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En esta realidad, el rey de Auradon nunca invitó a cuatro hijos de villanos para estudiar en la prestigiosa preparatoria de la ciudad capital. Tampoco se enamoró locamente de la chica de cabello morado gracias a un plan malvado y una galleta mágica que resultaron en un amor sincero.

Aquí, la barrera entre los Estados Unidos de Auradon nunca existió. De hecho, la distinción entre villanos y héroes tampoco lo hacía. Solo se juzgaba a la gente por su buena o mala reputación, como suele pasar en la vida real.

Lo que quiere decir que Ben y Mal jamás se conocieron en la entrada de la preparatoria junto a la estatua del ex-rey, Adam. Sin embargo, sus amistades seguían siendo las mismas, y también su ex-relaciones sentimentales. Solo que, por obras del destino, terminarían conociéndose de todas maneras.

Ben, aún siendo el rey de Auradon, asistía con frecuencia a múltiples eventos destinados a la caridad, la política y la cultura. Lo hacía con todo el gusto y la disposición del mundo a pesar del cansancio. No solo por que sus padres se lo inculcaron, sino porque de verdad le nacía.

Después de una fallida relación con su amiga de la infancia, Audrey, se tomó un buen tiempo antes de considerar volver a salir con otras mujeres. Pasó dos años con la rubia, hasta que entendieron que sólo comenzaron a salir por presión social.

Había tenido citas y encuentros con algunas mujeres, pero aún no había encontrado a la indicada. Sabía que tener ese pensamiento era algo trillado, pero en serio quería encontrar a alguien que fuera la persona ideal para él. Así que tenía la esperanza de seguirla buscando hasta por fin encontrarla.

El trabajo era duro, y su vida era seguida por millones de personas. De modo que entendía que encontrar a una mujer que supiera adaptarse a pesar de todas las dificultades sería bastante complicado. Pero no perdía la esperanza.

Por otro lado estaba Mal, quien técnicamente nunca había tenido alguna relación que durara más de un año. Salió con diversos chicos, pero no terminaba de sentirse cómoda con ninguno.

Al ser la hija de una de las hadas más poderosas y del dios del Inframundo, era bastante fácil deducir que su vida no era nada privada. Se había ganado la reputación de ser una rompecorazones.

Tal vez porque la mayoría de los hombres con los que salió no desmentían los rumores, o porque su personalidad podía dar ese mensaje. Solo que la verdad era muy distinta a esa.

No permitió que la loca y mediática separación de sus padres la cambiara, decidió seguir creyendo en el amor. Sobretodo al ver como su papá lograba reencontrar el amor en su primera amada, y como ella era la mejor madrastra para ella y la mejor madre que sus hermanos menores podrían tener. O como su mamá aceptó amarse a sí misma y seguir adelante.

Amaba con locura a Macaria, Hadie y Melinoe, sus medio hermanos. Los tres niños podían ser unos revoltosos, pero eran tres de las personas a las que más quería junto con sus padres y sus amigos.

Maléfica decidió frenar su descendencia con ella, pero estaba bien con ello. Además, sabía que definitivamente el hada no quería ser madre de nuevo. Estaba bien teniéndola solo a ella.

Desde pequeña tuvo una gran fascinación por todo lo relacionado al arte, algo que hizo que conectara rápidamente con su mejor amiga peliazul, por lo que no fue muy difícil decidir dedicarse a trabajar en esa área cuando creció.

Estudió una carrera en artes plásticas e hizo una maestría en ilustración y pintura. Su dedicación la había llevado a graduarse con honores en la Universidad, y le abrió grandes oportunidades para su vida laboral.

Había creado muchas pinturas y murales para lugares y familias importantes. Sin contar que una galería tenía un contrato con ella para hacer exposiciones nuevas cada trimestres. Y a la vez, otra galería vendía sus obras todos los meses.

Esa noche, la noche en que lo conoció, justamente estaba siendo anfitriona de la apertura de una nueva exposición. Probablemente era una de las más importantes en su vida, así que estaba extremadamente orgullosa de sí misma.

La galería estaba repleta. Sus mejores amigos, -Evie, Carlos y Jay-, habían asistido con sus respectivas parejas. Conocía a Doug, Jane y Lonnie desde hace mucho. Les agradaban tanto que se sentía bien decir que eran parte de sus amistades.

También habían asistido Audrey y Chad. Audrey era la hija de Aurora, la ahijada de su madre, por lo tanto podía considerarla como su prima. Y se trataban como tal.

Estaba feliz por ver a la chica tan alegre con su novio. Su relación anterior había sido larga, pero ninguno era realmente feliz porque se querían solo como amigos. En cambio, con este chico desbordaba amor y adoración.

A pesar de tener contacto con la princesa de Auroria desde bebés, no se habían hecho cercanas sino hasta los últimos años. Por lo que sólo conocía a Ben, el ex de su prima, desde lejos. Saludos con la mano a la distancia y sonrisas. Y ya. Más nada.

Por eso y por el hecho de que literalmente era su ex novio no entendía como Audrey insistía tanto en que quería presentarlos.

-Aud, sé que quieres verme feliz, pero...¿No se te hace extraño querer emparejarme con tu ex? - cuestionó ella.

La rubia negó, apoyando su cabeza en el hombro de su novio.

-Yo nunca dije que era para emparejarlos, esa conclusión la sacaste tú sola - dijo burlona.

Mal sintió como sus mejillas enrojecían ligeramente. Tal vez, solo tal vez, podría admitir que el rey se le hacía atractivo. No era ciega y no vivía debajo de una roca, así que claro que sabía quién era y cómo lucía.

Un mesero llegó con una bandeja, ofreciéndole copas con champaña a todos. El grupo le agradeció y este se retiró luego de entregárselas.

-Vamos, M. No te haría daño conocer a alguien - la animó Evie, Doug dándole la razón.

Mal alzó una ceja.

-No tiene que ser románticamente- se apresuró a decir Carlos- Solo decimos que no sería malo que tengas más amigos.

-Carlos, en este momento literalmente tengo a once personas a mi alrededor a las cuales considero amigos - reclamó, señalando a los demás.

En su cuenta incluyó a Uma, Harry y Gil, quienes habían llegado un poco después y los habían alcanzado justo a tiempo para el brindis de apertura.

-Y en defensa de Audrey, Ben es un gran tipo - lo defendió Jay- No entiendo como es posible que todos lo conozcamos y tú seas la única que no ha hablado con él directamente.

Mal se encogió de hombros. La conversación se desvió cuando vieron que ella no diría nada más. Se dispersaron un rato después para dejar que la ojiverde hablara con los asistentes al evento.

(...)

Ben bajó de la limusina, ajustando su corbata. Le agradeció al chófer y entró al hermoso lugar al que había sido invitado. Se le había hecho tarde por quedarse leyendo en la biblioteca del castillo junto a su madre.

Caminó hasta ubicar a dos de sus amigos.

-Ben - lo saludó Audrey con alegría.

La saludó con un abrazo y estrechó amistosamente la mano de Chad.

-No creímos que se te haría tarde - le dijo el hijo de Cenicienta.

-Lo siento, es que me distraje leyendo con mamá. Y saben que cuando leo con ella nos ponemos a charlar sobre nuestras lecturas. Se me fue el tiempo - se rascó la nuca, apenado.

-No pasa nada - lo tranquilizó la chica.

Lo tomó del brazo y caminaron con él, con dirección a quien sabe dónde.

-¿Consideraste lo que te propuse? - volvió a hablar la princesa.

-Quiero conocerla, pero no te prometo que se cumpla algo de lo que te imaginas - aclaró- Eres una ex novia bastante particular, queriendo que salga con tu prima.

Chad y Audrey se miraron, aguantando las risas. Que casualidad que su respuesta había sido similar a la de Mal...

-Quiero que al menos sean amigos. Son de las personas más importantes en mi vida - lo persuadió- Todos en nuestro grupo se conocen menos ustedes, así que ya era hora.

Chad dijo que se iría con los demás y que luego los alcanzaba. Se acercó a donde estaban Jane y Lonnie. Ellos siguieron su caminata.

-Wow - exclamó Ben, maravillado por la obra que tenía enfrente.

La ojimiel sonrió.

-Te dije que es muy talentosa.

Ben no sabía que más decir. Conocía el trabajo de Mal gracias a sus amigos y a las redes, solo que verlo en persona era totalmente distinto. Era fenomenal.

-Y hablando de ella, creo que es hora de que te acerques. Ya ha transcurrido suficiente de la velada como para que les den un buen rato para conversar sin que los interrumpan - lo animó.

Ben se volteó, sintiendo como su corazón retumbaba en su pecho al verla caminando hacia ellos. La había visto en fotos y de lejos. Pero tenerla tan cerca de él era diferente.

Se veía extremadamente hermosa en el vestido verde esmeralda que portaba. Dedujo que era una pieza a la medida de Evie's 4 Hearts. Las sandalias doradas que adornaban sus pies, el maquillaje natural y el moño que sostenía su cabello le favorecían mucho.

Audrey lo soltó y se acercó a Mal. Hablaron por unos segundos hasta que la pelimorada se volteó a mirarlo. La saludó con la mano, sintiéndose nervioso de repente. La artista le sonrió y le devolvió el saludo.

Cuando las dos estuvieron con él, Audrey decidió ser la primera en hablar.

-Hasta que por fin puedo presentarlos adecuadamente - dijo con ánimo- Ben, te presento a Mal. Mal, te presento a Ben.

Los dos estrecharon sus manos, sintiendo una corriente eléctrica atravesarlos. Se miraron a los ojos unos segundos, apartándose lentamente.

-Los dejo para que hablen a solas - se despidió Audrey, sonriendo con malicia.

Los otros dos se rieron y dejaron que se fuera. Con eso había dejado más que claras sus intenciones de casamentera.

Comenzaron a caminar, observando las obras. Ninguno sabía muy bien como comenzar la conversación, menos después de lo que habían sentido al rozar sus manos.

-Así que...Tengo el honor de que el rey de Auradon haya venido en persona a ver mi trabajo - comentó Mal, con sus manos entrelazadas en su espalda.

Ben se rió suavemente.

-En realidad, el honor es mío. Hace mucho que sigo tu trabajo, y lamento no haber poder asistido antes- se detuvieron a mirar un lienzo que tenía trazado un precioso paisaje- Es aún más impresionante en persona.

Mal sonrió.

-Pues gracias, me he esmerado por superarme a mí misma en cada obra para lograr hacer cosas como esta.

Ben admiró detalladamente la pintura.

-¿Por qué decidiste esta temática y este nombre para la exposición? - consultó con ella.

La pelimorada se tomó un momento para responder.

-Bueno, decidí nombrarla Delicate porque quise centrarme en los detalles delicados de las cosas - comenzó a explicar mientras que avanzaban- Los petalos delicados en una flor o en el plumaje de un ave. Lo hermoso y delicado de mis lugares favoritos de la ciudad y de la naturaleza.

Se detuvieron de nuevo frente a una en particular.

-Y lo delicado que puede ser el amor de una pareja - completó.

La obra era una especie de representación fantasiosa de una pareja sentada en medio de una manta de picnic, siendo rodeados por varios pilares de piedra, una cascada y un lago. El lugar parecía sacado de un cuento de hadas.

This ain't for the best
My reputation's never been worse, so
You must like me for me
We can't make any promises
Now can we, babe?
But you can make me a drink
(Esto no es lo mejor
Mi reputación nunca ha sido peor, así que...
Debo gustarte por lo que soy
No podemos hacer ninguna promesa ahora. ¿Podemos, cariño?
Pero puedes prepararme un trago)

-¿Has tenido algo de suerte en ese ámbito? - preguntó.

Mal se sorprendió un poco por la pregunta. Carraspeo antes de contestar.

-Siendo honesta, no. De hecho, todas mis relaciones han terminado en desastre - se rió- Aunque bueno, supongo que eso no es novedad para ti.

-¿A qué te refieres? - cuestionó con confusión.

-Bueno, para nadie es un secreto todo lo que dicen de mí. Ya sabes, eso de que rompo corazones y que deshecho a los hombres solo porque sí.

-¿Y piensas que yo creo que eso es cierto? - interrogó con suavidad.

Ella lo miró.

-No lo sé, suele ser la impresión que doy - bajó la mirada momentáneamente.

Se posaron delante de otra obra. Era otra pareja. Un chico estaba de rodillas frente a una chica, extendiéndole un anillo de compromiso dentro de una caja. Solo que ese en realidad no era el punto central de la pintura. De hecho, estaban pintados adentro de una de las ventanas de un castillo. La edificación era lo principal en el lienzo.

-Pues yo no creo que sea cierto -se miraron- Pienso que eres alguien que desea ser amada genuinamente por alguien que no piense todas esas cosas horribles que dicen de ella en las noticias - sus ojos observaban con firmeza los del otro- Y lo entiendo perfectamente porque siento algo parecido.

La pelimorada se sonrojó, sintiendo de repente una calidez en su interior. Ambos pasaron el resto de la noche hablando. Incluso se rieron en varias ocasiones.

Ben se quedó hasta el final junto a los demás. Intercambiaron sus números y prometieron seguir hablando y verse pronto. Le dijeron al resto que sería algo amistoso, pero muy dentro de ellos sentían que tal vez no era solo eso.

(...)

No podían entender cómo habían tardado tanto en presentarse y conversar. Desde esa noche comenzaron a chatear seguido, compartiendo más sobre sus vidas y su día a día. Incluso comenzaron a hacerse llamadas y videollamadas.

Le juraban a sus amigos que solo eran amigos, pero realmente varias de sus salidas habían sido citas. En términos técnicos, se habían convertido en pareja luego de un par de meses. Solo que habían decidido no hacerlo público y mantenerlo en secreto.

Y con eso, los meses comenzaron a transcurrir y su relación avanzaba. Al punto de que trataban de verse al menos una vez a la semana.

Mal lo esperaba en un bar lindo pero poco conocido en una de las zonas más lujosas de la ciudad. El dueño era uno de los compradores frecuentes de sus obras, así que el lugar estaba adornado con ellas.

Tenía rato sin saber del castaño, de modo que le escribió para saber dónde estaba. La pantalla de su teléfono se iluminó luego de unos minutos. Ben le avisaba que estaba en camino. Le dijo que lo esperaba en la mesa más alejada de la entrada.

Dive bar on the East Side, where you at?
Phone lights up my nightstand in the black
Come here; you can meet me in the back
(Estoy en un pequeño bar en el Lado Este, ¿dónde estás tú?
El teléfono ilumina mi mesita de noche en la oscuridad
Ven aquí, puedes encontrarme en la parte de atrás)

Ben estacionó su auto y se dirigió a la entrada del bar. La buscó con la mirada y sonrió al divisarla al fondo, justo donde le dijo que estaría.

Mal mordió su labio al verlo. Usaba unos jeans oscuros, zapatos deportivos y una camisa azul que resaltaba el color de sus ojos. Su mente le jugó una mala pasada al imaginarse en otra situación junto a él.

Dark jeans and your Nikes, look at you
Oh, damn, never seen that color blue
Just think of the fun things we could do
(Jeans oscuros y tus Nikes, mírate
Oh, maldición, nunca he visto ese color azul
Solo piensa en las cosas divertidas que podríamos hacer)

Estaba algo nerviosa, porque sabía que debían hablar sobre un asunto importante. Se sintió reconfortada cuando el rey la tomó suavemente del mentón y la besó. Al separarse se tomaron de las manos.

Mal ya había ordenado la comida para los dos, así que no corrían riesgo de que alguien los viera. Comenzaron a comer, poniéndose al día.

Ben notó que la princesa del Inframundo estaba algo tensa. Trató de distraerla para que se relajara. Sabía que eventualmente ella le contaría.

Un par de horas después salieron del restaurante con discreción. Entraron al auto del monarca. En el camino cantaron y tararearon varias canciones hasta llegar frente al departamento de Mal.

La pelimorada suspiró.

-¿Ben?

El castaño apagó el auto y la miró con atención.

-Necesito sacar esto de mi pecho antes de que me angustie más- comenzó a hablar- Creo que en estos meses te habrás dado cuenta que para mí no es muy fácil expresar lo que siento. Pero, nunca me había sentido más querida y apoyada que contigo.

Ben le sonrió y entrelazó sus dedos.

-Me gustas, y mucho.

-Y tú a mí, princesa - besó sus nudillos.

Mal apretó sus dedos.

-Por eso es que tengo miedo de arruinarlo todo. He pasado desde finales de mi adolescencia hasta ahora oyendo las cosas terribles que dicen de mi vida amorosa.

-Y yo no creo que ninguna de ellas sea cierta - le recordó él.

-Ben, si queremos que esto funcione, tienes que amarme por lo que soy. Tienes que aceptar que a veces tendré estos momentos de duda, o que tendré inseguridades con las cuales debo aprender a lidiar - lo miró directamente a los ojos- No quiero que hagamos promesas vacias, quiero que sean cosas que en serio podamos cumplir.

Ben extendió una mano y acarició su mentón.

-Estoy dispuesto a lo que sea con tal de estar contigo. Te has vuelto alguien vital en mi vida. Jamás te prometeré algo que sepa que no pueda cumplir -se acercó hacia ella- Estoy enamorandome de ti, y no quiero hacer nada para arruinarlo.

Mal sonrió, con los ojos brillantes de la emoción. Besó sus labios cortamente y se separó.

-¿Quieres subir a beber algo? Puedo prepararte uno de los famosos cócteles que preparan mi papá y Kore.

El rey se rió y asintió.

'Cause I like you
This ain't for the best
My reputation's never been worse, so
You must like me for me
Yeah, I want you
We can't make any promises
Now can we, babe?
But you can make me a drink
(Porque me gustas
Esto no es lo mejor
Mi reputación nunca ha sido peor, así que...
Debo gustarte por lo que soy
(Sí, te deseo)
No podemos hacer ninguna promesa ahora. ¿Podemos, cariño?
Pero puedes prepararme un trago)

Se bajaron del auto, riéndose cuando entraron al ascensor, evitando que vieran al monarca entrando al edificio.

(...)

Las semanas seguían pasando, y ya era bastante común que se vieran al menos 4 días a la semana. Para ese punto, ya llevaban casi ocho meses saliendo. Al principio era una noche como cualquiera luego de tener una cita. Habían ido al salido, sentándose hasta el fondo y saliendo de la sala justo antes de que las luces se encendieran para evitar ser vistos.

Habían pedido comida para llevar en el autoservicio de un restaurante de hamburguesas. Llegaron al departamento de Mal y se en el suelo junto a la mesa de centro de la sala. Ambos se reían a carcajadas mientras que jugaban un juego de cartas con sus manos libres para ni llenarlas de salsa.

-Ahora entiendo porqué te llevas tan bien con Lonnie y Jay, eres una tramposa- le reclamó Ben.

Mal soltó una carcajada y le robó sus últimas papas. Las remojó en salsa y se las comió antes de que el rey se lo impidiera.

-No sabes cuanto me alegro de haberte conocido ese día en tu inauguración- soltó él de repente.

La pelimorada sonrió y se sentó en su regazo. Lo tomó de las mejillas y lo besó lentamente. Juntó sus frentes al separarse.

-Te amo -declaró con suavidad.

Ben se quedó paralizado al oírla. Ella se golpeó mentalmente al caer en lo que había dicho.

-L-lo siento, no quería incomodarte.

Trató de apartarse pero el castaño se lo impidió. Al verlo a los ojos, notó que estos estaban brillantes.

-Es un pensamiento que ha estado pasando por mi cabeza estos días. Con tantas cosas por las que hemos estado pasando, no sé si sientes que fue muy pronto o...

Él la sostuvo del mentón.

-No fue para nada pronto, cielo - acarició su rostro con delicadeza- Yo también te amo.

Mal se relajó y dejó que Ben la abrazara y besara de nuevo. Tal vez no era tan malo por fin estar con alguien. Después de todo, el ojimiel ha sido el más caballeroso, comprensivo y atento con ella desde que se conocieron.

Sabía que por él valía la pena derribar todos sus muros. Aún cuando todo era tan delicado.

Is it cool that I said all that?
Is it chill that you're in my head?
'Cause I know that it's delicate (Delicate)
Is it cool that I said all that?
Is it too soon to do this yet?
'Cause I know that it's delicate

¿Está bien que haya dicho todo eso?
¿Es normal que estés en mi cabeza?
Porque sé que es delicado
(Delicado)
¿Está bien que haya dicho todo eso?
¿Aún es demasiado pronto para hacer esto?
Porque sé que es delicado

Ben sabía lo complicado que sería el por fin tener una relación con alguien que no estuviera interesada solamente por su estatus y su título. Quería mantenerlo todo privado y en tranquilidad, pero al mismo tiempo quería gritar a los cuatro vientos que estaba con una mujer que lo amaba tanto como él a ella.

Algún día llegaría ese momento, algún día.

Isn't it, isn't it, isn't it?
Isn't it?
Isn't it, isn't it, isn't it?
Isn't it delicate?

¿No es así? ¿No es así? ¿No es así?
¿No es así?
¿No es así? ¿No es así? ¿No es así?
¿No es delicado?

(...)

Para sus amigos no era un secreto que el rey y la artista estaban en constante contacto, pero ninguno se atrevía a preguntar si pasaba algo más allá. Incluso Evie y Doug, siendo los amigos más cercanos de cada uno, sabían que había algo entre ellos y aún así temían insistir porque sabían que era un tema complejo para los dos.

Ese día habían coincidido de nuevo en un evento, así que para su círculo cercano fue bastante obvio el coqueteo y la cercanía que había entre la pareja. En algún punto todos estaban tan borrachos que eso pasó a segundo plano y dejaron de prestarles atención.

Aprovecharon la ocasión para escabullirse de la fiesta. Esta se llevaba a cabo en un hotel en la parte oeste de la ciudad, así que subieron al piso más alto y entraron a la habitación que habían reservado bajo nombres falsos horas antes de la fiesta.

Ambos estaban sobre la cama, besándose apasionadamente y con parte de su ropa tirada en el suelo de la habitación. La pelimorada estaba sobre el rey, con el vestido enrollado alrededor de su cintura y la camisa de él prácticamente arrugada y con los botones sueltos.

-¿Alguna de las chicas con las que habías estado antes te había hecho sentir como yo lo hago?- murmuró en su oído.

Ben negó con la cabeza, no teniendo capacidad para hablar en ese momento. Estaba hipnotizado por la mujer que es su novia. La acercó más a él, juntando sus cuerpos y sus labios.

Al pasar los minutos, los dos estaban acurrucados sobre la cama. Ben besó su cabello, acariciandolo con sus manos. Vio la hora en su reloj, dándose cuenta de que ya era hora de que regresaran a la fiesta.

Mal estaba más dormida que despierta, por lo que se despertó al oír sus pasos en el piso de madera.

-¿Amor? -hizo pucheros.

-Es hora de regresar- la levantó de la cama y la sentó en el borde.

-Pero no quiero. Quiero quedarme aquí contigo y que las chicas no vean lo guapo que luces en este momento- le peinó unos cabellos sueltos.

Ben soltó una carcajada. Besó su frente luego de terminar de vestirse y la ayudó a arreglarse de nuevo. Salieron de la habitación y regresaron a la fiesta como si nada hubiera pasado.

Third floor on the West Side, me and you
Handsome, you're a mansion with a view
Do the girls back home touch you like I do?
Long night with your hands up in my hair
Echoes of your footsteps on the stairs
Stay here, honey, I don't want to share

Estamos en el tercer piso, Lado Oeste, tú y yo
Guapo, eres como una mansión con una hermosa vista
¿Las demás chicas que tuviste te tocaban como yo lo hago?
Es una noche larga noche, con tus manos en mi pelo
Ecos de tus pasos en las escaleras
Quédate aquí, cariño, no te quiero compartir

(...)

Este era un momento que estaba poniendo a prueba su relación. Una chica que salió con Ben en un par de citas trató de dejarlo mal parado acusándolo ante una revista de chismes. Trató de dar a entender que terminó la "relación" de manera abrupta y sin explicaciones.

Al mismo tiempo, un ex novio de Mal (si es que podía llamarlo así) había sacado rumores bastante similares, aumentando la mala fama de la ojiverde. Esto había puesto en riesgo como la prensa veía su supuesta amistad, ya que habían conectado los puntos de que ambos se conocían y compartían amistades.

Mal se sentía de lo peor, por primera vez en meses volvía a sentirse insegura y dolida. Y ni hablar de Hades, conocía al chico por ser el hijo de uno de sus empleados de mayor confianza en uno de los bares que posee en la ciudad.

Ben estaba tan desesperado por la situación, que comenzaba a pensar que era la oportunidad de al menos confesarle a sus padres que había una mujer a la cual amaba y por la que lucharía y necesitaba ayuda para protegerla.

-Cariño, ¿me prometes que seremos honestos con nuestros padres el día de hoy? -le preguntó, acariciando su mano mientras que manejaba con la otra.

La pelimorada suspiró, apretando su mano.

-Creo que es el momento - cerró los ojos y respiró profundo- No es el momento ideal, pero necesitamos ayuda si algún día queremos hacer público lo nuestro. Además, me muero por fin conocer a tu familia y que la mía los conozca.

El rey sonrió y besó sus nudillos.

-Y probaré uno de esos maravillosos cócteles que tu papá te enseñó a preparar.

Mal soltó una risotada y le sonrió. Llegaron al edificio y subieron lo que habían comprado para hacer la cena. Si les darían una noticia como esa era mejor mantenerlos con el estómago lleno y algo para beber.

'Cause I like you
This ain't for the best
My reputation's never been worse, so
You must like me for me
Yeah, I want you
We can't make any promises
Now can we, babe?
But you can make me a drink

(Porque me gustas)
Esto no es lo mejor
Mi reputación nunca ha sido peor, entonces
Debes quererme por lo que soy
(Sí, te quiero)
No podemos hacer ninguna promesa ahora. ¿Podemos, cariño?
Pero puedes prepararme un trago

Los padres de ambos se sintieron confundidos por haber sido citados por sus hijos tan de repente. Sobretodo los ex reyes, ya que no conocían el edificio en el que estaban.

Los adultos se miraron confundidos al encontrarse en la puerta del departamento.

-¿Ustedes que hacen aquí?- preguntaron al mismo tiempo.

No tuvieron tiempo de responder, ya que sus hijos abrieron la puerta del departamento.

-Creo que los dos les debemos explicaciones- habló Mal.

Los cuatro adultos entraron, todavía más confundidos.

Is it cool that I said all that?
Is it chill that you're in my head?
'Cause I know that it's delicate (Delicate)
Is it cool that I said all that?
Is it too soon to do this yet?
'Cause I know that it's delicate

¿Está bien que haya dicho todo eso?
¿Es normal que estés en mi cabeza?
Porque sé que es delicado
(Delicado)
¿Está bien que haya dicho todo eso?
¿Aún es demasiado pronto para hacer esto?
Porque sé que es delicado

A medida que oían lo que les contaban los más jóvenes la tensión disminuyó hasta el punto de esfumarse. Se dieron cuenta de lo enamorados que estaban por como se miraban y hablaban del otro.

Bella y Adam habían quedado encantados con la novia de su hijo. Y Ben había logrado impresionar lo suficiente a Maléfica y a Hades como para respetarlo.

-Sea en lo que sea que necesiten de nosotros en el futuro, cuentan con nosotros - aseguró Bella.

-Y si quieren que le deje en claro a ese chico como se debe hablar sobre una dama, no tengo problema en decirle a su padre que un día de estos lo lleve al trabajo.

-¡Papá!- reclamó la chica.

Los demás se rieron, mientras que Maléfica le daba un codazo a su ex esposo.

-Y por favor dígale a Kore que venga a cenar con nosotros un día, Mal me ha contado muchas historias de ella y de sus hermanos menores. Me encantaría conocerlos- pidió el rey.

Hades sonrió disimuladamente.

-Claro.

Isn't it, isn't it, isn't it?
Isn't it?
Isn't it, isn't it, isn't it?
Isn't it delicate?

¿No es así? ¿No es así? ¿No es así?
¿No es así?
¿No es así? ¿No es así? ¿No es así?
¿No es delicado?

(...)

Unos días después de conocerse, Bella insistió en que la chica debía pasar un fin de semana con ellos. De modo que los cuatro se fueron a pasar un par de días en una cabaña que tenía la familia real en Arendelle.

La familia real había hecho sentir como en casa a la artista. Incluso le regalaron un precioso anillo con una amatista en el medio, el cual había pertenecido a la abuela paterna de Ben.

Ya era bastante avanzada la madrugada. Mal tenía algo de insomnio, así que dejó que Ben siguiera durmiendo mientras que este estaba apoyado en su pecho.

Se preguntaba si soñaba con ella tan seguido como ella lo hacía. Si se imaginaba un futuro junto a ella. Una vida juntos.

Sonrió cuando los ojos verde-miel del castaño se entreabrieron y sus labios se extendieron en una sonrisa adormilada.

-¿Qué hacías, princesa?

Mal besó su mejilla y volvió a recostarse en la almohada.

-Me imaginaba una vida junto a ti.

La chica se rió cuando él se le echó encima, haciéndole cosquillas.

-Te amo mucho, mi vida.

Ella sonrió ante el apodo. Lo estrechó contra sí misma, volviéndose a quedar dormida de nuevo al cabo de unos minutos.

Sometimes I wonder; when you sleep
Are you ever dreaming of me?
Sometimes when I look into your eyes
I pretend you're mine, all the damn time
'Cause I like you

A veces me pregunto; Cuando duermes:
¿Alguna vez sueñas conmigo?
A veces, cuando te miro a los ojos
Finjo que eres mío, todo el maldito tiempo
(Porque me gustas)

(...)

Había llegado el momento de confesarle a sus amigos lo que pasaba. Todos los felicitaban y les decían la bonita pareja que hacen.

Era la fiesta privada que habían hecho por el cumpleaños del rey. Habían bailado, comido y bebido. Incluso armaron un karaoke con el cual Adam, Bella y los empleados más cercanos a la familia gozaron entre risas.

Incluso Ben había confesado su amor por Mal con una canción que decía que su amor por ella era RI-DI-CU-LO. La chica no pudo para de reírse y estar sonrojada durante toda la presentación de su novio y sus amigos haciéndole de apoyo.

Is it cool that I said all that?
Is it chill that you're in my head?
'Cause I know that it's delicate (Delicate)
(Yeah, I want you)

¿Está bien que haya dicjo todo eso?
¿Es normal que estés en mi cabeza?
Porque sé que es delicado
(Delicado)
(Sí, te quiero)

En cierto momento fueron separados por sus amigos. Las chicas interrogaron a la princesa del Inframundo y los chicos al monarca de Auradon.

Mal se reía por las ocurrencias de sus amigas, y Ben la miraba desde el otro lado de la sala, embelezado.

-¿Creen que sea pronto para decir que quiero casarme con ella?- preguntó Ben luego de unos minutos.

Los demás se miraron, sonriendo.

-Creo que no suena tan descabellado, hermano- respondió Carlos, dándole una palmada en el hombro.

El castaño sonrió.

Is it cool that I said all that?
Is it too soon to do this yet?
'Cause I know that it's delicate (Delicate)
'Cause I like you

¿Está bien que haya dicho todo eso?
¿Aún es demasiado pronto para hacer esto?
Porque sé que es delicado
(Delicado)
(Porque me gustas)

(...)

El día había llegado. Ben y Mal habían sido invitados a una gala por el aniversario del Museo de Historia Natural de Auradon. Así que ambos decidieron que era el momento de al fin mostrarse como pareja ante el público.

El rey sólo se había atrevido a anticipar que daría una noticia importante, pero nadie sabía que era. Él y Mal ya tenían un año juntos, era ahora o nunca.

-No te molesta que haya adelantado un poco de la noticia, ¿verdad? - cuestionó.

Estaba en una videollamada con su novia. Él ya iba en camino con sus padres mientras que la chica iba en un auto con sus tres mejores amigos.

-Para nada, sé que debías anticipar algo por el protocolo que te sugirieron los asistentes de comunicación del castillo.

Ben asintió.

-Te veo en un rato, amor- se despidió la chica, lanzándole un beso a la cámara.

El castaño le devolvió el gesto antes de colgar.

Is it cool that I said all that? (Isn't it?)
I

s it chill that you're in my head? (Isn't it, isn't it?)
'Cause I know that it's delicate
Isn't it delicate?
Yeah, I want you

¿Está bien que haya dicho todo eso? (¿No es así?)
¿Es normal que estés en mi cabeza? (¿No es así? ¿No es así?)
Porque sé que es delicado
(¿No es delicado?)
(Sí, te amo)

Los autos llegaron prácticamente en simultáneo. Todos se bajaron, siendo dirigidos a la alfombra azul mientras que se saludaban entre ellos. Ben y Mal habían entrelazado sus brazos, percibiendo algunas cámaras que ya los cantaban desde lejos.

Se miraron, reconfortando al otro antes de pisar la alfombra. El lugar se llenó de ruido al verlos con los brazos entrelazados y con piezas combinadas. Mal llevaba una preciosa diadema de flores forjada con metales del Inframundo, mientras que las flores que Ben tenía en su bolsillo iban a juego.

-Rey Ben, señorita Mal, ¿vienen juntos como amigos o como pareja?- oyeron que alguien preguntó entre los cientos de reporteros.

Ella lo miró, sonriendo al saber lo que el chico tenía planeado como respuesta. Ben la tomó delicadamente de la cintura, la chica pasó sus brazos alrededor de su cuello. Unieron sus labios, logrando que los gritos aumentaran y las luces llenaran todo el espacio.

Entrelazaron sus manos al separarse, recorriendo el resto del camino en silencio hasta ingresar al establecimiento. Había válido la pena esperar.

Is it cool that I said all that (Isn't it?)
Is it too soon to do this yet? (Isn't it, isn't it?)
'Cause I know that it's delicate
Isn't it delicate?

¿Está bien que haya dicho todo eso? (¿No es así?)
¿Es muy pronto para hacer esto? (¿No es así? ¿No es así?)
Porque sé que es delicado
¿No es delicado?

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Después de meses en mis borradores, por fin terminé este OS.

Quería publicar algo por el cumpleaños de mi rubia favorita, pero tendrán que esperar un poco a que lo escriba porque de todos modos ya me atrasé🤭

Mi inspiración ha estado algo corta debido al cansancio y al estrés, así que es un milagro que haya escrito desde donde tenía esto hasta el final en poco más de dos horas.

¡Nos leemos pronto!

~Con amor, su escritora💕.

Publicado el 18/12/2023.