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ⁿᵒᵗ ᵉᵛᵉʳʸᵗʰⁱⁿᵍ ⁱˢ ʷʰᵃᵗ ⁱᵗ ˢᵉᵉᵐˢ

Despertó con la respiración agitada y el corazón latiéndole a mil por hora, su cuerpo estaba cubierto por una gran capa de sudor lo cual le sorprendía ya que ni haciendo ejercicio sudaba tanto.

-Qué... ¿Qué pasó? - se preguntó a si mismo.

Todo lo que soñó se sintió tan real que le daba escalofríos pensar en eso de nuevo.

-Hoseok...

Lo recordó, lo vio en sus sueños, ¿estará bien?

Justo iba a levantarse cuando alguien abrió la puerta de su habitación y de ahí entró Jimin.

-¿Park? - dirigió su mirada a los ojos de este.

❝¡Jungkook! Al fin despertó, que alivio❞

-Jungkookie ¿ya te sientes mejor? - tomó asiento a su lado.

-¿Si? ¿Qué sucedió? - cuestionó con bastante curiosidad.

-Estábamos en el patio en nuestro descanso hablando de los fantasmas y las auras raras, dijiste que te ibas pero antes de hacerlo te desmayaste - le informó su amigo.

-Uh, no recuerdo nada de eso - suspiro.

Su sueño comenzaba donde su amigo le explicó.

-El doctor dice que podría ser falta de alimentación, deberías comer más, Jeon.

-Si como sea - se levantó de la cama sentándose a la orilla de esta - Tuve un sueño raro...

-Siempre tienes sueños raros.

-Pero este era aún más raro, era como una premonición o algo así.

Jimin tenía la sensación de que su amigo no era del todo normal ya que siempre le solía contar sus sueños muy extraños y el comportamiento de este también lo es, lo más probable es que tenga una enfermedad mental o eso es lo que piensa Jimin.

❝Ya empieza otra vez, es un poco aburrido❞

Jeon frunció el ceño inmediatamente, como se atrevía a pensar eso.

-Me largo, tenemos clases, llegare temprano.

-¡Oye! ¡Dime tu sueño!

De forma rápida dejó su habitación y caminó por los pasillos del internado, mientras más lo hacía recordaba todo lo que soñó, los cadáveres de sus compañeros, el incendio, esas voces y Hoseok.

Trataba de convencerse que es un sueño y nada más, no tenía que darle más vueltas al asunto.

Antes de la clase se dirigió al baño, al estar ahí encendió el grifo del agua y mojó su rostro, no quería parecer un borracho en las clases.

Estaba bastante concentrado en lavarse el rostro que no se dio cuenta que habían entrado dos chicos al baño.

-Los exámenes empiezan pronto Hobi, no te olvides de ello.

-Claro que no TaeTae, ¡es lo primero en mi lista! Estudie mucho tiempo.

Sin embargo, de la nada regreso en si al escuchar esa voz de Hobi, quizás la mirada que le dio a los chicos fue muy obvia que ellos se dieron cuenta y lo miraron.

❝¿Ese es Jeon? Vaya ❞

Leyó los pensamientos del tal TaeTae

❝Es Jungkook... No me di cuenta que estaba aquí❞

Y luego los de Hoseok, su rostro se suavizó, recordaba su sueño y no podía evitar mirar al chico así.

Y también recordaba todo lo que este pasó lo cual lo puso nostálgico.

-¿Se te ofrece algo? - pregunto el amigo de Hobi.

-No - apartó la vista -Lo siento.

-Perdonado, no es bueno que escuches las conversaciones de los demás - regañó.

-Tae no seas así con él - le dio un golpe en la cabeza ignorando la queja de este.

-¡Hyung! Yo que culpa que este este escuchando nuestra conversaciones de hombres.

-Dejalo, mejor vámonos.

Aquellos chicos se retiraron dejando a Jungkook pensante, en su sueño esos dos vinieron a hablar justo en el baño y el los escucho en el cubículo, ahora paso casi lo mismo.

La diferencia era que no escucho ninguna voz por parte de Hoseok.

-Fue un sueño Jungkook... Ya deja de pensar.

En las clases casi se quedaba dormido, su asiento era al final cerca de la ventana lo que le hacia tener sueño con bastante facilidad, no prestaba atención a absolutamente nada que el maestro estaba diciendo.

-Jeon Jungkook - habló el maestro

El chico reaccionó asustado y observo al maestro.

❝ Otra vez este niñato durmiéndose en mi clase.❞

Apartó la mirada, no iba a escuchar lo que este estaba diciendo en su mente, puras pestes.

-¿Esta prestando atención a lo que estaba explicando? - preguntó aburrido el viejo.

-Si señor - asintió con la mirada baja.

-Dígame que estaba explicando.

Como siempre hace miró a alguno de sus compañeros quienes lo miraban curiosos, al escuchar la respuesta la dijo y solo así se pudo salvar del maestro ogro.

Suspiro más aliviado, iba a volver a ver sus apuntes cuando sintió una mirada sobre él, cuando quiso averiguar de quien se trataba Jung Hoseok rápidamente vio hacia otro lado.

Jungkook se sorprendió de que este estuviera viéndolo, y es que nunca antes habían cruzado miradas pero de repente sentía un vínculo entre ellos.

Ya que Hobi estaba en los asientos de adelante no alcanzaba a verle los ojos, nunca leía los pensamientos de los demás a su gusto, ya que consideraba que debía tener privacidad. sin embargo ahora quería leer los de Jung.

La clase acabó a la hora del almuerzo, Jungkook salió del aula mientras bostezaba, detrás de él venían Namjoon y Jimin quienes hablaban entre ellos sobre cosas triviales.

-El maestro te notó de nuevo hoy - mencionó Nam.

-No me lo recuerden - dijo aburrido.

-Este chico - señalo a Jeon - se la pasa durmiendo pero sabe las respuestas cuando le preguntan.

-No como tu Jimin-ssi - se burla Namjoon riendo.

-Gracioso Hyung.

Se rió un poco con sus amigos, en ese ambiente ingresaron a la cafetería donde Nam y Jimin pedían el almuerzo del día mientras Jeon solo un ramen picante.

Tomaron asiento y como es habitual Jungkook estaba callado en su sitio con la mirada baja, el ramen sabía delicioso.

-Disculpen, ¿puedo sentarme con ustedes?

Al reconocer la voz levantó la mirada rápidamente.

❝Espero no me rechacen...❞

Al leer el pensamiento volvió la mirada a donde la tenía, osea su tazón de ramen.

-Si si, claro Hobi Hyung siéntate - le hizo espacio Jimin.

El chico un poco tímido tomó asiento quedando frente a Jungkook.

-¿Y Tae, Hobi Hyung? - preguntó con amabilidad Nam.

-Fue a estudiar a la biblioteca, yo tenía mucha hambre así que estoy aquí solo - explica con una sonrisa.

-No te preocupes, nosotros te cuidamos. - aseguró Jimin.

El resto del almuerzo fue entre animadas pláticas entre los tres, menos Jungkook que prefieria ver con gran fascinación la mesa y dibujar figuras con su dedo en esta.

-¿Y tu como llegaste aquí Jungkook? - interroga Hoseok.

Más no recibe ninguna respuesta.

-Lo siento Hyung, siempre es así de asocial - se disculpa Jimin antes de darle un manazo en el brazo al mejor.

-¡Ah! - gritó - ¿Que te pasa estúpido?

-Más respeto tonto, Hoseok Hyung te estaba hablando.

Dirigió la mirada al chico acariciandose el brazo.

❝Creo que Jimin fue muy brusco...❞

-Dígame Hyung... - alejó la vista.

-Preguntaba, como llegaste aquí.

-Mis padres murieron - explico sin darle muchas vueltas - Me adoptaron otras personas pero por mi comportamiento me dejaron aquí.

-¿Tan mal te portabas? - pregunta ahora Nam.

-En realidad no sólo...

No, no podía decir eso, sería exponer su don abiertamente.

-No hablaba mucho y pensaron que necesitaba estar lejos...

-Ya veo, perdón por hacerte hablar de eso - se disculpó Hoseok.

-Esta bien - negó restándole importancia.

Los padres de Jungkook murieron extrañamente cuando el nació, toda la vida la paso en un orfanato donde ahí fue descubriendo que cuando miraba a los ojos a alguien podía leerle los pensamientos.

No era nada bonito escuchar a los demás niños pensar cosas feas de él, al no entender bien su don siempre les reclamaba por haber dicho eso cuando en realidad no.

Eso trajo bastantes problemas que por suerte no llegaron a más, ya que Jungkook entendió y aprendió a vivir con ello. La solución, no mirar a nadie a los ojos.

De ahí empezó eso, cuando hablaba con personas normalmente lo hacía con la mirada baja, algo que incomodaba a algunos pero era mejor a escuchar hasta que color de ropa interior tiene.

Cuando fue adoptado todo parecía ir bien, sin embargo, gracias a su don sabía que no era querido en lo mínimo. Al poder leer los pensamientos conocía todo lo que estos pensaban de él y la única razón por la que llegó era para ser el sirviente.

Obviamente nunca se dejó, siempre se defendía.

Incluso más de alguna vez se los hizo saber, cuando le castigaban y pensaban el lugar donde me escondían el celular o el computadora y Jungkook siempre iba a sacarlo hasta del lugar más secreto.

Una vez leyó los pensamientos de su madre adoptiva donde está decía que no sabía porque lo llevaban a estudiar si los burros no aprenden y Jungkook le contestó "Ni yo se porque voy"

Poco a poco ellos empezaron a de cierta forma temerle y arrepentirse de no haberse llevado otro niño, las reglas decían que no podían regresarlo y ya no lo querían con él.

Así que lo inscribieron al internado para hombres situado en Gwangju donde pasaría cuatro años hasta acabar sus estudios.

Ahora está aquí compartiendo mesa en la cafetería del internado con otros chicos, dos amigos bastante cercanos y el otro, el chico de sus sueños.

Pero no porque sea de sus "sueños" Si no porque literalmente apareció en sus sueños.

Todavía le pone la piel de gallina recordar las voces que provenían de Hoseok, así de esconditas quiso verlo encontrando otra vez que este lo miraba.

❝¿Estas leyendo mis pensamientos Jungkook?❞

Asustado abrió sus ojos de la sorpresa que hasta se levantó de su sitio haciendo que todos en la mesa le vieran.

-¿Que pasa Jungkookie?

-N-Nada... - cerro los ojos y trago saliva.

-¿Te sientes mal? - cuestiona Nam preocupado - Te llevaremos a la enfermería.

-Estoy bien... Voy al baño.

Salió de la cafetería corriendo por los pasillo hasta llegar al baño donde se encerró en un cubículo, ¿como era posible que Hoseok supera que...?

No, es imposible, siempre es cuidadoso en el internado.

No encuentra ninguna explicación a eso, no hay quizás.

-¿Jungkook?

La voz de Hoseok sonó en todo el baño y se tensó, iba a hacer como si no estaba ahí.

-Se que estas aquí... Unos chicos te vieron entrar.

Suspiro, ya que, si el sabía ahora tenía que enterarse de como supo. Abrió la puerta y salió.

-Hoseok tu-

-Dejame hablar - le interrumpió -Ayer... Soñe contigo.

Se sorprendió ante eso ya que igual le sucedió.

-Soñé algo muy feo... Donde yo al parecer estaba poseído por demonios extraños y tu podías escucharlos.

Levantó la mirada conectado con la de Jung.

❝En mi sueño tu podías leer los pensamientos al ver a las personas, pero, con esas voces era diferente y podías oírlas aún sin verme. Se sintió bastante real que pensé que tu podías de verdad saber que pensaba... Claro lo pensaba como broma pero al ver tu reacción en la cafetería supe que era de verdad.❞

Escuchó todo y suspiro revolviéndose el cabello.

-Si puedo... Creo que me deje en evidencia demasiado.

-Es extraño... E increíble.

-Por favor, mantén esto en secreto. - pidió.

-Claro que lo haré ¿Desde cuando sabes hacerlo?

-Desde siempre supongo, eres el primero en saberlo también, por cierto, yo también soñe con lo mismo que tú.


Jungkook tenía los ojos cerrados hace poco había estado leyendo y estaba cansado, estaba a punto de dormir cuando sintió una caricia en los cabellos.

Al abrir los ojos encontró a Hoseok al cual le sonrió.

-Casi me dormía.

-Si, tenemos clase.

Pasó un año desde el sueño que tuvo Jungkook y Hoseok en conjunto, aquello solo los unió más, lo que comenzó con saber detalles del sueño fue haciéndose una rutina de hablar todos los días.

Obviamente el tema principal cambio con el tiempo.

-No quiero ir - mencionó apartando la vista.

-Sabes que no tengo problema en que leas mis pensamientos.

-No estoy acostumbrado todavía.

-Ya ha pasado mucho tiempo - le menciona con una sonrisa - Lo único que vas a leer es que tengo hambre.

Jungkook rio ante el comentario.

-Deberías comer.

-¿Me ayudaras robando comida de la cafetería?

Negó y se levantó de la cama.

-Vamos a clase pues.

Hoseok sonrió en secreto, ambos salieron de la habitación y caminaron directo al aula, en el camino Jung se dio cuenta que sus manos estaban peligrosamente cerca, quería juntarlas, no obstante, se obligó a reprimir ese impulso.

-Pronto serán las vacaciones... - informa Hobi para distraerse - ¿Dónde irás?

-Yo no salgo - dijo sin darle importancia. - Me quedo aquí.

El de cabellos rojizos le dio una mirada de curiosidad.

-¿De verdad?

Asintió Jungkook.

-A mis padres adoptivos no les hace mucha gracia verme.

No pudo evitar sentirse mal por su amigo leedor de pensamientos así que propuso algo.

-Entonces saldrás conmigo.

-¡¿Que?! - le observa sorprendido - ¿Donde?

-No lo se, lejos de este internado, no lo se tu pero este uniforme rojo me aburre.

-Hoseok Hyung, mejor me quedaré.

-Nada de eso, de seguro no haz salido desde que entraste.

El silencio respondió por si solo.

-¡Tenia razón!

-Tengo el presentimiento que no me dejarás en paz hasta que acepte.

Al ver la sonrisa "de inocente" lo comprobó.

-Iré - dijo Jungkook con una mueca.

-¡Bien! Te mantendré al pendiente~

La conversación acabo cuando entraron al aula, cada uno se sentaba en un lugar distinto pero eso no impedía que se dieran algunas miradas.

Hobi dirigió la mirada hacia el menor y pensó.

❝¿Nos sentamos juntos en el almuerzo? ❞

Jungkook lo estaba viendo también por lo que al leer el pensamiento asintió.

Mientras tanto Jimin junto a Namjoon tomaron asiento cerca de Jungkook, se les hizo un poco extraño que este viera a Hoseok y este le estuviera asintiendo o negando.

-Creo que se gustan - opina Jimin en susurró.

-No lo se, no me parece.

-Aun así, se han hecho muy cercanos - hizo una mueca.

-¿Y eso es malo?

-No, para nada, solo que me acostumbre a que seamos tres.

Namjoon sonrió y le revolvió los cabellos al rubio.

Cuando la maestra hizo acto de presencia todos se obligaron a prestar atención y aprender todo lo posible.

Finalmente las vacaciones llegaron, todos los alumnos salieron de sus habitaciones con muchas maletas consigo pareciendo que estaban más que listo para este momento.

Solo Jungkook se quedó en su habitación, de forma precisa en su cama, como habitualmente, esta vez no sabe que hacer en las vacaciones, se ha leído muchos libros, ha estudiado mucho, no encuentra nada que hacer.

Lo que hará es mejor dormir un poco, abrazó la almohada donde cerró los ojos pero casi de inmediato la puerta fue tocada. Seguro era la persona quien estaba pensando que es.

Se levantó y abrió la puerta con un rostro serio, recibiendo una sonrisa deslumbrante.

Si, si es en quien estaba pensando.

—¿Ya estaba listo Jungkookie? — cuestiona sin borrar la sonrisa.

❝ Por lo que veo no❞

—¿Y si lo ves porque preguntas? — entró de nuevo a la pieza.

—Es parte del guion — se tomó la libertad de acompañarle dentro.

—No creo que tengamos que empacar como los demás.

—Claro que no, iremos a un lugar cerca.

—Bien.

Jungkook estaba sentado evitando mirar a Hoseok, el nombrado al notar que este no pensaba en tomar la iniciativa le toma la mano.

—¡Vamos!

El menor se deja llevar por el de cabellos rojos quienes corrían hacia la salida de aquel internado que parecía más una prisión

—¡¿Donde me llevarás?! — eleva la voz Jungkook ya que al estar corriendo no podía hablar normalmente.

—¡Ya veras! — contesta con el mismo tono.

Los chicos corrieron tomados de las manos, para Jeon no tenían rumbo alguno, no obstante, sentir el viento chocar en su rostro le dio una sensación de libertad que nunca había percibido.

No tuvo cuenta de cuanto corrieron hasta que llegaron a un puente y ahí Hoseok lo soltó, ambos respirabas cansados y Jungkook tenía los ojos cerrados.

El mayor fue hacia el tomándole las manos.

—Abre los ojos Jungkookie.

El nombrado aún con la respiración agitada abrió los ojos viendo los ojos de su acompañante como primer plano.

❝Este lugar es muy bonito y te gustará ❞

Giró el rostro para ver el paisaje y por primera vez en mucho tiempo sonrió por lo lindo que estaba todo a su alrededor, no dudó en asomar la cabeza por el puente, notando algunos pececitos nadar.

—Es hermoso — le dijo a Hoseok dinero dejar de mirar los peces.

Este se acercó y lo abrazó por detrás sorprendiendo a Jungkook en el acto.

—H-Hoseok...

—Me gusta verte disfrutar de las cosas, verte feliz me calma, se que aunque tengas esa cara de enojado también tienes sentimientos, como me gustaría también leer tus pensamientos para saber que te hace feliz.

Jeon se quedó paralizado al escuchar las palabras tan bonitas de su compañero, fue como si su coraza fue destruida brutalmente por Jung Hoseok, las mejillas estaban rosadas y el corazón le latía como loco quizás Hoseok podía notar aquello.

Con timidez puso sus manos sobre las del chico, la sorpresa en sus rostro cambio a la sonrisa que tuvo anteriormente.

—Tú...

—¿Yo? — preguntó hobi.

—Tú me haces feliz.

Se dio la vuelta para verle no pudiendo evitar leerle la mente.

❝Jungkook, tu me gustas mucho ❞

Sonrió y sin pensarlo más atrajo a Hoseok para besarle los labios suavemente, no tenía experiencia pero su corazón le decía que lo hiciera.

Por supuesto Hoseok correspondió sintiéndose cómodo con el chico que lee mentes y que coincidieron con aquel sueño horrible.

No todo es lo que parece, es la frase de vida de Jungkook que al saber leer mentes sabe en realidad como es una persona.

Se quedaron bastante tiempo en el puente así abrazados sin importar nada y nadie más.

—Vamos a otro lugar — pidió Jung.

—Si, mientras estés conmigo.

Se tomaron de las manos viéndose a los ojos.

❝Nunca te dejare❞

Ambos caminaron de la mano hacia otro lugar, nadie sabe que más paso a partir de ahí sin embargo, Jungkook ya no se sentiría solo si tiene a Jung Hoseok a su lado.


Muchas gracias a quienes apoyaron este one-shot, decidí crear un extra para que supieran que no todo es como parece ;)

Gracias por todo!

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