song ; dancing with a stranger
by ; sam smith and normani kordei
ship ; wenri
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ㅡlo siento, yerm. yo no sabía que estaría aquí. deja yo te-

el borboteo apurado de las palabras de joohyun junto la escena frente a ella, hacen que yerim se sienta en un bucle alrededor de las únicas tres personas que conoce en esta fiesta.

su mejor amiga, su ex novia y la chica por la cual su ex novia la dejó. al menos seulgi y sooyoung se están divirtiendo.

ㅡno, está bien. solo iré por algo de aire fresco, vuelvo dentro de un rato. ㅡyerim controla los violentos ademanes de joohyun tomando sus manos. ㅡanda con yong y minji, deben estar esperando.

han sido siete meses, ya debería haber superado a sooyoung pero es bastante obvio que no es así, el más mínimo pensamiento sobre la pelinegra con la que compartió cama por año se convierte en una bola de nieve rodando montaña abajo. crece y crece a medida que siga rodando hasta que impacta algo, en yerim impacta su corazón.

eran tan felices, se complementaban a la perfección y sus aristas encajaban tan bien que no había grieta por medio que las pudiera separar; o al menos así pensaba yerim que eran las cosas, hasta que un día la grata sorpresa de ver a sooyoung sentada sobre el regazo de seulgi prácticamente comiéndose las bocas hizo que la menor reconsiderara en que términos estaba su relación.

yerim ama a sooyoung todavía, a pesar de lo que hizo y lo que ha hecho, su corazón todavía sigue respondiendo a cualquier mínima señal de que la más alta está cerca. pero hoy no recibió esa señal, todo lo contrario, tuvo a cambio una imagen tan parecida a la que yerim guardaba de ella y sooyoung juntas bailando en medio de cuerpos intoxicados; ahora ha sido remplazada por seulgi y sooyoung bailando y ella siendo una de las que miran a un lado.

sooyoung era quien mantenía su fuego vivo, esa chispa de voluntad para ser algo o alguien, por muy patético que sea, yerim ha perdido el control sin ella y eso es justa la razón por la cual la necesita tanto.

ㅡ¡hey, tú! ㅡuna voz se une al silencio que yerim había estado guardando al otro lado del jardín. ㅡ¿no tienes un encendedor?... oh...

la extraña pensaba que era alguien más intentando aliviarse de los efectos del alcohol (como la mayoría que están en esta privada sección del jardín), pero ha conseguido una chica notoriamente menor que ella llorando como si detrás de sus grandes ojos pudiera contener océanos completos.

seungwan puede ver las grietas que esos orbes oscuros intentan ocultar, no sabe que ha causado eso en ella.

ㅡ¿necesitas un abrazo? ㅡpero si hay algo que la pelinegra sabe es que nada puede ser tan malo en un abrazo.

suena estúpida la pregunta dentro de la mente de yerim, pero cuando intenta sacar las palabras para negarse en su lugar un roto sollozo escapa de sus labios. la extraña con simpatía que raya en la incomodidad, encierra el pequeño porte de yerim en un ajustado abrazo, y es entonces que el verdadero llanto que la castaña había estado reteniendo los últimos meses consiguen su camino libre.

las ligeras palmadas que seungwan le da en la espalda y cabeza calman un poco el océano de yerim, no tarda mucho para que esta se separe también incomoda aunque agradecida de haberse desquitado un poco.

ㅡ¿estás mejor? ㅡofreciendo la bandana que guinda de su cadera para que la contraria seque sus lágrimas, la extraña inspecciona el rostro de yerim. ㅡpuedo traerte algo de beber o comer.

ㅡmuchas gracias, no debes preocuparte por mi. ㅡla vergüenza se traduce como un suave sonrojo a las mejillas de a castaña. ㅡlamento haber llorado encima de ti.

ㅡestá bien, a veces se puede necesitar un abrazo de algún extraño que no te juzgues llorar.

ambas chicas ríen la incomodidad y en el silencio que cae sobre ellas se siente bien. hay un nudo en la garganta de yerim que pide ser deshecho, el nombre de sooyoung palpitando en la punta de su lengua como si quisiera escapar de su sistema. tal vez necesita eso, y una extraña que no te juzgue parece ser la mejor opción.

ambas están de pie contra la cerca viendo como un desastre se desenvuelve delante de ellas cuando seulgi y sooyoung se pasean sin notar presencia alguna de la menor a la que le rompieron el corazón.

ㅡvine a esta fiesta queriendo olvidar a la chica que me engaño y lo único que puedo ver ahora es a esa misma chica bailando y haciendo lo que hacíamos nosotras pero con la persona con la que me engañó. ㅡyerim revela el significado detrás de sus lágrimas mientras seungwan enciende el cigarrillo que esperaba por ser consumido detrás de su oreja.

ㅡdeberías dejar de verla entonces. ㅡtan simple como expulsa el humo de su garganta, la pelinegra da su opinion. ㅡesta casa es enorme, hay diversión en donde sea, chicas que les gustaría una buena noche y alcohol para olvidar a la que te lastimó. estás viéndolas porque eres una masoquista de primera.

yerim golpea el costado de seungwan en una mezcla entre ofendida y entretenida por la actitud de la recién conocida.

ㅡno es tan fácil, es como si quisiera seguirlas e intentar entender en que falle.

ㅡ¡dios santo! ¿es tu primer amor, te donó un pedazo de hígado, cruzó los siete mares por ti o de plano te gusta el sufrimiento? ㅡes divertida la forma en que seungwan reacciona al corazón roto de yerim, incluso esta consigue consuelo en ser un chiste para alguien más. ㅡnadie dijo que es fácil, solo debes fingir que lo es hasta que se vuelva realidad.

la pelinegra lanza su cigarro a medio fumar al suelo y toma a yerim por un brazo hasta acercarla a donde la música suena un poco más fuerte. ㅡ¿me concedería esta pieza de música moderna, mi estimada extraña?

ㅡ¿extraña, eres así de rara con todos lo que se te acercan?

ㅡde hecho si, pero quiero que hagas conmigo lo que hacías con ella y así te darás cuenta que nunca fallaste sino que ella fue una idiota. ㅡseungwan vuelve a ofrecer su mano esperando a que yerim la tome.

la casa es grande, hay diversión en cada rincón de ella, una chica le ofrece una buena noche y el alcohol puede acompañar luego. hay millones de distracciones para olvidar aunque sea por un segundo a sooyoung, solo por un momento puede respirar en nombre de alguien más. en nombre suyo.

seungwan guía el ritmo de sus caderas mientras mantienen una conversación de expresiones cortas y esporádicas para llenar cualquier vacío entre sus cuerpos. a yerim le cuesta dejar ir la imagen del par a unos pocos metros de ellas y más cuando nota sus miradas sobre ella y seungwan.

«esto es tu culpa, park sooyoung.»

«¿puedes ver el error que soy ahora?»

ㅡya no las veas más, extraña. ㅡla pelinegra susurra a un lado de su rostro.

ㅡellas están mirándonos a nosotras.

ㅡentonces se están dando cuenta de lo que hicieron.ㅡseungwan pasa sus brazos por la cintura de yerim y la pega más a su cuerpo.

por un segundo siente como la castaña se tensa y al siguiente se relaja, siguiendo los pasos que llevaban. ㅡahora mírame a mi, nunca seré ella pero puedo ser tu extraña por esta noche.

en una moción catártica ambas dejan que la música y su compañía sea suficiente para ignorar a las otras dos. algo que seungwan nunca espero fue conseguir consuelo en la chica que fue novia de la persona con la que le solía engañar su ex.

seulgi y sooyoung han vuelto a seungwan y yerim en dos extrañas que bailan sus lamentos juntas para olvidarlas.