—¡¿Cómo se te ocurre venir a la casa de un testigo y hacer semejante escándalo?! —le preguntó Mark intentando mantener la calma, golpeando su sien repetidas veces.

—Testigo de la muerte de mi hijo —le respondió Sana entre dientes.

—Noticia, cariño —habló sarcástico Mark—¡También era mi hijo!—Sana solo apartó su mirada —no puedes pretender que cada vez que te sientes impotente venir a hacer un escándalo— habló en realidad molesto, la mujer había llamado a la policía.

—Ella lo sabe, Mark—habló dolida —ella sabe quién me quitó a mi niño, y no quiere decirnos—Mark suspiró intentando buscar las palabras adecuadas, mientras que Tzuyu hablaba con el oficial de policía que había llegado en su patrulla. Estaban fuera de la casa de aquella mujer que nerviosa por todo el escandalo decidió llamar a la policía.

—Creo que se te olvida que Taehyung también era mi hijo— repitió sin entender porqué Sana seguía diciendo que era solo suyo. Sana negó con su cabeza —así me odies, y me culpes, yo era el padre de Taehyung, tenía mi apellido... yo te embaracé— Sana lo miró con su ceño fruncido. 

Mark rió un poco tomando suavemente los costados de los brazos de Sana— Taehyung murió, amor, y tienes que aceptar que no va a volver —Sana dio un paso atrás provocando que Mark la soltara— es duro —reconoció llevando sus manos a su cinturón —muy duro, pero es la realidad. Sana, Taehyung murió.

—A Taehyung lo mataron— respondió con desprecio— a Taehyung me lo quitaron—Mark negó con su cabeza— ¡Tú no lo viste morir como yo!— soltó sin poder retenerlo más, llevando sus manos a su cabello desesperada por encontrar respuestas a preguntas que jamás quiso formular—su cabeza contra la placa de aquel auto —susurró comenzando a llorar de manera inevitable—sus ojos cerrándose mientras dejaba de sonreír —volvió a susurrar sintiendo como perdía el equilibrio— ¿Cómo me pides que viva después de eso?— le preguntó manteniéndose en pie, la misma pregunta que le hizo a Tzuyu.

—Yo era su padre, Sana— respondió con sus ojos cristalizados— yo era tu esposo, yo era feliz.

— El dejó de respirar en mis brazos —dijo abrazándose a sí misma, sin notar que Tzuyu se acercaba a ella ya que había terminado de hablar con aquel policía —tú eras su padre, es cierto— susurró mirándolo a los ojos— pero yo lo vi nacer, y de la misma forma tuve que verlo morir —Mark volvió a negar al ver las lágrimas de Sana bajar por sus mejillas —claro que si. Cuando nació, lo abracé como si fuera lo único seguro que tendría en el mundo, y cuando murió lo abracé de la misma forma. Murió en mis brazos, mi niño murió en su lugar seguro, en los brazos de su mamá—Mark suspiró secando sus propias lágrimas. Al Tzuyu llegar, se preocupó de inmediato ya que no estaba al tanto de la discusión de la ex pareja.

—Sanake—le habló Tzuyu suavemente. Sana ladeó su cabeza sin entender y dirigió sus llorosos ojos a ella

—¿Qué pasó?— preguntó mientras quitaba un poco de cabello de su rostro.

—¿Por qué lloras?

—Porque mi niño murió —susurró sinceramente. Tzuyu comprendió y sin decir otra palabra decidió abrazarla, abrazo que Sana correspondió y que Mark miraba confuso ¿Era esa su ex esposa?

—Todo está bien —le susurró dulcemente intentándola hacer sentir tranquila —no llores, no llores.

—¿Sana? —intervino Mark al verla de una manera tan vulnerable—Sana creo que deberiamos hablar.

—No quiero —respondió terminando el abrazo para secar nada delicadamente sus propias lagrimas —tengo que volver al trabajo— dijo recordando que Dustin seguía en su auto, así que caminó de vuelta a éste.

—¿Y tú eres? —le preguntó Mark directamente. Tzuyu se señaló a sí misma confundida, Mark asintió.

—Oh, mi nombre es Tzuyu— se presentó simplemente —soy abogada también— rió pero Mark no reía con ella —soy amiga de Sana —dijo un poco nerviosa. Mark asintió sin dejar de mirarla.

—Sana con amigas —dijo sorprendido —eso es nuevo —Tzuyu se encogió de hombros un poco incomoda.

—Creo que yo ya me voy—dijo sin querer alargar más la conversación —adiós, señor —dijo antes de comenzar a;caminar hacia el auto de Sana.

—¿Señor? —susurró para sí mismo llevando su mano confundido a su mentón.

♡

— ¿Socializando con mi ex esposo? —le preguntó Sana sin verla una vez Tzuyu subió al auto a su lado.

—Me preguntó quién era —respondió colocándose el cinturón de seguridad, notando que Sana no llevaba el de ella puesto— fue bastante incómodo— dijo sinceramente.

—Claro— respondió sin darle más importancia — ¿Quieres que te lleve a casa, Dustin?— le preguntó Sana mirándolo por el retrovisor.

—Dejé mi bicicleta en la firma— respondió sinceramente —pero puedo volver mañana por ella si usted me lo permite... ¿Será mi abogada? —preguntó nervioso. Sana lo miró y no podía dejar de verse reflejada en él, simplemente se veía a sí misma perdida.

—Si, seré tu abogada—asintió escuchando el suspiro de alivio del chico —no hagas que me arrepienta— pidió poniendo en marcha el auto.

— No, no lo haré— dijo emocionado — muchísimas gracias, señorita —Sana asintió mientras Tzuyu los veía— vi todo el drama, llegó la policía. Cualquier cosa en lo que pueda ayudar, solo dígame.

—Necesito que mañana lleves a mi oficina todo lo relacionado a esa mujer y a su hija— pidió Sana con su vista fija en el camino todo. —Relaciones, deudas, familiares, conexiones. Dustin, estamos hablando de tu futuro. Esa mujer está acusándote de seis homicidios, incluyendo el de mi hijo — suspiró —no quiero que te separes de mí, si ocurre otra muerte sabremos que es otra persona, si no ocurre quedarían dos opciones: que tú seas el asesino o que ya no haya razón para matar a otra chica. Descarto la primera y me quedo con que todo ha sido un plan conspirativo —dijo intentando creérselo —mi pregunta es ¿Por qué? ¿Qué les hiciste a esas personas? ¿Con qué clase de personas se relacionaba tu ex novia? Quiero entender por qué te quieren hundir— Dustin se encogió de hombros.

—Mi ex novia era su hijastra, su padre murió y puede que... —comenzó

— ¿Cuánto tiempo pasó antes de que esa mujer reclamara el seguro? —interrumpió ansiosa

—¡Claro!... Pero eso no me responde los otros dos asesinatos.

—Quizá porque a lo mejor no tienen ninguna conexión— intervino Tzuyu —quizá a la chica simplemente la asesinaron y aprovecharon los demás casos para confundirnos y acusar a Dustin.

—Pero sigue sin encajar, Tzuyu — respondió Sana —a todas: las violaron, a las cuatro chicas—suspiró —no entiendo cómo relacionar todos los casos —Dustin suspiró también, deseando poder ayudar —sí descartamos a la ex novia de Dustin quedan tres chicas, una de ellas es encontrada en su habitación y dos en el bosque fuera de la ciudad —comenzó de nuevo— sí les buscamos una conexión a las tres sería que... —miró a Tzuyu por un segundo antes de volver su vista al camino.

—¿Eran trabajadoras del turno de noche? —preguntó al azar, recordando lo poco que pudo leer del folder del caso.

—¡Claro!— dijo Sana emocionada, sonrojándose instantáneamente —un asesino guapo, de esos que no te da miedo dejar entrar a tu casa... ¡Las victimas lo conocían! ¡Claro! Es por eso que no hubo forcejeo en las puertas, seguramente este hombre debía tener auto y allí subía a las chicas para así violarlas, allí o en sus casas, antes de transportar los cuerpos —Tzuyu sonrió entendiendo gran parte de lo que descubrió— y esa mujer sabe eso muy bien, el auto negro ¡Tzuyu! —le habló en realidad emocionada —el auto del asesino guapo—Tzuyu asintió sin dejar de verla— ahora tenemos una nueva interrogante ¿Por qué asesina a las chicas?

— Eran chicas solitarias al parecer —respondió Tzuyu —¿Eran prostitutas?—Sana negó con su cabeza— trabajaban en sitios cercanos... —Sana asintió sonriendo —las tres fuera de la ciudad... y la ex novia de Dustin vivía cerca del central park... allí es cuando deja de tener conexión —susurró impresionada. Sana volvió a asentir.

— ¡Exacto!— sonrió emocionada ahora solo nos queda encontrar la conexión entre las tres chicas y esa mujer... ella habló de un auto negro, lo cual ahora dudo mucho que sea cierta esa información. Lo único seguro es que ella conoce a quién conducía el auto que se llevó a mi niño y quiere salir de eso de una vez— habló molesta.

—Escuché que dijiste algo sobre un auto blanco... —dijo Tzuyu al recordar—quizá sí, si eso debe ser. Ella sabía muy bien lo del auto blanco y por eso dio información falsa, para desviar nuestra atención.

—¿Tú conducías un auto negro, Dustin?— le preguntó Sana.

—Mi hermano mayor— respondió sinceramente —alguna vez me lo prestó para llevar a Lena a algún sitio —sonrió un poco melancólico al recordar a su ex novia —pero yo no tengo licencia— dijo avergonzado. Sana suspiró pesadamente.

— Claro, quiero que investigues quién relacionado a esa mujer conduce un auto blanco —le pidió Sana mientras el chico asentía, obedecería— tengo que saber quién fue —susurró para sí misma apretando inconscientemente el volante.

—¿Entonces son dos asesinos diferentes? —preguntó Dustin confundido.

—Eso es lo que tenemos que averiguar —respondió Sana deteniendo el auto en un semáforo en rojo —sí esa mujer es cómplice del asesinato de tu ex novia, tendría mucho sentido que quiera acusarte. Si esa mujer reclamó el seguro de Lena entonces tendría aún más sentido. Ahora quisiera saber quién la está ayudando, porque dudo mucho que ella haya asesinado a Lena sola.

—A Lena la encontraron muerta en su habitación, lo que significa que conocía al asesino —intervino Tzuyu— a ella no la violaron, de hecho no se pudo comprobar nada en la autopsia. Lena conocía al asesino, por lo tanto su madre también.

—Excelente deducción, Tzuyu—le sonrió Sana volviendo a poner en marcha el auto —matarla para reclamar el seguro e iniciar una nueva vida... Dustin —el chico asintió mirándola por el retrovisor— ¿Esa mujer tenia algún novio?

—Creo que sí, era mucho más joven que ella —respondió sinceramente— poco lo vi, no podría decir mucho —Sana asintió, tenía mucho trabajo que hacer.

—¿Dónde vives, Dustin?— preguntó. El chico sonrió, por fin iría a casa.

♡

—¿Cómo te sientes? —le preguntó Tzuyu entregándole su taza de café.

—No muy bien —respondió recibiéndola para dejarla a un lado de la mesa —gracias, por cierto —sonrió con su vista fija en sus papeles, totalmente entregada al caso.

—No hay de qué —respondió sentándose a su lado —¿Has descubierto algo?—Sana la miró recostando su cuerpo en la silla.

—Estoy pensando en ceder el caso— suspiró sorprendiendo a Tzuyu —el caso de las tres chicas asesinadas, así podré concentrarme totalmente en el caso de Lena Lennon.

—¿Pero a quién le cederías el caso? —Sana se encogió de hombros.

—Ese es el problema —volvió a suspirar— si yo dejó el caso, lo tomaría Mark y él es abogado de la firma de Connor Carter, enemigo número uno de tu papi —dijo pasando frustrada sus manos por su rostro.

— Pero no es necesario eso— le dijo Tzuyu tratando de comprender— prácticamente solo necesitas el nombre del asesino y resolverás el caso. Yo sé que tú puedes, juntas podemos —Sana sonrió un poco.

— No es así de fácil, Tzuyu — respondió suavemente—estamos hablando de tres chicas violadas y asesinadas, no hay indicios de robo, no hay huellas, no hay sangre, no hay ADN, no hay nada que me lleve al asesino. No puedo hacer mucho.

—Puedes hacer más—dijo tomando su mano— son dos casos diferentes, a lo mejor tienes que verlo así. Tres chicas muertas en las últimas dos semanas, con diferencia de tres días...

—¿La próxima puedo ser yo?— interrumpió ligeramente emocionada. Tzuyu negó con su cabeza de inmediato.

—No, no, no y no— respondió —no digas eso, Sanie. A mí me importas—Sana suspiró antes de asentir— ahora, tienes que pensar —dijo llevando su mano a su rostro —en que quieren desviar tu atención —Sana cerró sus ojos mientras reía —eres muy buena y ellos lo saben. Una cadena.

— Quizá tienes razón, a lo mejor no tienen ningún tipo de conexión. Pero entonces ¿Por qué son asesinatos contemporáneos? —preguntó tratando de entender— trabajo sucio, cómplices, seguros, dinero, ambición... —susurró para sí misma esa mujer y su pareja son compañeros de crimen, ella planea y él ejecuta... él engañó a Lena antes de asesinarla, lo dejó entrar a su habitación, quizá tuvieron sexo y luego... la asfixió, asesino sutil —Tzuyu asintió sonriendo— y ella debe tener una gran cuartada para el día de la muerte —miró a Tzuyu sonriendo —sino tendremos a nuestros asesinos.

—¿Lo ves? —preguntó emocionada —eres muy buena.

— Gracias por confiar en mi —le dijo sonriendo, sonrojada como era inevitable —de verdad, Chewy—Tzuyu se encogió de hombros detallando su mirada, le gustaba Sana, le gustaba mucho.

—No tienes que agradecer si es algo que hago con gusto— respondió —confio en ti, en cada aspecto de ti— Sana se inclinó para besar la frente de Tzuyu por algunos segundos.

—Eres la mejor pretendiente del mundo —le susurró al separarse— me siento cómoda contigo y es algo que no me pasa con muchas personas. Siento que podremos llegar a formar algo bonito si se dan las cosas.

— Que sea tan precioso como tú —respondió en un suspiro, no se esperaba aquello—me gustas tanto— dijo inconscientemente. Sana abrió su boca sonriendo sorprendida y Tzuyu al escucharse a sí misma se sonrojó de inmediato.

—Oh —dijo Sana riendo un poco— invítame a una cita, vamos — La mente de Tzuyu quedó en blanco— concédeme eso, quiero tener una primera cita contigo—Sana no era nada tímida cuando de amor se trataba.

— Quieres, quieres una cita— asintió Tzuyu nerviosa y totalmente sonrojada. Sana asintió sin dejar de sonreír —¿Quieres salir conmigo? Como en una cita, ya sabes, una cita de amor.

— Estaré feliz de salir contigo —respondió sinceramente;ya sabes donde vivo, solo tienes que planearlo.

—Mañana después del trabajo —dijo de inmediato —no sé conducir pero podríamos...

— Yo conduciré —rió Sana encogiéndose de hombros— quizá cuando seas mi novia te enseñe a manejar bromeó provocándole un corte a la respiración de Tzuyu.

— Haré lo que tú quieras— respondió. Sana volvió a reir un poco, Tzuyu era simplemente maravillosa ante sus ojos— y quizá cuando tú seas mi novia vuelvas a colocarte el cinturón de seguridad—Sana ladeó su cabeza —digo, porque...

—Tendré a alguien esperándome en casa— susurró para sí misma. Tzuyu asintió puntualmente, sus nervios eran muy fuertes —ya veremos— sonrió —mañana tendremos nuestra primera cita, así que dejaré esto organizado. Voy a tardar, sí quieres puedes ir a dormir— dijo tomando algunos papeles para hacer lo anteriormente dicho.

—No, yo quiero acompañarte —respondió incorporándose, sacudiendo un poco su cabeza. Sana miró a Tzuyu detallándola, pensando irracionalmente en arriesgarse a ganar por ella.