Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

"El Vino"

- No creo que sea buena idea esto, Harry -Decía Hermione no muy convencida detrás de Harry.

-Créeme, sé lo que hago.

Harry la había arrastrado hasta un bar, poco conocido, para buscar a un pretendiente. Ella había tratado de denegar por completo esa idea, pero se trataba de Harry. Jamás pudo hacerlo cambiar de opinión cuando eran adolescentes, mucho menos podría ahora.

Las personas que habían en el bar no estaban nada mal, pero no eran su estilo. Tenía la extraña sensación de que saldrían de aquí sin siquiera con una persona en la mente de Hermione. Pero no había que ser negativos, solo tenía que tomárselo como una salida más con su amigo, solo que esta vez si tendría que corresponder a los pretendientes, de no ser así no encontraría a nadie.

Harry la tomó del brazo y la arrastró, por segunda vez, hacia la barra, donde un chico castaño claro preparaba un trago. Cuando este se percató de la precencia de ambos, dirigió su mirada a ellos y les dedicó una sonrisa de bienvenida. Rápido terminó de hacer el trago, lo entregó a su perspectivo dueño, cobró su precio y los atendió.

- Buenas noches, Harry y señorita, ¿qué les gustaría pedir en este gran mundo de cócteles?

Harry soltó una risilla que no puedo aguantar, y se acercó al chico castaño claro, dándole un fuerte abrazo, como si se conocieran de toda la vida.

Ella los miró extrañada, Harry jamás le había contando del chico. Al parecer habían siertas cosas que su amigo no le contaba. No tenía porque enojarse, él era libre de su vida, pero ella siempre le contaba todo y era raro enterarse que él no.

El llamado de una voz, la sacó de sus pensamientos, haciendo que volviera al presente y realidad. Era Harry, que la había llamado dos veces seguidas y no lo había escuchado. Aveces se iba por las ramas, hasta llegar a no escuchar el afuera.

- Si, ¿qué pasa?, los siento, me perdí -dijo avergonzada.

-Te estaba presentando a Charles, mí amigo -Harry señaló al castaño y este le sonrió amablemente - él es el chico que te dije que se había casado con un español, ¿Recuerdas, Mione?

Frunció el ceño, sin saber de que le hablaba, no recordaba que le haya dicho sobre su amigo Charles. De seguro se lo había dicho un día en el que había estado repleta de trabajo, a veces Harry le contaba cosas que no eran sobre trabajo y ella solo asentía, pero sin entender o saber ni una palabra de lo que le había dicho. Pero no era su culpa, Harry le contaba sus cosas cuando ella estaba haciendo cosas importantes, en vez de contárselo cuando iban a cenar o se quedaba a dormir en la casa de ella.

-No lo recuerdas, ¿verdad?

Negó con la cabeza una vez más avergonzada.

-Bueno, como no escuchaste en el momento en te lo conté - ella lo miró graciosa - te lo contaré de nuevo; Él es Charles, antes era jugador de Quidditch, pero después con los estudios dejó, y en esos estudios conoció a Carlos, con quien ahora está casado. Ambos están viviendo en Mónaco, que es la ciudad natal de Charles.

Ella asintió ahora entendiendo todo, Harry había asistido a muchos partidos de quidditch y también había hecho muchos estudios, así que era posible que en uno de ellos haya conocido a Charles. Pero eso no le generó tanta duda, sino fue que; si estaba casado y viviendo con su esposo en Mónaco, ¿Por qué estaba en Londres trabajando en un bar? .

- ¿Y por qué estás aquí si vives en Mónaco? -preguntó directa.

Harry la miró ante tal pregunta rápida y sin filtro.

- Ah, solo estoy aquí por mi hermano, Es el dueño del bar, y uno de sus empleados se fue de luna de miel, así que aproveche y tomé su lugar, para también pasar un poco más de tiempo con mi pequeño hermano - contó sin problemas.

-¿ Y tu esposo?

- ¡Hermione!

Harry la retó, ya que había sonado bastante mal esa pregunta.

- Él está visitando a su prima que vive aquí, en Londres -Dijo ahora rojo de la vergüenza por tal pregunta incómoda.

-No quería sonar así de mal, solo era una duda, no lo vayas a tomar mal, por favor.

-No no, tranquila, si me hubiera incomodado tu pregunta te lo hubiera dicho.

-Si, en eso Charlie no tiene pelos en la lengua.

Los tres rieron al unísono ante el comentario por parte de Harry. Después de terminar de reírse y bromear un rato más, Harry y ella pidieron dos copas de vino tinto. Charles les trajo uno de los mejores vinos de la reserva, uno de los que no se les daba a cualquiera, solo a invitados de honor. Charles les sirvió un poco del vino en cada una de sus copas y les sonrió, esperando a su degustación.

La luz de las velas titilaba suavemente, reflejando destellos dorados en el líquido rubí que reposaba en las copas. Charles, con una sonrisa de satisfacción, observaba cómo sus amigos disfrutaban del vino que había seleccionado con tanto cuidado.

-¿Qué les parece? - preguntó con un tono que denotaba su curiosidad y un leve orgullo.

Harry fue el primero en responder, su voz teñida de asombro:

-Es extraordinario, nunca había probado algo así.

Hermione asintió con entusiasmo.

-Es como si cada sorbo contara una historia diferente, una mezcla de sabores que danza en la lengua.

Charles se reclinó en su silla, complacido por la reacción de ambos.

-Es un vino especial, de una pequeña viña en la Toscana, donde el sol besa las uvas justo antes de la cosecha- explicó.

La conversación fluyó tan naturalmente como el vino en sus copas, cada anécdota compartida era un hilo más en el tapiz de su amistad. Hablaron de aventuras pasadas, de sueños futuros, y de las pequeñas cosas que encontraban mágicas en su día a día.

La noche avanzaba, pero el tiempo parecía detenerse en aquel pequeño rincón del mundo. Entre risas y confidencias, el vino seguía fluyendo, y con él, la promesa de recuerdos que perdurarían mucho después de que la última gota fuera saboreada. Y así, en la calidez de la compañía y la riqueza del momento, Harry y Hermione se dieron cuenta de que no era solo el vino lo que hacía esa noche especial, sino las personas con las que lo compartían y el lugar que ocuparían esos instantes en sus memorias.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro