Aydee se encontraba entre cajas, a lado tenía a Sevika, quien cuidaba de la menor, la azabache había crecido muy bien ya que vestía de un hermoso vestido rojo corto pegado, que daba a notar su cuerpo bien desarrollado, tenía arnéses que sostenía sus armas. Aydee miró a Sevika exactamente en su brazo, recordando como esta había perdido su extremidad a la hora de salvarla, sintiéndose culpable.

—— ¿Por qué me miras tanto princesa? —— hablo Sevika mirando como el lugar se llenaba de botes, llenándose poco a poco de ese brillo

—— Nada, solo tu capa, te queda bien. —— evito mirarla girando su mirada

Sevika la miró, notando como esta ya no la miraba con amor, y eso en cierta parte la desconcertada. ¿Qué pasaba por la cabeza de Aydee?. Quito su mirada de está y se dirigió al que Aydee pensaba era el piloto de la nave que transportaría la carga de su papá.

—— ¿Manifiesto de carga? —— un saquito de monedas cayó en su portapapeles

—— Un obsequio de tu amigo, de abajo. —— este sello el permiso que los dejaría transportar la carga

Aydee quien se había recargado en los barandales percibió un ruido tras de ella y en cuanto lo noto era demasiado tarde, los Fireligths estaban ahí, para evitar que el brillo de Silco se vendiera allá abajo. Aydee se escabullo intentando encontrar a su hermana.

—— ¡Mora, ¿dónde estas?! —— grito evitando los objetos que aventaban estos haciendo que una especie de cristal los detuviera.

—— ¡Aydee! —— miro tras ella, donde el grito de Sevika la llamaba, solo sintió como la empujó, recibiendo la morena los cristales.

Intento liberar a Sevika, peor un golpe a su costado llegó, alguien la había golpeado, era uno de ellos, ekko. Sabía ella quien era, sin embargo, tenían que fingir que eran enemigos, si como oyeorn bien, fingir, ya que Aydee ayudaba a los Fireligths a salvar a las personas, sin traicionar a su papá.

—— Ay hola, nuevos juguetes ¿cierto? —— hablo esta, apresurandose a escapar

Entro abajo de la nave, buscando a su hermana, una mano tapando su boca la sorependip, era ella, Jinx. Quien con su mano le pidió que guardará silencio, ya que dos Fireligths qué no sabían del trato con Aydee, la habían seguido, miró como ambos caían en la trampa de su hermana. Jinx la jalo y sostuvo su cintura, cargando la para poder viajar en un cable que les ayudaría a pasar rápido entre los dos sujetes poniéndoles unas bombas.

—— Ay hermanita, que bueno que estas aquí, mira el espectáculo—— le susurro Jinx en el oído a Aydee, para evitar ser escuchadas

—— Jurame que no se van a morir. —— regaño Aydee

—— Ay que importa,mira ya van a explotar.

Aydee no tuvo tiempo de reaccionar al oír la fuerte explosión, definitivamente se iban a enojar con ellas, al ver como la explosión dejó tirados a los Fireligths, deseo que estuvieran desmayado y no muertos.

—— Bueno princesa, vayamos a ver presentarnos —— Jinx te dio su mano a su hermanita, esta aceptando la y saliendo juntas del ático.

—— Hola... —— saludo Jinx, Aydee siguiéndole pero con la mano, Jinx al finalizar de decir esto saco sus granadas

Aydee intentando hacer algo, saco otras dos, aventando la a la parte trasera de los Fireligths, Jinx protegía a Aydee, haciendo que no hiciera nada, sin embargo, Aydee noto a una chica que iba a dejar caer fuego al brillo de Silco, así que apuntó hacia allá, diciéndole a Jinx

—— El brillo de papá —— Jinx llego a tiempo, de tendiendo el acto de la chica.

Pero al darle un golpe en la máscara, vio el rostro de la chica, era peligrosa, parecida a Vi. Desde lo lejos Aydee miro la escena, quedándose estática, hasta que sintió la mano de alguien, era Sevika.

—— Cálmate, ella está muerta, ya no te hará daño. —— le hablo Sevika, juntando sus frentes

—— Eso no me da miedo- —— sus palabras se cortaron al oír un disparo

Jinx había matado a la Fireligth.

Aydee corrió rápidamente a Jinx, antes de que Sevika llegará.

—— Mora, ella no era Vi, era solo una niña... —— agarró la cara de su hermana quien al mirarla relajo su mirada

—— Nosotras también lo éramos.

Aydee le dolió oír a su hermana decir eso, pero su platica fue interrumpida al que Sevika jalara a Jinx para encararla.

——¡Se supone que deberías de vigilar el cargamento! —— jinx solo bufo burlona, dando a dar una pequeña sonrisa, Aydee por instinto abrazo a Jinx. Sevika miro atrás suyo por un momento, dándole a Jinx la oportunidad de mirarla mal.

Aydee al notar esto, sostuvo la cara de su hermana con una mano sin dejar de abrazarla.

—— No hagas caras, ¿Puedes dejar de mirar a Sevika así? —— le dijo Aydee firme. —— Sino serás una mora amarga.

—— Yo no soy mora amarga, soy Morita. —— sonrió a su hermanita, abrazándola subiéndose de un saltó

Aydee al no esperarse eso, cayó de espaldas mientras reía, y eso a Jinx le calmaba.

Aydee seguía a Sevika, ya que iría a donde Silco para darle los informes de lo que pasó hace no tanto, Jinx se había ido con Silco sin que Sevika se enterará, dándole a Aydee un beso en su cabeza de despedida.

—— Espero y no insultes a mi hermana. —— le dijo Aydee a la morena

—— Jinx es una loca, donde vaya todo arruina.

—— Basta Sevika, mora-

—— Dile por su nombre, ya no son niñas, jamás entendí porque no le has dicho Jinx. —— se giro a verla

—— Por que para mi no es eso, no me gusta. —— Aydee arrebato a Sevika llegando a la entrada de la última Gota

Al entrar noto la fiesta que se daba en donde antes era tranquilo, y aunque no le gustara en lo que se convirtió su antiguo hogar, a veces ella misma se relajaba ahí, bebiendo y a veces besándose con mujeres que iban ahi por primera vez, unas manos la sostuvieron de su cadera, era Sevika.

Aydee la miró y noto que no la miraba a ella, sino a unas mujeres que encuera Ban a Aydee con la mirada, las mujeres al ver como estas dos caminaban muy juntas solo voltearon los ojos prendidas al pensar que la asiática ya tenía a alguien.

—— Suéltame qué espantas a mi ganado. —— llego a las escaleras Aydee

—— Antes tu eras la que no se despegaba a mí —— le reprochó Sevika

—— Era una niña, no te preocupes ya me gusta alguien más. —— Aydee subió las escaleras, Sevika paró en seco al escucharla, arrebatandole la botella a un borracho que estaba ahí, por el enojo de escuchar a Aydee.

Al entrar a la oficina de Silco, la menor se acercó a él dándole un beso en su mejilla, este la miró feliz al ver como iba recuperando a su hija.

Sevika y Aydee se encontraban sentadas una enfrente de la otra en los sillones qué tenía Silco ahí, Sevika de vez en cuando miraba las largas piernas de Aydee.

—— Ella nos disparo —— abrió la botella sevika

—— Siempre suceden accidentes en combate—— le resto importancia ——Los Fireligths tuvieron su objetivo y algunos murieron en el proceso.

—— No fue un accidente, se paralizó y enloqueció —— reclamo la morena ya harta—— Yo podía encargarme de esos mocosos, ella es un problema y todos lo sabemos

Aydee la miro, Sevika solo alzó los hombros sin importarle nada, aun seguía enojada.

—— Todos lo sabemos.. ——repitió Silco. —— ¿Tu eres esa, princesa? —— miro a su hija

—— No papi—— susurro Aydee aun mirando a sevika

—— Si, entonces ¿Todos quienes? —— se dirigió a Sevika, esta agachó la mirada—— Espero mejores cosas de ti, que excusas, era tu trabajo asegurar que todo saliera bien, fallaste, no me desepciones de nuevo

Aydee miro arriba, donde su hermana se encontraba, después miro a Sevika quien miraba el suelo.

—— ¿Quieres saber por que no le digo Jinx a Jinx? —— Aydee se dirigió a Sevika. —— Bien te lo diré frente a mi papá, es por que yo no la veo como Jinx, desde niñas nos pusimos apodos lindos, ella por eso jamás me dice Aydee, solo princesa, como papá y como tu sevika, yo también me parálise, yo soy el problema, no Morita, que sea la última vez Sevika. Me voy papi, me despides de Morita, saldré un buen rato.

Aydee no espero y salió, oyendo pasos detrás de ella, sin importarle bajo las escaleras, perdiendose entre la multitud meneando se entre la gente para fingir lo mal que se encontraba, al llegar a la puerta se despidió de los guardias de ésta.

Camino y camino, pero sabía que Sevika la seguía, paró en un callejón desolado, por el fuerte dolor que comenzó a darle en su pierna, fue bajando al suelo, alguien se paró a lado de ella, miró hacia arriba y era sevika. Sevika se agachó para sobar su pierna.

——Aceptalo Sevika —— esta giro a verla con lágrimas en los ojos. ——, te gustó desde que tengo 17, ¿Por qué no aceptas que me amas?

—— Porque no quiero que te hagan daño—— la miro limpiando las lágrimas de esta. —— ¿Por eso te metiste a bailar al burdel?

—— No, me metí ahí porque la señora me lo pidió, solo bailar, así atrae a más clientes y cada vez que me piden, entra esa asiática qué tiene el mismo cabello que yo. —— apuntó hacia el lugar. —— Con esa, con la que luego sueles acostarte.

—— Yo no me acuesto con ella...

—— Hagamos que te creo. —— bromeó Aydee intentando aliviar el ambiente

—— Niña, en serio que no te entiendo. ——la alzó, llevándola en sus brazos y sentandola en la pila de ladrillos qué había ahí, sobando su pierna e inyectandole algo para su dolor

—— Mi heroína. —— río Aydee, Sevika siguiéndole

Ambas disfrutaba estar juntas, Aydee sabía que Sevika había comenzado a tener un gustamiento por ella pero sabía que la morena no iba a andar con ella por ser menor y por Silco. Y Sevika pensaba que poco a poco perdía a Aydee, empezó a protegerla por su difunta amiga, pero jamás imaginó que esa niña le iba a gustar, y que poco poco se iba a enamorar.

@ D e a t h u i s i