──¿D-de verdad ustedes son los PussyCats? ──preguntó Izuku intentando contener su emoción, cosa que le resultó un poco difícil.

──Así es, esos somos nosotros ──respondió Mandalay con una sonrisa orgullosa.

──Ellos están aquí porque serán de ayuda para su entrenamiento ──habló Shouta──. Ya están al tanto de sus Quirks y solo es cuestión de tiempo para que comiencen a usarlos en el entrenamiento.

──Pero, ¿dónde está el campamento? ──preguntó Hyōta, teniendo a todos de acuerdo con eso.

Mandalay emitió una pequeña risa junto a los demás miembros de su equipo.

──Eso es sencillo ──comenzó a decir, pidiéndole a los demás PussyCats que se aportarán──. Para encontrar el campamento tienen que mirar por aquí.

Enseguida todos los integrantes de la clase se acercaron al acantilado para saber de qué estaba hablando pero apenas llegaron a la orilla la tierra comenzó a desmoronarse.

──¡¿Qué demonios se supone que es esto?! ──exclamó Minoru mientras la tierra los arrastraba.

──Esperamos que disfruten de nuestra pequeña iniciación ──dijo Tiger──. Seguro que será un encanto para ustedes.

Ninguno pudo decir nada más que gritar mientras caían por el acantilado sin saber que hacer o de donde sujetarse hasta que finalmente llegaron hasta tierra firme, encontrándose a varios metros de donde habían estado y en un bosque frondoso.

──¿Qué se supone que significa esto? ──Hyōta miró de un lado a otro en busca de alguna señal del campamento que estaban buscando.

──¡Nos han abandonado! ──gritó Minoru, llevándose las manos a la cabeza.

──Esto tiene que ser una especie de prueba ──comentó Izuku──. El profesor Aizawa no nos abandonaría así porque sí.

──Deku-kun tiene razón; tal parece que desde un inicio el profesor Aizawa ya tenía un plan con las PussyCats para hacernos usar nuestros Quirks desde un inicio ──apoyó Ochako.

La parecían seguir confundidos por lo que estaba pasando pero estando de acuerdo con sus compañeros.

──En definitiva ──Momo tomó la palabra──, tenemos que buscar la forma de llegar al campamento.

──Yaoyorozu tiene razón ──comentó Shōto──. Ya hemos usado antes nuestros Quirks y fue en una situación de peligro real. Ahora estamos en un entrenamiento, podemos llegar sin ningún problema.

Los que estaban inseguros de que hacer poco a poco comenzaron a entrar en razón al recordar que, aunque no habían conseguido ayudar a Aizawa en ese momento, habían sido lo bastante capaces de defenderse por sí solos hasta que All Might llegó.

──Movernos por este lugar será sencillo ──dijo Hyōta──. Si permanecemos en grupo nos cuidamos las espaldas llegaremos en cuestión de nada al campamento.

──Pero, ¿de casualidad saben hacia que dirección tenemos que ir?

──Oh, ¡yo sé! ──exclamó Denki ante la pregunta de Toru──. Cuando veníamos en el autobús alcancé a ver unas cuantas viviendas a varios kilómetros de aquí.

──Entonces, ¿qué estamos esperando? ──exclamó Mashiraō, intentando levantar el ánimo de quienes aún no estaban del todo convencidos──. Solo tenemos que ir, será pan comido.

Después de un rato de llevar a cabo un plan, todos los chicos y chicas comenzaron a caminar en la dirección que había dicho Denki, guiándose un poco com ayuda de la carretera.

──Se me hace un poco raro que solamente sea llegar al campamento ──le dijo Hyōta a Shōto──. Estaba seguro que debía de haber algún tipo de trampa en esto.

──Es lo que estaba pensando. Yaoyorozu también me había comentado lo mismo pero seguro que solo quieren probarnos para saber que tan capaces somos.

Pasaron unos cuantos minutos mientras toda la clase A continuaba caminando en medio de aquel bosque, buscando la forma de guiarse para no terminar yendo a un lugar diferentes.

El camino estaba siendo tranquilo. De hecho, era muy tranquilo como para ser normal. Eso ya no estaba siendo para nada bueno...

──O-oigan, ¿sienten eso? ──preguntó Koji mientras varias aves se arremolinaban a su alrededor en busca de protección.

El resto de la clase estaban confundidos por la pregunta de su compañero. «¿Sentir qué?», se preguntaron la mayoría de ellos y cuando estaban a punto de preguntar por ello el piso comenzó a moverse de una forma rara.

──¡¿Sismo?! ──exclamó Mashiraō, manteniendo el equilibrio.

Apenas vieron que la tierra que estaba bajo sus pies comenzó a agrietarse y abrirse, todos se alejaron para encontrar un lugar seguro.

──¿Qué es eso? ──preguntó Fumikage al ver una mano hecha de roca/tierra formándose al igual que el resto del cuerpo.

──Creo que esto es una especie de prueba ──comentó Hyōta──. Lo que el profesor Aizawa y las PussyCats quieren ver es que tan capaces somos de sobrevivir por nuestra cuenta.

Apenas tuvieron tiempo de alejarse antes de ver a un enorme gigante hecho de tierra levantarse sobre ellos.

Por pura inercia, todos comenzaron a alejarse cuanto podían. En cuanto al "gigante" ─que no media más de tres o cuatro metros─, comenzó a arrancar varios árboles para lanzarlos contra los adolescentes.

──¡¿Acaso el profesor Aizawa está loco o qué?! ──exclamó Hanta mientras usaba sus cintas para alejarse de la zona de ataque.

Denki estaba mirando todo con cierto temor pero algo dentro de sí le había indicado que intentará atacarlo. Desde que había entrado a la U.A no había tenido tantos méritos como los que poseían Izuku, Katsuki, Shōto o hasta Hyōta, que apenas había ingresado ya se había ganado el reconocimiento de muchos después de haber sido el ganador del Festival Deportivo y por haber ayudado a vencer a Stain.

──«Si voy a ser un héroe al menos tendría que saber actuar en estas situaciones.»

En un rápido movimiento Denki se desplazó por las piernas del gigante sin que nadie se diera cuenta. Afortunadamente su Quirk le daba una pequeña velocidad adicional y, enfrentándose a enemigos que son más grandes que él, era sencillo poder pasar incluso delante de sus narices sin que estos se dieran cuenta.

Cuando los demás vieron lo que Denki estaba por hacer se sorprendieron. Apenas él llegó a la cabeza del gigante para lanzar una fuerte descarga en su cabeza que le dejó lo bastante aturdido y endureció un poco la roca como para que Rikido pudiera usar la fuerza de su Quirk para darle un puñetazo que lo destrozó al instante.

──¡Kaminari! ──exclamó Hyōta mientras iba hasta donde estaba el rubio siendo seguido por Kyoka──. ¿Estás bien?

El pelirrojo y la pelipúpura esperaron unos segundos para obtener una respuesta de su compañero. Denki tardó unos segundos en reaccionar pero al hacerlo sorprendió a todos al ver que estaba bien-bien, no tenía signos de idiotez o algo parecido.

──Cr-creo que estoy bien ──dijo, también incrédulo por no haber recibido ningún corto circuito en el cerebro.

──Esto sin duda será una excelente noticia para el profesor Aizawa ──comentó Hyōta con una sonrisa hacia Kyoka.

[...]

Ya estaba atardeciendo. El sol cada vez se empezaba a ocultar más dejando ver solamente unos cuantos destellos naranjas-rosas en el cielo que se impregnaban en las nubes y hacían que se viera mejor.

──Ya están tardando ──comentó Shouta.

──El bosque es bastante grande grande y basto ──respondió Mandalay──. Además, les pusimos unas cuantas pruebas para saber que tan buenos son todos ellos.

El pelinegro estaba pensativo mientras miraba hacia el bosque. No sabía por donde llegarían pero tenía que estar atento en caso de que tuviera que ir por ellos.

Pasaron varios minutos hasta que finalmente vió a los primeros chicos y chicas que salían del bosque. La mayoría salía con un aspecto cansado y con el uniforme sucio.

──¿Ya te sientes mejor? ──le preguntó Hyōta a Denki mientras le ayudaba a caminar.

El Kaminari solamente levantó el pulgar mientras seguía andando casi a rastras.

Todos estaban más cansados de lo normal que, apenas llegando, muchos se dejaron caer de rodillas sobre el suelo por el cansancio.

──Increíble ──comentó Mandalay──. Pensé que tardarían un poco más en llegar.

Shouta se acercó a sus estudiantes, mirandolos de la misma forma de siempre.

──Será mejor que vayan a darse una ducha.

──Tenemos unas aguas termales si lo que quieren es relajarse ──comentó Yawara ─Tiger─ tras acercarse a ellos──. Pueden disfrutar de las aguas mientras preparamos la cena.

──Es lo menos que merecemos después de tanto ajetreo ──murmuró Kyoka mientras todos comenzaban a caminar hacia la entrada.

Todos habían comenzado a caminar hacia la entrada del lugar pero antes de que pudieran hacerlo se encontraron con un niño de cabello negro y con una gorra roja mirándolos de mala gana.

Ninguno se acercó a él a excepción de Izuku, quien al verlo solo y con esa cara decidió saludarlo.

──Hola pequeño. Soy Midoriya Izuku ──se presentó con una sonrisa mientras se acercaba al pelinegro──. ¿Y tú, cómo te lla─?

La expresión de todos los integrantes de la clase A se transformó en una de dolor al ver que el niño, Izumi Kota, había golpeado a Izuku directamente en la entrepierna.

El peliverde terminó en el suelo por el golpe y sin poder moverse mientras que Katsuki se reía a carcajadas mientras intentaba decir algo pero sin entendersele del todo.

──¡Kota, no! ──regañó Mandalay──. No puedes tratar a nuestros invitados así, jovencito.

──N-no... ──masculló Izuku sin poder hablar bien del todo──. E-estoy seguro de que no lo hizo a propósito...

──Lo siento mucho ──dijo Mandalay, asegurándose de que Izuku estuviera bien──. ¿Necesitas alguna ayuda o algo?

──Estaré bien... ──respondió, un poco adolorido──. Solo necesito ir a descansar.

Todos seguían mirando con asombró a Kota. No sabían de donde había sacado la idea de golpear a alguien en una zona tan delicada.

──Creo que este niño me agrada ──dijo Katsuki.

Algunos chicos lo miraron de mala manera a Katsuki, después de todo, la mayoría podía saber cuan doloroso era un golpe como esos.

──Será mejor que todos vayan entrando ──dijo Shouta, ignorando a Hyōta y Ochako ayudando a Izuku a caminar──. Mañana iniciará el entrenamiento así que descansen lo mejor que puedan.

──Deberías saber que no todos los niños disfrutan de hablar con desconocidos ──regañó Tenya mientras caminaban al interior del lugar.

──Solo quería ser amable... ──contestó Izuku, aun le seguía doliendo el golpe.

──Al menos podrás relajarte en las aguas termales ──comentó Hyōta──. Podremos relajarnos antes del entrenamiento de mañana.

Los tres ─Ochako, Izuku y Tenya─ estaban de acuerdo, al fin de cuentas estaban cansados por todo el esfuerzo que habían hecho durante todo el día al enfrentarse a gigantes de roca que habían intentado atacarlos durante todo el camino. Así que, un descanso les vendría bastante bien.

──«Quizá debería llamarle más tarde ──pensó Hyōta al ver la hora en su celular──. Todavía debe estar trabajando.»

Mientras Hyōta entraba, Shōto lo miraba a lo lejos.

──¿No vas a entrar, Todoroki-kun? ──le preguntó Momo, deteniéndose al igual que Kyoka.

El bicolor se quedó pensando unos segundos antes de asentir, caminando detrás de ellas.

Mientras Momo y Kyoka iban charlando, Shōto pensaba en todo lo que había pasado desde que Hyōta ingresó a la U.A. Al principio pensó que tenerlo ahí no sería más que un recordatorio de que la razón por la que él ─Shōto─ y todos sus hermanos estaban ahí fue por la ambición de Enji de conseguir al héroe perfecto que derrotará a All Might.

Creía que solamente sería una forma de hacerle entender que no era más que un objeto para una acción egoísta pero, ahora que había comenzado a tener más conexión con su medio-hermano se había dado cuenta de que ambos eran iguales. Habían pasado por esa sensación de no ser suficientes para Enji y lo único que habían recibido fue el consuelo de sus madres, quienes fueron las que también sufrieron por su culpa.

Pero, ahora que ambos estaban juntos, en la misma clase y que habían estado viviendo juntos durante unos días, se había dado cuenta de lo agradable que era tener un hermano que le entendía a la perfección.

Quizá eso era lo que le faltaba. Un hermano que, a pesar de no llevar toda su sangre, entendía como se sentía.

Y eso le hacía sentirse bien. Le hacía ser feliz.

【Continuará...】

【2 / Febrero / 2025】