ᴳᴬᵁᴺᵀ ᴴᴼᵁˢᴱ
i. las serpientes reunidas.
( HARRY POTTER GOBLET OF FIRE. )

"Génesis 3:15: Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar."

𝐑𝐄𝐙𝐀𝐑 𝐍𝐎 𝐄𝐑𝐀 𝐀𝐋𝐆𝐎 𝐐𝐔𝐄 LEXIE 𝐀𝐌𝐀𝐑𝐀.

𝐋𝐀 𝐅𝐀𝐌𝐈𝐋𝐈𝐀 𝐆𝐀𝐔𝐍𝐓, conocida por su linaje puro y su descendencia directa de Salazar Slytherin, mantenía un vínculo especial con ciertas tradiciones muggles que habían sido adoptadas a lo largo de los años. Una de estas tradiciones era el acto de rezar, una práctica que algunos miembros de la familia consideraban sagrada y esencial para mantener su conexión con la magia ancestral.

   Sin embargo, para Lexie Gaunt, el concepto de rezar era completamente desagradable. Le resultaba incomprensible y repulsivo participar en una tradición que consideraba sucia y contaminada por la influencia muggle. Cualquier mínima asociación con los muggles despertaba en ella un sentimiento de repugnancia en su ser.

━Y en la hora de nuestra muerte. Amén.

   Terminó su oración, Ominis, quien yacía arrodillado frente a la cama, las palmas de sus manos juntas, buscando una respuesta en un Dios superior.

   Lexie se miraba en el espejo con determinación mientras cepillaba su largo cabello café. Cada movimiento del cepillo era preciso, desenredando cada hebra con cuidado. A su lado, Ominis quien acababa de terminar su oración se preparaba para el día con la ayuda de su varita, una compañera que parecía tener vida propia.

Mientras la chica ajustaba los pliegues de su uniforme con precisión, no podía evitar sentir admiración por la habilidad mágica innata de Ominis y la forma en que su varita respondía a cada uno de sus movimientos. Era evidente que la varita de Ominis era más que un simple objeto; era una extensión de su ser, una herramienta que le permitía navegar el mundo mágico con gracia y determinación a pesar de su ceguera. Mientras se preparaba, su mente divagaba en los eventos que llevaron a ella y a su hermano Ominis a tener que abandonar Hogwarts en su tercer año.

Las presiones y las tradiciones familiares los habían forzado a regresar a la mansión Gaunt, donde la oscuridad y el peso del linaje de Salazar Slytherin parecían envolverlos en un abrazo sofocante.

En ese instante de reflexión, la elfa doméstica de la familia Gaunt irrumpió en la habitación.

━Señorita Lexie, señor Ominis.━habló con voz suave pero respetuosa━el joven Sebastián los espera abajo. Ha estado ansioso por reunirse con ustedes y comenzar el nuevo año escolar en Hogwarts.

Ominis se dirigió a Seraphina con seriedad y cortesía━Seraphina, por favor, asegúrate de tocar antes de entrar la próxima vez.

━Oh, Ominis, ¿temes que Seraphina nos sorprenda en plena preparación para el día?━Carcajeó Lexie, encontrando diversión en las precauciones de su hermano.

━Es solo una medida de precaución.━Agregó el rubio esbozando una sonrisa casi invisible━ No me gustaría interrumpir la labor de Seraphina, pero valoro mi privacidad.

Lexie, aún divertida, se dirigió a Seraphina con amabilidad━Seraphina, por favor, dile a Sebastián que ya estamos bajando. No queremos hacerle esperar más. La elfa asintiendo a la orden de los jóvenes abandonando la habitación.

La castaña decidida se puso de pie junto a Ominis, y de manera cariñosa, entrelazó su brazo con el de su hermano. La conexión entre ambos se manifestaba en gestos sutiles pero significativos, reflejando el vínculo fraternal profundo que compartían.

Ambos ansiosos de ver nuevamente a uno de sus mejores amigos, Sebastián Sallow. Lo conocieron en primer año, los tres fueron castigados por entrar al bosque prohibido en busca de centauros (una idea infligida por Sebastian)

━Al fin devuelta en Hogwarts, ¿no es emocionante, Ominis?—Consultó Lexie mientras ambos bajaban las escaleras.

━Sí, definitivamente lo es. Espero este año sea calmado, ¿crees que la amistad con Sebastián y Anne siga igual?━Respondió Ominis, con la voz más calmada.

━¡Oh, Anne! Un año sin verla, extraño nuestras charlas nocturnas.—Exclamó recordando aquellos viejos momentos━y respondiendo a tu pregunta... esta más que claro que es un sí, Ominis.

Lexie y Ominis descendieron las escaleras en silencio, cada uno inmerso en sus propios pensamientos mientras se dirigían hacia el salón principal de la mansión Gaunt, donde Sebastián los esperaba pacientemente. Al llegar al salón principal, encontraron a Sebastián esperándolos con una sonrisa cálida. Su presencia era reconfortante y energizante, recordándoles que estaban rodeados de amigos que los apoyaban en su camino en Hogwarts y más allá.

Lexie no podía creer lo que veía, el niño flacucho, pecoso y más bajo que ella se había convertido en alguien más alto, más musculoso y sobre todo más lindo.

━Vaya, mirar a quiénes tenemos aquí, los príncipes y princesas de Slytherin.━El tono jecoso de Sebastián se hizo presente.

   La castaña rió suavemente y luego, con curiosidad, preguntó a Sebastián:━¿Y Anne? ¿Dónde anda tu encantadora hermana últimamente?

  Sebastián apretó la mandíbula por un momento, intentando ocultar sus emociones, y luego respondió con una mentira.

━Anne enfermo, nada grave pero tendrá que ausentarse unos meses.━Mintió Sebastian, despertando la duda en Omitís, quien parecía no creerse aquella mala mentira.

A pesar de que Lexie aceptó la explicación de Sebastián sin cuestionarla, Ominis no pudo evitar sentir una pizca de escepticismo. En su mente analítica, encontró la respuesta de Sebastián un tanto sospechosa, pero decidió guardar sus pensamientos para sí mismo por el momento.

Mientras caminaban hacia la puerta, Ominis observaba de reojo a Sebastián de vez en cuando, notando su tensión y la manera en que evitaba ciertos temas. Sin embargo, decidió dejar que las cosas fluyeran naturalmente y esperó el momento adecuado para abordar cualquier preocupación que pudiera tener sobre Anne y la respuesta de Sebastián.

El Expreso de Hogwarts resonaba con murmullos y susurros mientras Lexie, Ominis y Sebastián se abrían paso entre los estudiantes en busca de un vagón vacío. A su paso, podían escuchar los murmullos que surgían a su alrededor, rumores y especulaciones sobre los Gaunt que se extendían como fuego en un bosque. Lexie, acostumbrada a las miradas y comentarios por su apellido y su ascendencia, mantuvo una expresión serena mientras continuaban su camino por los pasillos. Ominis y Sebastián, por su parte, parecían más relajados ante los murmullos, sabiendo que los rumores eran parte inevitable de pertenecer a una familia tan conocida y con tantas historias que contar.

━¡Theodore dijo que estaría aquí, junto con Blaise!━Exclamó Sebastián, al mismo tiempo que los tres adolescentes seguían recorriendo el tren en busca de sus otros amigos.

━Te habrá mentido.

━Ominis, ¿porque no revisas los vagones de la izquierda?━Sugirió Lexie deteniéndose en medio del angosto pasillo.━con Sebastian podríamos revisar los que quedan.

━Claro... manden al ciego, que conveniente.—Respondió con sarcasmo, haciendo reír a sus dos amigos━¿Que? Es la verdad.

━Mejor que Lex revise esos.━se aventuró a decir Sebastian, a la chica no le quedó de otra que aceptar a regañadientes.

Lexie, entre resoplidos, aceptó la misión de Ominis y Sebastián de ir a buscar a sus amigos Theo y Blaise. Con paso ligero y un aire de expectativa, se encaminó por los pasillos del Expreso de Hogwarts en busca de sus compañeros, mientras los murmullos a su alrededor seguían siendo tema de conversación entre los estudiantes.

Mientras caminaba,  escuchaba de forma discreta los murmullos y rumores que circulaban sobre ella y su familia. Aunque algunos comentarios eran halagadores, otros reflejaban la curiosidad y la especulación que siempre parecían acompañar al apellido Gaunt. Sin embargo, su trayecto se vio interrumpido abruptamente cuando chocó con la espalda de alguien, haciendo que esa persona dejara caer algunos dulces al suelo.

Un quejido escapó de los labios de Lexie mientras se llevaba una mano a la cabeza, sintiendo el impacto del choque. Al levantar la vista para disculparse, su expresión cambió a una mueca de desdén cuando se dio cuenta de quién era la persona frente a ella. Ron Weasley.

━¿Estás bien? Lo siento mucho.━Preguntó con preocupación Ron con una expresión de preocupación mientras con cuidado recogía alguno de los dulces que se habían caído.

━¡Casi me arruinas el uniforme, Weasley! ¿Qué habrías hecho si lo hubieras ensuciado? No creo que puedas pagarlo si lo arruinas...━Exclamó con un tono de reproche, ignorando momentáneamente su propia responsabilidad en el incidente.

━No es para tanto, seguro que tu uniforme no sufrió ningún daño grave.━Respondió Ron tratando de calmar la molestia de Lexie.

━No tienes idea de lo que significa mantener un uniforme impecable. Claro que no podrías tener idea, mira de donde vienes, con esa ropa usada... libros usados, eres desagradable.━El ambiente se había convertido en uno tensó, Ron trataba de articular alguna palabra.

━Tratar a las personas con desprecio no arregla nada e insultar a Ron no va a arreglar tu uniforme, que para recalcar sigue impecable.━Lexie esbozó una sonrisa al reconocer a Harry Potter, el famoso mago del que tanto había oído hablar. Sin embargo, su sonrisa se desvaneció rápidamente.

━Gracias por intervenir, pero preferiría resolver esto sin necesidad de la ayuda de un... mestizo.━Aclaró ella.━¿tus papis no te enseñaron que es de mala educación irrumpir en una conversación?

━Lexie.—La voz de Ominis resonó detrás de ella.━guarda la compostura, te lo ruego, Theodore y Blaise aguardan en los vagones de la izquierda, vamos.

━Potter.━Dijo Sebastián mientras alzaba las cejas en un gesto que reflejaba cierta actitud sarcástica.

━Sallow.━La voz femenina de Hermione Granger se entrometió detrás de Harry, apareciendo en la conversación, correspondiendo el saludo de Sebastian quien sonrió burlescamente al reconocer a la chica.

Sebastian y Ominis se llevaron a la castaña del lugar, poniendo fin a la conversación con Harry. Mientras se alejaban, Atenea no pudo evitar echar un último vistazo hacia Harry, cuya expresión mostraba una mezcla de confusión y incomodidad por la interacción anterior. Estaba decidida a saber más sobre aquel mestizo pero guardando su distancia.

━Cinco minutos.━Rompió el silencio Ominis.━Cinco minutos te dejamos sola, Lexie, y ya estas causando problemas.

━Ahórrate tus sermones.

━Por favor.━Rogó Sebastian.

Intrigado por la breve pero intensa interacción con Lexie, Harry se quedó pensativo por un momento. Quería saber más sobre esa chica, sus antecedentes, su año en Hogwarts y cualquier otro detalle que pudiera ayudarlo a entender mejor su actitud y sus creencias. Con curiosidad tomó asiento en su vagón, buscando las palabras exactas con las cuales dirigirse a Hermione.

━Hermione, ¿sabes algo de ella? ¿De que año es...?━Consultó con curiosidad.━no la había notado antes.

━¿Cómo lo notarías? Jamás prestas atención en clases.━Suspiró con pesadez la chica.━Lexie es de Slytherin, de nuestro año. Descendiente directa de Salazar Slytherin, se ausentó en tercer año junto con su hermano, Ominis.

━¿Cómo...?

━Mantente alejada de ella, Harry. Una vida de miseria es lo que les espera a las personas de su al rededor.━Aclaró.

━¡Lo sabes todo!—Exclamó Ron.━¡Lo sabe todo, Harry!

Sin embargo, la advertencia de Hermione solo pareció aumentar la curiosidad de Harry. Para un chico de catorce años como él, nada era más intrigante que lo desconocido y lo desafiante. Decidido a saciar su curiosidad y tal vez desafiar algunas creencias arraigadas, Harry estaba dispuesto a hacer lo necesario para conocer a la enigmática chica rubia.