«ES OFICIAL»

—¿DONDE ESTAN mis galletas?

Heart abrió la parte trasera de la casa del té gritando molesta. Ya había una fila de cinco personas esperando ser atendidas y ella no tenía sus galletas de “comeme” con glaceado.

Cuando llegó atrás, vio a Sonriente comiendo dichas galletas, tenía sus boca a punto de explotar de lo llena que estaba por haber comido lo más rápido que podía, detrás suyo, los padres de Gabriella estaban igual. Parecían tres ardillas con la boca llena de nueces.

Los padres de Gabriella habían llegado de visita para el cumpleaños de su hija, dejando su forma animal para volverse los dos humanos que estaban frente a Heart.

—¿En serio? —puso las manos en su cadera, molesta.

Sonriente señaló al conejo Blanco, el cual señaló a la Liebre de Marzo que estaba señalando al Gato de Cheshire. Los tres adultos sonrieron inocentes.

—Me encanta que estén de visita, en serio, eso hace a Gabriella feliz, lo que hace a Carlos feliz, por ende, yo estoy más que feliz —le arrebató los platos de galletas —pero no me importa convertirme en la reina roja que tanto le temen si siguen haciéndome perder dinero.

—¿Estás feliz? Estos días solo te he visto gruñir —se burló Sonriente tragando las galletas —Teo si ha estado feliz, saltando de aquí por allá y de allá por aquí. Salta más que ellos dos —sonrió inocente señalando a la pareja detrás suyo.

—No sé si ofenderme —El conejo blanco arregló su vestimenta cara y blanca, limpiando las migas.

—Tomalo como crees que es correcto —Sonriente se encogió de hombros y Heart rodó los ojos —no gruñas, niña cabezota —hizo un chasquido y las galletas volvieron a ser muchas —ya está, arreglado.

La Liebre se estiró a tomar una pero Heart las alejó haciéndolo gruñir poniendo sus ojos más bizcos.

—Carlos está por llegar, tengo que mostrarle mi regalo, mientras, pueden ir con Isla, Evie y Gabriella que están arreglando los últimos eventos del cumpleaños de su hija —Salió con ellos tres detrás —tienen prohibido cruzar la barra ¿Entienden?

—entendemos —Sonriente desapareció, esfumandose y apareciendo a un lado de Isla. La pareja fue hasta donde su hija para abrazarla.

—Maravillanos —se quejó Heart, comenzando a atender a los clientes.

La casa del té estaba siendo furor, los villanos iban hacia arriba con sus logros. En especial ella junto a Evie, la peliazul ahora tenía su propio castillo en medio del bosque, no muy lejos de la casa del té, y tenía su propia marca de ropa. Todas le pedían diseñar sus atuendos. Aveces, se completaba con Teo y llenaban sus bolsillos de dinero.

Escuchó la campanita y guardó el dinero en la caja para levantar la cabeza y ver a Carlos que entraba junto a Jay.

—Un té sorpresa, por favor —se burló Jay cruzandose de brazos sobre la barra.

—Hola, Heart —Carlos la abrazó como pudo y ella le sonrió —¿Para qué me llamaste?

—tengo algo para ti —anunció tocando con su dedo índice la punta de la nariz de Carlos. Haciéndolo reír.

Heart se giró, preparó unas tazas del té, las puso sobre una bandeja y se las dió a Jay. Los tres caminaron hasta ir a sentarse donde todo su grupo estaba, justo cuando Teo entraba agitado.

—¿Llegué tardisimamente tarde? —preguntó preocupado pero solo consiguió una mirada confusa de Carlos.

—no, llegaste justo a tiempo —Heart le hizo una seña para que se acerque, viendo a su prometido suspirar de alivio.

Teo corrió, se sentó a un lado de Isla y tiró de la cintura de Heart para que se siente sobre su regazo. Ella le dió un sonoro beso en su mejilla que le dejó marca de su labial rojo. Teo ni se molestó en limpiarlo, amaba cuando andaba por Auradon con besos de Heart en su rostro.

—¿Por qué todos me miran? —Carlos rió nervioso al ver qué todos estaban expectante a sus movimientos. Bebió un poco de té.

—¿Te gustan los trucos de magia, Carlos? —Sonriente estaba invisible, mostrando solo sus ojos y gigantesca sonrisa.

—si —admitió, pronto, un humo azul apareció en su regazo que lo hizo dar un salto. Cuando se desvaneció, tenía una carta en sus piernas —¿Qué...? —miró a Heart que alzó las cejas esperando a que lo abra.

Carlos le sacó el listón rojo, abrió la carta y sacó una larga hoja de allí. Miró dudoso a todos pero Gabriella apoyó su mentón en su hombro, leyendo con él. Haciéndolos sonreír de ternura. Los dos comenzaron a leer hasta que vieron el rostro de Carlos temblar en una expresión que les revolvió el estómago. El niño miró con ojos cristalizados a Heart.

—yo... —no pudo terminar porque comenzó a sollozar con una sonrisa, ella se levantó rápidamente y abrazó al niño —te quiero, Heart.

—yo te quiero más —Besó su cabello sonriente.

Con eso, era oficial, Carlos ya sabía que ahora era familia oficial de Heart.

—“es un placer comunicarle, Carlos de Vil, que usted ha sido autorizado y aclamado por Heart “la Reina de corazones”, Mirana “la Reina Blanca”, Benjamin “Rey de Auradon” para ser nombrado oficialmente Carlos de Vil-Crims, príncipe de corazones por, ahora, titulo siendo legalmente hermano de Heart de Crims —leyó el conejo Blanco —asi se finaliza, que cuando su, ahora, hermana tome el trono del reinado del país de las maravillas, usted será aclamado también como príncipe de tal región”

Los aplausos comenzaron a abrazar al pequeño Carlos que besó la mejilla de Heart que limpió sus lágrimas de felicidad.

—ya no tendrás que teñir el cabello o quitar la dureza de los pies de tú madre —le susurró asqueada y Carlos rió.

—aleluya.

Mal observaba por los binoculares a Heart estaba volando sobre su Jabberwocky. Una vez a la semana, desde lo ocurrido en la fiesta de la no-boda de Ben y Mal, la reina de corazones se montaba en su dragón y cubría terreno sobre el agua en busca de Uma. Pero nada, no estaba cerca de Auradon. La pelimorada observó cómo el dragón movía sus alas, creando corrientes en el agua, hasta bajar a Heart a un lado de ella e irse volando.

—¿Y? —preguntó ansiosa observando como ella se arreglaba el cabello y ropa.

—nada —Negó sacando una paleta de corazón de su bolsillo. Mal suspiró.

Ben golpeó suavemente el hombro de Teo que aguantó su risilla, los dos iban acercándose a las espaldas de las villanas hasta que Ben tomó por la cintura a Mal, haciéndole cosquillas lo que provocó un grito desprevenido por ella y Teo le quitó el dulce a Heart llevándolo a su boca, la pelirroja rodó los ojos pero le quitó el chupetín de la boca y se lo llevó a la suya. Teo soltó risillas que la hicieron sonreír.

—¿Algo? —Teo cuestionó abrazando a Heart y apoyando su mentón sobre su hombro.

—no hay ningún tentáculo cerca —negó Mal viendo el agua.

—creo que, si Uma tendría algo en mente, lo sabríamos —su novio intentó relajarla.

—no, Ben, conozco a los villanos —Insistió la hija de Maléfica.

—en especial a Uma —asintió Heart sacando la paleta de su boca para hablar.

—exactamente por eso no confío en ella —Mal señaló a Heart dándole la razón —porque sé cómo piensa. Aguardará a qué bajemos la guardia y entonces atacará.

—y solo lo hará con Auradon, primero porque estamos nosotros y segundo porque es lo único que conoce —Terminó la pelirroja apoyando su cabeza contra la mejilla de Teo que le dió un pequeño beso a su cabello.

—Heart cubre con el Jabberwocky, su pájaro JubJub ha estado dando vueltas por el otro lado, pero quisiera volar como dragón así poder cubrir más terreno —se quejó volviendo a tomar los binoculares pero Ben se los hizo bajar.

—bueno, pero no pueden estar en todos lados —negó viendo a ambas.

—Aun que me sorprende que un poco más y lo hacen —Teo soltó una risilla —pero deben calmarse para estar calmadamente calmadas y no tan a la defensiva defensora.

—si, y tienen nuestro apoyo —Ben señaló detrás suya a los guardias que estaban en la parte alta del castillo con telescopios buscando señales —vamos, están esperándonos —miró de reojo a Heart que le tapaba la boca a Teo para que no suelte una risilla emocionada que arruine la sorpresa de la propuesta.

—espera —Mal lo detuvo —¿Traeras más guardias?

—Habra más guardias —asintió Ben —respira —bromeó y Mal hizo una exagerada respiración —vamos.

Heart entrelazó su mano a la de Teo y los dos fueron delante de ellos hasta la entrada del castillo de Auradon. Cuando se asomaron, Heart llevo dos dedos a su boca y silvó con fuerza, haciéndole una seña a Isla que mandaba a las porristas, ella le hizo una seña a la banda, así comenzando a tocar. Algunos alzaban sus carteles de “bienvenidos” ya que en unos minutos también llegarían los jóvenes de la Isla.

Heart y Teo se pusieron a un lado de Bella y Bestia, el antiguo Rey palmeó el hombro de Teo sin controlar su fuerza haciendo al chico casi trastabillar pero soltó una risita infantil, después de todo era cómo su tío. Heart le sonrió a Bella y está tomó sus manos saludandola cortésmente. Cuando la pelirroja miró a un lado, vio a Sonriente y su tía.

—niña cabezota —Sonriente estiró su mano, ella la aceptó pero él la hizo dar una vuelta —lindo atuendo.

—me lo hizo Evie —Contó para acercarse a su tía que la abrazó —hola, tía.

—hola, pequeña maravilla —La estrechó con fuerza para soltarla y tomar su mano —¿Encontraron algo? —Heart negó aplanando los labios —no se sabe si eso es bueno o malo —sonrieron ligeramente. Las dos voltearon donde Ben y Mal eran saludados y guiados hasta el pequeño escenario.

La música paró, el hada madrina tomó el micrófono comenzando a hacerle una prueba de sonido y pasárselo a Ben que le agradeció.

—¡Auradon! ¿Cómo están? —Los gritos de respuesta afirmativa le dieron una buena respuesta a Ben —gracias, les agradezco mucho por venir a recibir a los recién llegados. Pronto estarán aquí.

—Que emoción —Teo rió poniendo una mano en la cintura de Heart que suspiró dándole la razón.

—con los primeros cinco funcionó muy bien —Alagó Ben.

—¡Si, en especial para ti! —Se burló Damián haciéndolos reír.

—¿Para mí solo? —Ben alzó una ceja viendo a sus amigos que rieron. Él negó divertido volviendo su atención a su novia —Mal, este es el lugar exacto dónde nos conocimos no hace tanto. Es como si te conociera de toda la vida... ¿Te he mencionado que me enamore de ti? —Los sonidos de exclamación de ternura ante esa referencia no se hicieron esperar.

Heart y Teo, junto a Sonriente, Mirana, los padres de Ben, el grupo de maravillanos y los VK'S se acercaron hasta el borde del escenario, Teo tomó una guitarra que le dió Isla, Damián comenzó a hacer sonidos con su boca para acompañarlo y los demás le hicieron coro.

—I met this girl that rocked my world like it's never been rocked and now i'm living just for her and i won't never stop—Mal rió con ternura, dando una pequeña vuelta con Ben —I never thought that it could happen to a guy like me but now look at what you've done... —el rey de Auradon se arrodilló frente a ella —You got me down on My knees.

Ben le pasó el micrófono a Carlos y sacó de su bolsillo una cajita de terciopelo. Heart miró a Teo que aguantaba la respiración nervioso, pues Mal ya tenía historial de haber rechazado a Ben. Heart le insistió con la mirada que respire pero él negó volviendo a ver a Ben. Teo no respiraría hasta que Mal aceptase casarse con Ben.

—quedate conmigo, seamos dos para siempre —le pidió, Mal tenía las manos tapando su boca —¿Serás mi esposa? —abrió la caja mostrando el anillo violeta —¿Quieres ser mi reina?

—¡No! —Gritó Audrey espantada haciendo a Heart rodar los ojos.

—¡Si! —Mal aceptó emocionada.

Heart aplaudió feliz, Teo al fin respiró y Sonriente acarició su espalda ya que se notaba que Teo no aguantaba más. Mirana chilló contesta y juntó sus manos llevandolas a su boca. Ben le puso el anillo a Mal y ella le dió un corto beso. Todos festejaban ruidosos y alegres de la, ahora, unión confirmada de Ben y Mal.

Mal bajó rápido las escaleras hasta abrazar a Evie y Heart que rieron.

—¿Estaban enteradas? —les preguntó sorprendida.

—¡Lo sabíamos todo! —Asintio Evie contesta —bueno, Heart lo supo antes que yo.

—Yo di algunas ideas —Heart confirmó —pero salió bien, estoy feliz por ti, MaliMalita.

—sé que serás una reina genial —Evie asintió acariciando la mejilla de su mejor amiga —¡Okey! Dibujé como mil deseos de vestidos para tú boda y Bella planificó tú fiesta de compromiso para esta semana. Heart la fiesta de soltera.

—¡Ay, que bueno que le dije que si! —Mal se acercó a abrazar a sus suegros.

Heart sintió como Evie zarandeaba sus hombros emocionada y volteó sus ojos con diversión. Jay y Carlos se acercaron felices, comenzando a murmurar sobre los eventos hasta que Jay se abrió paso a Ben y Mal.

—¡Inclinense ante su majestad! —bramó con voz grave.

—¡Oh, sí! Real moradeza —Carlos se quitó el sombrero, los tres fingieron hacer una reverencia a excepción de Heart que se cruzó de brazos con una ceja levantada.

—silencio súbditos... —ellos abrieron las bocas fingiendo indignación pero Mal se llevó las manos a la boca fingiendo estar horrorizada —¡Ay, no! Chicos...¡Ya me parezco a Heart! —rieron a carcajadas pero la nombrada volteó sus orbes.

—que conste, que no llegas a mi nivel —Movió su cabello y Mal rió.

—oh, no, jamás —negó divertida.

Heart sintió unos brazos envolverse en su cintura y volteó para ver a Gabriella que le sonreía. Ella acomodó las dos coletas de la chica y besó su cabello. Estaban todos relucientes en felicidad, cuando Ben les avisó lo que todos esperaban. La llegada de los villanos.

—¡Okey! Llegó la hora —chocó puños con Jay.

Gabriella se acercó con Heart, las dos aún abrazadas, listas para recibir a los villanos.