❛❛Por él❞

Su mirada fija en la salida, pensando que perdió la oportunidad de matar a esa miseria.

El más desconcertado era él a decir verdad. Joder, era realmente inexplicable cómo podía dejarse hacer por un maldito niño.

¿Qué le importaba a él los traumas que pudiera tener? ¿Qué le importaba si su 'mami' lloraba? ¡Absolutamente nada!

Pero dejó al hombre salirse con la suya y, aún peor, todo había ocurrido por tratar de defender a ese chiquillo.

¿Por qué el castaño le pidió que parara?

Como siempre lo dijo, era especial, casi... Exótico, y ahora lo entendía aún menos.

Suspiró profundamente, haber ayudado a ese mortal tenía un precio y consecuencias, él no debía estar ahí para cuando comenzaran, de hecho, se le agotaba el tiempo.

Era una mierda, pero lo hecho, hecho está, y ahora por lo menos debía terminar lo que comenzó.

Más sereno que minutos atrás, se dió vuelta encontrándose con el pequeño parado justo detrás de él.

Intentó sonreírle con ternura, pero rápidamente borró la expresión que apenas se formaba pensando que no sería buena idea mostrar ningún gesto para no asustarlo con sus grandes colmillos. Sin embargo, ni si quiera el mismo mounstro notó como sus ojos brillaron al mirarlo, tan diferente a cualquier otra cosa que hubiese visto jamás.

¡Bup bup! ¡bup bup!

¿Qué era eso?

Restándole importancia, tomó al castañito entre sus brazos, cargándolo de forma nupcial. Hizo las sábanas a un lado y lo acostó tiernamente en la cama para después arroparlo.

—He visto muchos monstruos, señor monstruo... Y debo admitir ¡das miedo! —. Le dijo y, a pesar de sus palabras, estaba seguro que lo escuchó soltar pequeñas y dulces carcajadas.

Jeon también rió bajito para sus adentros, de alguna manera, eso le había aliviado un poco.

—Bien, es un honor escuchar eso de tan valiente jovencito.

El castaño sonrió orgulloso de sí mismo, acomodándose mejor en la mullida cama, recibir un halago de su mejor amigo monstruo le había hecho sentir muy bien, más todo el ajetreo anterior agotó sus energías y el ser a su lado se dió cuenta de ello.

—Duerme bien, querido. Volveré otra noche.

El chico asintió, casi vencido por el sueño.
Una vez JungKook supo que se quedó dormido, salió de la habitación lo más rápido que pudo.

Tenía tantas cosas por hacer y tan poco tiempo.

“Todo sea por el niño” Se repitió sin cesar durante la noche.

Pensé que lo publicaría el viernes, pero mejor tarde que nunca.

Este ha sido el final del cómic como tal. Tengo pensado escribir dos extras, pero no están basados en el cómic.

No sé si me explico bien :( les diré más a fondo en qué consiste más adelante ♡

¡Gracias por leer y esperen el próximo capítulo ❤️✨!