—Habiamos prometido no decirte nada de esto por tu propio bien, sabíamos que algo malo pasaría si esto llegaba a oídos tuyos o de padre, pero ahora con la gravedad de la situación... Tal vez sea lo más prudente hacerlo -Mina explicó tranquilamente, llenando de paz y amor todo el departamento, T/n, que encabezaba el grupo desde su propio sofá miró a un punto indeterminado mientras la rubia hablaba- Desde que fuiste desterrada del infierno, Satanás murió por la gravedad de las heridas que padre le había provocado, fu después de que tú te habías marchado que ella dió su último respiro.

T/n apretó sus puños con rabia, recordando perfectamente aquel día. —Pero las cosas no acabaron ahí -agregó Mina, T/n alzó la mirada- El alma de Satanás, al ser un demonio, quedó atrapada en el limbo por un tiempo hasta ayer Jihyo, desobedeciendo la orden de padre envío el alma de Satanás hacia otro lado, lejos de las garras de Dios.

—¿Su alma reencarnó, no?

Suspiros ahogados y exclamaciones de sorpresa fueron las respuestas más escuchadas. T/n cerró sus ojos unos segundos.

—Si... -respondió Mina, alargando el tono de su voz- Satanás reencarnó en Kim Dahyun.

Flashback

—¿Que haremos entonces? Es la primera vez que un demonio de clase alta muere Mina, esto nunca había pasado y jamás debió de pasar.

Jihyo suspiró agarrando su cabeza entre sus manos, apretando un poco en señal de desesperación. Mina también exhaló un suspiro.

—¿Y Remiel? -preguntó la Arcángel rubia, llamando la atención de la mayor- Ella podría hacer algo...

—¿Momo? -Mina asintió- ¿Estas proponiendo indirectamente que hagamos reencarnar el alma de Satanás en un cuerpo humano? -Mina nuevamente asintió, Jihyo cerró sus ojos y suspiró- Es una buena idea, pero Mina, ¿Sabes lo peligroso que podría ser reencarnar el alma de un demonio tan poderoso como Satanás en un cuerpo humano? ¿O las consecuencias que esto traería?

Mina asintió. —Pero sé que Satanás era un alma pura -esta contestó- Fue ella quien encabezó la marcha cuando exiliaron a T/n del cielo, fue ella quién se mantuvo firme a su lado pese a tener a todos en su contra -Mina agachó la mirada- Y fue ella quién murió protegiendo a quién más amaba...

Jihyo desvió la mirada hacia otro lado, a su mente llegaron los gemidos de dolor y lamento que su hermana menor musitaba ante la perdida de la demonio.

T/n estaba sufriendo. Tanto así que su dolor podía ser escuchado incluso en el propio cielo.

—Confiaré en ti, Mina -aseguró Jihyo, Mina sonrió levemente- Un demonio tan poderoso como lo fue Satanás necesitará un portador que pueda soportar tales magnitudes de poder, también necesitará alguien de corazón puro y noble para evitar que descienda hacia el caos... El poder que tendría sería equiparable al mío, o al de T/n o al de nuestro padre incluso -Luego, la Arcángel mayor se puso de pie, viendo desde la ventana de su habitación hacia la tierra- Dile a Roseanne que venga con Momo, también dile a Tzuyu que este aquí.

Mina se puso de pie para seguir el pedido de su hermana. —¿Y Jimin? -Jihyo se giró hacia Mina ante la mención del arcángel- ¿Le dirás también?

—No -respondió Jihyo- Esto será un secreto nuestro.

T/n suspiró fuertemente cuando Mina terminó de contar aquel recuerdo. El mundo de la azabache había dejado de ser normal -y tranquilo- cuando Rosé apareció días antes en su universidad.

—Por eso conociste a Dahyun, por eso es que tú cuerpo y tu alma pedían a gritos estar cerca de ella, por eso es que nuevamente has comenzado a tener aquel sentimiento en tu corazón -agregó Mina- Es tu alma gemela, la otra mitad de tu corazón que te llama a gritos para estar contigo.

—Entiendo -respondió T/n, luego, miró a Jihyo- ¿Por qué no me lo habían dicho antes?

—¿Me hubieses creído? -T/n negó ante la pregunta de Jihyo, quién sonrió levemente por la sinceridad de la menor- No te lo dijimos por qué sabíamos que eres muy impulsiva, ¿Realmente habrías guardado la calma ante esto? ¿Hubieras esperando pacientemente los doscientos años que tardó en reencarnar su alma?

T/n nuevamente negó.

—Habrías enloquecido -agregó Tzuyu desde el otro lado de la habitación- Nunca llegué a pensar que llegaríamos a esta etapa, pero las cosas suceden por algo -esta dijo- Si decidimos contar esto justo ahora es por padre y Jimin se han enterado de la existencia de Dahyun, y créeme T/n, esto no significa nada bueno, por eso fue que aquel camión trató de arrollarlas la noche anterior.

Las arcángeles estuvieron de acuerdo con la morena.

—¿Entonces me están diciendo que Satanás aún vive? -preguntó Nayeon desde el lado izquierdo de T/n, Mina y las demás asintieron- Eso significa que se puede hacer el ritual y el hechizo para anular el sello del Pentecostés, ¿No? -esta dijo felíz- Dahyun es como el contenedor del alma de Satanás, lo que significa en obvias razones que también tiene todo su poder.

—Básicamente si.

De repente, la alegría había regresado el departamento. Esto duró hasta que Jihyo se aclaró la garganta.

—Lastimosamente en este mundo no existe tal magia -esta dijo, prácticamente dañando la atmósfera del ambiente- Y si liberamos su poder de la manera convencional estaríamos creando un segundo BigBang -luego miró a la azabache- No podemos hacer mucho en realidad.

—Todos vamos a morir.

Particularmente el comentario de Sana generó cierto caos en el departamento, alterando a algunas arcángeles y a todas las demonios que estaban allí, a excepción de Jihyo, Tzuyu y T/n, quienes veían la escena con una mirada de reproché a la demonio pelinaranja. Jihyo especialmente era la que tenía la mirada más filosa.

—Si ese es el problema yo conozco a alguien que es capaz de hacer cualquier tipo de magia -respondió T/n cuando todo ya estuvo más calmado- No es de este mundo, pero es una de las personas más poderosas de todo el multiverso.

—¿Y que necesitas?

T/n sonrió ladinamente.

—Las necesito a todas ustedes.

Dahyun miraba con desconcierto hacia la pantalla de su computadora. Desde que había llegado a casa la noche anterior -aunque está no recordaba haberlo hecho- está tenía recurrentes lagunas mentales sobre lo ocurrido horas antes.
¿Fue imaginación suya o T/n realmente tenía un par de hermosas alas blancas?

¿La conversación que escuchó realmente pasó o fue un producto de su imaginación debido a su estado de embriaguez?

Muchas preguntas, pocas respuestas. En ese momento la mirada de la pálida recayó en la pequeña Lia que dormía a tan solo unos pocos metros de distancia. La pequeña niña había mejorado exponencialmente desde la llegada de  T/n al hospital; su cabello, su peso, su color de piel y en si todo de ella estaba regresando a la normalidad, justo como antes de sufrir aquella enfermedad.

¿Todo aquello estaba relacionado siquiera?

Dahyun podría estar exagerando las cosas, puede que todo aquello solo sea una rara y simple coincidencia, y que su gran imaginación estaba divagando en cosas imposibles.

Está debía de dejar de ver películas de ficción.

Dahyun espabiló cuando un mensaje -el cual decía que era solicitada en otro lado del hospital- la sacó de su ensoñación. Está rápidamente arregló todo para dejar una enfermera al cuidado y pendiente de su niña. Cuando ya todo estuvo listo está salió silenciosamente de la habitación, abriendo la puerta con suavidad para no hacer ruido.

—Hola, Dahyun-nah.

La palida se congeló en su sitio cuando escucho aquella voz nuevamente. Está cerró finalmente la puerta y se giró para encarar a la otra persona que estaba allí, viendo su rostro después de mucho tiempo.

—¿Que estás haciendo aquí?