➹ Capítulo Veinticinco
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I Can't breathe - Bea Miller
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Habían bajado a Clint en una camilla y a Thai en brazos de Thor, ya que solo había una camilla en el jet. Natasha no sabía con quien ir, por un lado estaba Clint, y por otro Thai.
- quédate con Thai- le murmuró adolorido Clint mientras iban por el complejo.
Natasha no esperó más y fué con su hija.
La dejaron en un cuarto médico aislado, era algo estrechó pero estaba rodeado por cristal. Natasha se apegó a el y vio aún desmayada a Thai. Quería entrar y estar con ella, pero le habían dicho que por seguridad de todos debían mantenerla aislada
No tardó mucho cuando Tony, Steve, Thor y Bruce llegaron a su lado viendo a Thaily con una intravenosa. Solo había entrado personal médico a verla.
- Tiene anemia y esta deshidratada, fuera de eso todo esta bien- murmuró Tony
Natasha mordió su labio y le dió una corta mirada a Tony. No creía que Thaily estuviera bien si habían experimentado con ella de forma forzada.
- Tienes que dejarme entrar- pidió Natasha
- Es mejor que éste aislada por ahora, Natasha... no sabemos que fue lo que HYDRA le hizo- dijo Steve
María llegó a la par de Tony, y por la mueca que tenía, sus sospechas sobre los últimos ataques eran ciertas.
- Por la información que me diste y el análisis de los últimos ataques, si- confirmó María- HYDRA uso a Thaily como arma
Tony suspiró con desánimo y Natasha los vio sin comprender, al igual que Steve quien tenía una ligera idea de lo que hablaban.
- ¿De que...? ¿Que esta pasando? - quiso saber la pelirroja
- Los poderes de Thaily son los mismos que los del alterado que estuvo asesinando los últimos meses... Ese alterado era Thaily- dijo María
- ¿Y cuales son sus poderes? - preguntó Bruce
- Telepatía, telequinesis, piroquinesis, manipulación molecular, control de la materia y energía- enumeró María y Bruce alzó las cejas impresionado- sus poderes se parecen mucho a los de la gemela Maximoff, pero el rango de manipulación mental de Thaily es mayor que el de ella, además de que su telequinesis alcanza una nivel atómico
- ¿Y eso que significa? - preguntó Steve sin haber entendido nada
- Puede manipular tu mente, recuerdos, percepción, hablar telepáticamente, inducir dolor con zumbidos positrónicos dolorosos que pueden estallarte el cerebro, provocar visiones, puede mover objetos con la mente y manipular la composición de esos objetos... - María suspiró viendo su tableta- es muy variado
Natasha pareció maldecir por lo bajó al escuchar lo que había dicho María.
- ¿Y saben que alcancé de manipulación tiene? ¿O si es estable? - el interés se mostró en el Dr. Banner
- No... - suspiro la ex-agente
- ¿Y se puede revertir? - pregunto algo ansioso Steve
La culpa de que Thaily estuviera pasando por eso calaba hondo en él
- Lo dudo- respondió Banner y los demás lo vieron buscando respuesta- es decir, usaron un artefacto alienígena del que no sabemos su origen en ella. Lo que sea que hayan hecho... pudo haberla matado
- Si no se puede revertir, la ayudaremos a controlarlo- asintió Tony- tenemos que saber el alcance de sus habilidades y así podremos frenar posibles fluctuaciones de poder
Natasha vio a Tony agradecida de al menos saber que Thaily tendría la ayuda.
- ¿Qué sabes de Strucker? - le preguntó Steve a Hill
- La OTAN lo tiene- contestó
- ¿Y qué hay de los otros dos alterados? - quiso saber Thor
- Wanda y Pietro Maximoff; gemelos. Quedaron huérfanos a los diez cuando un misil derribó su departamento- leyó la información Hill
- ¿Qué habilidades dices que tienen? - preguntó Steve
- El tiene un súper metabolismo y homeostasis térmica acelerada, lo de ella es interconexión neuroelectrica, telequinesis, manipulación mental- cuando María vio a Steve, supo que no había entendido- el es veloz y ella muy rara- resumió
Pasaron algunas horas, Clint había sido atendido por la doctora Cho y ya se encontraba mejor, ahora sólo esperaba poder ver a Thaily.
- Despertó- anunció Tony al par de espías que estaban en la sala.
No esperaron más y fueron de nuevo al área médica. Thaily estaba aún acostada en la camilla, con la mirada perdida en alguna parte de la habitación mientras jugueteaba con la sábana que la cubría.
Natasha trago en seco al ver su mirada distante y perdida. Le recordaba mucho a cuando la había encontrado por primera vez; tan rota y dolida.
- Tengo que entrar- dijo Natasha
- Puede ser peligroso- advirtió Tony
- No creo que me haga nada- asintió convencida Natasha- si quisiera escapar ya lo habría hecho
- Nat tiene razón, además, solo mirala- señalo Clint a su hija adoptiva que estaba ajena a lo que sucedía afuera
Tony suspiró, pero entendía la preocupación de ambos. Thaily estaba lejos de ser la chiquilla sarcástica e indiferente que había conocido, ahora sólo era una niña vulnerable que parecía perdida.
Thaily vio la intravenosa conectada al dorso de su mano. No sabía dónde estaba, pero sabía que no era HYDRA. Su cabeza punzaba adolorida y tenía la garganta seca... Tenía mucha sed.
Lo último que recordaba era estar atada a una camilla en HYDRA, ver entrar a Strucker y al médico que estaba al pendiente de sus poderes, luego comenzó a decir aquellas palabras...
Thaily se sostuvo la cabeza con dolor. De ahí ya no recordaba lo que había pasado, pero sabía que los recuerdos vendrían a ella después de unas horas. Escuchó un ruido en uno de sus costados y giró, viendo ahí de pie a Natasha.
Thaily no supo exactamente qué pensar. Natasha estaba ahí, viéndola con lágrimas en los ojos y una sonrisa triste. Sintió su corazón acelerarse al por fin verla, después de un largo y horrible año, pero no sabía cómo reaccionar, ni qué decir, las palabras se habían atorado en su garganta.
Todo eso se veía demasiado bueno. El pánico y la incredulidad se estaban apoderando de Thaily. Tal vez esa era una de las visiones que Maximoff le estaba haciendo, no sería la primera vez que la ponían a practicar sus poderes contra ella.
Pero en su campo visual también apareció Clint, el corazón de Thaily se estrujo ante la idea de ver de nuevo a sus dos hermanos y a Laura.
- Thai- la llamó Natasha- hola nena... - susurro acercándose con lentitud
- Nat...
Natasha soltó el aire qué no sabía que estaba conteniendo cuando la escuchó susurrar su nombre, muy apenas y lo había escuchado pero la llenaba de alegría escucharlo de ella.
Natasha asintió conforme se acercaba.
Al principio Thaily no mostró expresión alguna, aun estaba en Shock y tratando de descifrar si eso no era un especie de juego mental de Wanda.
- Estas de vuelta... - le dijo Natasha tratando de contener su llanto y del impulso de envolverla entre sus brazos
- ¿Si lo estoy? - preguntó con inseguridad- temo que este sólo otro buen sueño y luego despierte- admitió
- No lo es pajarito- negó Clint y Thaily lo vió a los ojos por primera vez- iremos a casa- aseguró
- ¿A casa?
- Si- asintió Natasha atreviéndose a tocar su pálida mejilla
El tacto se sintió tan real, qué Thaily ya no tuvo duda que por fin todo había acabado
Su pecho se contrajo en un sollozo lleno de alivio y las lágrimas de inmediato llenaron sus ojos. Ni siquiera lo pensó y se lanzó al pecho de Natasha que era el que tenía más cerca. Natasha la rodeó y acarició su espalda con suavidad con una músculo de su barbilla comenzando a temblar
- Por fin se acabó- sollozó Thaily- creí que ya no los volvería a ver... - lloró lo que había estado soportando un año entero
Clint se sentó en la camilla y Thai también lo abrazó. Los había extrañado tanto.
- Ya estás aquí pajarito- susurro sobre su cabello- ya nadie te va a lastimar
Thaily no pudo decir más, sólo lloró mientras las dos figuras más cercanas que tenía a un padre y una madre la consolaban. Tan solo unas horas atrás había creído que no los volvería a ver nunca... y ahora estaban ahí con ella.
Había deseado tanto ese momento, por tantas noches...
Clint no había podido evitar llorar junto a la niña que quería como a otra hija. La había extrañado tanto, y todo ese tiempo sin tenerla había sido como perder una parte de él. Le había mentido muchas veces a sus hijos sobre el paradero de su hermana adoptiva, y cada vez que lo hacía no podía dormir. Ese había sido el peor año de su vida para el castaño
Clint la acuno más en su pecho y Thaily se aferró a él como una niña temerosa de que su padre la fuera a abandonar. La simple imágen de ella así de temblorosa hizo que el nudo en su garganta aumentará y de sus ojos salieran más lágrimas. Jamás la había tenido que consolar así, jamás había visto a esa terca y perseverante chiquilla tan rota, salvo un par de veces cuando tenía ataques de pánico, pero apenas pasaban volvía a ser la misma. Besó la cabeza de Thaily y sus lágrimas cayeron en parte del cabello pelirrojo de la menor
Natasha notó el lado más frágil y paternal de su mejor amigo con su hija, y aunque una parte muy grande de Natasha deseaba que James estuviera ahí así con Thaily y ella, no podía evitar pensar que el amor de Clint por su pequeña era el mismo que con sus otros hijos.
Clint le extendió la mano por detrás de la espalda de Thaily y Natasha se acercó más a los dos, apoyó su cabeza en el hombro de Clint y lo abrazo por la espalda, con su otro brazo libre rodeó a Thaily, así entre los dos la tenían acunada y rodeada con temor a que se fuera a ir en cualquier momento
Natasha también estaba llorando junto a su pequeña mientras plantaba algunos besos húmedos por las lágrimas en su cabello. El dolor de haberla perdido por segunda vez había sido aún peor que la primera, ya que en ese tiempo sabía que estaba en buenas manos, pero ahora simplemente se había esfumado de un momento a otro y ni siquiera sabía si aún seguía con vida. Y aunque no había pasado tanto tiempo como la primera vez, Thaily estaba aún más rota de lo que la había dejado la Habitación Roja, pero se encargaría de ayudarla a recoger sus pedazos y ayudarla a levantarse
No supieron exactamente cuánto tiempo pasó hasta que Thaily se calmó, aún hipaba un poco pero ya estaba mejor.
- Tengo mucha sed- se quejó Thaily con la voz ronca
Clint la tenía apoyada en su pecho mientras acariciaba su cabello. Natasha limpió la húmeda mejilla de Thaily y le sonrió.
- Te traeré algo de beber- anuncio y salió de ahí limpiándose las lágrimas
Los ojos de Thaily le ardían de haber llorado bastante, pero había encontrado alivio al hacerlo, una muy pequeña, muy diminuta forma de alivio en su pecho.
- ¿Cómo te sientes?
Thaily pensó un poco y tomó algo de aire sintiendo su garganta muy seca.
- Adolorida, cansada... sucia- puso los ojos en blanco- quiero bañarme
Clint la vio con preocupación. La ropa de Thaily estaba muy desgastada y sucia, tenía unas muy marcadas ojeras y estaba muy pálida. Se veía enferma.
- Bueno, vas a descansar, te vas a bañar, cenaras algo y dormirás... Mañana te prepararé un rico desayuno... luego iremos a ver a tus hermanos- planeó el de cabello castaño
Una sonrisa algo emocionada apareció en su pálido rostro, pero así como había aparecido se fue.
¿Y si lastimaba a sus hermanos? No quería estar cerca de ellos si era inestable. No con esa entidad cósmica y extraña que le decía que sólo traería caos y destrucción.
Thaily se separó de Clint y su mirada se tornó vacía. No quería lastimar a nadie, era peligrosa y temía lo que sus caóticas emociones podían provocar a su alrededor.
- ¿Qué pasa? - las líneas debajo de los ojos de Clint se marcaron en preocupación al ver el súbito cambio en Thaily
- Nada... es sólo que, no creo que deba ir a verlos aún- susurro sin verlo a los ojos- ya no soy la misma- confesó en un poco audible balbuceo
- Claro que eres la misma Thaily, ¿según tu porque no lo eres? - quiso saber el arquero
Sus ojos verdes brillaron con las lágrimas. Estaba aterrada de lo que pasaría ahora, ya nada sería lo mismo y le dolía
- No quiero lastimar a nadie, es todo- susurro limpiando sus lágrimas esforzándose en no romperse otra vez
Clint estaba por hablar pero Natasha entró de nuevo con una botella de agua y se la dio a Thaily. La menor tomó la botella y trató de abrirla, pero su manos temblaban y no podía.
Natasha la vió con preocupación y Clint se la quitó de las manos, la abrió y se la regresó. Thaily de una sola empinada vació todo el líquido de la botella en su garganta, aún así la sed seguía.
- ¿Por qué dices que no quieres lastimar a nadie? - se atrevió a preguntar Clint, Natasha le dió una mirada llena de confusión a su mejor amigo
Thaily le dió una corta mirada a ambos adultos y luego la bajó a sus manos. Tenía mucha tentación de rascarse los brazos pero se contuvo
- Experimentaron conmigo... HYDRA metió muchas cosas en mi cabeza que en cualquier momento podrían... - Thaily suspiró temblorosa y con algo de pánico, llevo su mano a su sien y talló ahí de forma frenética- soy una bomba de tiempo que en cualquier momento va a explotar- balbuceo con sus lágrimas escapando de sus verdes
- Thai- llamó Natasha acomodándose a su lado y apretando la mano con la intravenosa entre las suyas con cuidado- todo va a estar bien... sé que HYDRA te hizo mucho daño... pero no estas sola y te vamos a ayudar- aseguró - así como lo hicimos cuando te acogimos
Thaily estaba por hablar, quería decirles sobre la extraña fuerza, la presencia que ahora habitaba en ella, pero ya estaban demasiado preocupados por ella, ya no quería ser más una carga para ellos, así que se tragó sus lágrimas y su desesperación... y asintió.
Ellos creían que ya todo había acabado, que por fin ella era libre y solo tendría que recuperarse. Eso dejaría que pensaran y ella lidiaría sola con el monstruo en su cabeza... o al menos trataría
Thaily alegó estar muy cansada y que quería recostarse. Ambos insistieron en quedarse junto a ella pero Thaily negó, quería estar sola.
Al verlos salir por fin de su pequeña habitación se recostó en posición fetal en la camilla, su corazón se apretó y se hundió en el ácido de su estómago al sentir miedo.
Tenía miedo de lo que le esperaría ahora, con sus poderes y el ser que había entrado a ella. Era tan irreal lo que le estaba pasando, pero el dolor y sus palabras resonando una y otra vez en su cabeza eran la prueba de que era real.
Sus ojos verdes enfocaron la luz naranja del Sol colarse por una de las ventanas, a ella le encantaba ver los atardeceres y los amaneceres, pero ahora sólo eran cualquier cosa, no tenía fuerzas para ir a ver un simple atardecer...
Ese pensamiento causó una extraña sensación de frío y nostalgia, eran como estar muriendo por dentro. A decir verdad, la sensación de estar de nuevo entre los brazos paternales de Clint y las palabras de Natasha no habían hecho que ella sintiera calidez, sólo una pequeña sensación de cobijo, pero había sido muy efímero.
Llevó ambas manos a su pecho y presionó ahí. Era como si se estuviera perdiendo a ella misma, todo se estaba tornando gris y frío a su alrededor, como si algo dentro de ella se estuviera marchitando y expandiendo, invadiendo todo. Era como si sus pensamientos no fueran de ella, si no de otra persona que había creado HYDRA a base de dolor.
Tal vez estaba libre de HYDRA, pero mentalmente estaba atrapada. Había vuelto al inicio de todo, igual que cuando había escapado de la Habitacion Roja, sólo que esta vez HYDRA había podido romper mucho más en ella y las heridas eran más profundas. Thaily ya se había levantado de cada golpe que había recibido, se había quitado demasiadas lágrimas del rostro y se había tragado otras tantas, pero esta vez simplemente estaba demasiado débil para levantarse de nuevo ¿Por qué no dejarse hundir un rato?
Steve, quien fue avisado un rato atrás de que Thaily por fin había despertado, se acercó en silencio hasta la puerta. Thaily estaba ahí, sus ojos estaban enfocando la ventana pero su mirada se veía distante y pérdida. Podía notar que estaba bastante afectada ante todo lo que había pasado por casi un año en manos de HYDRA.
Steve creí que era injusto todo lo que le había pasado, las mentiras que le decían Natasha y Clint; lo que HYDRA había metido en su cabeza y le habían hecho con los experimentos; pero sobre todo, el daño psicólogo que seguro ahora tendría. El progreso que había mostrado antes de que HYDRA se la llevará había sido bastante notorio, pero ahora no estaban seguros de que tan mal estaba.
Thaily notó a Steve en el umbral de la puerta. Una pequeña sonrisa apareció en su rostro.
- Hola- dijo ella sentándose en la camilla
Steve sonrió con algo de alivio al ver que ya lo reconocía. Thaily estaba ahí después de tanto...
- Hola- respondió Steve y entró en el pequeño cuarto médico
Thaily dejó de pellizcarse el brazo y cubrió la marca de forma disimulada. No quería preocupar a nadie más de lo que ya lo hacía, sobre todo con algo tan estúpido como las autolesiones. Sabía que no debía hacerlo, que era un idiota por hacerlo, pero no podía evitarlo
»- Te traje una hamburguesa- le extendió la bolsa de papel- tu... me ganaste la carrera...
Recordó hacía más de un año que eso había pasado pero seguía fresco en la mente de Steve... esa había sido su última mañana corriendo juntos antes de que todo pasará
Thaily sonrió más y tomó la bolsa
- Aww gracias- rió Thai pero dejó la bolsa aún lado- pero recuerdo que me dijiste que ya no me la ibas a dar
Steve vio extrañado a Thai y cómo dejó la bolsa aún lado. Thaily lo notó e inclinó un poco la cabeza
»- ¿Qué?
- Nada, es solo que no comiste tu hamburguesa- señaló la bolsa
- No tengo hambre- se alzó de hombros Thai
Steve frunció el ceño más. Eso era extraño en ella
- ¿Te sientes mal? - preguntó preocupado
Thaily no pudo evitarlo y rió, se rió como no la había hecho en mucho tiempo y eso de cierta forma fue liberador
- No... solo no tengo hambre- confesó con una sonrisa
Steve sonrió al verla reírse un poco. Verla ahí después de mucho tiempo sana y salva era tranquilizador.
- Es extraño verte sin hambre- admitió Steve
- Lo sé- asintió de acuerdo Thaily- hasta me siento extraña- arrugó el gesto
Steve rió y negó. Ahí estaba la Thaily que conocía.
»- Te extrañe... - susurro Thaily.
Sus ojos brillaban ante las lágrimas que retenía pero una sonrisa que resaltaba sus ojuelos estaba presente en su pálido rostro
Para Steve esa sonrisa mostraba mucho, desde una pizca de felicidad y esperanza, hasta dolor y podría decirse que... muchas ganas de ya solo morir, pero tal vez era solo su imaginación. Realmente esperaba que solo fuera su imaginación.
Steve quería abrazarla, en serio quería hacerlo pues era su pequeña mejor amiga que casi había perdido, pero sabía que a Thai no le gustaban los abrazos y se contuvo
- Yo también te extrañe... mucho- confesó Steve
- Hazlo- alentó Thaily
- ¿Hacer que? - preguntó confundido
- abrazarme. Ahora si lo necesito- concedió
Steve algo confundido del que ella supiera que quería abrazarla, lo hizo, no le importaba ahora cómo lo sabía, solo quería hacerlo.
Thaily cerró los ojos al sentir los fuertes brazos de Steve rodearla. Era cálido y muy reconfortante, él era tan fuerte y ella estaba casi rota... se sentía tan frágil.
Una lágrima silenciosa cruzó su mejilla. Por fin estaba libre y podía verlos de nuevo, los había extrañado tanto, pero tenía mucho miedo de acercarse y al mismo tiempo tenía aún más miedo de estar sola
Steve sintió como Thaily apretó la tela de su camisa entre sus dedos. Parecía querer convencerse de que era real y aferrarse a algo. No imaginaba todo lo que había tenido que pasar. Estaba muy delgada, ella siempre había sido menuda y ligera pero ahora estaba casi en los huesos; sus mejillas estaban descoloridas y su cabello muy enmarañado. No la habían tratando como un ser humano siquiera
- Estás bien... eres libre, estás a salvo- susurró Steve, pero sentía que trataba de convencerse más a él que a Thai
Thaily contuvo un sollozo y trató de encontrar consuelo en esas palabras, pero no podía... se estaba volviendo increíblemente difícil encontrar esperanza. Sentía que ya no podía más, solo quería dejar de luchar por una vez en su vida.
Steve la tomó del rostro y notó la mejilla húmeda de la menor. Los ojos de Thaily se veían algo apagados y con una profunda tristeza queriendo invadirlos por completo, le dolía verla así.
Le dió un tierno beso en la frente y le sonrió con tristeza.
Thaily sintió como sus mejillas adquirían un ligero tono rojizo. Era extraño como aún sentía eso con la misma fuerza de antes, aún cuando trataba de sentir lo mismo por todo lo demás, era como si todo fuera frío, pero con él era exactamente lo mismo, incluso podía decirse que con más fuerza que antes
- Cre-creo que ya fue suficiente- susurro Thaily tratando de ocultar su nerviosismo
Steve le dio su espacio y se sentó a su lado. De cierta forma temía que ella se fuera a ir de pronto.
- ¿Qué le pasó a tu cabello?- preguntó Steve viendo la tonalidad rojiza, casi del mismo tono que el de Natasha
Thai tomó un mechón enmarañado y lo vió con el ceño fruncido. Era cierto que estaba rojo ahora, muy apenas y lo estaba notando
- No tengo idea, mi cabello siempre fue rojizo pero ahora lo está más- susurró con una mueca- ¿Se ve mal?
- N-no- dudó en responder
No se veía mal, pero pensaba que eso le daba un gran parecido con Natasha
Thaily entre cerró los ojos al verlo dudar
- No me mientas. Sé que justo ahora me veo horrible pero no tienes que mentirme- rió ella
- No te ves horrible solo...
"Te trataron muy mal" pensó él sin ser capaz de completar la oración
- Lo sé- respondió escuchando sus pensamientos y Steve la vió con confusión- no tienes que verme con lastima Steve. Sé que lo que me pasó fue horrible y doloroso, pero justo ahora sólo quiero enterrarlo en el fondo de mi mente y jamás recordarlo- susurró sin verlo a los ojos
Steve puso su mano sobre una de las de Thai y le dió un apretón, pero Thaily apartó la mano como si el contacto le quemara. No sabía si era por miedo o nerviosismo, pero justo ahora Thai quería alejar a todos. Temía por la seguridad de todos.
Steve vio con preocupación a Thai, podía notar el temor en ella.
- ¿Thai?
- me gustaría estar sola... por favor- pidió ella mordiendo su labio inferior
Las palabras de su visión no dejaban de repetirse en su cabeza como un eco, hasta parecía apropósito
- ¿Por qué no sales del cuarto? Despertaste hace horas y Bruce dice que no hay nada malo contigo- quiso saber él rubio sabiendo que algo andaba mal con ella
- No quiero lastimar a nadie- susurró apenas sin alzar la vista
- No lastimaras a nadie, ya todo está bien... HYDRA ya no tiene control sobre tí- alentó él
Thaily negó y retuvo sus lágrimas, nada estaba bien, ella no estaba bien. Sentía que no respiraba y la esperanza la estaba abandonando, ya nada era igual. Un suspiro tembloroso salió de sus labios, se estaba ahogando.
»- Thai...
'Vaya, vaya... así que es el por quien te aferras...' escuchó Thaily
- Déjame en paz- siseo tomándose las sienes tratando de frenar a la voz en su mente- solo cállate, déjame
Steve la vió aún más preocupado, algo andaba muy mal
"¿Qué te hicieron?" escucho Thaily que pensó Steve
Thai alzó la vista y conectó sus ojos con los de él
- Ellos pudieron conmigo... - balbuceo- creó qué estoy rota- confesó
- No... - negó él poniéndose de pie y se colocó justo frente a ella- no estás rota, estás bien, ya estás a salvo... ya nadie te va a lastimar- aseguró
- No estoy bien- insistió- hay algo muy... m-mal conmigo- sus ojos brillaban ante las lágrimas contenidas- trató de permanecer fuerte frente a Clint y Natasha... pero es más fuerte que yo- su respiración se cortó, estaba por hiperventilar. No quería tener un ataque
- Hey respira, tranquila Thai, respira- trató de calmarla
- No puedo respirar, ya no puedo... duele cuando lo hago- balbuceo entrando en pánico- me duele mucho...
Steve sin saber que decirle la atrajo de nuevo a un abrazo. Ella no se resistió y sólo se quedó quieta tratando de encontrar calidez en él. Steve era tan cálido y ella se sentía tan fría.
- Shh... todo va estar bien, vas a estar bien- aseguró él mientras acariciaba su cabello
- No estoy segura de eso... ya no estoy segura de nada- susurró
- Thai- Steve la tomó del rostro y la hizo mirarlo, pero se encontró con unos ojos que parecían estar muriendo- ¿Dónde está la chica que siempre luchaba por levantarse? ¿La chiquilla fría que mandaba a todos por el caño? La Thaily que siempre vuelve un muro en un peldaño...
Los labios de Thaily temblaron y ella suspiro
- No tengo idea...- se alzó de hombros y trató de sonreír, pero salió más una mueca dolida- creo que me perdí a mi misma...
El pecho de Thaily comenzó a subir y bajar con fuerza
»- soy tan patética. Ella lo dijo, no deja de decirlo, ya me tiene harta y no puedo callarla- balbuceo con la mirada perdida y Steve no sabía qué hacer
- Thai, hey Thaily, mírame- llamó su atención tomándole del rostro de nuevo y buscando sus ojos perdidos- ¿Quién es ella? ¿De quien hablas?
Thai parpadeo y cuando notó la cercanía del rubio retrocedió en la camilla y atrajo sus piernas a su pecho
- Na-nadie... No es nadie- asintió con nerviosismo y limpio una lágrima traicionera- quisiera estar sola, quiero descansar un poco... estoy cansada
Steve suspiró sin saber si dejarla sola así como había estado
- ¿Estás segura de que no quieres que nadie esté aquí contigo? Puedo decirle a Natasha que venga, o a Clint
Thaily negó. Solo quería estar sola
»- No quiero que estés sola
- No estoy sola- balbuceo solo para ella y Steve no alcanzó a oír bien- Estaré bien- aseguró pero ni ella se lo creyó
Steve resignado salió de ahí, sólo podría ayudar si Thaily le hablaba, mientras tanto no podía hacer nada más que apoyarla y respetar su espacio
Al verlo salir Thaily soltó el aire que estaba conteniendo. Estuvo apunto de decirle de la presencia que vivía en ella, pero no podía decirle, o de lo contrario pensaría que ella estaba loca.
Solo quería volver a el tiempo donde todo estaba bién, donde estaba ganando la batalla contra la ansiedad, cuando aún disfrutaba de los atardeceres y el simple hecho de ver aves volando en el cielo
Thaily llevó su mano a sus labios y trató de frenar los sollozos. Quería alzar su muro y mostrarse fuerte, pero ahora simplemente su corazón estaba agotado y no podía hacerlo
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Natasha había preparado la habitación que sería para Thaily Era hora de que saliera de aquel cuarto aislado.
Clint estaba algo preocupado por su hija adoptiva y lo que había dicho sobre lo que HYDRA había metido en su mente, temía que ella tratara de aislarse. Llegaron ambos espías con Thaily y encontraron a una mujer del personal médico quitándole la intravenosa
- ¿Lista? - preguntó Natasha y Thaily frunció su ceño sin entender de qué hablaba
- ¿Para qué?
- Para ir a tu habitación- respondió Clint- además los demás quieren verte
Thaily llevó su mano a su antebrazo y rascó de forma involuntaria. Natasha lo notó pero decidió que no diría nada hasta estar a solas con ella.
- Yo... me-mejor me quedo aquí... aquí estoy mejor- balbuceo sin dejar de rascarse
- Cariño, no está bien que te aisles- trató Clint de hacerla cambiar de parecer
Thaily mordió su labio y negó. No quería provocar ningún daño.
- Estoy bien aquí- aseguró con una sonrisa que a leguas se veía fingida
Clint suspiró pero no se iba a rendir
- Okay- se acercó a Thaily y la alzó tomándola por sorpresa
- N-no.. ¡¿Qué..?! - apenas y se aferró a él pensando que se iba a caer- Clint, suéltame- pidió pero él no le hizo caso
La sacó del área médica con Natasha siguiendolos por detrás
»- in-invades mi espacio... - trató de resolverse pero Clint logró mantenerla estable - ¡Claustrofobia! ¡Necesito mi espacio! - exigió
- Lo sé, y tu habitación es más amplia que ese cuarto en el que estabas- Respondió Clint con simpleza
Thaily se quejó y dejó de poner resistencia. Clint dejó a Thaily en su cuarto y Natasha ya le tenía la tina lista y su pijama. Solo querían que descansara después de ese largo día.
- ¿Y donde se supone que estamos? - preguntó Thaily
- Tu habitación- contestó Natasha mientras le tendía su ropa
- Yo me refiero a el lugar- tomó su ropa y miró a su alrededor. Tenía que admitir que era lindo
- En la torre Stark, o torre Vengadores ahora
Thaily alzó ambas cejas. Al parecer había pasado mucho ese año
»- Te contaré todo luego, ahora debes tomar un baño
La ojiverde entró al baño en silencio y cerró la puerta tras ella. Dejó la ropa en un estante y se vio al espejo. Notó que tenía unas muy marcadas y oscuras ojeras, además de que tenía los ojos hinchados. Sus ojos no parecían los mismos a los de hace un año; su cabello estaba aún más rojizo que la última vez. Se sentía como otra persona, una muy rota y sin fuerzas para seguir realmente.
Estaba dejándose ir lentamente al fondo y su muro estaba caído, por ahora lo tendría así pues estaba demasiado agotada emocionalmente para alzarlo. Odiaba lo que había en su reflejo; una cría asustada y vulnerable, que con cualquier golpe se iba a romper. Detestaba que lo demás pudieran verla así, tan fácil de doblegar y lastimar.
Las lágrimas se reunieron en su ojos y no se molestó en frenarlas, solo las dejó seguir su camino. Tomó unas tijeras que había en uno de los cajones y los llevó a su maltratado cabello pelirrojo, podía notar como las puntas estaban más oscuras y sus raíces eran de un color más rojizo. No lo pensó mucho y comenzó a cortar su cabello a el ras de sus hombros.
Al final había un montón de mechones rojizos en el suelo y ella se metió a la tina.
Thaily se sintió muy aliviada de por fin tener un baño decente después de mucho tiempo, era mucho mejor que solo un paño de tela con agua.
Tardó bastante en estar satisfecha con su aseo personal. Era muy quisquillosa en cuanto a la limpieza, así que tardó mucho en el baño. Se vistió con una pijama azul celeste y por fin salió del baño. Natasha estaba ahí sentada en la cama esperándola con una bandeja de comida, ahí estaba la hamburguesa que le había dado Steve, con todo y papas.
- ¿Mejor? - preguntó Natasha
Thaily asintió y se sentó a un lado de Natasha
- No tengo mucha hambre- señaló la bandeja con comida
- Pero aún así vas a comer, tienes anemia, Thai
Thai hizo una mueca y resopló. Se acomodó mejor en la cama y comenzó a comer en silencio. No sabía que decir, y a decir verdad no tenía ánimo de hablar de nada. Solo quería quedarse a solas. Era por el bien de todos, aunque odiara la soledad.
- Terminé- anunció apenas terminó con su hamburguesa y un jugo.
Natasha tomó la bandeja y estaba por salir cuando la voz de Thaily la frenó
»- ¿Tu crees que lo corte mal? - preguntó Thaily frente al tocador viendo su cabello
Natasha dejó la bandeja en la cómoda esperando que Thaily le reprendiera por eso sabiendo lo ordenada que era, pero no lo hizo y eso la extraño
- Lo cortaste tú sola ¿verdad? - Thaily asintió y Natasha no vió que estuviera disparejo o con algo que se viera extraño- te quedó bien, se ve lindo- sonrió la mayor
Thaily solo se dió una corta mirada en el espejo y se alzó de hombros para volverse a sentar en la cama
Natasha notó su mirada apagada y llena de tristeza. Su corazón se hundió en el ácido de su estómago y las líneas debajo de sus ojos se marcaron con preocupación. Podía ver que el muro de Thaily estaba caído por completo y estaba demasiado afectada por todo
- Me veo patética ¿no es cierto? - susurro Thaily jugueteando con el borde de su blusa para dormir
Natasha negó y se sentó de nuevo junto a ella
- Claro que no, Thaily- la tomó de la barbilla y la hizo mirarla- no vuelvas a decirte eso
Thaily solo dió un vago asentimiento y ya. Natasha no supo qué hacer, hasta que recordó la cadena de Thaily
»- Yo... - Natasha sacó la cadena de uno de sus bolsillos- encontramos esto entre los escombros ese dia
Thaily alzó la mirada y cuando vió su cadena de plata su corazón se aceleró
- Yo... Creí que lo había perdido- balbuceo y sus comisuras se alzaron temblorosas en una sonrisa agradecida- gracias
Natasha se la dio y Thaily la apretó entre sus manos. Había llorado mucho la pérdida de su cadena, pues era lo único que tenía de su madre.
Natasha sintió la necesidad de decirle a Thaily la verdad, de contarle todo. Pero sentía una enorme cantidad de culpa al recordar cómo había llorado horas atrás, el saber que ahora todo lo que habían avanzado contra la ansiedad se había perdido, que otra vez estaba muy lastimada y de nuevo era por su culpa
Natasha se tragó el creciente nudo en su garganta, parpadeo para espantar sus lágrimas y se levantó dispuesta a dejar la bandeja en la cocina.
Thaily sintió un fuerte dolor en su sien y como la voz de su cabeza comenzaba a gritar demasiado aturdiendola. Gritaba tanto que no podía entender lo que le decía, solo escuchaba la palabra 'mentirosa' en su cabeza resonando una y otra vez. Thaily llevó sus manos a sus oídos y se quejó apretando sus párpados. No entendía por qué estaba pensando eso.
Natasha se giró cuando escuchó a Thaily quejarse, pero sus alarmas se dispararon cuando la vió comenzar a respirar entrecortada
- Thaily- se quiso acercar pero ella negó
- V-vete... - pidió en un susurro temeroso
Thaily se puso de pie a pasos inestables buscando llegar al baño y encerrarse ahí
Natasha no hizo caso y trató de llegar hasta ella
»- ¡No! ¡Alejate! - gritó Thaily y un gemido de dolor salió de sus labios
La Fénix no dejaba de gritar en su cabeza, una y otra vez causándole dolor y mucho pánico. La fuerza estaba muy enojada, y temía lo que podía llegar a provocar
- Thaily mírame- pidió Natasha caminando con cautela hacia su hija
Thaily comenzó a jadear por respirar, el pánico estaba viniendo y eso no era bueno, sobre todo con sus poderes.
- cállate... cállate- le pidió a la voz en su mente- ¡Déjame en paz! - grito arrodillándose por el dolor sin dejar de sostener su cabeza
- Thaily, mi amor- pidió Natasha
Thaily ni siquiera notó el mote cariñoso que le dijo Natasha por la voz que resonaba y gruñía en su cabeza era aún más fuerte. Las luces del edificio entero comenzaron a parpadear alertando a los chicos que estaban en la cocina.
- Y-ya basta... - suplicó en un sollozo Thaily
- Hey... Thaily escúchame- se arrodilló Natasha frente a ella
Thaily hizo un ademán y su energía alejó a Natasha de ella sin ser brusca, solo la quería lejos de ella para no lastimarla
Natasha quedó aturdida al ver por primera vez los poderes de Thaily. Tardó un poco en reaccionar, pero volvió en sí al escuchar los gritos de Thaily
- Tha-
- ¡ALEJATE! - gruño Thaily y Natasha esta vez fue empujada con brusquedad y alzada sobre la pared
No se podía mover
'¡ELLA TE ESTA MINTIENDO! ¡ES LA CAUSA DE TODO TU DOLOR! ¡ELLA VA A DESTRUIRTE!'
- ¡DÉJAME EN PAZ! - las luces parpadearon aún más a su alrededor
'¡TENEMOS QUE ESTAR SOLAS!'
- ¡Silencio, silencio, silencio, silencio! - jadeó aún arrodillada- ¡DIJE SILENCIO! - su voz resonó en todo el piso y todos los focos y luces explotaron al igual que Natasha dejó de ser sostenida en el aire y cayó de rodillas
Por fin la voz de la Fénix dejó de escucharse y Thaily jadeó quedando en el suelo. Apenas pudo respirar mejor el llanto no se hizo esperar y se desmoronó
- Thaily- Natasha se arrodilló de nuevo junto a ella
Thaily retrocedió arrastrándose hasta que se topó con la pared
- ¡ALEJATE! - le gritó envuelta en pánico- ¡No quiero hacerte daño! - lloró aún más
Su llanto estaba lleno de histeria y no podía dejar de temblar
- Thai
- ¡Vete! ¡Alejate de mi!- siguió gritando paranoica
- Tranquila, ya pasó- susurro Natasha y Thaily negó fuera de sí. Jamás la había visto así
- No, no, no, no, no- Thaily hipo y tuvo un espasmo mientras se mecía en el suelo- quiero que se vaya, quiero que se vaya... - jadeó sosteniéndose la cabeza
Natasha busco atraerla a su pecho pero Thaily se resistió, ambas forcejearon mientras Thaily gritaba y lloraba en el suelo
»- ¡SUÉLTAME! ¡NO!
Natasha logró envolverla y Thaily por fin cedió pero sin dejar de llorar. Aún estaba paranoica
»- quiero que se vaya, que me deje en paz... yo no la quiero, no la quiero- sollozo y Natasha daba todo de sí para no soltarla, pues Thaily no dejaba de moverse mientras balbuceaba- ¡YO NO PUEDO VIVIR ASÍ! - gritó histérica
Clint veía a Thaily y a Natasha en el suelo. La menor estaba completamente fuera de sí y Natasha luchaba por mantenerla quieta y calmada
El resto de los Vengadores no sabían que hacer, solo podían mantenerse al margen de la situación
»-... no puedo
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Body and Mind- Girl in Red
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