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«FIESTA EXTRAÑA»

LA PRINCESA BLANCA y reina de corazones eran sus títulos, junto a princesa roja por ser hija de, la ahora fallecida, reina roja. Los únicos que sabrían de la muerte de Iracebeth, son los VK's y Teo, de momento. Hasta que la herida sane en ese cajón guardado con llave y ella esté lista.

Heart entró al cuarto, sonriente, ya con todos los ánimos y nervios por el cielo al tener que ir a la fiesta en la noche. Tal vez Mal no estaba segura si aceptar el compromiso, pero el festival se iba a llevar a cabo de misma manera.

Hablando de la pelimorada, en cuanto cerró la puerta detrás suya, Mal se giró dando un saltito. Heart suspiró al notar sus ojos llorosos y se quitó un mechón de su cabello delante de sus ojos.

—Hace tiempo no venía al cuarto —Admiró que todo estaba casi igual que la última vez que estuvo allí. Eso sí, sus cosas estaban intactas —Pero la últimas vez que estuve aquí, no había una uva llorando sobre su cama.

—Graciosa —Rió irónicamente sin humor. Heart se sentó a un lado de ella.

—¿Es por Ben aún, MaliMalita? —Ella asintió —Venía emocionada a hablarte a Evie y a ti de algo pero, antes de que ella llegue, quiero que sepas una cosa —tomó su mano para entrelazarla, Mal la observó —si esta noche te sientes con ganas de saltar de la fiesta al agua y ahogarte en tú miseria, yo misma llamo a mí Jabberwocky y sin importarme nada, ni nadie, te llevaré personalmente a la isla.

Mal sonrió con sus ojos aguados y asintió abrazando a Heart, que fingió rodar los ojos con molestia, haciéndola reír. Abrazó fuertemente a Mal.

—Sabes que siempre estaré aquí ¿Cierto, MaliMalita? —Se alejaron y Heart puso un mechon del cabello de Mal detrás de su oreja.

—¿Incluso siendo una aburrida dama de la corte? —Ambas hicieron una mueca y rieron.

—Incluso siendo de las más aburridas damas de la corte —Aceptó, se acercó y besó la punta de la nariz de Mal haciéndole reir.

Evie abrió la puerta emocionada, las dos villanas se giraron a ella que borró su sonrisa.

—¿Sucede algo? —exclamó preocupada, en sus brazos tenía demasiadas telas de color rojo.

—Nada de que preocuparse —Heart negó de antemano levantándose —¿Es para mi vestido de esta noche? —señaló las telas. Evie asintió —Bien, manos a la obra. Yo solo me paro y luzco bonita para que tomes mis medidas —Puso un banquito y se colocó de pie sobre él. Ambas villanas rieron —de paso dibujame, MaliMalita.

—Lo que ordene la reina de corazones.


Heart dejó la taza de té sobre la mesa, se limpió las manos y sintió a Teo susurrarle al oído que ya volvería, alejandose unos momentos, sonrió quedándose allí de brazos cruzados hasta que sintió una presencia a su lado.

—Alumna —bromeó Ariadna saludandola, Heart le sonrió —Un espíritu me contó que te abriste una cafetería con Teo.

Heart volteó a ver a la pelirroja. Ambas estaban juntas, a un lado de la mesa de comida, ya que estaban en el tan esperado evento de propuesta de Ben a Mal. Sobre un enorme yate, en medio del agua, con las estrellas iluminando en el cielo nocturno, acompañadas de las luces de colores que ayudaban a la decoración. Alumnos bailando, pero vestidos formalmente, las rodeaban.

—Si, hay muchos tés que vamos a estrenar, va a haber temáticas y todas... Esas cosas —hizo un ademan fingiendo desinterés, Ariadna rió.

—puedes emocionarte, roja, es bueno cumplir sueños y metas. Seguramente con Deena iremos al salir de clases todos los días, es decir ¿Qué mejor que un lugar donde poder estudiar, tomar té y comer galletas que dicen “comeme”? —Rió haciendo sonreír a la reina de corazones.

—Jamas me hubiese imaginado todo lo que soltaste en la isla —Admitió observando a Carlos entrar con Gabriella, delante de la reina blanca hablando.

—La isla, algún día me gustaría ir —Se sinceró la hija de Mérida —¿Allí eras la única pelirroja? Digo, aquí somos dos, naturales claro está —Estiró su mano, cómo habitualmente Jay lo hacía, Heart rodó los ojos pero chocó los cinco.

Pronto, la música paró y Heart se giró a tomar un sorvo de su taza de té veloz. Ben había puesto exclusivamente una jarra de té de frutos rojos solo para Heart, siendo que el resto bebía ponche. Ariadna tomó una fresa y la mordió, justo cuando Teo volvía.

—Ahm, corazón —Heart lo miró alzando una ceja ante su tono —Problemas.

—¿Qué sucede? —Murmuró preocupándose, Teo estaba por hablar pero las trompetas lo interrumpieron.

—¡La futura Lady Mal! —presentó Lumiere sobre las escaleras. Teo se rascó la ceja ansioso viendo a Damián que le susurraba al oído a Evie, lo mismo que él quería decirle a Heart.

—es que ansiosamente ansioso fui con Damián a felicitar a Ben y querer aconsejarlo con consejos consejosos sobre su propuesta para Mal pero... —habló veloz en el oído de Heart que rodó los ojos ante su lengua que se trababa al hablar.

—¡Gorritos! —Le exigió exaltada, aún que tuvo que alzar la mirada y quedó boquiabierta al ver a Mal.

La pelimorada usaba un vestido amarillo y azul, los colores de Ben, junto a una pequeña y linda tiara. Ella se paró, nerviosa a un lado de Lumiere que la alagó, logrando hacerla reír.

—¡Si, Mal! —Gritó Carlos, los demás comenzaron a aplaudir.

—¡Mal! —Evie también continuo, Heart tomó la mano de Teo para acercarse a ellos.

—¡Esa es mi chica! —Grito Heart guiñándole el ojo a la de cabello violeta que negó divertida. Una vez a un lado de Evie, sin borrar su sonrisa, se encorvó hacía Teo —¿Qué sucedio?

—Ben dejó una nota que decía que iría a buscar a alguien y vendría, por eso se está tardando —Le explicó el hijo del sombrerero y Heart frunció sus cejas.

—¿A quién? —Murmuró confusa, miró a Evie que se encogió de hombros.

—La nota decía que era de la isla —Damian le contestó, Heart suspiró sin entender.

—¿A alguien de la isla? —Preguntó sin creer. Miró a Mal que estaba tensa y suspiró.

—Ven, vamos —Evie tomó su mano, las dos caminaron hasta ir frente a la Bella y la Bestia, que estaban hablando con Mal. Hicieron una pequeña reverencia y ellos se movieron para dejarlas, a cada una, tomar una mano de Mal.

—¿Cómo estás? —Le susurró Evie, caminando ante la atenta mirada de todos.

—Agh, siento cómo si fuera a vomitar —Admitio la de cabello morado.

—Hazlo pero lejos de mi —Heart mostró sus perlas blancas haciéndolas reír suavemente.

—Hay que ayudarla —Evie irónicamente le pidió a Heart que rodó los ojos divertida.

—tranquila, hubo un pequeño inconveniente que no sabemos que significa, pero lo vamos a arreglar, Bennyboo debe estar por llegar —Heart se encogió de hombros, tratando de mostrar confianza.

—¿Saben por qué está tardando? —Mal miró a ambas con ansias, ellas dos se dieron una mirada, nuevamente, fueron interrumpidas.

—Ahora, el rey Benjamín —Lumiere habló.

Las tres voltearon, viendo al rey de gran corona y traje a juego con Mal, comenzaron a aplaudir más aliviadas, vitoreando al chico de cabello castaño que sonreía. Heart sonreía al ver a su mejor amigo, aún que dudosa de quién había sido a quien fue a buscar a la isla. Hicieron una reverencia para saludarlo, los villanos observaron a Mal que se mordía el labio inferior, sonriente, al ver de quién estaba enamorada.

—Acercate —Le aclaró Evie, Mal dió unos pasos a su vez que Ben bajaba totalmente hasta estar frente a ella. Él hizo una reverencia que ella volvió dudosa.

—Mal, quisiera tiempo para explicar... —comenzó, extrañandolos, Ben volteó.

Siguieron su mirada, escaleras arriba hasta ver qué Lumiere se movía incómodo, detrás suya entró una morena de vestido celeste con sus trenzas en un moño. A los villanos casi se les cae la boca al ver quién era, Heart dió un paso completamente en shock... Uma estaba allí.

—¿Qué carajos...? —escucharon a Isla boquieabierta. Los murmuros y las miradas confundidas no tardaron en acompañar a Ben que se acercaba a Uma para tomar su mano.

—Esto debe ser una broma —Heart gruñó, Teo se puso a su lado y tomó su mano, Carlos le dió una mirada confundida a Heart que se la devolvió.

—¿A ella al fue a buscar? —Damian estaba igual que ellos.

Los padres de Ben saludaron incómodos a la morena que para ellos era desconocida, Ben se había inclinado ante Uma y besado su mano, justo donde estaba el anillo que Mal le había devuelto a Ben. Teo sintió como Heart apretaba su mano por inercia ante el enojo, ante la impotencia de ver los ojos cristalizados que reflejaban el corazón roto de Mal.

Uma soltó una risita, entrelazando su mano con Ben y colocándose frente a Mal que observaba todo dolida.

—lo siento, todo fue muy rápido —Ben se excusó, pero en sus ojos no había una pizca de remordimiento —pasó algo especial cuando estuve en la isla con Uma —miró a la nombrada —...una conexión.

Heart casi suelta una arcada, amagando vomitar, por el asco.

—¿Qué estás diciendo? —balbuceo la hija de Maléfica.

—Solo estoy diciendo que... —empezó, pero la hija de Úrsula terminó.

—¡Que esto es amor! —Soltó risueña, pero sus ojos se desviaron a Heart que comenzaba a tener el rostro rojo de cólera —¡Lo es!... Es que he notado lo parecidos que somos Ben y yo ¿Cierto? —Parecia burlarse delante de sus narices.

—cierto —asintió Ben, admirandola.

—lo sé... —Rió aparentemente avergonzada.

—eres hermosísima —Alagaba el rey, Heart soltó repentinamente a Teo que la observó detenidamente. Ella solo veía con llamas en sus ojos a Uma.

—¿Volviste por ella? —Señaló descaradamente, metiéndose, Mal reaccionó y miró a Heart, una lágrima bajando por la mejilla de la pelimorada —¿En serio? —sonrió irónicamente y pasó su lengua por sus dientes.

—Eso no hizo falta, bueno, no tanto. Antes de que se vaya, atravesé la barrera —Uma la miró, Heart ni siquiera quería contactar miradas con su ex novia —y creo que sabes que soy buena nadadora.

—claro —Ben alagó, interrumpiendo a ambas villanas, Uma rió avergonzada.

—Oye, Mal —se acercó a tomar su mano, sonriente, Mal aprecio dar un saltito que hizo tensar más a Heart —yo solo quiero agradecerte.

Heart miró la interacción sintiendo náuseas. Él no era su mejor amigo, ese no era Ben. Ben era leal hasta la tumba, amaba a Mal como nunca había amado a alguien, la había elegido sobre todo... No la cambiaría por alguien cómo Uma, alguien que no amo a nadie más que a si misma.

Pero ella se equivocaba, Uma miró a Heart que la veía con asco, hiriendo otra vez el corazón de la morena.

—en serio... Quiero agradecerte por lo que pasó —Miró de nuevo a Mal, queriendo avanzar a abrazarla.

—¡No la toques! —Heart tomó la mano de Mal para esconderla detrás suyo. Uma miró a la pelirroja conteniendo su molestia ante esa acción.

—¿No lo entiendes, Heart? —Ben se colocó a un lado de Uma —eres mi mejor amiga, deberías comprenderme —Se señaló, Heart lo observaba como si estuviera loco, pero de una forma diferente a la suya —Mal tenía razón, ella sabía que no éramos el uno para el otro —miró a la nombrada —eso hizo que nunca dijeras que me amabas... Gracias.

Heart retrocedió con Mal, viendo cómo Uma le daba su bolso a una adolescente y se ponía a bailar con Ben, ante la shockeada mirada de los presentes.

—aun que no lo crean, arriesgue mi vida por él —Carlos gruñó molesto, a un lado de Heart.

—estamos contigo, Mal —La pequeña Gabriella se acercó a acariciar su brazo.

cambia más de novia que de ropa —Isla se cruzó de brazos, molesta con el rey de Auradon.

—Él no es mi amigo —Teo veía decepcionado a Ben.

—Vamonos de aquí —Jay terminó por acercarse a Mal, que asintió rogando por eso.

—Andando —Rogó Heart, moviendo a las personas para dejarlos ir hasta bajar del barco. En cuanto pasaron a un lado de los padres de Ben, estos los frenaron para dirigirse a la de cabello morado.

—Mal —El rey Bestia la miró con pena.

—no teníamos idea, lo sentimos —se disculpó Bella.

—Hablare de esto con él —Asintió su esposo, pero Mal, agobiada, se giró a Heart que pasó un brazo sobre sus hombros para apresurar el paso.

Cuando iban subiendo las escaleras, Jane llegó apresurada para hablarle a Lumiere que vociferó.

—¡Y ahora! —frenaron confundidos —descubriremos la obra de arte diseñada por el rey Ben, especialmente para su dama —señaló a Mal.

Las trompetas sonaron y volvieron a girar desorientados, Heart estrechó con más fuerza a Mal cuando bajaron una telas sobre un enorme cristal con la imagen de Ben y Mal. La pelirroja en esa pintura vió a su mejor amigo, al detallista y perdidamente enamorado de Mal, al sincero y amoroso Ben.

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