song ; stay
by ; blackpink
ship ; wenri
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Las clases han terminado, por fin ese martirio que parecía eterno ha tenido su fin solo para entrar a uno mucho peor pero eso no importa ahora.

No cuando las Estrellas comienzan a mostrar todo el brillo de sus celestes cuerpos en el cielo que disfruta en su horizonte de los últimos rayos de sol, los altos árboles ocultando en su inmensidad los secretos dentro del círculo de campamento que se ha formado por la noche.

Nombres y rostros conocidos se han reunido para hacer a un lado las máscaras que solían usar en la escuela; todos se conocen entre sí aunque ninguno realmente puede hablar en detalle del otro.

Tal vez algunos si lo puedan hacer pero cuando en medio de la intimidad que el silencio y el calor que trae el fuego, Jennie, la popular que solo sabe de arrogancia y petulancia, admite los problemas familiares que han formado su personalidad como mecanismo de defensa y se disculpa sinceramente si alguna vez los lastimo, ellos entienden que no se conocen en lo absoluto.

Es sorpresa también que Seulgi, la que todos pensaban no llegaría lejos por su conocida torpeza y estupida, es la tutora de matemáticas y ciencias de todo el grupo de amigos de Jennie. Jungkook, quien es reconocido como el Playboy de todo el curso, solo se ha enamorado una sola vez y Jaehyun, el jugador de fútbol, también admite que el deporte solo es para complacer a su padre, que el arte es su verdadera pasión.

Las palabras ofensivas, las cicatrices en corazones ajenos y las disculpas que ni siquiera un "lo siento" tuvieron son todas olvidadas.

Seungwan va a su tienda y saca la guitarra que había traído consigo, las repentinas confesiones dejaron un sabor amargo de boca por encima de los malvaviscos, un poco de música no vendría mal. Y cuando todos la acompañan en la canción, incluso Yerim, sabe que su trabajo está hecho.

Porque ese es, de hecho, su trabajo. Asegurarse que todos estén bien aunque ella no lo esté, que Yerim sonría aunque ella tenga un rostro inexpresivo y los susurros al espejo de tener que dejarla ir hagan su corazón más terco a quedarse.

Pero no puede darse un lujo que nunca estuvo en sus opciones.

Yerim ríe y grita al son de la melodía que por dentro rompe cada hilo de su estabilidad, es la canción que se supone debía mantener solo memorias con Seungwan y ahora se ha manchado de personas que olvidara tan rápido como ha olvidado todo lo que aprendió en cinco años de secundaria.

La noche se asienta sobre ellos y las temperaturas bajan tanto que hasta la fogata sufre por ello al su fuego volverse débil. Es hora de ir a dormir, mañana temprano sus padres vendrán por ellos y todo los que dijeron, hicieron y revelaron en estas horas se quedara como un voto de silencio entre todos.

Uno a uno entran a sus tiendas pero Seungwan se queda en la fogata un rato más, el poco calor que ha quedado es suficiente para ella; cuando un cuerpo se sienta a su lado y una cabeza se recuesta en su hombro, el calor es demasiado.

Mejor que tener conversaciones con otros es estar en silencio con Yerim, solo ellas dos respirando al mismo tiempo y que la incomodidad que las rodea desaparezca con cada exhalación. Ella la entiende mejor que Seungwan misma, las palabras solo son una pérdida de tiempo.

Aunque ese es el secreto de Yerim, a ella no le gusta el silencio de Wendy, ella quiere gritar y llorar todo lo que sea necesario; silencio significa que las cosas ya han sido tomadas por sentado y dejar ir a la primera persona que ha amado no es algo que pueda aceptar tan fácil.

ㅡ¿A que hora sale el vuelo? ㅡYerim hace de nuevo la misma pregunta que ha hecho por enésima veces.

ㅡA las ocho debería estar en el aeropuerto, es en la noche así que podremos pasar el día juntas.

Wendy dice concentrada en algo más que la manera en cómo la castaña aprieta su agarre alrededor de ella. Aún, hay algo que logra romper su perfecta farsa, y escapa. ㅡNo quiero irme.

Mañana Seungwan volverá con sus padres a Canadá, ya los planes que ellos tenían para ellos en su natal Corea han sido cumplidos y es momento de que comience los nuevos que ellos tienen listos. Canadá será un buen lugar para ella, ya vivió allí cuando era niña y ahora que está en el último año de su adolescencia podrá ver la ciudad con ojos distintos.

Pero ni en el perfecto panorama de Toronto, Wendy podrá encontrar algo tan hermoso para ella que Yerim. Es joven y sabe que más amores podrán venir, sin embargo, ya conoce uno y ese es el único que quiere por ahora. En su mundo lleno de mentiras e imposibles expectativas de si misma, Yerim es su única verdad.

ㅡEntonces quédate. ㅡla castaña menor se aleja un poco. ㅡTu hermana no se irá del país, podrías quedarte con ella. Todo los que tus padres quieren que seas, podrías serlo aquí.

Tiene razón, en parte. Seunghee se quedará en Corea y siempre tiene lugar para su hermana menor en su casa pero ni ella, ni Seungwan, pueden contra lo que los señores Shon decidan.

Yerim recibe silencio como millones de veces lo ha hecho ya, pero esta vez no hará lo mismo; tiene algo por lo cual pelear. ㅡQuédate conmigo, por favor. Solo... quédate conmigo.

La menor por una semana vuelve a su posición original al ver la primera lágrima rodar por las abultadas mejillas de su joven amante. Las suyas esperarán a que entre a su tienda y la almohada sea quien las atrape.

ㅡ¿Todo fue real? ㅡpregunta en un susurro sobre el hombro de Seungwan. ㅡ¿Nuestra relación, lo que dijimos?, ¿Fue real?

ㅡLo fue.

ㅡEntonces te quedarás aquí, conmigo.

Seungwan es quien ahora abraza a Yerim mientras ven como el fuego se va apagando hasta dejar brazas todavía ardiendo. Esas son ellas, se han apagado pero el recuerdo mutuo durará un poco más de tiempo hasta consumirse por completo.

ㅡSabes que no puedo hacer eso. Realmente lo siento, Yerim. ㅡla castaña mayor deja besos regados en el cabello de la chica entre sus brazos.

ㅡSé que no puedes y tampoco tengo expectativas de mucho ahora mismo, solo espero que te quedes conmigo esta noche.