<<Que fastidio>>.

Caminaba en la entrada de la escuela de Suru,mirando la estructura frente a él en el camino. Tenía tanto tiempo sin poner un pie en la escuela,pero,esto lo requería,no había opción. El chico soltó un suspiro frustrado y entro a la escuela.

Ahi está frente a él,Ayano estaba con sus amigos cambiando sus zapatos,el de cabello alborotado y el afeminado. Él sabía de ellos hace tiempo,los investigo hasta la madrugada,sabía que ahora no eran una amenaza pero,quizás si más adelante... No sé fiaria.

Sintió como si el tiempo se deteniera unos segundos mientras cruzaba de largo por atrás de Ayano para llegar a su casillero sin dirigirle la mirada,esbozo una sonrisa de lado y la miro de reojo ya estando un poco lejos.

<< Esto será divertido>>. Pensó antes de cambiar sus zapatos y ajustar sus lentes.

...

Estaba sentada,pero está vez,no en su curso,sino,en el techo. La chica se saltó las clases o bueno,la primera hora de clases. Su cabello estaba volando casi, removiendose con el viento mientras ella tenía sus ojos cerrados dejando que el viento acaricie su rostro.

Hace mucho que no sentía algo así.

Hace tanto tiempo que no tenía un tiempo con ella sola,para sentirse viva denuevo,que siente,recordarse lo humana que es y feliz que es al no tomar el mismo camino de sus antepasados. Suspiro,abrió sus ojos e inmediatamente chocaron con esos ojos blancos. Se paralizó.

El chico delante,frunció el seño levemente luego de unos segundos,cruzado de brazos,la miro intimidante.

Ella lo reconocía,ese chico... El,el es el presidente del consejo estudiante y... Ella se estaba saltando las clases. La describió.

Claro, ¿Cómo podía ser tan tonta?

Este chico tiene fama de no tener misericordia con nadie en contra de las reglas,también tiene fama de estar algo así como obsesionado por hacer que saquen a los chicos de bandas de delicuentes de la escuela.

Sudo frío cuando está vez, él hablo.

– Entonces,¿Decidiste saltar las clases para tomar aire?– dijo,con esa voz fuerte y de forma fría. Manteniéndose firme la siguió observando con rudeza.

– Yo... Asumo las consecuencias– Suspiro – Fue algo estúpido– dijo mirando hasta el piso.

Ahora quizás,no,estaba segura de que se ganaría un reporte. Y ella, simplemente no quería decepcionar a su padre, él realmente si está feliz por ella aunque no lo expresé,le gustó que ella no tuvo que hacer lo que su madre para sentir y siguió un buen camino,pero le informo que no deje sus estudios por nada,está orgulloso. Ella lo sabía,el día de su cumpleaños 16 había visto esa cara de felicidad de su padre... Ahora debía hacer lo posible para evitar ese reporte pero,con Megamo ahí,no había mucha eficacia.

Para su sorpresa,vio al chico con pasos firmes dirigirse hacia ella.

<<Oh Dios, ayúdame>>. Pensó.

Quizás la tomaría y arrastraría hasta la oficina de la directora como vio una vez que hizo con un estudiante del 1-B.

Pero,no fue nada de lo qué pensó,el chico se sentó junto a ella y recostó su cabeza en la banca y cerró los ojos mientras suspiraba. Ella lo miro asustada y a la vez confundida ¿La estaba dejando en paz? Ella miró con detenimiento el rostro del chico a su lado,por primera vez no vio ese ceño fruncido y y esa mandíbula apretada,era bastante guapo, decía Izumi pero ahora lo comprobaba.

– Si dices algo de esto, haré todo lo posible para que te expulsen– dijo amenazandola Megamo.

Ella aparto su mirada inmediatamente,sintiendo como el color se concentraba en sus mejillas levemente. Jugo con sus dedos nerviosa.

– ¿Quién eres?– pregunto Megamo.

– ¿Yo... Soy Ayano Aishi– respondió al chico sin mirarlo aún.

El chico asintió mientras miraba el cielo,por primera vez,el también saltaba las clases pero,está vez sin razones de trabajos,está vez porque quiso.

Ella no hablo por todo el rato,al principio fue incómodo pero,luego se acostumbro a la presencia de Megamo.

...

Estaba leyendo,bueno, fingiendo que leía algo en su escritorio mientras disimuladamente pasaba la mirada por el asiento vacío de la chica. Hoy no asistió a su clase,lo cual fue raro, aparentemente la chica no lo soportaba pero... Almenos asistía a sus clases. Miro el reloj impaciente,en unos 5 minutos sonaría el timbre indicando el receso.

Se preguntaba si estaba enferma,nadie dió excusa por ella en primer lugar, nisiquiera el castaño que siempre está con ella, nisiquiera el sabía dónde estaba Ayano.

<<¿Dónde estás? Niña molesta...>>.

...

Había bajado hace rato al patio de receso,se sentó en la banca que solía sentarse con Kiba a merendar. Escucho como el timbre sonaba para dar pie el receso y suspiro recordando lo que sucedió hace unos minutos.

Ayano observo al chico,solo se escuchaba al chico inhalar y exhalar,parecia dormido. Estaba tan avergonzada. Un chico estaba durmiendo junto a ella,Megamo Saiko,el chico más arrogante y firme de la Academia estaba durmiendo en esa banca junto a ella.

Ahora mismo,si lo hubiera conocido así de vulnerable como está ahora,no creería que ese fue el mismo chico que fue capaz de enfrentarse con Osoro Shidesu en más de 3 ocasiones.

Vio como un pelo del chico fue colocado encima de su nariz por el viento,el chico pareció fruncir el ceño incómodo mientras se aceleraba su respiración. Ayano supuso que el cabello en su cara le incomodaba y acercó su mano para apartarlo, lentamente,trato de ser cuidadosa y no despertarlo.

Su mano se detuvo de pronto,fue sostenida por el chico,quién la miro de forma sería con esos ojos blancos y a la vez tan profundos. Con un suspiro hacia arriba logro apartar su cabello de su cara y miro a la chica por última vez antes de pararse.

– Cuida lo que haces,Aishi,yo te estaré observando– dijo por último para como mismo vino,irse a pasos firmes sin mirar a  atrás.

Se quedó ruborizada en la banca,acariciando la muñeca anteriormente sostenida por Megamo.

–¡Ayano!–.

Escucho que la llamaban pero no veía a nadie.

– ¡Aishi!–.

Aún seguía sin ver a nadie,de pronto sintió un temblor en todo el lugar.

Despertó de su trance de recuerdo viendose siendo sarandeada por Kiba,quién trataba de hacerla recobrar la memoria.

– Ayano,Tierra llamando a Ayano–. Dijo para luego ver a la chica mirarlo y apartarse de él mientras sostenía su cabeza.

– ¡Hey! Idiota,no tenías que moverme así– dijo obviamente algo mareada.

– ¿Porque diablos te saltaste la clase del profesor pervertido? Dame una buena razon– dijo cruzandose de brazos.

– Yo... Fui llamada por la directora antes de entrar para arreglar unos documentos mios– dijo sonriendo nerviosa.

– Si hubiera sido así,hubiera enviado un reporte contándole de la situación al profesor y no te hubiera buscado como loco el pervertido,vamos,dime la verdad– .

Suspiro,cansada.

– Solo,porque quise ¿Bien? Ya deja de preguntar– dijo,se sentó en la banca nuevamente y Kiba le siguió.

– La próxima vez avisa... Sabes que me preocupas– dijo de forma sería a Ayano.

– Está bien,Kiba– y le sonrió.

Tiempo después,Hanako había llegado con dos bentos,uno para él y otro que hizo para Ayano. La chica lo acepto gustosa y felicito las habilidades del chico de cocinar.

...

– Sé que tienes información de todo lo que se mueve–.

– Hmm,si,quizás si,quizás no ¿Quién sabe? – dijo burlón.

– Te daré lo que quieras a cambio,pero necesito información de alguien– dijo el chico de pelo blanco con los brazos cruzados.

– ¿Qué tipo de información? – dijo el chico poniéndose derecho y arreglando sus anteojos.

– Todo,dónde vive,sus padres,sus anteriores centros de estudio... Todo –. El pelirojo levanto una ceja,no parecía muy convencido – Si no lo haces,podría manipular información para que seas expulsado–.

El pelirojo río.

– Saiko,no me vas a amenazar asi, siquiera me escribiste por tu cuenta. Fue revisando el celular del esqueleto andante de tu abuela,la directora–.

– Tienes razón,pero,tengo información suficiente de ti para hacer que te expulsen,además de tus anteriores faltas a la escuela– Megamo sonrió con esa mirada sería de siempre.

– Bien,ganaste,pero,solo será está vez... – dijo sacando su celular y entrando al buscador de sus archivos – Ahora,¿Me permites saber de quién necesitas la información,Saiko?–.

– Ayano Aishi–.

El de pelo rojo inmediatamente posó su mirada sobre Megamo sobre la pantalla del celular,lo miro confundido unos segundos pero no hizo preguntas ahora,luego revisaría porque tanto interés de parte del peliblanco.

Procedió a buscar la información y trasladarla al celular de Saiko ahí mismo y este,luego se marchó sin siquiera decir adiós.

...

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