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04| Big hit y la Magic shop

16 de Abril 2022
"No importa lo que pase, siempre voy a estar para ti"

•Jungkook•

Eran recién las 11:59 de la mañana y Jungkook ya estaba dentro de un punto en medio del colapso depresivo y la felicidad extrema.

En menos de 30 segundos sería anunciados los resultados de los aceptados para trainnes en Bighit, hubo esperado al menos una hora actualizando su correo para ver si las buenas nuevas estaban a su favor.

Se mordió las uñas mientras veía como el reloj pasaba el tiempo de forma lentísima, y en el mismo instante en el que este marco las 12 del medio día volvió a actualizar la bandeja de entrada.

En realidad supondría que obtener los resultados tardaría quizá meses. Pero la empresa anunció públicamente que el 16 de abril darían a conocer el veredicto a los participantes.

El nudo en su garganta comenzó a formarse luego que después de un par de minutos su bandeja siguiera vacía.

Suspiró un par de veces, intentando retener las lágrimas que amenazaban filosas por salir. Se sentía triste y decepcionado. La desesperanza llenaba su cuerpo y mente mientras debatía si lo que había hecho fue un error o no.

Todos sus oscuros pensamientos fueron interrumpidos por el timbre de un mensaje nuevo en su teléfono.

Y como si se tratase de un pequeño rayo de luz al final de un túnel de oscuridad, el amor de su vida había llegado a alumbrar su camino.

Abue ❤️

¿Jungkookie eres tú? Espero que este sea tu número, me he tardado bastante en encontrarlo.
12:24 p.m.

Ya ha pasado casi un mes desde la ultima vez que te vi ¿como te va, estás comiendo bien?
12:25 p.m.

Hola abue, me da mucho gusto saber de usted, ya hacía tiempo no me enviaba mensajes, estoy feliz de saber de usted. ❤️
12:25 p.m.

He estado alimentándome bien, y bueno, digamos que de momento me está yendo bien. ¿Cómo está usted, se ha estado tomando sus medicinas? Recuerde que el médico dijo que no tenía que dejarlas.
12:26 p.m.

Me alegro mucho por ti, querido. Deseo que sigas persistiendo hasta lograr tu sueño, anhelo verte pronto en la televisión internacional. ❤️❤️🙏
12:27 p.m.

Sí, me he estado tomando el medicamento, sabe horrible, pero todo sea por permanecer viva hasta verte de nuevo mi niño 🤧✨❤️
12:28 p.m.

Ten por seguro que lo haré abuela, lo voy a lograr. No voy a regresar a Arizona hasta que tengas tu saludo por televisión.
12:30 p.m.

Tome sus medicamentos y manténgase saludable mientras tanto.
12:30 p.m.

Te quiero mucho abue ❤️
12:31 p.m.

Hablaremos más tarde Jungkookie, cuídate y aliméntate bien 😃😘❤️
12:32 p.m.

Te amo mucho mi niño bonito ❤️
12:33 p.m.

Suspiró, dándose ánimos para levantarse de su cama, vestirse bien y al menos por ese día, tratar de ser un poco más feliz.

Tenía mil problemas que solucionar en su vida. Pero ver a su abuela orgullosa de él jamás sería uno. Haría lo que fuera para cumplir su sueño y en el camino, cumplir la promesa que le hizo a su abuela.

Joder claro que lo haría, un correo electrónico no sería un impedimento para seguir luchando por su sueño.

Cerró su laptop y rápidamente se levantó de su cama, tomando unos pantalones de jeans grises, una playera de manga larga gris, cogió una chamarra negra y sus botas favoritas. Luego, procedió en ir al baño y mirar el tarro donde guardaba sus argollas y aretes. Se miro por sobre el espejo y se planteó a sí mismo.

"Si no puedes mostrar tus brazos, al menos adorna tus orejas y dedos"

Sonrió para sí mismo y tomó un par de aretes, colocando cada uno en sus orejas y lo mismo con sus dedos.

Finalmente salió del baño y buscó entre las bolsas de su maleta el sobre azul que contenía el dinero que estaría utilizando (sabiamente) en lo que conseguía un trabajo. Tomó un par de billetes y los puso dentro de su billetera.

No había nadie en casa esa tarde, algo que agradeció silenciosamente pues estaba indispuesto a escuchar los comentarios clasistas de su padre sobre sus perforaciones. Salió tranquilamente de la casa, y se dirigió hacia el único parque que conocía cerca de el lugar.

Hizo exactamente el mismo camino que aquella ocasión donde por azares del destino tuvo la oportunidad de hacer el casting para Big hit. Y justo cruzando la misma calle donde se encontraba la biblioteca-café instintivamente observó hacia el ventanal con la esperanza de ver a la chica que le gustaba.

Suspiró y sonrió con ironía al verla sentada en la misma mesa que la vez pasada.

Esa vez no la molestaría, de cualquier forma quizá estuviese lo suficientemente estresada ya. No sería un problema más al ir e incomodarla mientras estudiaba.

Siguió su camino hacia el parque y unos 5 minutos después ya estaba entrando a este. Observando a los niños divertirse en los juegos, los ancianos jugando Go y a las personas en sus puestos de trabajo vendiendo comida callejera. Se acercó a uno de los puestos donde vendían banderillas y palillos de papas fritas decidido a comprarse algo. Hacía bastante que no comía algo de la calle y desde que había llegado a Seul, tampoco había tenido la oportunidad de hacerlo.

Al final decidió comprar dos palillos de papas fritas y una banderilla de ramen. Teniendo sus compras hechas, se sentó en una de las bancas que estaban disponibles por todo el parque y comenzó a comer.

Dirigió su mirada hacia todos lados mientras comía y disfrutaba del agradable aire que hacía ese día. Corea no era muy soleado pero tampoco lo suficientemente frío. Su clima simplemente era agradable y los sonidos de los niños jugando en el parque lo relajaban mucho también.

Le gustaba mucho estar en un lugar así, nadie lo molestaba pero tampoco estaba solo. Simplemente era agradable.

Un rato después de terminar su comida, se decidió por levantarse e ir a dar un paseo del otro lado del parque.

En esos momentos se arrepentía de no haberse puesto algo deportivo pues el día estaba excelente para hacer cardio. También había visto que algunos chicos durante la noche se ejercitaban en unas máquinas que estaban en el parque al aire libre. Pero dudaba mucho en hacerlo por la cuestión de la hora en la que le permitían entrar a su casa. Y él definitivamente no tenía autocontrol de su tiempo cuando hacía ejercicio.

Quizá y sí se animara. Ese era definitivamente un buen día y si tenía suerte con el dinero que tenía en su billetera podría pagar una habitación en un lugar nocturno para pasar la noche. Solo era cuestión de encontrar uno que se ajustara a su presupuesto. 200 mil wones era el límite que se podía permitir gastar pero aún así le pesaba un poco ya que seguía siendo dinero que su abuela había ahorrado para que él hiciese su sueño realidad.

Se prometió a él mismo que cuando ganara el dinero suficiente se lo devolvería y le ayudaría también a que ella cumpliese su sueño, por eso, su motivación para perseverar hasta lograr ser idol era su abuela.

Mientras tenía estos pensamientos, Jungkook sonrió al imaginar que si se rendía no podría ver a su abuela orgullosa de él.

Su atención se desvió de su abuela hacia una pequeña cafetería que tenía un papel pegado en la puerta. Se acercó al ver que en letras grandes resaltaba "SE BUSCA", acelero un poco sus pasos para lograr leer todo lo que decía.

"SE BUSCA EMPLEADO" turno de medio tiempo de 2 pm a 8 pm. Salario a tratar, excelente ambiente laboral.
Requisitos; ser responsable, dedicado, buen aspecto y con disposición.

Sus ojos se abrieron con felicidad y sin titubear ni un poco entro a la cafetería para solicitar el puesto.

Si de por sí el exterior de la cafetería le parecía bastante llamativa por la cantidad de colores que tenía, el interior parecía que hubiera sido vomitado por un unicornio arcoíris. Todo dentro de él era de colores brillantes y pintorescos. Más que una cafetería parecía una tienda de diversión para niños. Le era curioso, pero en realidad no le interesaba mucho el aspecto.

—Hola buen día ¿te puedo ayudar en algo? —preguntó una chica, este la observó al darse cuenta de que le estaba hablando a él.

—Eh, he venido por lo del puesto de trabajo.

Ella hizo una sonrisa enorme, literalmente. Abrió sus ojos con exageración y sus mejillas llegaban hasta sus párpados, pareciendo derrochar una felicidad extrema.

—Acompáñame, la jefa está en su oficina. Le diré que has venido. —Jungkook asintió y se sorprendió al sentir la mano de la chica tomar de su muñeca y conducirlo por el pasillo interior de la caja.

Lo dejo un momento a fuera de una puerta de madera, realmente no se tardo ni 2 minutos en entrar y salir de vuelta, dándole la indicación de que pasara y él como el obediente chico que era, le hizo caso.

Al entrar pudo visualizar el rostro de una mujer algo mayor, quizá tuviese la edad de su madre o tal vez menos. Lucia bastante bien cuidada y con un buen aspecto.

—Adelante siéntate por favor. —le indicó ella y Jungkook lo hizo—. Lea me ha comentado que has venido a solicitar el puesto de trabajo ¿Como te llamas?

—Jeon Jungkook. Es un gusto.

—El gusto es mío, soy Lee In-Jae y soy la dueña de este negocio. Cuéntame Jungkook, ¿tienes experiencia trabajando en algún otro lado?

—Antes trabajaba en una cafetería. Pero tuve que dejarlo.

—Oh, ya veo. Y ¿Por qué te interesa este trabajo?

—Por qué necesito dinero. —dijo seguro, sin embargo al ver la cara que puso la señora In-Jae negó y se corrigió a sí mismo—. Pero más porque me pareció un lugar bastante bonito y en el anuncio decía que era trabajo de medio tiempo y yo tengo la disponibilidad.

Ella suavizó su mirada y asintió con calma.

—¿Tienes algún otro motivo que darme para el puesto? —le cuestionó, era claro que había cometido un error pero finalmente sabría corregirlo.

—Soy muy puntual, responsable, sé cómo usar varias de las máquinas del café y sé tratar con las personas.

Eso último era un poco falso, en realidad le costaba bastante, pero no le parecía algo tan difícil si era solo para atender, no tenía que ponerse a platicar con ellos a fin de cuentas.

—Bien, aunque no te ves como una persona a la que le gustaría tener este trabajo. —le confesó, viéndolo de pies a cabeza. Era claro que su aspecto era todo lo contrario al de aquel lugar pero, eso en definitiva no tenía nada que ver.

—Me parece que me está juzgando por mi forma de vestir, con todo respeto mi profesionalismo no se verá afectando en nada por eso, se lo aseguro.

Ella negó rápidamente y pareció comprender que lo había ofendido.

—Tu presencia hará un contraste bastante interesante con este lugar. —le sonrió irónica y Jungkook levantó sus cejas sin creerlo—. Bien, ¿Crees que puedas comenzar a trabajar mañana?

Jungkook sonrió satisfecho y emocionado.

—Claro que sí. Muchas gracias por la oportunidad. No la voy a defraudar señora In-Jae.

Ella le sonrió y estiró su mano hacia él.

—Bienvenido a la Magic Shop Jungkook.

Él estrechó su mano con la de ella y se despidió.

Salió de la oficina de su nueva jefa y se llevó un susto al ver a la alegre chica de antes mirarlo con su exagerado entusiasmo, como si hubiera estado espiando lo que hablaron.

De pronto chillo de la felicidad y tomó sus manos dando pequeños saltos. Parecía que ella estaba incluso más emocionada que él de que lo hubieran contratado.

—Es la primera vez que tenemos a un chico trabajando aquí, es inusual que vengan chicos aquí aunque en realidad tampoco las chicas nos frecuentan mucho pero ahora que estarás aquí, ¡estoy segura de que tendremos muchos clientes!

Sin duda alguna aquella chica desbordaba entusiasmo, y aunque hasta cierto punto seguía sin acostumbrarse a una personalidad así, en su interior le agradaba.

—Será un placer trabajar contigo. Soy Jungkook.

—Ah, antes no me presente, me llamo Seo Lea. Será un gusto para mí tenerte de compañero.

Le dio su mejor sonrisa siendo amable, y se despidió de ella con un gesto cortes, dejándole saber que al día siguiente la vería.

Salió de la cafetería y dejó salir un profundo suspiro que se había estado guardando, definitivamente se sentía mucho mejor de saber que ya tenía un trabajo asegurado y en un lugar no muy lejos de la casa de sus padres.

Tomo su teléfono para revisar la hora. Eran recién las 4, aún no quería regresar a su casa pero no sabía a donde más ir. Y como si el universo hubiese escuchado sus pensamientos, llegó quien sería su compañía el resto de la tarde.

—¡Hey! Jungkook ¿eres tú? —hablaron a sus espaldas y este volteó de inmediato.

El chico de sonrisa rectangular sacudió su mano acercándose hasta él.

—Taehyung ¿qué estás haciendo aquí? Wow, que sorpresa.

—Ujum, he salido a dar una vuelta, el clima de hoy está perfecto y me da algo de pena porque por la noche habrá lluvia según lo previsto así que no quería desaprovechar la oportunidad.

—Ya veo. ¿Y qué pasó con tu amigo Geom? ¿Por qué no estás con él?

Taehyung se rascó la cabeza y negó con cierta tristeza.

—Ya no somos amigos. Es una larga historia. —Jungkook asintió imaginando que quizá habrían discutido. Aunque en realidad no le interesaba—. Pero hey, ¿que te parece si vamos a tomar algo por aquí cerca? Escuche que abrieron un bar nuevo hace poco a una cuadra de aquí ¿Quieres ir? Yo invito.

Jungkook lo pensó un momento, quizá sería buena idea, no tenía amigos en Seúl y Taehyung parecía ser una buena persona y siendo honesto no le desagradaba su compañía.

—Está bien, pero solo un rato. Tengo que regresar a casa temprano.

•✦───────────•✧

—Y así fue como terminó una amistad de 3 años, por la envidia y los celos.

Jungkook asintió escuchándolo con atención, Taehyung acababa de contarle que había sido aceptado en Big hit y Geom se había molestado con él diciéndole que no merecía estar en un lugar como ese y que le había robado la oportunidad de entrar a la empresa, lo que le había impresionado de aquella historia no fue lo que le dijo su ex amigo sino que a Taehyung le habían dado los resultados desde hace dos días cosa que realmente lo confundió pues no había visto ningún anuncio que dijese que darían los resultados antes.

—No merecía tu amistad definitivamente. —negó, reconfortando con un par de palmadas en su espalda a su actual acompañante—. Oye Tae, es muy buena noticia que hayas podido entrar en Big hit, ¿como fue que te enteraste de ello? Nunca dijeron que darían los resultados antes.

—Ah, ¿aún no lo sabes? Big hit se está yendo por números de teléfono ya que al parecer alguien de su personal perdió muchos de los papeles que llevaron ese día para el trámite y se han estado guiando de los números que dejaron en las inscripciones online.

Jungkook retuvo un momento la respiración. Él no se había inscrito de forma online, ni siquiera sabía que debía hacerlo. Estaba realmente decepcionado, había perdido su oportunidad de entrar por un mínimo error.

—Entonces ¿Ya sabes quienes serán tus compañeros? —musito con cierto tono de tristeza.

Pero Taehyung negó.

—No, la empresa me contacto solo para avisarme que ya estaba en el grupo. Sin embargo creo que los miembros que ya tenían fichados en las pruebas aún los están buscando. Aunque sólo podría ser una suposición.

Una luz se le prendió a Jungkook. Y con ello una idea poco convencional. 

—¿Crees que la empresa de verdad siga buscando a las personas que faltan?

—No estoy muy seguro de eso, pero es probable, son muy meticulosos y por lo que sé no aceptarían a cualquiera.

Jungkook lo pensó, quizá si la empresa no podía ir a él, entonces él iría hacia la empresa. Correría el riesgo de ser decepcionado una vez más, claro que sí. Pero al menos así sabría si fue o no elegido de verdad.

—¿Sabes hasta que hora tiene la atención de la empresa? —Taehyung asintió mirándolo confundido.

—Los servicios del personal administrativo cierran a eso de las 8, ¿por qué preguntas? ¿Irás?

Reviso la hora en su teléfono, marcando las 7:50 de la noche. De verdad que había pasado un buen rato desde que estaban ahí. Analizó la situación por un momento y decidió levantarse con prisa.

—Al menos debo intentarlo. No podré dormir esta noche sino lo intento. ¿Vienes conmigo?

—Pero Jungkook, la empresa queda al otro lado, no creo que podamos llegar a tiempo.

—Nada es posible hasta que lo intentas. —respondió, apresurándose en tomar sus cosas y caminar de prisa a la salida del bar.

No se dio cuenta en que momento Taehyung comenzó a seguirlo, cuando fue que los dos ya se encontraban corriendo a toda velocidad para llegar a la empresa.

La adrenalina en su cuerpo y el frío de la noche golpearon con fuerza en su cuerpo, pero Jungkook no se detuvo ni tampoco miró hacia atrás. Necesitaba llegar lo más pronto posible hacia lo que quizá fuera su destino. 

En un tiempo casi récord, Jungkook ya se encontraba parado justo en frente de Big hit, respiró un momento para moderar su aire, pero esto solo duró un par de segundos al ver que faltaban dos minutos para las 8. Taehyung llegó detrás de él.

—Oye, corres muy rápido ¿como es que no estás cansado? —hablo entrecortado, colocando sus manos en las rodillas, tomando aire.

—No hay tiempo para hablar de eso Tae, vamos. Antes de que se cierren las puertas.

Jungkook tomó su muñeca y lo llevó casi arrastrando a la entrada donde un guardia de seguridad los detuvo.

—¿Quienes son ustedes?

—Soy Kim Taehyung y fui seleccionado de las audiciones. —dijo, mostrando su inscripción aceptada.

El guardia asintió y los dejó pasar. Jungkook entro detrás de él, y rápidamente buscaron la oficina de administrativos. Pero cuando la encontraron, un hombre ya estaba cerrando la puerta de esta y detrás de él habían otras cuatro personas más quienes comenzaron a irse.

El hombre que se había encargado de cerrar la puerta los miro extrañado y Jungkook se apresuró en hablar.

—Buenas noches señor, soy Jeon Jungkook y vengo aquí para saber si he sido aceptado de las últimas audiciones. Me han dicho que tuvieron unos problemas dentro del papeleo así que decidí venir a ver si mi solicitud ha sido aceptada.

El hombre lo observó de pies a cabeza y negó.

—Si te inscribiste en línea ya tuvieron que haberte llamado, si no has recibido ningún aviso es que por desgracia no has entrado muchacho.

Jungkook negó rápidamente.

—No, no me he inscrito en linea, he venido precisamente por ese motivo, no tengo manera de saberlo.

—En este caso lo único que podrías hacer sería grabar un video y subirlo con tus datos en alguna red social, aún faltan 3 participantes que están buscando los jefes, etiqueta las redes sociales de la empresa, quizá lo vean y podría ser que tú también seas uno de los que siguen buscando.

Jungkook dudo, en realidad él no tenía redes sociales. Era bastante anticuado, y pensaba que las redes sociales eran una pérdida de tiempo. No las necesitaba.

—¿Qué posibilidad tengo de que la empresa vea mi video de ser así?

—Honestamente muy bajas. Pero por las circunstancias que se están pasando en estos momentos es muy probable que más personas hagan lo mismo que tú así que las posibilidades de que tu video sea revisado son buenas, el que entres a Big hit no lo sé, depende de cuanto talento tengas supongo.

Jungkook asintió, le agradeció al hombre quien tan pronto como termino de hablar se dirigió a la salida.

—Descuida, haremos un video fantástico, yo te ayudaré. —habló Taehyung, colocando una de sus manos sobre el hombro de Jungkook.

Parecía estar ido, como en shock. Y de repente volvió a estar dentro de sí.

—Muchas gracias Taehyung. Vamos, ya no tenemos nada más que hacer aquí.

Estaban por salir del edificio nuevamente, Jungkook ya estaba algo desilusionado, pero al menos tendría otra oportunidad para ser aceptado.

Una vez fuera de este, ambos decidieron volver al bar un rato más, Jungkook tenía 2 horas libres antes de irse a casa, por lo que había aceptado la propuesta de Taehyung. Los dos se divirtieron un rato y Jungkook pudo conocer un poco más de Taehyung, se había dado cuenta de que era un chico bastante sencillo y muy agradable, además de bastante gracioso. Ambos encontraron una compañía amena el uno en el otro y decidieron hacerse amigos.

El tiempo realmente les había resultado bastante efímero y pronto se hizo la hora de volver a casa cada uno. Taehyung le había dicho que podrían ir a una cafetería a grabar el video para subirlo a internet, habían quedado de encontrarse el día siguiente por la mañana y grabarlo para subirlo lo antes posible.

Los dos se despidieron y Jungkook inició su camino de regreso a la casa de sus padres. Pasando por el parque donde se dio cuenta que ya no había casi nadie. Luego, por inercia, pasó a un lado de la cafetería donde había visto a Hara. Pero esa vez fue diferente. Completamente.

Hara iba saliendo de la cafetería, suponía que iba de regreso a casa.

Pero no iba sola. Alguien iba detrás de ella.

A unos 5 metros de distancia, un tipo de gorra negra y apariencia completamente desconocida comenzó a seguirla. Las alarmas internas de Jungkook se encendieron en ese momento y dejó de importarle que quizá sus padres ya no lo dejaran entrar a la casa.

Algo extraño estaba pasando y Jungkook no iba a permitir que Hara corriera peligro.

Ustedes no me van a creer, pero estuve trabajando en este capítulo durante 3 meses 🥺, espero realmente que les guste el resultado, porque el siguiente capítulo será algo triste.

Les quiero 🤍

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