo que va al bosque, con una puerta redonda con varillas de hierro simulando ser un sistema de drenaje, el cual está casi oculto por la espesura del bosque y los musgos.

Platicaron de cosas triviales hasta que Miraiki se quedó dormida, Rebecca estaba a punto de quedar igual, no durmieron desde hace horas y horas, se han mantenido despiertos todo el tiempo buscando indicios de Shigo y algún otro sobreviviente. Ella hablaba con Tiago para mantenerse despierta cuando Tsuki volviera.

— ¿Seguro que estás bien? No hemos dormido ni comido bien desde hace horas —Preguntó Bec, pues su acompañante se veía pálido.

—Sí, no te preocupes —Sonrió, escucharon que alguien se acercaba.

Aranen y Yue Fei fueron los primeros en presentarse en el sótano, los demás aún estaban algo ocupados.

— ¿Nada? —Preguntó Aranen.

—No, aún nada —Respondió Bec algo desanimada.

—Estoy seguro que vendrán enseguida —Dijo Tiago—. ¿Dónde está Kageshi?

—Está con Alicia y el rubio —Respondió—. ¿Por qué?

—Recuerden que Tsuki iba a traer a un Eoduun.

—Es verdad, Miraiki podría intervenir, es la única que puede domarlo —Soltó una risita, a lo que ellos también rieron.

—Puedo escucharlos... —Murmuró Miraiki, despertando con las mejillas coloradas.

—Saben... —Fue interrumpido por el sonido de la puerta de madera ubicada en la habitación de abajo, se abrió.

Aranen despertó a Mira y en silencio se acercaron a la trampilla, se escuchaban pasos seguidos por una voz gruesa y otra que reconocieron.

— ¿Noah, están ahí? —Preguntó Tiago.

— ¿Y de quién crees que es la voz? —Preguntó el mencionado irritado como siempre.

—Definitivamente es él —Confirmó Aranen.

Abrieron la trampilla y encendieron sus linternas, se llevaron la sorpresa al ver tantos Eoduun, todos estaban transformados, Tiago dejó caer la linterna de la impresión mientras que Aranen los miraba boquiabierta.

—Tranquilos todo está bien -Dijo Tsuki para calmarlos un poco.

Uno a uno subió las escaleras, los niños fueron primero y Tsuki, Twil junto a dos chicas adolescentes subieron después; por último los chicos. Bec apenas vió a su mejor amiga la abrazó, Miraiki hizo lo mismo con su hermano. Se separaron del abrazo y Tsuki le entregó la carta y el periódico a Tiago.

—Tiene algo escrito en Alaco —Dijo, él revisó primero el periódico.

Todos lo miraban atentamente, hasta que escucharon la voz de una persona que Tsuki reconoció.

—Vaya, vaya, ha pasado tiempo Tsuki —Era Kai, no había cambiado mucho pero sí se le notaba más maduro.

— ¿Qué haces aquí? —Cuestionó.

—El general Bradley me llamó —Respondió, luego voltearon hacia Tiago...

Se estaba desvaneciendo, Bec lo atrapó antes de que cayera al suelo.

— ¡TIAGO! —Exclamó.

— ¡Hay que llevarlo en la enfermería! —Dijo Kori.

Tydar volvió a la normalidad y cargó a Tiago como si fuera un saco de patatas, Bec le dijo que lo siga.

— ¿Qué le sucedió? —Preguntó Twil.

—Tiago ti—tiene problemas de la presión —Dijo Miraiki.

—No durmió en mucho tiempo ni comió bien —Añadió Noah.

— ¡¿Oigan que hay de Tydar?!¡Van a verlo! —Exclamó Ivar.

Tsuki fue rápidamente detrás de ellos y dijo a los chicos que se quedaran allí hasta que vuelvan. Llegó a la enfermería y vió que Tiago ya estaba en la camilla con un suero y Tydar usaba la capa de Rebecca, era tan alto que esta apenas le cubría hasta las rodillas.

Nadie lo vió gracias a que la capucha le cubría la cara.

— ¿Cómo se encuentra? —Preguntó por Tiago.

—Se le bajó la presión, pero va a estar bien —Respondió Bec—. No podían ver a Tydar así que le di mi capa.

—Olvidé mi capucha en el aviario —Dijo Tydar.

— ¿Cómo has estado? —Preguntó Bec a Tsuki, mientras la morena le acariciaba la frente a Tiago.

—Bien, ellos me recibieron con "calidez" —Resaltó la última palabra a lo que Tydar soltó una risa.

—Eso espero —Espetó Bec, mirando mal al otro.

—Al principio tuvimos un buen comienzo, agradece que no dejé a los demás que te torturaran más tiempo —Dijo Tydar, con una sonrisa de lado.

— ¡Uy! Casi lo olvido, Kageshi está esperándote en... ya sabes... —Dijo Bec.

—Entiendo —Tsuki se retiró del lugar y fue a la morgue.

Estando a unos metros de la puerta podía escuchar los llantos de las familias. Nuevamente agradecía de que su padre estaba a salvo, pero se sentía muy mal por todas esas personas y por Kageshi, al entrar fue junto a él. Abrazó a Kageshi y este le devolvió el gesto, ella dejó que sus lágrimas cayeran lentamente.

Hogomi siempre fue como un hermano mayor para ella y los demás, él siempre los protegió y ayudó en lo que necesitaran, nunca lastimó a nadie que no fuese un enemigo, siempre se mostraba amable incluso con nuevos reclutas para que estuviesen cómodos.

Horas después, los cuerpos fueron incinerados, los militares estaban en filas, los 21 cañonazos fueron escuchados. Acordaron con los familiares que las cenizas de los capitanes serían llevados al Panteón de los Grandes, cada urna tenía una cinta alrededor del cuello con los colores blanco y azul; el blanco simbolizaba la paz y descanso eterno y el azul la libertad, también se habían incrustado las placas militares de cada uno para que supieran quienes fueron los diez capitanes de la élite que dieron lo mejor de sí mismos en batalla y se sacrificaron por su reino.

Bradley estaba de regreso con su escuadrón desde minutos antes del funeral, cuando este terminó fue con Tsuki para que lo reuniera con Tydar y el resto de Eoduun.

En cuando Bradley apareció solo estaban los mayores, los niños fueron escondidos en la habitación debajo de la trampilla.

—Hace tiempo que quería hablar contigo —Dijo Bradley, ya sabía cuál de todos eran.

—No sé más que ustedes, así que no creo ser de utilidad —Fue al grano.

—Solo quiero que me cuentes lo poco que sabes, además si quieren unirse al ejército, los niños que tienen allí abajo estarán a salvo —Señaló la trampilla, tomando a todos por sorpresa.

— ¿Cómo...? —Murmuró Tsuki siendo interrumpida por el General.

—Desde hace años los estuvimos vigilando, no es una amenaza, sino una invitación.

—Tydar no podemos confiar en él —Murmuró Rage, seguido de Ivar y Noctus.

—Ni siquiera ellos confían.

— ¿Qué decides? —Tydar mantenía la mirada fija en el hombre frente a él, pensando en su decisión.

—Bien —Dijo, a lo que los antes mencionados fruncieron el ceño—. Yo me uniré, ustedes pueden volver si quieren.

—Tydar...

—Pero, no te confiaré a los niños —Espetó.

—Entiendo, conozco a una persona en la que puedes confiar —Dijo Bradley.

— ¿Quién es? —Preguntó Tsuki, Bradley sin dejar de mirar a Tydar respondió:

—Es de la realeza, dirige varios orfanatos de Rujarquia y les aseguro que ella cuidará bien de los niños...

—Si usted confía en ella, entonces estoy dispuesto a dejar a los niños bajo su cuidado —Dijo Tydar.

—No me diga que es Lady Atalaya de Furui, ella está casada con Gunter, usted dijo que él ni nadie más puede enterarse —Mencionó Tsuki, a lo que Bradley respondió tan calmado:

—No es necesario que ella sepa de dónde vienen y quienes son —Dijo—. Ella se encargará de los niños.

Rage suspiró e Ivar bufó.

—Yo también me uniré —Dijo Twil.

—Es peligroso... —Murmuró Rage.

—Puedo cuidarme sola, ¿Qué es lo que haremos?

—Imagino que pasaremos por un entrenamiento militar —Supuso Tydar.

—Así es, solo por unas semanas, traten de aprender lo más que puedan —Respondió el General.

—Nosotros también nos uniremos -Dijo Rage, el resto no había dicho nada pero cómo Rage habló no tenían de otra que acceder.

-Perfecto, pueden venir conmigo -Noctus sacó a los niños y siguieron al General y a Tsuki por uno de los pasadizos del sótano, el cual los llevaba a la oficina de Bradley.

Ahí se encontraba un soldado que llevaba esperándolos mucho tiempo, quién le indicó a Tydar y a los demás que lo acompañen. Los niños se quedaron en la pequeña sala de estar, quietos sin mover un solo dedo, pues Ivar tenía la costumbre de amenazarlos y les decía que si no se comportaban, él los castigaría, siempre les decía eso con un tono de voz siniestro.

-Tsuki, ¿No averiguaste algo? -Preguntó el General.

-Nada sobre Kaleb, pero resulta ser que el aviario era un laboratorio dónde experimentaban con personas -Dijo y buscó en su bolsillo-. Encontramos esto en el lugar, la carta y la nota detrás del periódico están escritas en Alaco -Mencionó y le mostró, este lo tomó en sus manos y revisó cada una, también el diario.

-La Maestra Ivanovna conoce el idioma, ella puede traducir lo que está escrito -Dijo y le entregó las cosas-. Está en el Patio, estaré con ustedes cuando Atalaya llegue.

- ¿Ella está en Ketsurein?

-Vino aquí en nombre del Rey, estuvo en el funeral junto a Gunter.

-Entiendo -Hizo una reverencia y se retiró del lugar.

Ágata estaba sentada en uno de los bancos, habían pasado años desde que perdió a su querida sobrina, se lamenta mucho y para rematar ahora perdió al hijo de su mejor amiga, a quién prometió que cuidaría, sus pensamientos fueron interrumpidos por los pasos de Tsuki acercándose.

-Tsuki -Murmuró.

-Lamento interrumpirla, Maestra.

-No tienes que disculparte, han pasado horas y no encuentran a Shigo... -Volvió a bajar la mirada.

- ¿Qué relación tenía con usted? -Preguntó con algo de curiosidad, a veces ella actuaba como una madre para él.

-Soy su madrina -Respondió, le señaló a Tsuki que se sentara junto a ella-, cuando su madre murió su padre casi no estuvo presente en su vida, Shigo y Kendra estaban solos, el líder sufría en silencio, para demostrarles que esa pérdida no lo iba a afectar o algo así fue lo que me dijo. Sin embargo, solo hizo que Shigo lo odie por no estar junto a él en ese momento difícil, cada vez que tenía tiempo iba a Zìrán para estar con ellos, cuidarlos. Ahora estoy muy preocupada.

-Sé que él sigue vivo, Shigo es muy fuerte.

-Lo sé, tú has estado con él, tienen una gran amistad -Dijo y esbozó una pequeña sonrisa-. Pensé que ya sabías que era su madrina.

-Las chicas estábamos separadas de los hombres, solo podíamos estar juntos en el almuerzo y en las clases que teníamos con usted; aunque en el almuerzo también nos dividían -Mencionó.

-Comprendo.

-Ah, el general me dijo que usted podría leer esto -Le entrego los papeles, ella revisó primero la carta.

Se escucharon otros pasos, pertenecían a Bradley.

- ¿Has leído la carta? -Preguntó a Ágata.

-Está en eso -Respondió Tsuki.

A medida que leía la carta, Bradley notó como su expresión cambiaba de a poco, parecía confundida y sorprendida, cuando pasó a la siguiente hoja, parecía perturbada.

- ¿Q-qué es lo que dice la carta? -Preguntó Tsuki, quién también lo notó.

Pasó de nuevo a la primera carta y con un poco de dificultad comenzó a leerla.

-E-estimado Doctor Timoteo Pinel. Los pacientes han demostrado una excelente evolución después de recibir la quinta dosis del líquido Tenso, el proceso fue doloroso para ellos, debido a constantes dolores de cabeza, sin embargo al hacerles algunos estudios descubrimos que el líquido estaba haciendo efecto y las neuronas se volvían activas, incluso adquirían un nuevo color según se notaba en las máquinas.

Hicimos otras pruebas, de acuerdo con lo poco que pudimos rescatar del diario, el cambio debía ser compatible con el sujeto, de no ser así, podría ser inestable, dos de los que analizamos, tenían un inmenso potencial que lastimosamente no era compatible con ellos, uno terminó siendo quemado y el otro, tuvo suerte.

Su nivel de compatibilidad era de 50 y 50, era capaz de soportar toda esa habilidad, si se tratara de un esquizofrénico, sería el equivalente a una persona capaz de controlar las voces de su cabeza, a pesar ser muchas, una comparación algo absurda, pero solo quería darle una idea. Hace miles de años esos "clanes" se presentaron como guardianes para Rujarquia, dándole la espalda sus creadores, no saben de lo que son capaces, estuve investigando y hay más inestables en los clanes que antes, la gente trata de tapar eso con un supuesto bloqueo que los padres hacen a sus hijos para que no tengan miedo, pero lo único que hacen es iluminarles la frente y le enseñan al niño a controlarse para que el supuesto bloqueo no falle. Estos son los que hemos recreado y no:

La Criokinesis, la habilidad mental de disminuir la temperatura de toda materia, no pudimos recrearla, esa parte no estaba completa en el diario.

La Piroquinesis, la habilidad de aumentar la temperatura, pudimos recrearla, hay cuatro ahora, no será suficiente para Kaleb, pero haremos más.

La Cloroquinesis: habilidad de manipular plantas, mezclada con la Zookinesis: habilidad de manipular o convocar animales, tampoco pudimos recrear eso, pero si tenemos a uno con la Cloroquinesis.

Hidroquinesis: manipulación del agua. Tampoco, no contamos con el espécimen necesario.

Geoquinesis: control sobre la tierra. Lo hemos logrado, tenemos a cuatro también.

Aeroquinesis: control del viento. Tampoco, pues necesita de cierto líquido especial que sólo se encuentra en la flor Fasid, la cual solo crece cerca de volcanes, en Rujarquia no hay y eso nos lleva a que los últimos tres tampoco pueden ser recreados. Los cuales son:

Gemoquinesis: habilidad de manipular cristales y minerales.

Fotoquinesis: control dela luz.

Y el poder de los Eoduun, que no solo se hizo realidad la metamorfosis, sino también otras habilidades como la teletrasportación, control de tinieblas, materializar cualquier cosa, y sus tentáculos.

Tal y como va el plan, la gente creerá que los clanes están empezando a traicionar a Rujarquia.

En cuanto al segundo tema que me había hablado, capturamos a dos niños pertenecientes al clan Kingusu, uno es de los diamantes, justo el que estamos buscando, es una niña, al otro lo trajimos para encontrarle algún provecho, tal vez pueda encontrar el modo de trasferir su poder a Kaleb.

Norcrania va a acabar con esos clanes antes de que más inestables aparezcan y provoquen catástrofes naturales que acaben con la humanidad.

Me despido

Dr. Kevin Monroe.

Posdata: Kaleb ya está aquí, nadie lo reconoció, esperamos su pronta llegada a Rujarquia.

Terminó de leer la carta.

Tsuki apenas podía digerir todo lo que acababa de escuchar.

-Somos... ¿El resultado de un experimento? -Murmuró...

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Me podrían dejar su opinión en los comentarios sobre este capítulo por favor :)

Dato curioso:

En Alaquía se habla Francés, turco y árabe. El 75% de la población habla francés, el 20% turco y el 5% árabe.

Hasta la próxima actualización!.

Voten, comenten y compartan, me ayuda muchísimo 💙✨

~Luji Acosta