La salida al cine fue muy divertida desde el punto de vista de Yunho. Él no sabía de los problemas que pasaban por la mente de Yeosang ni de como se sentía Wooyoung.

El simple hecho de pasar tiempo con Mingi lo hacía feliz, así que para no desaprovechar el permiso iba a ir a casa del menor para jugar videojuegos, ver películas y comer dulces hasta vomitar.

En ese momento estaban sentados en el borde de la cama de Mingi, mientras jugaban Mortal Kombat. Uno al lado del otro con algunas decenas de centímetros separándolos. Pero, mientras más competitivos se volvían se acercaban más.

Era como una ley de atracción entre ambos y la realidad era que no podían estar mucho tiempo separados. Desde que se conocieron habían sido como uña y carne, su química era espectacular, en todos los sentidos, destacando ambos en el baile y la creación de coreografías. Podían hablar horas y horas sobre cualquier tontería. Donde iba Yunho iba Mingi y viceversa.

Por eso, que empiecen a sentir algo por el otro fue inevitable. El estar uno junto a otro se había hecho tan fundamental que cuando no estaba uno se sentían vacíos, como si les faltara su otra mitad.

Yunho daba muchas indirectas que todos captaban menos Mingi. Mingi era especial y Yunho lo sabía, era muy inteligente pero a la vez algo lento al entender las cosas. Aún así para él era perfecto, aceptaba todos sus defectos y sus virtudes.

Después de una docena de partidas ambos estaban algo cansados de ver el televisor. Yunho apoyaba su cabeza en el hombro de Mingi y Mingi apoyaba su cabeza sobre la de Yunho.

Yunho había ganado por décima vez consecutiva. Se volteó levemente hacia Mingi y le sacó la lengua, no había notado lo cerca que estaban hasta ese momento. Entre él y Mingi apenas habían dos centímetros de diferencia. Su lengua casi tocó el labio inferior de Mingi por lo que rápidamente la devolvió a su sitio.

Ninguno de los dos dijo nada, solamente se miraban fijamente el uno al otro, aunque por momentos bajaban a los labios del otro. Las mejillas de ambos estaban completamente rojas y calientes, se notaba más en la piel blanca de Yunho y a Mingi le parecía muy tierno.

Luego de algunos segundos que habían parecido horas para ambos se empezaron a acercar muy lentamente. Despacio cerraron sus ojitos y luego sintieron por fin los labios del otro. Un muy pequeño contacto de apenas unos segundos. Se separaron casi al instante con sus corazones latiendo fuertemente en sus pechos.

-Mingimegustasmucho.- Soltó rápidamente Yunho, cerrando fuertemente sus ojos y apretando sus manos (diría manitas pero no tienen nada de chiquitas-) en un puño, esperaba cualquier cosa. Si Mingi correspondía sus sentimientos estaba bien y si no lo hacía también, lo único que estaría mal era que se aleje de él.

Mingi tardó algunos minutos en entender el trabalenguas que había dicho Yunho. Al comienzo solamente había entendido su nombre y "cho" al final. No podía decirle que lo repitiera porque parecía estar muy nervioso y avergonzado. Cuando por fin entendió su corazón dio un salto de felicidad y se tiró encima de Yunho, abrazandolo fuertemente.

-TutambiénmegustasmuchoYunho.-Respondió también atropellando sus palabras, pero no porque estuviera nervioso, era simplemente para decirlo como lo había dicho Yunho. Cosas que pasan por la mente de Mingi, si.

Yunho demoró apenas un minuto en procesar todo y le devolvió el abrazo al menor. Sentia que al fin podía respirar tranquilo. Porque el silencio que le había dado Mingi por tanto tiempo lo había puesto muy nervioso, tanto que contenía su respiración por mucho tiempo, respiraba de nuevo y volvía a contener el aire.

-Entonces... ¿Quieres estar conmigo?-Preguntó Yunho que se había separado un poco de Mingi para verlo a los ojos. Así también pudo notar el brillo de los ojitos de Mingi más de cerca. Que envidia me das Yunho.-Pero estoy contigo, Yunho.-Respondió el menor confundido y entonces el de cabellos ya negros soltó una risa nerviosa.-O sea, estar pues, estar juntos... ser pareja.-Decirlo en voz alta lo había hecho sentir tímido de repente. Mingi soltó un "Ahhh" de entendimiento y empezó a asentir rápidamente con la cabeza, parecía un niño emocionado y eso a Yunho lo hacía sentir feliz, muy feliz.

Mingi apretó fuerte a Yunho.-Si quiero.- Luego le dio un pequeño piquito y se acurrucó sobre él, moviendo lentamente su cabeza como si fuera un gatito.

💫

Se que es muy tarde (al menos en mi país lo es. Son las tres de la mañana sjsjs) pero sentí que debía subir este especial ya, porque se supone que es el especial de las 500 estrellitas y ya son más de 600.

Estuve dudando mucho sobre que escribir aquí, tuve un pequeño bloqueo con el Yungi porque no suelo leer muchas historias Yungi, osea, que se traten principalmente del Yungi. (Pueden recomendarme algunas ajsjs)

Y pues no sabía que escribir, al final me basé en una pequeña anécdota personal (que no terminó igual ajsjs) y pues, salió esto, espero que les guste.✨

24.05.21