Los demás especialistas empezarón a despertar. Al momento en que Kuya escucho como Riven empezaba a levantar a los demás quito su cola juguetona del cuerpo del peliazul, esta acción hizo que el peliazul pudiera volver a respirar. 

—¿Cómo dormiste Kuya?— el pelimorado volteo hacia donde escuchaba la voz; quien lo había llamado no evito dar una sonrisa al ver la ternura inconsiente que hemanaba el zorro recién levantado.

—Pude dormir bien cutie— le respondía a Nabu —Lo que más me gusto fue la almohada— Helia no evito sonrojarse al escuchar eso, ya que básicamente él fue la almohada del pelimorado.

Asi siguió la plática entre los especialistas y el zorro, por alguna razón los chicos se sentían muy comodos y agustos con la presencia del contrario. Y que decir de Kuya, aquella situación le traía muchos recuerdos. 

Estaban conociendose un poco más, hasta que el celular de los cuatro chicos se esucho como habían recibido un mensaje.

—¿Qué es?— preguntaba curioso Kuya al no entender lo que estaba pasando

—E-es un mensaje de S-sky— titubeaba al responder Helia, esto era porque el mayor se había apoyado en su hombro para ver sobre él, ocasionando que su aliento pegara directamente en su cuello; cabe decir que esa zona era muy sensible para el peliazul.

—Ahora que dice el príncipe— comentaba burlón mientras se acomodaba más en el hombro de su primera víctima, no evito sonreír al sentir como el contrario se tenso al momento en que empezo a pasar su mano disimuladamente por su espalda baja.

—Dice que hoy no tenemos ninguna misión y Saladino nos dio el día a todos nosotros— resumía el mensaje Timmy —Que solo estemos al pendiente si surge una emergencia— finalizaba para depués levantarse de su cama —¿Qué harán?— preguntaba mientras se estiraba.

El zorro no evito darle una mirada al cuerpo del pelinaranja.

—"Que bueno es ver nuevamente esa cintura"— pensaba Kuya lascivamente al ver como la camisa que tenía Timmy se levantaba un poco y daba a relucir su pequeña cintura (para un hombre). 

—Riven y  yo vamos a ir a Magix— informaba Nabu mientras agarraba sus prendas para cambiarse —Vamos a ir a conseguir algunas cosas que nos pidio Brandon...—la voz del pelimagenta interrumpio al castaño. 

—A ti te las pidio, yo solo voy porque necesito comprar algo— decía de manera tosca mientras se terminaba de arreglar el cabello. 

Kuya volteo a ver al pelimagenta y no evito darle un escaneo a como estaba vestido.

—"No puedo esperar a tener esos brazos como collar de nuevo fufufu~"— esto lo estaba pensando el pelimorado, al ver como los brazos de Riven sobresalían de sus típicas camisas sin mangas.

El pelimagenta al contrario no evito sentirse un poco nervioso al sentir una mirada intensa en el —"Cálmate Riven no es momento, aún no"— se regañaba a si mismo el chico que trataba de ignorar la intensa mirada.

—¿Y tú Timmy?— preguntaba Nabu al pelinaranja que ya estaba a nada de salir del dormitorio.

—Tengo que terminar unos prótotipos en los que he estado trabajando, también tengo que ir a Alfea— Kuya al escuchar esa escuela no evito endurecer su mirada, aquello lo noto el pelinaranja ocasionando que se sintiera nervioso ante la mirada tan dominante que emanaba el pelimorado

—S-solo voy p-por..por que Tecna m-e-e tiene que d-dar unos m-materiales-s—  respondía con dificultad el chico —¡Pero solo por eso!— los tres especialistas se extrañaron de que les estuviera dando explicaciones.

—Tranquilo Timmy lo entendemos— calmaba Nabu al pobre chico —¿Y ustedes que van hacer? — ahora su atención se iba al peliazul que estaba siendo abrazado por detrás por Kuya.

—"¿Esta mal que quiera ocupar el lugar de Helia?"— se cuestionaba el castaño al ver como el cuerpo del pelimorado estaba muy cerca del de su compañero.

Antes de que el peliazul contestara, lo hizo el zorro —Le pedí a Ao que me diera un recorrido por este lugar, ya que será de ahora en adelante en donde me voy a quedar— Kuya volteo a ver a Helia con una mirada complice —¿No es así Ao?—

—E-eh si— el peliazul no sabía de lo que estaba hablando el contrario, pero tampoco sabía porque le seguía la corriente.

💜🔞💜

Cuando el último chico salio de la habitación, Kuya con un simple movimiento de manos le puso seguro a la puerta y cerro las cortinas.  Helia se sorprendio, ya que era la primera vez que veía esos poderes por parte del zorro.

—Lindo si sabes lo que sigue verdad— susurraba el mayor en la oreja del contrario, en todo este tiempo se habían mantenido en la posición de como estaban con los demás. Helia estaba apoyado en el pecho del más alto.

Kuya tomo con delicadeza la barbilla contraria e hizo que este lo volteara a ver.

—No sabes como me alegra volver a tenerte en mis brazos— expresaba con cariño el pelimorado —Espero que puedas volver a recordar— 

En todo ese momento Helia no estaba entendiendo lo que estaba pasando, iba a preguntar pero en vez de que expresara una pregunta se le salio un gemido de sorpresa.

Kuya había unido sus bocas en un beso, este en un incio comenzo lento y suave, el peliazul podía sentir amor puro en ese beso. Pero cuando el mayor le pidió permiso para introducir su lengua, el beso paso de ser uno suave a uno fuerte donde la lujuría era protagonista. 

Helia pudo sentir como el mayor empezaba a desabrochar la parte superior de su pijama.

—K-kuya..ah~ e-esper...ah~..ra— gemia entre palabras, esto era porque el pelimorado estaba recorriendo sus manos en todo el pecho del contrario.

—¿Qué pasa Ao?— preguntaba juguetonamente mientras peñizcaba ambos pezones del menor, trayendo como respuesta un agudo gemido —¿Acaso no te gusta?—

El peliazul con trabajo podía recordar como respirar, los toques lo estaban volviendo loco.

—"¿Esta mal si cedo?"— pensaba Helia al sentir el fuerte calor en su cuerpo y más en cierta zona que ya hacía su aparición

—Porque no caes en la tención Ao— el peliazul podía sentir como el zorro susurraba en su cuello — Dime que pare y lo haré, pero mientras no digas nada te voy a llevar al pecado— daba su última oportunidad de arepentirse.

Pasaron unos segundos donde Kuya dejo de tocar al peliazul para que este pensará racionalmente.

—"Quiero sentirte como antes, pero si no quieres tendré que respetarlo mi querido Ao"— pensaba el pelimorado mientras veía al jadeante chico en sus brazos.

El mayor al no ver iniciativa del contrario, alejo sus brazos del cuerpo de Helia dispuesto a irse. Pero antes de que tan siquiera pudiera moverse, tomaron sus manos y estas fueron colocadas en los pechos contrarios.

Helia volteo la mirada hacia el mayor y con deseo en su mirada le dijo.

—Hazme pecar Volpe— y despues de eso el peliazul unio nuevamente sus labios en un desesperado beso.

Kuya abrio de sobremanera sus ojos al escuchar aquel característico apodo que le generaba muy buenos recuerdos.

En respuesta el pelimorado intensifico más el beso, coloco una de sus manos detrás de la nuca del menor e hizo presión en esta para poder tener un mayor soporte y evitar que este se alejara.

—"Ao, amor mío no sabes cuanto te he estado esperando"—

Helias empezo a cubrir aquel dildo con el lubricante que le dio Kuya, una vez que estuvo totalmente cubierto puso la punta de este en su entrada y empezo a presionarlo cuidadosamente.

Después de haber sondeado y frotar aquel trozo de plástico en su ano, fue capaz de encontrar el ángulo perfecto e introducir de golpe la mitad de aquel juguete.

—Unghh~— 

Para ponerles un poco en contexto, después de que el peliazul haya aceptado la propuesta del zorro, este con su magia habia desaparecido sus prendas inferiores y en medio de las piernas de Helia hizo aparición un dildo y un bote de lubricante color rosa.

Este confundido miro al mayor, este le dijo que como era la primera vez que Helia recibía placer por su ano, Kuya quería primero que él experimentara con su cuerpo aquella primera experencia. 

Y asi es como fue que nos encontramos en la situación actual.

—¿Qué es lo que sientes Ao?— preguntaba en un tipo susurro en su oído

—Ah~..se siente frío y siento algunas cosquillas— expresaba su pensar Helia

—¿Te molesta?—

—No, me encanta— y fue cuando empezo a mover ligeramente aquel juguete. 

—"No se porque tener a Kuya observando como me estoy martubando me genera cierta sobrestimulación"— pensaba el peliazul al sentir la intensa mirada del zorro.

—Oh, Parece que lo estas disfrutando— comentaba burlonamente

—¿D-de..verdad? ughh~— hablaba entre gemidos —Siento que aun...ughh~...no es suficiente—

—¿Necesitas moverlo más fuerte?— preguntaba al ver como Helia no movía con confianza el dildo

—S-si tan solo...hnghh..se m-moviera solo— pensaba en voz alta 

Kuya al escuchar esto sonrío con lascividad.

—Fufufu~ parece que estás batallando un poco, por qué no te ayudo un poco Ao—

Helia al escuchar eso no pudo evitar sorprenderse ante la propuesta del zorro.

—Tú querías que se moviera solo, ¿verdad?— el peliazul solo gemía en respuesta —Eso es muy fácil de resolver, solo se necesita un poco de magia—

El zorro concentro cierta de su escencia en su palma, para después pasarla al dildo, esto ocasiono que aquel objeto empezara a moverse sin que alguien lo tomara.

Helia estaba por comentar algo pero la toma sopresiva de su miembro por parte de Kuya lo hizo callar y exclamar un gemido.

—Ao antes solo estabas intentando meter la punta, ahora vamos a intentar completamente— dicho esto el dildo empezo ha adentrarse cada vez más al ano del peliazul.

—¡Nghhh! No..uh~..lo m-metas todo de golpe...ah~—

Debido al placer que estaba sintiendo el peliazul, esto solo podía sacar gemidos agudos ante el nuevo placer que estaba sintiendo tanto por su ano como por su pene.

—¿Eso es suficiente para ti?— la voz ronca hizo que inconsientemente apretara más su entrada —Puedo hacer que sea mucho mejor— 

Al terminar de decir esto, Kuya tomo el dildo y empezo a proporsionarle fuertes estocadas al contrario —¡No!..agh~..espera.. v-va rápid..AH! —

Helia se estaba sujetando de los brazos del más alto, debido a la corriente eléctrica que estaba sintiendo no podía dejar de soltar gemidos uno tras otro.

Una y otra vez, entraba el dildo en la entrada del peliazul, logrando que esta se expandiera y pudiera entrar cada vez más profundo auquel juguete.

El lubricante ya empezaba hacer efecto, este hacía que Helia sintiera un extraño y placentero hormigueo. El lubricante más los fluidos naturales que expulsaba, hacían que el sonido principal dentro de la habitación sea un glorioso chapoteo que si una persona lo lograra escuchar, se daría cuenta de lo que estaba pasando en aquel dormitorio.

Kuya en uno de sus movimientos había logrado dar con el punto dulce —¡AH~..AHÍ!— rogaba el contrario.

—Estás apretando tan fuerte esta cosa, que con trabajo puedo moverla— Helia no lo podía ver, pero el pelimorado había sacado inconsientemente sus colmillos, esto era debido a la exitación que estaba sintiendo en ese momento.

El zorro en un arranque empezo a bombear fuertemente el dildo a la pobre entrada de Helia, este en respueta estaba exclamando fuertes gemidos de placer. 

—S-si..ahg~..sigues asi..v-voy..AH~— y antes de poder terminar un líquido blanquecino hacía su aparición en la mano de Kuya, aquella que estaba sostiendo el miembro de Helia.

Su orgamo había llegado de golpe, logrando hacer que Kuya dejara de mover el dildo y empezarle a darle atención al duro pene de Helia junto a sus dos pezones que ya rogaban por atención. 

El zorro empezo a mover frenéticamente su mano alrededor del pene del peliazul, este primero lo había apretado fuertemente para después empezar a realizar la fricción. 

Debido a que Helia apenas había recibido su primer orgasmo, este aun seguía sensible.

—Ao parece que lo estas disfrutando demasiado— decía esto al ver como el contrario solo podía mantener la boca abierta y los ojos en blanco al recibir ese golpe de placer. 

Kuya al ver como el cuerpo de su amado pedía aún más placer, hizo que el dildo tomara fuerza y rápidez en sus estocadas al mismo tiempo que el movía con más fuerza su mano ante el sensible miembro del contrario.

—¿Aún no te llenas con esto? fufufu~— en eso el zorro tuvo una idea —Haber si con esto lo haces—

Helia no había entendido las palabras del pelimorado, pero al sentir como el dildo estaba expulsando algo directamente en su entrada hizo que se nublara su pensamiento.

—"¿Cómo es que esto se esta corriento dentro de mi?"— 

—¡Hgnnn..si sigues..ah~..así..v-voy..aghhh~!— fuera de su control, el abdomen de Helia se contrajo trayendo consigo su segundo orgasmo.

El peliazul respiraba pesadamente, aquello que había pasado lo dejo cansado junto con un dolor leve en sus caderas, debido a que este las movía inconsientemente para recibir más.

Kuya en ese momento chaqueo los dedos e hizo aparecer un gran espejo enfrente de ellos dos.

Helia se sorprendio mucho al ver su reflejo, su rostro estaba totalmente sonrojado, en las comisuras de su boca veía saliva saliendo de estas; pero lo que más le llamo la atención fue como su semen estaba regado en su abdomen y en las sábas de la cama.

Alzo su mirada y pudo ver como Kuya estaba observandolo, el peliazul al conectar mirada con él pudo ver la lujuría y deseo en esta.

El zorro ya tomo a su primera presa. Ahora ¿quién será el siguiente en caer?

Notas:

💜Los apodos "Ao" y "Volpe" le traen recuerdos del origen de todo a Kuya.

💜Kuya había puesto un hechizo a la habitación para que esta fuera insonora y asi evitar que se escuchar algo demás.

💜No llegaron a más debido a que Helia estaba cansado de tantas primeras emociones en tampoco tiempo.