Un año después...

–¡Tamayo-sama! Despertó... ¡La chica despertó! - apareció rápido Yushiro.

(...)

–¿Qué paso? ¿Quiénes son ustedes?. - pregunto T/N.

–Me presentó mi nombre es Tamayo, y él es Yushiro. Ambos te encontramos en una montaña. - dijo la demonio.

–Y-yo soy... Y-yo... N-no me acuerdo. - susurro T/N.

–No te preocupes pequeña. Seguro es amnesia temporal, en cualquier momento recuperas la memoria. Por ahora estamos feliz de que lograste despertar. Quieres algo de comer o agua? Puedes darte una ducha si lo deseas. - dijo Tamayo.

–Ehh... Tengo sed y hambre... Mucha hambre...- susurro avergonzada T/N.

–Ven, vamos a la cocina. - le dijo Tamayo.

T/N asintió y los siguió, ambas personas parecían buenas personas.
Tenían un aura que inspiraba confiar en ellos.
Además no podía hacer mucho... Ella recién despertaba y todo le parecía muy extraño.

Miro su muñeca y tenía un brazalete, lo observó y pensó: "es hermoso"
Pero una lágrima recorrió su rostro.
Por alguna extraña razón ese brazalete le daba nostalgia y tristeza...

–¿Estas bien? ¿Recordaste algo? - pregunto Yushiro.

–N-no. No recordé nada, solo me dio tristeza.-susurro T/N.

–Tranquila pequeña.- sonrió Tamayo.
Y se acercó con un vaso de agua.

T/N lo aceptó con gusto y pidió más y más agua, estaba muy sedienta.
Luego le dieron algunas frutas mientras preparaban algo de comer.

Se le cayó un poco de comida en el pecho y al retirar esas migajas se dio cuenta de un collar que llevaba.

Lo agarro con delicadeza, y al tocarlo sintió como si recordará.
Sintió la presencia de alguien... No sabía de quien, solo era una silueta incompleta.

Al presenciar esa silueta, sonrió con gracia... Parecía un caballero, no... Un Guerrero... Algo...
Llevaba una katana.

–Cazador de demonios.- pronunció T/N sin darse cuenta de lo dicho.

Tamayo y Yushiro la miraron... Era obvio que ella era cazadora de demonios, tenía una katana y yukata que indicaba eso.

¿Pero por qué se acordaría de eso? Si no puede recordar su propio nombre.

T/N sintió la mirada de ellos, y desvío la mirada.

–L-lo siento, no se lo que dije... Es extraño.

Tamayo y Yushiro asintieron, no había qué hacer la sentir extraña.

T/N término de comer y agradeció por todo, luego de un momento a otro pregunto.

–¿Dónde me encontraron? ¿Cuanto tiempo llevó dormida? ¿En qué condición me encontraron? ¿Me conocían antes? ¿Saben mi nombre?

–Te encontramos en la montaña, llevas un año en coma, te encontramos casi muerta, no te conocíamos pero decidimos ayudarte y no sabemos tu nombre. - dijo Yushiro.

–Ehh, muchas gracias por rescatarme. -dijo T/N, con ganas de preguntar más pero se dio cuenta de que no era el momento indicado.

–De nada... Ehh... - Yushiro quería llamarla de una manera pero no sabía su nombre.

–Les gustaría ponerme un nombre... No se podría ser lo que ustedes quieran o les parezca bonito, a mi no se me ocurre nada. - propuso T/N

–Kotonaru.- dijo Yushiro rápidamente y luego bajo la mirada... Tal vez la señora Tamayo quería proponer un nombre y él sin preguntar dijo algo.
¡Pero que vergüenza!

–Lamento mucho no permitir que de su idea Tamayo-sama.- se disculpó Yushiro.

–No te preocupes Yushiro, Kotonaru es un buen nombre y la representa bien... Porque ella es "diferente"- dijo Tamayo.

–A mi también me gusta el nombre Yushiro-san. - sonrió T/N.

El ambiente se puso más tranquilo, Tamayo se retiró un rato para luego volver con algunos libros.

–Kotonaru, quisiera saber si puedes leer esto. - Dijo, entregando un cuento para niños.

T/N agarro el libro, y trato de leerlo.
Pero no entendía nada, y solo estaba confundida.
Luego, Tamayo le paso un libro simple de matemáticas, donde tenía que sumar y restar ciertos números naturales.

Pero, ella no pudo hacerlo.
Es más, se dio cuenta de que solo podía contar hasta 10.
Y el resto de números, se le había olvidado.

Frustrada, T/N se molesto consigo misma.
No podía recordar cosas, aparentemente básicas.

Soltó un suspiro de frustración, y golpeo la mesa.
Estaba realmente enojada con ella.

–Ey, tranquila Kotonaru. Si quieres, podemos enseñarte a leer y también matemáticas básicas. -propuso Tamayo.

Más tranquila, T/N asintió.
Y Tamayo, fue por unos libros más sencillos.
Mientras esperaba, a T/N le entró una curiosidad por ir a la cocina.
Ahí se encontraba Yushiro, cocinando algo para él y la señora Tamayo.

Pero él estaba tan concentrado preparando, que no se dio cuenta de la presencia de Kotonaru.
Chocando con ella y haciendo que se caiga la comida que estaba llevando a la mesa.

T/N en un movimiento rápido, logra evitar caerse y agarra los dos platos de comida antes de que lleguen al suelo.

Pero los cubiertos se cayeron al suelo.

–Ahh, que lástima. Lo siento mucho Yushiro-san. - susurro apenada T/N.

–No te preocupes Kotonaru, lo bueno es que la comida no se cayó. - respondió Yushiro para luego recoger los cubiertos, limpiarlos y ponerlos en la mesa.

La noche cayó, los tres comieron en silencio.
Tamayo coordinó los horarios que tendría con T/N para enseñarle lenguaje y matemáticas.
Y fueron a descansar, pero antes... De forma privada, Yushiro habló con Tamayo.

Confirmando las sospechas de ella.

T/N, o como la habían llamado Kotonaru, tenía memoria corporal.
Su cuerpo se movía solo, como ejemplo, hablar.
Y sus movimientos de cazadora, su velocidad y flexibilidad seguían ligeramente intactos.

Obviamente, por tanto tiempo en coma su cuerpo era más lento.
Pero con un poco de práctica, volvería a ser la misma de antes.
Incluso, podría ganar más fuerza.

Ya que, sobrevivió a la muerte.
Su cuerpo adquirió nuevos anticuerpos y un poco de sangre demoníaca.

Ahora el deber de ambos era entrenarla y ayudar a que su potencial crezca para que pueda ser parte de los cazadores de demonios.

Si avanzaba bien, T/N incluso llegaría a ser una pilar.

Una vez T/N se durmió, Tamayo le escribió una carta a Ubuyashiki.

Continuará...