➹ Capítulo Setenta
Un gemido algo dolorido salió de sus labios con el sudor bajando por su frente apretando los párpados. Todo parecía tan real
— Únete a mi— escucha un voz áspera y grave sobresalir del resto de los gritos
Había muerte, cenizas, caos y todo giraba concentrado en seis gemas coloridas y brillantes, pero lo más aterrador de todo eso era un increíble e insoportable dolor, como si arrancarán algo de ella
— Tú poder es más grande que esto…
Flashazos de imágenes la aturdían una y otra vez provocando que apretara los párpados aún más. Había un imponente halo de fuego, un destello naranja de una explosión abriéndose paso entre los árboles…
— … una fuerza cuyo límite se desconoce..
Las seis gemas brillaban cada vez más y un rugido ensordecedor la aturdía.
—… nacida al mismo tiempo que las gemas
— ¡THAI!
Y fue cuando la rubia se sentó en su cama después de jadear. Apenas reguló su respiración suspiro y pasó una mano por sus cabellos buscando calmarse
'Él está cerca… debemos prepararnos'
— ¿Quien?
'La razón por la que te busqué… '
Thaily respiró hondo y no creyó poder volver a dormir, así que se levantó y sacó una pequeña maleta.
Lo que sea que hubiera sido eso, le daba una extraña opresión en el pecho, una que la tenía muy inquieta. Sentía que una guerra se avecinaba, una batalla que debía ganar sin opción.
Más de un año había pasado desde la última vez que había visto a Natasha y a Steve. Thaily era una jovencita de más de dieciocho años.
Su negocio como el "Mediador de poder" le daba ganancias todos los días lo suficiente para retirarse de por vida viviendo bien y sin preocuparse. Incluso le había dejado a Sharon uno de sus clubes para que ella formara un negocio independiente por sí misma.
Había tenido algunos encuentros con los gemelos durante ese año, y aunque no estaban del todo de acuerdo con sus negocios, sabían que no podrían hacerla desistir. Aún así las llamadas eran seguidas y también las cartas. Thaily incluso los había apoyado económicamente para que no se quedarán sin comer y tuvieran un techo sin preocuparse demasiado. También tenía contacto de vez en cuando con Yelena, pero sin decirle dónde estaba y lo que hacía. Yelena siempre que podía le ofrecía ir con ella y cuidarla, algo que conmovía a Thaily, pero aún así negaba.
Thaily luchaba por ser independiente, pero aún en el fondo, cuando no quería admitirlo, se sentía un poco sola.
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— Lila, ayúdame a poner la mesa— pidió Laura a su hija que de inmediato apareció en la cocina ayudando a poner los platos
— ¡Uhmm! ¡Que bien huele mamá! — exclamó Clint apareciendo al oler la comida
— ¡Thai! — gritó Lila de pronto haciendo que sus padres la mirarán de inmediato— ¡Es Thai! ¡Está afuera!
Clint y Laura se vieron entre sí desconcertados sin saber cómo reaccionar, solo pudieron ver a Lila salir disparada de la cocina hasta la puerta.
Clint por lo que sabía, Thaily había estado moviéndose en las sombras sin que Natasha y Steve pudieran darle alcance. De ella solo recibían cartas de vez en cuando que iban dirigidas a sus hijos, siempre de diferentes direcciones.
— ¡Oh por Dios! ¡Estas enorme! — exclamó Thaily apenas vió a Lila abrirle la puerta
La castaña menor se lanzó a los brazos de la rubia platinada que venía con una pequeña valija.
— ¡Thai! — ahora fue Cooper quien bajó las escaleras de dos en dos lanzándose hacía su hermana mayor
— ¡Coop! ¡Ven acá!
Clint no sabía cómo sentirse ante la imagen de ver a sus tres hijos mayores juntos de nuevo, no sabía cómo acercarse a Thaily. Sabía que su hija mayor había estado metida en algo bastante turbio, pero él no temía a eso, temía que lo siguiera odiando.
— Thai— fue Laura quien habló antes que su esposo bastante desconcertado de la repentina llegada de la ojiverde— llegaste a tiempo para la cena
— Hola Laura… Clint— saludó al último de forma sería
— Hola, Cariño— sonrió Clint ahora aliviado de tenerla de nuevo en casa
El castaño se acercó a su hija y tomó su maleta que no pesaba casi nada
»— Llevaré esto
Thaily respiró con profundidad siguiendo a su padre hasta su antigua habitación, que estaba exactamente igual a como la había dejado
— El retiro te sienta bien— habló Thaily con calma pasando su vista por su habitación sintiéndose algo melancólica, pero de cierta forma algo ajena
— Tus hermanos te han extrañado mucho. Te ves bien, sana… — no pudo evitar señalar Clint— rubia..
Thaily soltó una ligera risa, sin embargo, no se sentía divertida para nada
— De alguna forma quería dejar de parecerme, aunque fuera un poco, de mi madre— habló con sinceridad sosteniendo una fotografía de todos ellos, cuando su vida era falsa
— Thai… ¿a qué has venido? — preguntó por fin el arquero— No es que no me guste, en realidad me alegra verte después de más de dos años, ya eres toda un mujercita— no pudo evitar sonreír Clint acercándose con cautela a su hija— es solo que… temo por lo que has estado haciendo
— Eso ya se acabó — aclaró de inmediato dejando bastante sorprendido a Clint— tengo el suficiente dinero para desaparecer por siempre y mis negocios se pueden mantener prácticamente solos… así que solo ajuste un para de cosas y decidí tomarme un tiempo lejos de eso— se alzó de hombros
— ¿Se puede saber por qué?
— Me temo que hay algo demasiado poderoso que viene… no voy a quedarme, iré con Tony mañana— dijo para poner el marco en su lugar de nuevo y darle la cara a su padre adoptivo
— ¿Para qué? Thaily, por lo que más amas, quédate y detente de todo plan que tengas, no tienes que estar sola— ahora Clint estaba entrando en modo preocupado— nos tienes a nosotros, a tus hermanos… podrías-
— No— cortó antes de que siguiera— tal vez he vuelto, pero eso no significa que te he perdonado ni olvidado lo que me hiciste. Y ten una cosa en claro, Clint; ya no soy esa niñita frágil a la que puedes manipular— Thaily paso a su lado con intención de salir de su habitación
— Pero aún eres mi niña pequeña— habló causando que Thaily frenara en seco en el umbral de la puerta— no importa si me odias, eres mi hija y tienes que entender que te amo… y que jamás podría sacarte de mi vida, aún cuando tú quieras que lo haga
Thaily giró hacia su padre adoptivo con las lágrimas llenando sus ojos, relamió sus labios y suspiro
— Yo no te odio— negó causando que Clint tragara el nudo en su garganta— pe-pero me lastimaste y ya no sé si pueda confiar en tí de nuevo
Clint abrió la boca y la cerró sin sentirse capaz de emitir palabra. Thaily bajó las escaleras donde sus hermanos la recibieron felices sin saber todo el caos familiar
(•••)
— … y dice que tengo talento para el arco— narró Lila entusiasmada causando una sonrisa cálida en la ojiverde
— Si sigues así tendrás ojo de Halcón— aseguró Clint— al igual que tú— señaló Clint a la mayor de sus hijos
Thaily sonrió mientras comía
— Bueno, ¿qué puedo decir? Aprendí de un gran arquero— habló con una sonrisa Thaily
Laura le sonrió a Clint al ver que Thaily tenía la guardia baja durante la cena, pero sabían que eso no duraría demasiado, así que aprovecharían mientras ella los dejara acercarse
— ¿Es cierto que estuviste en París? — no pudo evitar querer saber Copper
— Sí. Les envié mis cartas y las postales— aseguró la menor— ¿Les llegaron mis regalos de Navidad?
— Si— asintió emocionada Lila— aunque me hubiera gustado que estuvieras con nosotros
— Bueno, estuve algo ocupada— se limitó a decir Thaily carraspeando
— ¿Tienes poderes? — pregunto inocentemente Nathaniel
— Eh… si— asintió Thaily
La última vez que había visto a Nathaniel tenía poco más de un año. Ahora tenía cuatro
La cena pasó bastante tranquila mientras Thaily, Copper y Lila se ponían al día. Clint y Laura se mantenían al margen para no tocar algo sensible sabiendo que Thaily aún estaba bastante resentida
Al final Thaily se había ofrecido a lavar los trastes mientras sus hermanos habían ido a terminar su tarea por órdenes de Clint.
— Hola cariño— se acercó Laura a su lado observando a Thaily lavar los trastes— ¿Cómo has estado?
— Pues… sobreviviendo— se limitó a decir— ser prófugo de la justicia no es precisamente algo cómodo, pero me las he ingeniado
Laura solo afirmó apretando los labios
»—… Tu también lo sabías— habló de pronto cortando el silencio que se había hecho presente entre ambas
Laura afirmó sin encontrar el caso de negarlo
— Natasha me contó de la bebé que le habían quitado
Una pequeña risa salió de la garganta de Thaily
— ¿La bebé que le quitaron?— interrogó escéptica— creo que lo confundes con la bebé que decidió dejar atrás, a merced del mismo monstruo que la forjó
Laura bajó la mirada por un breve instante hacia sus pies notando que los ojos de Thaily solo estaban concentrados en los trastes
— Creo que estás siendo demasiado dura con ella— habló de nuevo Laura con su tono maternal demasiado notable
— La Habitación Roja fue dura conmigo. HYDRA fue dura conmigo. Ella fue dura conmigo. ¡La maldita vida fue dura conmigo!— exclamó con rabia pero de inmediato tomó aire queriendo calmarse, no quería alzar la voz con los niños cerca
— Ella es tu madre
— ¡Es por eso! — susurro soltando con brusquedad los trates encarando a Laura — ¡Ella siempre fue mi madre! ¡Todos lo sabían menos yo! ¡Ella era mi madre y no me lo dijo! ¡La vi como a una aún cuando no sabía la verdad! ¡Y lo peor es que hizo que todos los que amo parte de esto también! — exclamó aún susurrando con las lágrimas bajando por sus mejillas
— Mami, ¿puedo comer una manzana? — habló Nathaniel de repente causando que Thaily volviera enseguida a los platos después de limpiarse las lágrimas con rapidez
— Si, cariño. Toma
Nathaniel apenas tuvo su manzana se fue corriendo fuera de la cocina topandose en el proceso con Clint
— No corras, Nathaniel— advirtió Clint pero el pequeño siguió su camino sin reducir el paso
Thaily respiro hondo aparentando que no había pasado nada
»— ¿Todo bien?
Laura negó con los labios apretados señalando con la cabeza a Thaily
— Todo genial, como los últimos casi tres años— ironizó la rubia fregando con una fuerza algo innecesaria los trastes
Clint suspiró sin saber que hacer para acercarse a ella.
— Cariño… No quisimos mentirte
— Pero lo hicieron… me mintieron por años y me hicieron creer que esta vida era real— la voz de Thaily tembló señalando a su alrededor para luego girar hacia Clint — creí que tu eras mi padre. Creí que me habías adoptado porque viste algo más que una niña herida a la que habían convertido en asesina… creí que me veías como tu hija…
— Eres mi hija— afirmó con seguridad Clint de inmediato
— Ya me mentiste por mucho tiempo. Ya no te creo— fue todo lo que dijo Thaily sin dejar sus lágrimas salir
Se secó las manos y se fue de la cocina dejando a Clint con un doloroso nudo en la garganta. Laura fue hacia su marido dándole un pequeño abrazo lateral notando el dolor de ver a su hija estar enojada con él
— Ya no sé qué decirle— susurro impotente el cobrizo
Laura sonrió con tristeza
— Ella necesita saber que en verdad la amas. Solo dile eso— aconsejó Laura
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— ¿No te puedes quedar un poco más? — insistió Lila algo decaída de ver a su hermana partir de nuevo
— Lo siento, pero tengo que ver a un viejo amigo
— ¿No habrá un novio escondido por ahí? — sugirió Copper
— ¡Callate! ¡Claro que no! — exclamó ante la broma de su hermano
Copper solo siguió molestando a su hermana mientras Clint veía con tristeza a su hija partir. Lo peor es que no tenía forma de detenerla
— Okay, volveré pronto. Solo tengo que atender un par de cosas y volveré, ¿Okay?
— ¿Lo prometes?
— Lo prometo— afirmó ante la insistencia de Lila— adiós pequeño Nathaniel— añadió hacía el menor de los Barton revolviendo sus cabellos
Thaily se enderezó viendo a los adultos fingiendo una sonrisa.
— Adiós— sonrió Laura algo tensa
Thaily solo asintió caminando hacia su auto subiendo al asiento del conductor. Clint se asomó por su ventana viendo a Thaily arrancar el motor. Le daba melancolía recordar cuando le había enseñado a conducir y se veía pequeña al volante
— Me llamas cuando llegues a Nueva York
— Te enviaré un mensaje— contestó sin molestarse en verlo
Clint apretó los labios ante la respuesta tan seca
— Te amo… No lo olvides ¿okay?
Thaily respiró hondo viendo a Clint con los ojos llorosos
— Y yo a ti…
Dicho eso, aceleró sin voltear de nuevo. Sentía que si lo hacía no podría irse. Tal vez Clint y Laura le habían mentido también, pero eso no quitaba el hecho de que los amara a pesar de todo, ni quitaba lo que le habían dado. Después de todo la habían acogido cuando no tenía a nadie
Después de largas horas conduciendo por fin llegó a Nueva York. La ciudad que no se había atrevido a pisar en poco más de un par de años.
El corazón de Thaily se estrujo cuando vio el complejo de los Vengadores, con esa distintiva "A". Ese lugar tenía muchos recuerdos tanto lindos como dolorosos y agrios.
Bajó de su auto mordiendo su labio ante la idea de ver de nuevo a Tony. Sinceramente lo había extrañado mucho pero temía que él la odiara por lo sucedido en Alemania, pero entendía si lo hacía.
—… si, la reservación para las ocho— hablaba Tony por teléfono cuando por fin notó a la rubia— … eh, sí. Gracias
Tony colgó sin despegar sus ojos de Thaily, que solo atinó a sonreír de forma tensa
— Tony… ha pasado tiempo
— Thai… — apenas y salió de los labios de Tony
Sin esperarlo más, Tony fue hasta ella y la abrazo, algo que Thaily no esperaba en absoluto. Sin embargo, se relajó y correspondió el abrazo con las lágrimas reuniéndose en sus ojos
Tony tomó a la ojiverde de las mejillas y la vió de arriba a abajo
»— ¡Creciste!
Thaily soltó una pequeña risa mientras asentía
— ¡Tu estas más viejo!
Tony en vez de mostrarse ofendido sonrió más dejando un beso en la frente de Thaily
(•••)
— ¿Y cómo está tu espalda? — quiso saber Tony ambos en uno de los balcones viendo el enorme jardín del Complejo
— Pues bien, solo estuve algo adolorida unos días. Soy como una cucaracha, nadie puede aplastarme
Tony soltó una ligera risa
»— ¿Y tú cómo has estado? Escuché que te casaras con Pepper, felicidades
— Si… es un gran paso. Jamás había estado tan seguro de algo en mi vida, ¿Sabes? — habló Tony bastante feliz— ¿Y qué hay de tí? Después de que escaparon de la balsa no supe de tí, solo una ocasión de un rumor de tí en Budapest
Thaily hizo una mueca
— Si, bueno… pasaron muchas cosas— afirmó torciendo los labios— Es una larga y muy, muy, dramática historia…
— Resumelo
— Natasha es mi madre… la biológica— soltó causando que el cuello de Tony casi tronara de lo rápido que giró su cabeza en su dirección— Clint lo sabía, por eso me adoptó… Rogers también lo sabía… Luego me enteré que Tú y Steve pelearon…
Tony apretó los labios volviendo su mirada a la nada
»— Luego yo me peleé con él después de decirle que lo amaba…
Tony volvió a girar hacia Thaily que tenía la mirada en el jardín
»— Es un idiota… Luego morí— divago frunciendo el ceño
Tony abrió y cerró la boca sin saber qué decir ante ello
»— la Fénix me trajo de nuevo a la vida… Ahora somos amigas. Es cómo una mamá cósmica, es extraña pero creo que he aprendido a entenderla… Luego conocí a la familia de Natasha… ¡Tengo una tía!... Y he sobrevivido… Ese es el resumen— terminó de narrar
Tony alzó las cejas bastante sorprendido de todo lo que había pasado Thaily
»— ¡Oh! Resulta que Barnes es mi padre— añadió
— ¡¿QUÉ?!
Las mejillas de Thaily se inflaron y desinflaron en un suspiro bastante pesado
— Natasha se acostó con-
— ¡Si! ¡Ya sé cómo! ¡¿Pero Barnes es tu verdadero padre?!
— Si… no es algo que cambié mucho las cosas
— El mató a mis padres— dijo Tony pensando en voz alta tratando de procesarlo
—Lo sé— aceptó Thai causando que Tony la viera enseguida de nuevo— Me enteré de ello después de que Steve nos sacó de la balsa… Maldito Rogers mentiroso— gruñó
— Tú y él… ¿ya no se hablan?
— La última vez que lo ví lo encerré en una de sus pesadillas después de decirle que me dejará en paz. Ha estado buscándome junto a Natasha él último año, pero no tengo la mínima intención de hablar de nuevo con ellos, ó perdonarlos por lo que me hicieron
Un silencio se instaló entre ambos. Era una silencio cómodo y empático, los dos habían sido traicionados por las mismas personas
»— Lo siento, Tony. Tenías razón, él solo me estaba manipulando— habló arrepentida Thaily
— No tienes porque disculparte-
— Sí, sí tengo. Yo sabía que debíamos ir contigo y decirte pero-
— No es tu culpa— cortó Tony— sé que tú no querías que todo esto pasará. Lo ví cuando trataste de detenernos a todos ese día en Alemania
— Aún así no lo pude evitar— lamento Thaily
Tony la rodeó por lo hombros y Thaily le sonrió a Tony de forma débil
— Me alegra que hubieras escapado de la Balsa— murmuró Tony.
— Sobre eso… No creo que debas confiar en Ross, Tony. El mandó que experimentarán conmigo y mi ADN en ese lugar…
Tony sé separó del abrazo sin saber qué decir. Pero una increíble ola de rabia sé acumuló en su pecho
— Ese maldito— masculló por lo bajo— Yo no te iba a dejar en ese lugar, estaba en proceso de ayudar a sacarte cuando-... — Tony respiro hondo tratando de calmarse— no sabes como lo siento, Thai…
— Tranquilo, sé que tu hiciste todo lo que podías— le sonrió a Tony
— De hecho… ya estaba por finalizar un proceso legal… Mi abogado dijo que sí yo me hacía cargo de tu tutela podía mantenerte bajó mi protección y así los acuerdos te protegerían… — reveló con una pequeña sonrisa
— Tú… ¿Tú querías hacerte cargo de mi custodia? — procesó Thaily algo asombrada
— Sí… solo hasta que cumplieras la mayoría de edad. Ya que tus tutores eran también prófugos y prisioneros no ayudaba, iba a arreglar para que me dieran tu custodia como hogar temporal… solo para sacarte de ahí
Thaily mordió su labio sin saber qué pensar exactamente.
»— Claro que con tu fuga todo eso ya no se pudo hacer. Pero me alegra ver que estas bien
Thaily le sonrió a Tony agradecida
— Gracias por intentarlo, pero la verdad ahora estoy harta de los padres… No tengo buenas experiencias con ellos últimamente— admitió alzándose de hombros con una sonrisa triste
— Te entiendo… además, ¿No dijiste que soy el tío rico?— bromeó
Thaily soltó una ligera risa.
— Sí, el tío rico buena onda
— Me gusta como suena eso
— A mi igual
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Tony le había ofrecido quedarse en el complejo. Thaily sé había negado a hacerlo, pero Tony la había logrado convencer. Sinceramente Thaily no quería estar sola en el departamento que había rentado a las afueras de la ciudad, así que por ello al final aceptó.
Thaily estaba desayunando en la cocina meditando en su nueva pesadilla mientras Tony y Pepper habían salido a correr. Eran las mismas pesadillas de las últimas semanas. Un montón de imágenes rápidas, gritos, lamentos y dolor. Todo eso partía de un extraño guante dorado con seis gemas
— Thaily Soloviov— habló un hombre con capa roja saliendo de un extraño portal naranja circular
Los cuchillos e inclusive algunos vasos sé deformaron en picos de un material extraño y cristalino alzándose en el aire amenazando a el tipo
»— Tranquila, baja esas cosas, Fénix. Soy el Doctor Stephen Strange, necesito que me acompa-... ¡BAJA ESE SARTÉN!
¡PRIMER CAPÍTULO DE INFINITY WAR!
Es hora de ver todo lo que Thai a avanzado con sus poderes~
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