02| Linda Noona
15 de marzo 2022
"Ella es como la luz que brilla siempre que me encuentro perdido en la oscuridad, ella es la estrella más brillante en la noche mas oscura"
•Jungkook•
Observaba una de las esquinas de su habitación, aquella donde se encontraba una caja de zapatos vieja, como si fuera lo más interesante del mundo. O al menos para él.
Había pasado un tiempo desde que estuvo ahí, tal vez ¿trece años? Dudaba mucho que fuera menos que eso y aún así no dejaba de sentirse incómodo.
Extrañaba a la abuela Rui, con ella siempre pudo sentirse en casa. Pero tenía un sueño por cumplir y no volvería con ella hasta que eso no haya pasado.
"No vuelvas a casa hasta que no salgas en la televisión"
Fue lo que le dijo antes de despedirse. No pensaba volver a su casa sin haber cumplido su promesa. Aunque fuera difícil mantenerse en su actual familia.
Dejar a su abuela sola en Arizona no era lo que quería, pero ella tampoco podía acompañarle, su estado de salud no le permitía viajar en un avión por más de 10 horas.
Unos breves toques en la puerta lo hicieron reaccionar. Y segundos después escucho a su hermano hablar.
—Mamá y papá están en casa, quieren que bajes.
Asintió poniendo de lado sus tormentas emocionales y contestando; —Iré ahora mismo.
Los pasos de su hermano al otro lado de la puerta fueron alejándose y Jungkook aprovecho para levantarse de la cama e ir al baño para realizar su aseo personal y cambiar su pijama por un par de pantalones de cargo negros y una camiseta de manga larga de mismo color.
No se podía dar el lujo de mostrar su brazo derecho, no cuando tiene a unos padres tan correctos que creen que tener tatuajes es sinónimo de rebeldía, les era ya un límite tener que ver a su hijo con piercings en sus orejas y eso sin contar que desde que llegó tuvo que reprimir su deseo de colocar sus piercings de ceja y labio.
No estaba siendo él mismo, pero también tenía que respetar las reglas de sus padres. Al menos hasta que lograra su aceptación.
No tenía más que hacer dentro, por lo que fue directo al desayunador donde se encontraban ya sus dos progenitores. No se la pensó dos veces antes de sentarse.
—Buenos días. —comenzó, su padre lo observó a través de las ventanas de sus lentes, y su madre dejó la taza de café que estaba bebiendo para prestar atención.
—Buen día. —contestó su madre con un tono sin emoción.
—Jongkook hyung ha dicho que querían hablar conmigo ¿de que se trata? —fue directo al grano, puesto que sabía que si no lo hacía era probable que la espera se hiciera larga para él.
—Bueno, para comenzar. —empezó su padre, dejando a un lado una revista medica que había estado leyendo—. Como ahora vas a estar viviendo en esta casa, habrá un par de reglas que deberás cumplir.
Jungkook entrelazó sus manos sobre sus piernas, ansioso por saber de que se trataba.
—Bien...
—Empezando por evitar las salidas tarde, las puertas se cierran a las diez en punto y no se abren hasta las siete. Seguimos con las rebeldías, a casa no se puede llegar con mujeres, mucho menos meterlas a tu habitación. Luego pasamos al área de la cocina, puedes tomar lo que quieras de la nevera, pero se prohíbe completamente tocar el queso cheddar de Jongkook, y para terminar, lo más importante... si quieres quedarte aquí, al menos hasta que consigas ser... —se quedó callado, y Jungkook de inmediato supo que evitaría mencionar su sueño de seguir en la música—. Lo que vayas a ser, deberás trabajar y aportar algo en esta casa ya que no estudias.
Se quedó en silencio.
No se negaba a la idea de trabajar, para nada. Era justo ya que todos hacían algo para conformar la estabilidad familiar, su hermano estudiaba, su madre era enfermera y se encargaba de trabajar en el hospital general de Incheon, y bueno, su padre era el que encabezaba esa familia de médicos.
Neurólogo con un doctorado en endocrinología. El subdirector del hospital donde trabajaban él y su madre y en un tiempo no muy lejano, también su hermano.
Él por otra parte, era la "oveja negra", o así solía llamarlo la mayoría de la gente conocida de sus padres.
Estar en una familia de privilegiados con carreras enfocadas en la salud de los demás no era fácil, nunca había sido fácil pertenecer allí. Mucho menos cuando tu no estabas ni cerca de querer lo mismo.
Durante su adolescencia, sus padres intentaron convencerlo de seguir el legado, al menos intentar hacerlo. Pero perecer en algo que no le gustaba, que no le causaba euforia cuando lo hacía, y no le hacía sentir vivo. Nunca fue una opción. No para él.
—Está bien. —se dispuso a contestar, dándole a entender que sería responsable y aportaría con lo que se le pedía.
—Bueno, entonces te sugiero que comiences a buscar desde hoy un lugar donde trabajar, no pierdas tiempo en andadas de vago.
Se reprimió las ganas de rodar los ojos y en cambio escondió sus manos dentro de los bolsillos de su suéter haciéndolos puño ahí dentro.
Sabía exactamente a lo que se refería con aquello y a Jungkook para nada le gustaba que lo mencionara de una manera tan despectiva.
No dijo nada más y evitó volver a mirar hacia su padre, se levantó de la mesa y se dirigió hacia la salida.
En realidad no tenía ningún lugar a donde ir, ni siquiera sabía por dónde caminar. Él aún no se adaptaba a la gran ciudad y esperaba que no le tomara mucho tiempo para hacerlo ya que pronto tendría que conocer cada rincón de la misma.
Se encontraba caminando sin ningún rumbo, cuando fue que algo llamó su atención, o mejor dicho alguien.
Del otro lado de la calle por la que estaba caminando se encontraba una pequeña biblioteca café. Y justo sentada delante de la vitrina que mostraba una pequeña parte del interior, se encontraba ella.
Su noona.
Sonrió de forma tierna al verla ahí y sin darse cuenta sus ojos brillaban mientras lo hacía. Ella parecía estar muy concentrada tratando de leer un libro y escribiendo algo en su IPad. No lo pensó mucho cuando volvió a caminar para cruzar la calle.
Solo pasaría a saludarla. Sí, después se iría en busca de lo que sea que le hubiese pedido su padre. No tardaría más que simples minutos.
Empujó la manija del cristal que tenían como entrada a la biblioteca mientras que apenas entra se gira sobre si mismo para poder cruzar el pasillo que daba a donde estaba ella.
Su linda noona.
Se quedó quieto por un par de minutos observando cómo apoyaba una de sus manos sobre su sien mientras que con la otra sostenía un bolígrafo que dirigía a su boca para morderlo cada tanto.
Ella no se había dado cuenta del peso de la mirada de alguien más. No hasta que le dio por estornudar para abrir sus ojos y ver hacia el frente donde se encontraba él.
Jungkook levanto su mano izquierda para saludar mientras le sonreía y se acercaba a ella.
—Oh, hola Jungkook. ¿Qué haces por acá?
—Buenos días noona. —dijo apenas estuvo lo suficientemente cerca para ser escuchado—. Pasaba por aquí y la vi así que me acerqué para saludarla.
Ella asintió amablemente, trató de sonreír pero le salió más bien una mueca de incomodidad. No sabía que decir con exactitud y él parecía entender su lenguaje corporal.
—Ah, bueno... —suspiró algo cansada y cerró los ojos un momento para después volverlo a observar—. Si gustas puedes sentarte.
Jungkook ladeó su cabeza, dudando en si debía aceptar, pues más que observar las ganas que ella tenía de que se quedara ahí pudo ver la incómoda mirada que ponía sobre él.
No. No quería su lastima.
Pronto negó con amabilidad y sonrió levemente.
—Muchas gracias por la invitación noona, pero creo que no sería lo correcto. —se inclinó con levedad y volvió a mirarla—. Me retiro primero. Tenga un bonito día noona.
No esperó que contestara de la misma manera, en realidad no esperaba nada. Solo se dio la vuelta y salió del lugar. Dejando a una castaña confundida.
...
Después de haber caminado alrededor de unos 40 minutos mientras hacía breves paradas en cafeterías y restaurantes preguntando por algún puesto que tuviesen disponible para él. Decidió tomar un breve descanso en un parque cerca del museo nacional.
Estiró sus brazos para relajar la tensión que había generado durante el día y tomó su billetera. Había un poco del dinero que su abuela le había dado; eran los ahorros de años, su abuela le obsequió ese dinero para que lo utilizara cuando estuviera en Seúl. Era una ciudad mucho más grande de lo que pensaba, incluso Arizona le parecía más pequeña ahora que vivía dentro de una ciudad donde fácilmente podría perderse.
Le parecía frustrante el hecho de que tenía que seguir soportando el rechazo de su familia solo porque había decidido hacer lo que más amaba, no era ajeno a lo que ellos hacían, al menos en el aspecto emocional. Y aún así estaba dispuesto a darlo todo de sí mismo para demostrarles que podría ser tan reconocido y respetado como ellos lo eran, y al menos así, poder hacerlos sentir orgullosos de él.
Su vista se cerró y sus pulmones soltaron todo el aire que hubieron retenido durante esos pocos segundos que se dedicó a estirar sus músculos. Y como si de una señal se tratara, a través de sus oídos comenzó a sonar una canción que fácilmente podía identificar, Rainism. Sonrió e inevitablemente comenzó a mover sus pies al ritmo de la música, al tiempo que se levantaba de donde anteriormente se había quedado sentado para dirigirse al lugar de donde comenzaba a sonar la melodía de Rain.
Minutos después de estar caminando para cruzar todo el parque y poder al fin visualizar el edificio de donde salía la música, sus ojos brillaron y su piel se erizó.
Big hit entertainment.
Era actualmente una de las empresas que él seguía pero que veía casi imposible de entrar, artistas tan famosos como Lee Hyun o BUMZU eran parte de la discográfica.
No se distrajo mucho cuando logro observar como una larga fila de personas se formaban para entrar en aquel lugar, lo que pudo deducir como algún evento o convocatoria, sin embargo no fue hasta que se tomó el tiempo de levantar un poco la mirada y ver un gran cartel que anunciaba audiciones.
Hey, esto es Big hit entertainment.
Se hace anunciar oficialmente abiertas las audiciones para formar parte del próximo grupo producido por la empresa.
Requerimientos: Ser hombre y tener entre 12 a 24 años de edad.
Contar con habilidades como: Rapear / cantar / bailar / modelar / actuar .
Audiciones abiertas desde el 14 de marzo al 16 de marzo del año presente.
En caso de ser menor de edad contar con un permiso autorizado por los padres o tutor del menor.
Sus ojos se abrieron como platos de par en par, quedando en un estado de shock inminente. Hubo estado revisando la página oficial de diferentes empresas como JYP, SM y YG. E incluso ya había hecho audiciones a las empresas mencionadas anteriormente, sin embargo no le habían dado una respuesta, no aún. Por lo que se preguntó; ¿Y sí lo hago?
Sus veintidós años no serían eternos, y no estaba seguro de si podría llegar a pasar, sin embargo no le pasaría nada si al menos lo intentaba.
Ya tenia al menos una idea de lo que se requería de llevar en papeleo a una audición, y era suerte la suya que en su teléfono llevase siempre la carpeta de ese papeleo, por lo que tan pronto como pudo corrió en busca de una papelería para imprimir aquellos documentos.
...
No tardo mucho tiempo cuando hubo sacado los papeles y dirigirse nuevamente al lugar donde la gente no paraba de llegar a las audiciones, Jungkook al menos pudo contar unas setecientas personas en espera de entrar y que fuese su turno.
Era imposible que la empresa recibiera a todas esas personas en un solo día y le afligía pensar que recién él había llegado. Aún así, el rendirse sin haberlo intentado no era una opción para Jeon Jungkook.
Decidido a caminar hasta encontrar el final de la fila para formarse, sin embargo no había llegado a la mitad de esta, cuando fue que tropezó con alguien y sus papeles salieron volando por todo el pavimento.
— ¡Aigoo! Lo siento muchísimo, de verdad lo lamento mucho, no te vi por estar distraído, lo lamento mucho ¡En serio! —mencionó el otro individuo, colocándose de cuclillas para ayudar a recoger los documentos de Jungkook mientras este tomaba la carpeta donde los había puesto.
Una vez los dos estuvieron de pie, Jungkook se sacudió sus pantalones de cargo al mismo tiempo que lo hacía con su camiseta. Luego de eso, levantó la vista solo para mirar a un chico de cabellos castaños con una mirada apenada.
—Está bien, no ha pasado nada, muchas gracias de todas formas. —sonrió amablemente y estiró su mano para que le devolviera su documentación. Lo que rápidamente el chico captó e hizo.
Jungkook hizo una reverencia y al momento de querer retomar su camino hasta el final de la fila, el chico lo detuvo.
—Espera ¿también has venido a la audición? —asintió y el chico sonrió—yo he venido a acompañar a un amigo. —apuntó hacia donde estaba un chico que miraba con curiosidad la escena que su acompañante había causado.
Jungkook se comenzaba a desesperar, quería estar por fin formado, pero aquel joven no paraba de oponerse a que se fuese de una vez por todas.
—Eso es genial, eh, yo tengo que ir a formarme también, oh si no voy a...
Pero no logro terminar de hablar cuando ya estaba siendo arrastrado por el castaño hasta donde se encontraba su amigo.
—Geom-ssi ¿podemos dejar que... —volvió hacia Jungkook, no siquiera tuvo que esperar para que él le dijera su nombre.
—Jeon Jungkook.
—Ah, sí. Podemos dejar que Jungkook se quede con nosotros en la fila?
El otro tipo hizo una pequeña mueca, pensando muy bien la respuesta, no le parecía agradable la idea de ceder su lugar a alguien más habiendo otras setenta personas antes de él. Sin embargo la mirada que le regalaba su amigo le era imposible de ignorar, por lo que aún con duda, asintió cauteloso.
Jungkook se sonrojo, y agradeció el gesto tan amable que le estaban otorgando para luego caminar un paso adelante del chico que recién acababa de hacerle el día uno más feliz.
—Muchas gracias, lo digo en serio.
—Un placer, soy Park Geom Hyun y este de aquí es Taehyung. —estiró su mano y pronto el pelinegro imitó su gesto para entrelazar sus manos en un saludo.
— ¡Es un gusto conocerte Jungkook! —dijo el segundo, sonriéndole de oreja a oreja en un gesto amistoso.
—El gusto es mío. —le sonrió de igual forma.
— ¿A que área te vas a dedicar? —preguntó de repente Geom.
Jungkook ladeó la cabeza y sonrió algo apenado por lo que diría luego.
—En realidad, no tengo problema con hacer un poco de todo. Pero mi fortaleza es el canto.
—Oh, yo también vengo con el fuerte del canto. Realmente no tengo nada más, y he practicado una coreografía por si me piden bailar algo. ¿También practicaste?
—Eh, no realmente. En realidad fue hace poco menos de media hora que me enteré de las audiciones así que creo que improvisaré.
Geom asintió, imaginando que era un principiante en audiciones y que probablemente no llegaría a pasar de la puerta por los nervios. Seguramente. Además, tenía un aspecto peculiar, sus orejas eran adornadas por seis piercings y acompañados de estos uno en la ceja y otro en el lado derecho de su labio. Sin contar que su mano contaba con varios tatuajes y su curiosa forma de vestir, no lucia como alguien a quien le interesara el ser un idol sino más bien una estrella del rock, o eso aparentaba.
Pero no importaba mucho al final de cuentas, en realidad no debía de enfocarse en aquello, sin embargo le era imposible, la ignorancia de esperar algo sin haberse esforzado siquiera un poco de aquel chico le parecía estúpido e incoherente. Pero ya decía, no le interesaba, aunque le daba cierta curiosidad sobre él.
•✦───────────•✧
Eran pasadas las cuatro de la tarde, y faltaban cinco personas únicamente para que por fin pudiese pasar y hacer su audición. Quizá luego de eso iría a comer algo y le daría tiempo para ir a buscar el bendito empleo que le pedían sus padres para quedarse en casa.
Sus nervios no estaban a flor de piel, y aún así se sentía ansioso por saber que pasaría. Era la cuarta vez que audicionaba y estaba esperanzado a que pronto ocurriera lo que más anhelaba desde que llegó a Seúl.
—Hey Jungkook, mira ya avanzaron otros tres lugares, en unos minutos entrarás también ¿Estás nervioso? —cuestionó Taehyung, con una pizca de curiosidad pues no lucia para nada nervioso.
—Solo un poco ansioso. —respondió, rascando el puente de su nariz.
—Mucho éxito Jungkookie.
— ¿Tú no audicionaras Taehyung? —fue Jungkook quien cuestionó ahora. Tratando de desviar el tema para evitar las ansias.
Él subió sus hombros despreocupado.
—Tal vez lo haga, aunque no he venido a eso, creo que sería divertido tratar —confesó con cierta emoción en su voz.
Ambos asintieron y se giraron un poco al escuchar una pequeña risa nasal.
—Pero si tú no sabes cantar Tae, ¿audicionaras para modelo? Ya lo creo, tienes la pinta de uno, aunque dudo mucho que se estén enfocando en eso para conformar el grupo.
Jungkook frunció ligeramente el ceño ¿qué no se supone que es su amigo? Decirle ese tipo de cosas no hizo más que incomodarlo, y estuvo a punto de hablar, sino hubiese sido gracias a la voz de un hombre que pedía que siguiesen avanzando.
Fue entonces que reaccionó, le tocaba entrar.
Taehyung le hizo señas para que continuara y este asintió con esmero. Preparándose para lo que vendría después.
Dentro del edificio, su vista se vislumbró ante las blancas paredes y la cantidad de personas que estaban detrás de todo. Si bien por fuera el edificio lucia bastante bien, lo que contenía dentro era maravilloso.
Siguió el camino que se indicaba siguieran los participantes en las audiciones, Justo detrás de dos chicos quienes parecían estar nerviosos.
Una puerta se abrió y permito el paso al primero de ellos. Mientras que una chica del personal pedía que Jungkook y el otro chico aguardasen fuera unos minutos.
El chico ahí sobaba sus manos mientras que uno de sus pies se sacudía de arriba hacia abajo en un movimiento ansioso.
Jungkook identifico esa acción como un tic nervioso, lo mismo le sucedía cuando se encontraba cerca de lugares con muchas personas alrededor.
Estiró su brazo algo desconfiado, el rubio comenzaba a transmitirle su inseguridad y si seguía así estaba seguro de que pronto colapsaría sin antes haber entrado a la dichosa audición.
—Oye, amigo tranquilo. Estás híper ventilando ¿te encuentras bien?
El chico se giró para verlo, un chico unos centímetros más pequeño que él, pero con aspecto de ser algo mayor que él.
—Yo l-lo siento. Estoy un poco nervioso eso es todo.
—Está bien, verá que todo saldrá bien ¿es su primera vez? —el chico asintió—. Ya lo veo, umm ¿que le parece esto? Aún quedan unos cuantos minutos para su turno ¿quiere practicar conmigo? Cierre los ojos y muéstreme lo que tiene.
El rubio no muy seguro agito su mano y suspiró. Su vista se cegó y en unos cuantos segundos comenzó a rapear una canción que desconocía completamente, pero que sin embargo sonaba muy bien en la voz de aquel chico.
Quedó pasmado, realmente impresionado por lo que acababa de escuchar. Él era genial.
Su fascinación no se hizo esperar para revelarse cuando su sonrisa se ensanchó y sus manos comenzaron a hacer pequeños aplausos.
—Lo ha hecho genial hyung ¿y que canción fue esa? No logre conocerla ¿se presentará con ella?
—Ah, te lo agradezco mucho, y la razón por la que no la conoces es porque es mía, son mis letras y, es lo que quiero, quiero presentarme a la audición con todo lo que soy. Sin excepciones.
Jungkook se quedó embobado, observándolo, queriendo ver más de lo que tenía por ofrecer, el chico era tremendamente majo para escribir canciones y no dudaba en absoluto que también lo fuese para producirlas. Su corazón latía con fuerza, se sentía eufórico y emocionado. El chico realmente lo había hechizado.
—Soy Jeon Jungkook —estiró su mano, en un gesto que detonaba las ganas de saludarlo—. Es un placer.
—El placer es mío —sonrió por fin—. Soy Min Yoongi.
Recién fue que se tomaron las manos, la puerta se abrió y el otro chico que anteriormente había entrado, salió junto a la misma chica del staff quien indicó que ahora, el rubio podía pasar.
—Éxito hyung, sé que lo hará increíble.
Yoongi sonrió y asintió rápidamente para entrar por aquella puerta con mucha más confianza que antes.
Jungkook le había brindado la confianza que tanto necesitaba, y el apoyo que le hacía falta. Sin pensarlo mucho, afirmó mentalmente que aquel pelinegro era un angel.
•✦───────────•✧
Pronto los minutos pasaron, y cuando Yoongi salió se despidió con alegría, fue entonces que Jungkook lo reverenció y entró de una buena vez a lo que sería su pase al inicio de su sueño.
Habían cuatro personas ahí, lo que dedujo como los críticos o evaluadores a las audiciones.
—Buenas tardes. —se inclinó al momento de estar frente a ellos.
—Buenas tardes, ¿cual es tu nombre? —preguntó una mujer en tanto pudo contestar el saludo.
—Jeon Jungkook.
—Bien Jungkook, ¿podrías mostrarnos tu talento?
Él asintió y tan rápido como pudo tomó aire y de sus cuerdas vocales una melodiosa voz cantando Only then.
Ante los oídos de los críticos, su voz parecía tan única y tan bien trabajada que mediante el minuto y treinta segundos que tuvo para poder terminar de cantar el pequeño pedazo de la canción se sintieron anonadados por lo satisfactorio de escucharlo.
Jungkook termino de cantar, y apenas se dio cuenta, cuatro pares de ojos lo observaban.
—Además de cantar ¿sabes hacer otra cosa? —cuestionó un hombre esta vez, con un tono algo brusco.
—Ah, puedo bailar también.
Una tonada de música tipo hip hop comenzó a sonar y Jungkook de forma improvisada inició a bailar con movimientos dejados y al ritmo de la música. No era exactamente lo que tenía planeado, pero tan fácil como le fue poder vocalizar sin practicar le fue al bailar sin tener necesidad de verse forzado.
Fue algo arduo, sin embargo los valuadores no parecieron darse cuenta de aquel detalle.
Pasaron algunos minutos después de que parase la música y Jungkook se detuviera y su respiración se estabilizará. Su condición física era buena por lo que no tuvo que esperar mucho para dejar de sentirse agitado.
—Muy bien joven Jungkook, ahora puedes pasar a retirarte, nosotros te llamaremos después. Muchas gracias por venir. —Jungkook asintió luego de las palabras que mencionó la mujer.
Dio las gracias antes de irse, reverenció y finalmente salió del sitio.
Cuando paso la puerta vio entrar a Taehyung y Geom, el primero sonrió de oreja a oreja cuando lo vio y apenas con la mirada, le transmitió lo que ansiaba preguntarle mientras que Geom entraba por la puerta de la que anteriormente había salido Jeon.
—Fue bueno, supongo.
—Me alegra mucho ¿qué fue lo que te preguntaron?
—Nada solo que... —se silencio cuando un estruendoso llamado los interrumpió.
—Oye ¿vienes a audicionar? —preguntó un hombre apuntando hacía Taehyung.
—Ah, yo no- —pero no logro terminar cuando Jungkook puso una de sus manos sobre su boca.
—Sí, ha venido conmigo. Y es el siguiente en entrar.
Taehyung lo miro con evidente sorpresa, honestamente después de lo que había dicho Geom su autoestima bajo un poco pues, si bien le parecía algo divertido, no tenía intención alguna de ser idol o alguna de esas cosas. Y aún así, su ilusión se apartó cuando despotamente su amigo lo había hecho sentir así.
—Bueno pues, entonces tendrás que esperarlo afuera, el acceso aquí ya está cerrado para ti hasta que te den nuevas indicaciones, te pido que te retires por favor.
Jungkook acepto lo que se le demandaba y antes de salir volvió hacia Taehyung.
—No dejes que la gente te diga lo que puedes y no hacer. Sabes a lo que me refiero. Inténtalo, diviértete y no te cohibas ante nadie ¿Estamos?
Taehyung asintió aún algo ido. Y Jungkook subió su pulgar para después mirar hacia el frente y salir de una vez por todas.
•✦───────────•✧
Estaba agotado.
Ni siquiera se dio cuenta de cuanto había caminado hasta que pudo ver la misma biblioteca por la qué pasó la primera vez y donde vio a su noona.
Fue instinto propio que cuando estuvo justo frente al establecimiento voltear y dar con una sorpresa bastante increíble.
Ella seguía allí. Y estaba dormida.
Fue mucha la presión cardiaca que sintió cuando la vio de nuevo. Sonriendo involuntariamente cuando la observo bien para verificar que efectivamente era ella. Parecía muy cansada por lo que pudo notar a simple vista los pocos pero importantes metros que existían desde donde estaba él. Sus ojos tenían dos pequeñas pero notables bolsas azules debajo de ellos.
Se sentía algo mal por ella, hubo estado casi todo el día ahí si no suponía mal, y probablemente aunque eran sólo suposiciones suyas, no hubo ingerido nada más que lo que pidió por la mañana para el desayuno.
Fue hasta ese momento que lo recordó y sus dedos hormiguearon para sacar del bolsillo de su pantalón una barrita de cereal que anteriormente había comprado para comerla.
Era la persona menos indicada para hablar de comida cuando tenía desde la mañana que no había probado siquiera un bocado.
Aún así, su estómago podía esperar hasta llegar a casa de sus padres para comer algo.
Y como si sus pies fuesen los que pidiesen hacerlo, comenzó a moverse hasta la entrada del lugar donde, luego de entrar, pidió una botella de agua y la pago para luego caminar hasta la misma mesa donde se encontraba ella.
Dejo las cosas con extremo cuidado para no despertarla, y la observo un par de segundos más. Probablemente su cuello luego estaría adolorido, pero no era capaz de poder despertarla. Por lo que solo continuo ahí. Mirándola con fervor como si eso tuviese algún efecto telepático que pudiera hacerla abrir sus ojos.
No dio ningún resultado de todos modos. Pero al menos tuvo la dicha de ver su cara relajada y durmiendo por primera vez. No quería parecer un acosador en absoluto. Porque en definitiva no lo era, así que se forzó a alejarse de ahí para seguir su camino de regreso al que era su actual hogar.
No había logrado su cometido del día que era conseguir empleo, sin embargo hubieron pasado cosas mejores que eso, y justamente por esa razón no se sentía del todo mal.
Al menos tuvo la dicha de ver a su linda noona dos veces y poder dejarle algo comestible para cuando ella se fuera.
Además, esperaba con esmero las buenas nuevas de las empresas a las que había audicionado, incluyendo a Bighit.
En definitiva, no había sido un día tan malo después de todo.
—Algún día, linda noona...
No me regañen.
Ya se que tengo miles de años sin actualizar.
Pero espero que las 4700 palabras de este capítulo recompensen mi ausencia por aquí.
Este capítulo como podemos ver, narra la perspectiva de Jungkook y como ve a Ha-ra desde sus ojos, y como pudieron darse cuenta. Efectivamente Jungkook esta clavadisimo de Ha-ra. Por el momento así se ira intercalando entre los protagonistas durante lo que le queda a la historia.
Espero que se entienda, y no sea algo tedioso de leer, ¿les gustan los capítulos largos o más cortos?
Háganmelo saber
Nos vemos luego ❤️
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