song ; look at me
by ; george
ship ; wenseul
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Nadie es ajeno a la presencia de Seungwan en el local. Ha venido todos los días desde que empezó su tesis, ahora los baristas han memorizado su orden e intentan tener su mesa al fondo libre para cuando la pequeña castaña llegue.

Americano helado y dos muffins de mora, es lo mismo de lunes a jueves desde las cuatro hasta pasada las nueve. Seungwan no ha cambiado su orden ni una sola vez así que lo único que tiene que hacer al llegar es buscar esos ojos gatunos sabiendo que Seulgi tendrá su bebida y postre listos.

Tal vez sea Seulgi la razón por la cual Seungwan no cambia su orden.

ㅡAquí tienes, Wannie. ㅡla barista pone la bonita bandeja en manos de la contraria. ㅡQue lo disfrutes.

Seulgi ve a Seungwan esconderse en el rincón del local que ha reclamado como suyo, preguntándose qué hará una vez ella termine con la razón por la que viene. Ha estado dando tantas vueltas alrededor de la universitaria como ella ha escrito y borrado en el mismo documento.

Tan solo si Seungwan pudiera ver a Seulgi de la misma forma que lo hace ella.

ㅡDe acuerdo, Shon. Momento de dejar de pensar en chicas lindas y por chicas lindas me refiero a baristas lindas y por baristas lindas me refiero a cierta barista linda. ㅡSeungwan dice para si misma al abrir su laptop y seguir con el capítulo dónde había quedado ayer.

Este es su último paso antes de recibir su título en psicología musical, prácticamente su único enfoque los pasados años y ahora que lo piensa ha sido bastante solitario. Ha tenido todo lo que pueda necesitar y querer pero hay tantas otras de las cuales se ha negado con el fin de poner sus estudios como su absoluta prioridad, ahora que está a un par de meses de cambiar esa vida hay algo de miedo entre todo.

Salir a citas fue una de las cosas que se privó, Seungwan pensaba que esos chicos y chicas solo serían distracciones sin necesidad cuando bien pudieron ser distracciones que disfrutar. Jennie fue una para Roseanne y ahora están comprometidas, Chanyeol se suponía que era algo de una noche para Sooyoung y están cerca de su tercer aniversario. Es como si el mundo estuviese girando alrededor del tema del amor y ha dejado a Seungwan atrás.

Ella misma se obligó a quedarse atrás.

Sus divagaciones se detiene cuando las campanillas de la puerta avisan la llegada de otro comensal y la voz de Seulgi suena como la canción que le ayuda a relajarse.

Seungwan sigue los ágiles movimientos de la barista al seguir ese enredado procedimiento para servir un simple café. Es hipnotizante, casi tan encantador como la sonrisa de Seulgi al hacerlo. Por un segundo Seungwan quisiera que Seulgi pudiera verse a través de sus propios ojos.

Por favor, mírame así.

Un pensamiento que emerge en conjunto cuando comparten una mirada antes de seguir en lo suyo.

Seulgi ya lo hace, ella mira a Seungwan siempre con expectativa y esperanza, las horas no corren lo suficientemente rápido por el reloj en esas que la barista debe soportar antes de la llegada de su mejor cliente pero cuando ese fuerte perfume cítrico llega a la barra... Seulgi entonces pide que el reloj deje de andar.

No hablan mucho y no se conocen más allá de superficialidades, pero Seulgi quisiera cambiar ello. Va a cambiar eso.

ㅡNoona, puedes irte cuando quieras. ㅡChenle interrumpe el flujo de pensamientos de la pelinegra. ㅡNo creo que llegue mucha gente a esta hora, yo podré con ello. Pero si necesito que despiertes a Wendy noona antes de que te vayas, lleva una hora dormida sobre su laptop.

La noción del tiempo para Seulgi se perdió en medio de sus pensamientos sobre como invitar a salir a Seungwan que no se dió cuenta que el sol ya se había ocultado y la hora de cerrar no está tan lejos. Sin embargo, antes de ver al reloj se asoma al rincón donde la castaña duerme aún con sus gafas puestas.

Ella no hace mucho estuvo en el mismo lugar que Seungwan, así que sabe justo lo que puede ayudarla.

ㅡWan, vamos despierta. ㅡSeulgi pone la taza de espresso a un lado de mesa, poniendo su mano en el hombro de la universitaria. ㅡSi Joohyun llega y te ve dormida te va a quitar tus lujos como su clienta favorita.

Con el nombrar de la dueña del café y la perdida de sus privilegios es suficiente para que Seungwan despierte, completamente desorientada y apenada una vez reconoce el lugar en donde está. En especial, cuando se encuentra bajo la expresión preocupada de Seulgi. ㅡ¿Estás bien?

ㅡSi, solo estoy algo cansada de esta tesis. Disculpa por dormirme aquí. ㅡla castaña se excusa rápido, incluso dando pequeñas reverencias.

ㅡNo te preocupes, hice lo mismo mientras preparaba la mía. Solo que yo me quedaba dormida en el depósito y dejaba a Chenle y a Yerim por su cuenta. No le vayas a decir nada de esto a Hyun porque sino me despide. ㅡes graciosa la forma en que Seulgi susurra lo último. ㅡToma esto, te hará sentir mejor. Va por la casa.

Seulgi pone la taza de espresso frente a una aún más apenada Seungwan, quien la recibe con un agarre torpe aunque estable. Y Seulgi tiene razón, se siente mejor después de primer sorbo, aunque Wendy se lo atribuye más a su compañía.

Siente su corazón derretirse en el perfectamente amargo sabor del café y en las manos de Seulgi jugando con los botones de su manga. La barista adquirió esa costumbre luego de la quinta vez que Seungwan la invitó a sentarse a su lado.

La adoración en sus ojos es la misma que quiere de regreso, todavía tiene un mes para entregar su tesis y la revisión no es hasta la próxima semana. Quiere una distracción, una que se pueda disfrutar y tal vez quedarse para una segunda vez. Quiere a Seulgi.

ㅡ¿Tienes algo que hacer después de cerrar?

ㅡDe hecho no, ¿Tienes alguna recomendación? ㅡSeulgi suelta los botones de Seungwan para poner sus manos bajo su barbilla.

La pelinegra está poniendo sus cartas y verdad sobre la mesa, ahora es turno de Seungwan de permitirse hacer lo mismo.

ㅡConozco este bar donde sirven excelente comida y entretenimiento de calidad. ㅡse hincha el pecho de la castaña con el respiro que toma. ㅡ¿Gustarías acompañarme?

Tal vez finalmente estén entendiendo que esas miradas que comparten y se regalan tienen las mismas intenciones.