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It's Always Been You- Phil Wickham

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Thaily estaba profundamente dormida, con una venda rodeando su muñeca derecha, donde había hecho el corte.

La pérdida de sangre no había sido grave debido a la atención inmediata, pero aún así la dejarían en observación por la noche, así que ahí estaba Natasha, contemplando a su hija dormida en esa camilla.

Tenía sentimientos revueltos; tristeza al ver que otra vez había atentado contra sí misma. Impotencia al ver que estaba cayendo nuevamente en una depresión profunda; dolor ante la idea de que pasará de nuevo, pero justo ahora, sentía alivio de tenerla ahí, dormida y no muerta como la última vez

— Ten, negro y muy cargado— le ofreció un café Tony, sentándose a su lado en el sofá

— Gracias

— le ofrecería a Steve pero él… ya cayó— señalo al rubio que se había quedado dormido en una silla algo incomoda

— Thaily lo despertó a mitad de la noche, no durmió por ver que ella descansará— explicó Natasha en un murmullo bajo— sé que no te agrada pero… Steve si la ama

Tony solo rodó los ojos

— Si, si— afirmó de forma vaga— vaya… dos veces en el hospital en menos de tres meses— suspiró preocupado Tony

Natasha hizo una pequeña mueca bebiendo de su café para mantenerse despierta

— ¿Sabes? La primera vez que la vi en una camilla era del tamaño de un melón, tan chiquita y frágil— sonrió melancólica Natasha— era la cosita más hermosa que vi en mi vida… era muy joven pero estaba segura de que ella sería lo más importante en mi vida desde ese momento

Tony sonrió, notando ese brillo peculiar en los ojos de Natasha al ver a Thaily

— Fue… creí que se iba a ir frente a mí— comentó Tony aún demasiado tenso— cuando la vi con el cuchillo yo.. Me-me petrifique, no… no sabía qué hacer. Te juro que vi frente a mí a la niña a la que le conté el chiste de la gallina… y el solo pensar que se iba a ir y-yo…

Natasha puso una mano en el hombro de Tony, sonriendo con tristeza y agradecimiento al mismo tiempo

— Ella está bien, eso es lo que importa… solo está durmiendo— calmó Natasha

— ¿Cómo lo haces?

— ¿Qué?

— ¿Estar tan tranquila?

— Oh, no estoy tranquila, estoy aterrada de lo que pudo haber pasado, y me duele que haya pasado de nuevo… me siento como la peor madre justo ahora— admitió con una sonrisa entre sus ojos brillosos por sus lágrimas— no es la primera vez que hace algo así y… y no sé que hacer… solo sé que voy a estar ahí y la ayudaré a salir de esto… Por que si va a salir… — habló con seguridad Natasha

Tony suspiró poniéndo los ojos en blanco

— No sé si estoy listo para ser padre— admitió casi aterrado

— Realmente nunca estás listo— torció los labios Natasha— solo esperas lo que venga y tratas de hacer lo mejor… pero una vez que ves a los ojos a tu hijo.. Sabes que harás lo que sea por ellos… incluso dar la vida por que ellos tengan una mejor que la que tu tuviste

Tony sonrió, viendo en dirección a Thaily que se veía bastante tranquila.

Ella estaba bien, eso era lo importante

(•••)

Había empezado a nevar, los copos blancos y ligeros caían comenzando a tornar el exterior de blanco. Ese sería un crudo invierno a su parecer

Una quejido ronco a su lado lo hizo girar de inmediato. Era Thaily que apenas y estaba despertando

Steve entrelazo la mano de él con la femenina, provocando que terminara de despertar. Los bonitos ojos verdes de Thaily lo vieron de inmediato, entre somnolienta y confundida, luego sus ojos pasearon por la habitación blanca, con un potente olor a alcohol y desinfectante, procesando en un silencio casi eterno en donde estaba. De estar confundida pasó a tratar de procesar la situación, sus ojos verdes viajaron hacia Natasha y Tony, dormidos en el sofá, y de ellos a la venda en su muñeca

Perdió el aliento al mismo tiempo que sus ojos se llenaban de agua. Simplemente se reflejó todo su arrepentimiento en sus ojos dejando escapar un par de lágrimas

— Y-yo… -

Pero no pudo decir más apretando los párpados al sentir los labios de Steve sobre sus resecos y pálidos labios

— No… me… vuelvas… a asustar… así— habló Steve entre cortos besos

Thaily no pudo decir palabra, solo lloró regresando como podía los besos. La temblorosa respiración del rubio chocó contra la frente de Thaily, dejando un último besó ahí.

— Lo siento… perdóname— sollozó sin voz Thaily tomando de las mejillas al rubio, que estaba húmedas

Los ojos azules de su pareja estaban turbios entre temor y tristeza. Él ya la había visto una vez morir de la misma forma en que la había encontrado en la cocina, y la simple idea de perderla le había helado las entrañas y casi detenido el corazón

Steve envolvió su menudo cuerpo entre sus brazos, aún con la respiración inestable entre el cuello de la menor que estaba sintiéndose terriblemente culpable

— Estás bien… eso es lo que importa, estás aquí conmigo— susurro Steve besando de nuevo a su pareja

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Thaily no tardó en ser dada de alta, había vuelto al complejo e incluso había recibido una visita de Ralph, el terapeuta encargado del grupo de apoyo. Thaily de una forma muy "madura" se había hecho la dormida

Aunque sinceramente Thaily se sintió tan mal por lo que acaba de pasar que perdió las fuerzas para salir de la cama. Creía que si salía de ahí no tardaría en recaer en tomar drogas y alcohol y rematar en lanzarse frente a un autobús. Era como si las fuerzas de su cuerpo hubieran sido drenadas, las sensaciones cálidas se habían ido y parecían morir poco a poco con su alma

Sentía que ni siquiera debía intentarlo

Pero Tony estaba ahí para levantarle el ánimo un poco antes de volver a casa con Pepper

— Tony, yo puedo comer sola— se quejó Thaily entre divertida y frustrada por su sobreprotección al ver que Tony trataba de darle comida en la boca

— El médico dijo que no hicieras movimientos con la mano en varios días, además aún no recuperas la movilidad— dijo casi en modo paternal

— Lo sé, pero soy zurda, puedo comer con la izquierda— aseguró tratando de recuperar la cuchara— además tu pronto le podrías dar de comer papilla a tu hijo

Una sonrisa inevitable apareció en el rostro de Tony, que por fin cedió la cuchara

— Si… mi hijo

Thaily sonrió, al menos la vida de Tony no se había deshecho por culpa suya, él si estaba teniendo la oportunidad de seguir con su vida

— Tendrás una hermosa familia, Tony

— Y me encantaría que fueras parte de ella— confesó Tony causando confusión en la menor— yo… lo discutí con Pepper y… nos encantaría que fueras la madrina de nuestro hijo, ¿Qué dices?

— ¿Madrina? — interrogó tratando de procesarlo, a lo que Tony afirmó sin borrar su sonrisa— m-me… me encantaría ¡Sí!— aceptó sin titubeos la pelirroja— sí quiero, ¿donde firmó?

Tony sé rió un poco ante el entusiasmo de Thaily, pero su sonrisa sé fué apenas notó a Steve en la puerta

— Rogers— saludo Tony sin nada de entusiasmo

— Tony— respondió Steve— ¿cómo te sientes? — esta vez dijo a Thaily, quien sintió todo su entusiasmo irse al recordar a Steve tan preocupado por ella en el hospital

— Mejor— mintió

— Bien, me iré a casa antes de que Pepper me haga dormir en el sofá

— No la hagas enojar, una mujer embarazada y enojada es algo aterrador— aconsejó Thaily con algo de diversión

— Sí te creo. Adiós, Thai, cuidate— el castaño dejó un pequeño beso en la frente de la ojiverde

— Adiós— susurro siguiéndolo con la mirada hasta que desapareció por la puerta

Un silencio algo prolongado sé instaló entre Steve y ella. Thaily sé dedicó a ver sus manos como si fuera lo más interesante del mundo

— ¿Cuanto llevas despierta?— interrogó Steve entrando a su habitación

Thaily estaba casi bajo una montaña de cobertores. Steve suspiró ante su mirada vacía

— Como dos horas… tal vez más— respondió con un fino hilo de voz que apenas y se escucho sin verlo a los ojos

— ¿Y por qué no te has levantado? — pregunto preocupado tomando asiento en la orilla de su cama

Thaily sonrió, pero sus labios temblaron ante el llanto que quería salir. El solo recordar los ojos de Steve apenas despertó la ponía sensible y con ganas de esconderse bajo los cobertores

— ¿Qué caso tiene?— preguntó respirando hondo para no llorar— ¿para ver como todos son miserables por mi culpa? ¿Para levantarme y luego terminar ebria en la cocina de nuevo?

— Para luchar

— Ya no quiero luchar… ya me cansé— susurro limpiando las lágrimas traviesas que habían escapado de sus ojos— por eso no salgo de mi cama… porque… — Thaily tomó aire causando que sus mejillas se inflaran y desinflaran tratando de no llorar—… es tan difícil… Cuando duermo puedo ver a todos los que ya no están… Felices, en mis sueños… riendo conmigo… a Lila… Cooper, Nathaniel.. Ellos juegan conmigo ahí… los veo tan vivos… pero cuando abro los ojos… cuando vuelvo a la realidad-…

Steve tomó su mano y le dió un beso en el dorso al ver lo frágil que estaba. Parecía que hasta la misma voz de ella estaba muriendo en su garganta

»— Despierto… y repasó sus nombres, cada uno de ellos, todas las mañanas... pidiéndoles perdón por no poder… — musito con voz aguda y sin aire ante el llanto contenido—… no pude salvarlos, no pude…

Steve atrajo a Thaily a su pecho, ella se rompió en llanto apenas se sintió rodeada por el rubio

»— ¡Lo siento!... ¡L-lo siento tanto!... ¡Tanto, tanto! — dijo entre sollozos que desgarraban el corazón de Steve

— No lo sientas, no es culpa tuya Thai, no lo es, bonita— trató de consolar Steve pero ella siguió llorando ahí

— E-ellos… e-ellos n-no e-es-están por culpa mía… Pi-Pietro mu-murio por mi… y-yo debía traer de vuelta a Wanda… ¡Y NO FUI SUFICIENTE! ¡NO LO FUI! — Thaily lloró un poco más, cuando se sintió sin aire solo jadeó, perdiendo la capacidad de llorar de un instante a otro—… deberías alejarte antes de que te destruya a ti también

Steve la miró a sus llorosos y destrozados ojos, pero negó limpiando sus lágrimas y acomodó sus hebras rojizas y rebeldes

— No— Dijo simple, seguro y lleno de convicción— tú entraste a mi vida en un momento en el que la sentía vacía, fría… no tenía una vida realmente… pero ahora la tengo

— Pues que vida tan deprimente, evitando que tu novia alcohólica se quité la vida en medio de una crisis — susurro con más remordimiento que otra cosa Thaily

— Cuando veo un problema… no puedo ignorarlo. Así que estarías muy equivocada si crees que te dejaré solo por que crees que puedes dañarme

— soy más un problema que tu novia

— No eres un problema, y deja de verte como uno. No eres algo que está mal, Thai, solo eres alguien cuya vida te ha golpeado demasiado, pero no importa que pase-

— Yo siempre me levanto— completo la menor— l-lo sé… es solo que… a veces creo que ni siquiera debería intentarlo… es tanta presión… y siento que esta vez yo soy la ola que acabará con todos

— Yo lo veo como otra cosa… creo que eres la corriente que llevará a este barco lleno de náufragos a un lugar mejor— musitó de forma suave Steve

— ¿Cómo es que eres tan optimista? En serio, yo trato pero es… ese nivel de optimismo es casi ridículo— dijo ceñuda inflando un poco las mejillas

— Sé que es difícil tratar de intentarlo otra vez, porque ellos ya no están— murmuró Steve— pero como tu dices, Pietro dio la vida por ti, y no fue el único, tu tío dió la vida por ti también… creo que es por ellos que debes hacer que valga la pena, tratar de encontrar un nuevo propósito.. Un impulso

— ¿tú lo tienes?

Steve sonrió besando la frente de Thaily

— Está frente a mí

Thai besó inevitablemente a Steve, sintiéndose cálida después de esos días infernales en los que su mente había decaído tanto

»— Siempre has sido tú— aseguró Steve

Thaily respiró hondo, abrazando al rubio

— Y tú también el mío… pero aún así es jodidamente difícil— admitió

— Lo sé… pero vale la pena luchar por ello, de otra forma, nos hubiera matado a todos

Thaily asintió. Steve tenía razón, Pietro le había salvado la vida ese día donde ella hubiera preferido haber muerto, su tío también había dado su vida por que ella hubiera tenido una mejor, no podía defraudarlos de esa forma otra vez, atentando contra su vida, dañándose con drogas y alcohol, y lo peor, dañando a las personas a su alrededor con su tristeza

— Gracias… siempre sabes que decirme para detener el huracán — dijo entre una pequeña risa

Steve dejó un corto beso en sus labios recostandose a su lado

— ¿Te molesta si me quedó aquí?

Una sonrisa que causó que los ojos verdes de Thaily recobraran su brillo poco a poco fue la única respuesta que Steve necesito

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Thaily veía la TV sin ponerle atención en absoluto cuando Natasha entró a su habitación con una mirada que ocultaba muchas cosas

— ¿Qué pasa?

— ¿Dónde están? — preguntó con una gran calma, pero sus ojos ardían en severidad

— ¿Están que?

— La drogas, Thaily— habló segura Natasha

El corazón de Thaily tuvo un vuelco, apagó el televisor y negó sin atinar a decir palabra

»— No tiene caso que trates de negarlo, el doctor Ralph me dijo que su compañero está en prisión por cargos de recetar de manera ilegal antidepresivos— explicó Natasha sin perder su calma— así que dime, Thai, ¿donde están?

— Y-yo… no… — Thaily relamió sus labios y negó, pero sin poder evitarlo las lágrimas ardieron en sus ojos

— Por favor, no lo niegues, a la que le mientes no es a mí, es a ti misma pensando que esa es la forma en la que podrás salir de esto

— Sé que no es la forma— aclaró de inmediato con la voz ahogada— pero solo de esa forma es más llevadero el dolor

— Mí amor— los ojos de Natasha también tenían lágrimas— las píldoras no hacen que el dolor se vaya, solo lo adormecen

Thaily respiró hondo limpiando sus mejillas de forma brusca

— Y-yo… yo traté de no caer, en serio traté— lloró temblando de coraje hacia ella misma— no quería… sabía que n-no…

Natasha asintió creyéndole

— Lo sé

Thaily lloró entre aliviada y dolida por no ver enojo o decepción en Natasha, solo comprensión y amor. Se obligó a dejar de llorar, fue a su baño y sacó de su escondite el frasco de píldoras dándoselo a Natasha

»— Hey, mí amor, mírame— alentó Natasha con una sonrisa llorosa— no caíste… se que no hasta caído aún… solo tuviste un resbalón. A todos nos pasa… lo importante es seguir

— Es doloroso tratar de ser fuerte

— Lo sé— afirmó Natasha— pero, el dolor nos vuelve fuertes…

Thaily lloró, a lo que Natasha sé atrevió a acercarse y atraerla a su pecho, y Thaily no sé resistió, al contrario, sé aferró a Natasha y escondió su rostro mojado en su pecho como una niña pequeña que quería ser consolada por su madre

— Lo siento— sollozó la menor

Natasha besó su frente, llorando en silencio acariciando los cabellos de su pequeña como cuando era una pequeña bebé

— Yo también lo siento

Ambas terminaron en la cama, con Thaily hecha bolita entre sus brazos

»— Ya, ya… aquí está mamá— susurro Natasha— aquí estoy ptichka «pajarito»

Al final Thaily cayó dormida, como cuando era una bebé y Natasha la arrullaba en las noches hasta ver que se quedará dormida

La arropó y la dejó dormir, saliendo de la habitación con las píldoras, mismas que desechó por la trituradora aún con un nudo doloroso en su garganta

»— Ya se durmió— dijo cuando notó la presencia de Steve tras ella

— ¿Cómo la viste?

— Es muy terca— murmuró Natasha recargándose sobre el fregadero aún dándole la espalda a el rubio— y muy fuerte… está luchando demasiado

— Si, lo sé… ¿pero por cuánto tiempo seguirá así? — interrogó con cierta desesperación— sé que Thaily lucha a diario pero temo que en otra crisis ella si logré hacerse más daño…

— No eres el único que piensa eso— alzó un poco la voz Natasha. Sé obligó a respirar hondo para calmarse un poco— yo hablé con el terapeuta a cargo del grupo de apoyo… en realidad él cree que Thaily no debería volver

— ¿Y eso por qué? — interrogó Steve con el ceño fruncido

Natasha por fin se dio vuelta tragando en seco

— Dice que notó que para Thaily es difícil ver lo que está pasando con los que quedamos… y es cierto, ves a todos lados y solo hay caras tristes, todo se está quebrando y… y Thai se culpa por eso

— Si, ella me lo dijo— murmuró Steve con cierto pesar

— El doctor dijo que lo mejor seria darle un ambiente apartado, un lugar que la ayude a despejarse de… esto— señaló Natasha a su alrededor— donde intente sanar un poco

— ¿Y qué sugieres?

Natasha frunció los labios sin saber exactamente que hacer al respecto

— Tal vez… tal vez solo buscar alejarse, desaparecer— musito Natasha no muy convencida

— ¿Desaparecer? ¿Hablas de como cuando tu planeabas decirle la verdad e irse? — preguntó Steve sin saber qué pensar

Natasha asintió con su ceño marcado

— si pero… esto no es nuestra decisión, es la de ella— murmuró Natasha pensando con rapidez las opciones— pero si eso la hace mejorar... ¿Por qué no?

Steve lo meditó, pero la idea de que ella se fuera no le gustaba, en especial la parte donde ella se iba lejos de él

— ¿Sola? — interrogó Steve con el temor reflejado en sus ojos

— No, ella sola no es conveniente— suspiro Natasha— y yo no creo que sea precisamente la persona indicada para estar, además estoy en constante comunicación con el resto, aún cuando no se puede hacer mucho. Tony no es opción, está por ser papá… creo que la única opción y la mejor… es que tu vayas con ella

El rostro de Steve se llenó de incredulidad ante las palabras de Natasha, que aún cuando parecía de acuerdo con la idea, se notaba que le dolía la idea de ver a Thaily alejarse

— ¿Yo?

— Sí… sería como un especie de viaje para sanar, le hace falta

— Pero… pero ¿y tú?

— Lo importante ahora la salud mental de mi hija, y si alejarse de todo el caos la ayuda, yo estoy bien con eso— afirmó Natasha con seguridad, pero también dolor— solo que esta vez es su decisión, nosotros no podemos decidir por ella

— Si… tal vez… tal vez ella acepte, no lo sé

— Bien, creo que será mejor que tu le preguntes— Natasha le sonrió con tristeza, pero Steve pudo notar que era la misma mirada que le había dado en la casa de los Barton después de el primer intento de suicidio de Thaily— me iré a dormir

Y Natasha desapareció dejándolo solo con una montón de preguntas y pensamientos revueltos

No logró dormir del todo, salvo cuando Thai fue hasta su habitación en medio de la noche queriendo dormir con él y no sola, solo con ella logró dormir un par de horas

El día pasó sin demasiada relevancia, o eso hasta que recibió un mensaje de Thaily, que era más bien una dirección que no conocía. Temiendo que fuera un bar y ella estuviera ebria de nuevo, salió a toda prisa sin decirle a Natasha aún, esa podía ser una falsa alarma y no quería preocuparla con falsas suposiciones

Para su suerte, no era la dirección de un bar, era la dirección de un puente en medio de la carretera, despejado y con una vista al bosque, pero también con una caída mortal sin duda

— Thai— llamó

— Por aquí— contestó ella causando una horrible sensación de vértigo a Steve cuando la vio sentada sobre la barandilla con toda la tranquilidad de como si estuviera en un simple sofá

— Thaily, ¿que estás haciendo ahí? Mejor baja de ahí antes de que-

— Tranquilo, cálmate, ¿olvidas que me sé elevar por mi misma? — habló algo divertida sin dejar de ver abajo— anda, ven, siéntate conmigo

Steve miró hacia abajo, notando que si estaba demasiado alto, pero Thai ignoraba eso mientras balanceaba los pies de forma infantil en medio de aquel abismo sin el menor temor

— Okay… si me caigo será culpa tuya— habló cruzando la barandilla, para sentarse a su lado con el aire helado golpeando su rostro

— Si te caes yo te atrapó— dijo como si nada Thaily

— Hace frío aquí arriba— dijo Steve notando su frío aliento salir de su boca

— Ya has estado congelado antes, no te quejes— sé burló de él Thai

— ¿Qué haces aquí? ¿Y por que se te ocurre estar al borde de un precipicio?— demandó saber Steve aferrándose a la mano de Thaily, quien no dejaba de mirar abajo

— ¿Miedito? — preguntó burlona

— Yo diría que con vértigo

Thaily se rió como si la situación fuera solo un pequeño chiste

»— ya, en serio, ¿qué hacemos aquí?

— Estamos al borde de mi abismo— habló Thaily mirando embelesada hacia abajo— un abismo al que he sentido que caigo pero jamás tocó el fondo…

El ceño de Steve se marcó mientras buscaba los ojos de su pareja, quien lo miró por primera vez a los ojos y sonrió

»— Estoy al borde de mi abismo, de mi temor, mi tristeza, mi desesperación… — el viento sacudió los cabellos de Thaily, pero en vez de hablar con dolor, sonrió—… y estoy prometiendome a mi misma no dejarme caer

Steve de forma instintiva rodeó a Thai, quien sólo recargo su cabeza en su hombro

— Sabes… esto es lo más hermosamente aterrador que te he visto hacer, no se si besarte o regañarte por estar aquí arriba— admitió el rubio aún con la sensación de vértigo

— Prefiero el besó

— Si… aquí en el borde no

La menor se rió de nuevo de Steve, poniéndose de pie y brincando la barandilla otra vez con Steve siguiéndola de inmediato

— Okay, esto tenía que hacerlo y creo que fue terapéutico— suspiro Thaily con alivio

— Tus formas de terapia son extrañas, mi amor

La menor giró del paisaje hacia Steve de inmediato, con el corazón acelerado ante como la había llamado

»— Okay, hace frío y se me antoja chocolate

Thaily lo besó y afirmó entendiendo que ya quería irse de ahí, por lo que subieron al auto para regresar al complejo

— ¿Ya me vas a decir que te tiene tan distraído? — indagó

Steve frunció los labios, pero creyó que era el mejor momento para preguntarle

— Uhm… bueno, debido a lo que ha estado pasando… a lo que pasó— corrigió Steve— y que tú… tú no te has sentido bien, creo que lo mejor… lo mejor sea tal vez irnos

Thaily giró hacía su pareja de inmediato, preguntando con la mirada a qué se refería

— ¿Irnos?

— Si… desaparecer… empezar de nuevo

Thaily tardó en asimilarlo, por unos largos segundos que a Steve se le hicieron eternos. El vértigo que había tenido en aquel puente era nada comparado al que sentía en es instante

»— Solo si tu quieres, si no-

— ¿Y a dónde iríamos? — preguntó ella sin dejarlo terminar

— No importa a donde sea… solo que sea para nosotros dos, apartado… lejos de todo el caos

La mirada verde de Thaily se volvió a perder, pero sonrió un poco

— Me encanta la idea— admitió

Steve se sintió tan aliviado como si le acabarán de dar una manta después de estar metido entre el hielo

— ¿En serio?

— ¡Si! — exclamó Thai bastante animada— estar en el complejo se volvió… frío, muy callado y no me gusta, mi departamento es lindo y sin recuerdos… pero jamás me sentí del todo bien ahí… además, vivir rodeada de personas que se ven tristes todo el tiempo es… me deprime aún más

Steve ya sabía eso, pero aún así tomó su mano

»— Vivir apartados de todos suena… me encantaría, de verdad

Steve le dio una corta mirada para luego volver sus ojos al camino

— Bueno, esta decidido— declaró Steve con una nueva emoción creciendo en su pecho

Thaily suspiro con sus ojos brillando ante la emoción, justo cuando creía que su vida caía en picada y trataba de ascender de nuevo, su vida parecía comenzar a estabilizarse de a poco

Ambos necesitaban algo de paz al menos por un tiempo

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Se sentó de golpe en la cama con el corazón en la garganta, pero apenas vio a Thaily dormida a su lado se relajó un poco, suspirando y refregándose el rostro ante las pesadillas de lo pasado con Thanos

Aún podía recordar con claridad las cenizas perdiéndose en el aire frente a sus ojos, sin poder hacer nada

En la mañana partiría junto a Thai a lo que tal vez sería su nueva vida, pero de pronto la sensación de que todo podía acabarse de un momento a otro vino a él como una gran ola

— ¿Estás bien? — preguntó Thaily dejando un pequeño beso en su hombro abrazándolo por detrás

Steve giró un poco para verla a sus adormilados ojos, entrelazando su mano con la de ella, pero sin poder evitarlo acarició sobre la venda que cubría su herida aún reciente.

La ojiverde podía ver cierta inquietud en los ojos de su pareja, como si de un momento a otro su alrededor se fuera a volver cenizas otra vez. Steve no dijo nada, solo se inclinó besándola, casi con desesperación. Thai suspiro recostandose lentamente de nuevo en la cama con la figura de Steve sobre ella, quien bajó los besos a su cuello y luego respiró hondo ahí, estrechandola entre sus brazos como si temiera que se fuera

— Ahora si lo estoy— susurro apenas el rubio con la cabeza en el centro del pecho de la menor, quien solo se dedicó a acariciar sus cabellos en silencio

El sonido de sus latidos lo relajó, además de los ligeros mimos silenciosos de Thaily

— Vamos a estar bien… — susurro Thaily con una pequeña sonrisa triste, delineando el rostro de su pareja

Steve tomó su mano con la muñeca herida, besando sobre la venda, luego se volvió a erguir besando sus labios antes de recortarse a su lado

— Sí… vamos a estar bien— afirmó viéndola a los ojos

Tal vez había caos a su alrededor, pero ellos estaban afrontando la tormenta juntos, siendo el sostén del otro, pero era hora de que buscarán un lugar hacía un poco de paz. Era lo que ambos necesitaban

HAN PASADO OCHENTA Y CUATRO AÑOS....

NO ME MATEN, LA UNIVERSIDAD ES COMO UN DEMENTOR

Amo mi carrera pero el tiempo no me alcanza. Pero bueno, espero les hubiera gustado.

Thai y Steve se van juntos para olvidar todo~

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