𝟎𝟔: 𝐧𝐨 𝐩𝐮𝐞𝐝𝐨, 𝐧𝐨 𝐩𝐮𝐞𝐝𝐨
- ¿No querías lastimarme? - Pregunto mirando a Sergio detenidamente.
- Sí, eso es lo que dije. - Respondió.
- No te estoy entendiendo nada, Sergio... No entiendo absolutamente nada.
- No tienes por qué hacerlo, Chlóe, no quería hacerte daño. Eso jamás en la vida me lo hubiera perdonado.
- Si no querías hacerme daño, ¿por qué te fuiste, Sergio? No sabes lo mucho que sufrí con tu partida, desapareciste de mi vida como si nada, sin decirme absolutamente nada. - Mis ojos se empañaron de lágrimas. - Me dolió en el alma eso Sergio, me lastimaste muchísimo.
Sergio me atrae hacia él y me abraza, escondo mi rostro en su pecho y termino por llorar. Él acaricia mi espalda suavemente tratando de tranquilizarme.
- Por favor, Chlóe, no llores, no me gusta verte de esta manera. - Me separo de Sergio y nuestras miradas se conectan nuevamente.
- Sergio, ¿Por qué te fuiste? Solo dime la verdad. - Menciono con la voz quebrada.
- No puedo. - Responde. - No puedo, Chlóe, no quiero que...
- ¿No quieres que...?! - Exclamo y me separo de él totalmente - ¡Habla ahora Sergio! - Sergio se gira y se aleja de mí. - Has sido la persona que más daño me ha hecho, Sergio Reguilón. La persona que más daño me ha hecho... Y no entiendo por qué, que yo sepa no hice nada malo. Siempre te di lo mejor de mí en nuestra relación. - Espero a qué Sergio se digne a verme, pero sucede todo lo contrario. Sergio simplemente sigue con su camino, alejándose de mí y entrando nuevamente a la ciudad deportiva.
Me dejé caer sobre el césped y terminé por llorar, no me importa en absoluto que alguien me vea en estos momentos, simplemente quiero desahogarme y sacar todo este dolor que por años ha permanecido ahí.
Fui directamente a los baños y limpié cada gota de maquillaje que se había arruinado por las lágrimas.
- ¿Te puedo ayudar en algo? - Una chica de cabello castaño me mira con un poco de preocupación.
- No, estoy bien, gracias. - Sonreí en su dirección y ella asintió.
- Soy Paola. Paola Lo Celso. - La chica castaña se presenta con una sonrisa y correspondo a ese saludo.
- Chlóe. Soy Chlóe García. - Respondí. - Tu apellido me suena...
- Sí, todos me lo dicen. Lamentablemente, soy hermana de Giovani, jugador de este club.
- ¿Hermana de Gio? Bueno es un placer conocerte Paola. - Sonreí y seguí quitando todo el maquillaje.
- ¿Paso algo con alguien? Digo, no creo que hayas llorado así de la nada. - Paola me miró dudando y solté un suspiro - Oh, disculpa, no quería... -
- No te preocupes Paola, no pienso que seas una chismosa. - Ambas reímos. - Cosas de amor. - Dije. - Por eso no te enamores.
- Uy, no muy tarde. - Dice y reímos nuevamente. - Estoy segura de que ese problema se arreglará.
- Gracias. - Sonreí.
Al terminar de quitar todo el maquillaje junto a Paola salimos del baño y vamos directo a donde estaban los chicos, la cafetería. Sonny y Danny me mira frunciendo el ceño, niego mirándolos, pero ambos me conocen muy bien y no sé creerán cualquier mentira.
- Estoy bien. - Murmuré en su dirección.
Charlamos un par de minutos, la hermana de Lo Celso me agradó, tiene una forma de ser muy extravagante y eso es gracioso en algunos momentos.
- ¿Te veremos en la fiesta? - Pregunta Emilia cuando ya estamos en el estacionamiento.
- Sí, ahí estaré. - Respondí.
- Eh ah muy bien. Bueno tremenda fiesta que se viene, ¿o no? - Espeta Paola y todos reímos. - Ya hermanito deja de ser un amargado. - Gio roda los ojos y reímos nuevamente.
Nos despedimos y cada uno sube a su auto, Dele, por lo que Sonny me dijo se fue cuando estaba con Sergio, lo más probable es que lo vea en la fiesta de esta noche.
Estoy dudando sí ir a la fiesta, porque Sergio estará ahí y no sé si sea lo suficientemente fuerte para tenerlo frente a mí otra vez.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro