La morena caminaba tranquilamente sosteniendo su almuerzo. El día de hoy iría a merendar con sus compañeros Kiba,Hanako y Osono (con quién recientemente parece llevarse mucho mejor). Está feliz,ha hecho nuevos amigos en su nueva escuela y no son para manipular ni nada relacionado.

Se siente tan orgullosa de ella.

Ha ignorado perfectamente a Info-kun durante meses y años. Ese idiota sigue insistiendo pero, simplemente ella no se rendiría antes ni aunque le ofrezca 1 millón de dólares.

Sin darse cuenta,choco con alguien,tirando su jugo encima de él.

Diablos,no debí soñar despierta.

Se apresuró a dirigirse al chico y levantarlo.

– ¿E-estas bien?– pregunto avergonzada – ¡Lo siento mucho!– e hizo una reverencia – Buscaré un paño para limpiarte–.

Y entonces,cuando iba a salir corriendo directo a la habitación del conserje,la mano del chico en su muñeca la detuvo.

– ¡No!– exclamó – Yo... Estoy bien,solo cayó en mi brazo ¿Ves? – y le muestra el brazo con la manga del uniforme algo manchada– Solo tengo que hacerle un dobladillo y... Listo– y ocultó la mancha – Lo lavare cuando vuelva a mi casa– y le sonrió.

La chica se tranquilizó un poco al ver la expresión del chico rubio. Entonces forzó una pequeña sonrisa.

Esta chica... Claro que la ha visto,o eso cree. Cuando él viene a la escuela,aveces mira atrás y ve esa misma coleta negra larga moverse lentamente desde atrás con un castaño a su lado.

Y entonces,la miro bien a los ojos. Aishi... Claro que la recordaba,esta chica estudio un año junto a él cuando eran más pequeños,si no mal recuerda,quizás está sea la chica que parecía no adaptarse a sus compañeros fácilmente.

– Lo vuelvo a repetir,lo siento – e hizo una reverencia y se dió la vuelta para irse,debería buscar otro jugo e irse con sus amigos a merendar.

– ¡Espera!– y la sostuvo de la muñeca deteniendo su caminar – Eh,en mi club,el club de deporte,estamos reclutando personas para agrandar la cantidad. No sé si te gusta el deporte... Pero ¡Podrías quedarte una vez y luego ves si te gusta y quieres unirte!– sugirió.

La chica pareció pensarlo unos segundos y luego respondió:

– Bien,es lo que puedo hacer en compensación a manchar tu uniforme– y sonrió al ver el dobladillo del uniforme del rubio.

– Por cierto,me llamo Aso Rito– dijo con una enorme sonrisa mientras rascaba con nerviosismo su nuca.

– Ayano,Ayano Aishi– dijo finalmente antes de irse rápidamente a la cafetería de nuevo.

No parecía mala chica, cualquier otra lo hubiera insultado por estar en el medio sin cuidado. Se culpaba por esto.

De pronto,sintió como alguien a su lado chocaba sus hombros sin cuidado con él y nisiquiera lo miro al hacerlo.

– ¡H-hey!– grito el ojiazul mientras sobaba su brazo.

El pelirojo lo miro por el rabillo del ojo,no pareció importarle Aso y nisiquiera se disculpó.

<<Tsk,que maleducado>>. Pensó Aso.

Sin darle más vueltas al asunto,salió a merendar.

...

Después de tanto tiempo,volvía a compartir espacio con la misma escoria de sociedad. Cuánto odiaba la escuela... Pero,para la victoria hace falta un gran sacrificio.

Caminaba con un uniforme impecable,dando pasos precisos y con una mirada inexpresiva. Acababa de salir de la oficina de la directora y recibir un reclamo por su anterior ausencia. Enrealidad no le importaba lo que le diga esa vieja,solo le importó salir y ver todo el colegio eso podría ayudar en un futuro.

Paseó sus ojos rojos por el lugar hasta encontrarse con un grupo de chicos que parecían tener demasiado estilo para su gusto,otro de aparentemente emos quienes llevaban su uniforme decorado con detalles negros y mallas del mismo color,se encontró con deportistas pasando a su lado hasta salir al espacio donde vio quedaba una fuente y lo que vio después,le interesó.

Por primera vez,vio a Ayano Aishi en persona,es exactamente como él la veía por cámaras,solo que ahora parecía distraída. Tuvo un plan,consistía en acercarse a ella y entablar una conversación por cualquier accidente que él mismo provoque,quizás acercarse así a ella poco a poco y sacar el tema de Taro,manipularla y convencerla de que ese amor no se eliminará. Acomodó sus gafas y metió las manos en sus bolsillos con la mirada fija en la chica.

Pero,tuvo que frenar. Al ver cómo ella chocaba con un rubio que no pudo reconocer. Tomo su celular disimuladamente y busco al chico entre la lista de estudiantes.

Aso Rito,líder del club de deportes.

<<Interesante>>. Pensó. Quizás la chica podría unirse para ser más fuerte,para ser más popular,lo que sea,pero tiene que ver con ser algo más.

Su plan de acercamiento tendría que posponerse para más tarde.

Se quedó detenido en el mismo sitio,fingiendo mirar por la ventana recostado al otro extremo de la pared,mientras por el rabillo del ojo observaba a la azabache y al rubio conversar.

Al ellos terminar,intento alcanzar a la chica pero,está se fue muy rápido corriendo a quien sabe dónde.

<<ARG,que fastidio>>. Pensó mientras caminaba.

Intencionalmente, chocó con Aso. Sin importarle lo que este le haya gritado atrás,lo miro disimuladamente y siguió caminando. Este chico le daba el presentimiento de que sería un problema en un futuro.

Se fue a su curso designado,el 3-A,a identificar su asiento.

– Por fin se digna a venir,señorito Gary Akiyama– le reclamo una profesora que apenas entraba.

Sintió un respingón y tensión,un tik en su ojo izquierdo. Su nombre era lo último que le gustaba escuchar, nisiquiera su madre lo llamaba por su nombre desde niño quizás acostumbrando al uso de "Info-kun".

– Tsk– simplemente expresó y se fue a sentar en el asiento que la señora le señalo. No planeaba salir a almorzar,ahora mismo,tenía asuntos que atender con sus clientes.

– No te puedes quedar solo adentro,lo siento. Lo que sea que harás,lo puedes hacer después de clase– Advirtió la profesora y la abrió la puerta dándole paso a salir.

<< Es una metiche>>. Pensó. Aunque es irónico,porque él también se mete en la vida de los demás pero,en este caso nadie sabe que es él ¿No?

Salió con su típica mirada inexpresiva del curso con los labios estaba vez fruncidos y el celular bien oculto en sus bolsillos.

Lo que tendría que hacer,lo haría en privado en el baño de hombres.

...

Ayano se acercó a la empleada de la cafetería y para un jugo exactamente de lo que había tirado por accidente encima de Aso,pero,en eso se encontró con unos ojos claros mirándola desde la entrada. Tenía un grupo de chicas y chicos a su lado,todos parecían estar conversando con él mientras él ahora mismo solo miraba a Aishi.

Megamo,ese era él. Para ella, después de lo de hace poco fue algo un poco incómodo mirarlo,así que aparto la vista y se hecho a un lado permitiéndole ordenar primero.

– Solo una soda,por favor– pidió elegantemente con una mirada de desprecio a la empleada – Y ustedes- los señaló – Cállense de una vez,son un fastidio– les ordenó.

La mujer de la cafetería se apresuró con nerviosismo a buscar una soda de l nevera y tomarla para llevársela Megamo pera la lata se le callo,se agachó a recogerla otra vez,maldecía los nervios que le hacía sentir la presencia del Saikou.

– ¿Qué? ¿Piensa darme eso del suelo? – dijo con altanería.

– P-pero es una lata,no se dañó ni la soda puede ser a-afectada– dijo como pudo la señora.

–¡No me importa! ¡¿Trata de envenenarme,verdad?! Me está obligando a hablar con mi padre y hacer que la echen de este trabajo,no sirve para esto – le gritó a la señora haciendo que está inmediatamente suelte la soda en el suelo y debido a la fuerte caída se abra en el suelo y empape el mismo de un líquido oscuro – ¿Qué? ¿Ahora se quedará mirando? Busque otra,limpia y especial para MI,ahora–.

La mujer sintió como su cuerpo se tensaba, rápidamente tomo una soda,la limpio excesivamente bien y se la entrego con respeto a Megamo.

El chico la tomo y se la entrego a una de sus acompañantes.

– Llevenla a la mesa dónde nos sentamos,los alcanzaré– ordenó,estos asintieron y se marcharon.

El chico miro desafiante a la mujer y luego a Ayano.

– Que te quede claro,Aishi, aún tengo mis ojos en ti–.

Y se marchó.

La mujer parecía estar sollozando mientras tomaba un trapeador para limpiar el desastre ocasionado por la soda hace unos minutos.

La azabache la miro con pena,ahora mismo olvidó a sus amigos que la esperaban en el techo para almorzar y maldijo a Saikou,¿Cómo era posible que un chico tan malo puede sentarse y respirar y hacer como si nada de lo que hace realmente importa?

La chica tomo un trapo y se dispuso a ayudar a la mujer.

– No tienes que hacerlo,joven,puedes ir a almorzar con tus compañeros– dijo la mujer mientras limpiaba el suelo.

– No se preocupe,los veré luego en clases,solo faltan unos 6 minutos para que termine el receso– dijo y sonrió para ayudar a la señora.

Terminaron rápido,en unos 3 minutos. La señora le agradeció y la chica hizo una reverencia y se marchó por la puerta derecha de la cafetería.

Desde la puerta izquierda,escondido en una esquina sin ser visto por Ayano al salir,estaban unos ojos de un color claro observando mientras tenía un pie recargado en la pared.

<<Tsk,finge ser buena>>. Pensó. Ahora simplemente se le hacía falso cada comportamiento de la chica,quizás,había obtenido más información de ella de lo que debería.

...

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