Los Potter solo podían sentir la  felicidad por su nueva vida. Consiguieron nuevos amigos, una gran y hermosa familia, y algún que otro sentimiento por otra persona.

Harry dormía plácidamente. Pero su hermana no podía tener ese lujo. En su cabeza rondaba ese niño de pelo rubio y ojos grises. "¿Por qué pienso en el?" Se preguntaba la azabache.

Agarró el pequeño collar que le había regalado el niño, y sonrió inconscientemente.

— ¿___? ¿Estás bien?— preguntó un  Harry adormilado y miró a su hermana.

— Si, no te preocupes— le respondió la ojos avellana sin importancia mientras escondía el collar dentro de su blusa.

— ¿En qué pensabas?— cuestionó el azabache.

— Solo..... En todo esto. Howarts, la magia, todo. Sigo sin creer que podemos hacer magia. Es solo wow— contestó ____ mirando el techo mientras sonreía.

— Pienso lo mismo. Pero, estoy feliz que nos sucediera esto— Harry se levantó y se acostó junto a su hermana e imitó su acción— Lo bueno es que estamos juntos— prosiguió el azabache y miró a su hermana.

____ sacó su vista del techo, y le sonrió a su gemelo.

— Es verdad, estamos juntos— hizo una breve pausa— Y.... ¿Recuerdas esa vez que nos reíamos de Ron, y salió jugo de calabaza por tu nariz?— preguntó la ojos avellana divertida.

— Oh ¡___! ¡Superalo!— contestó Harry frustrado. Miró a su hermana y los dos estallaron en carcajadas.

Una nueva amenaza se dirigía a Howarts, pero los gemelos no lo sabían.

Los dos recordaban su promesa, si el mal intentaba atacar a sus seres queridos, ellos los defenderían.

Juntos sin importar que.

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¡Bienvenidos al prólogo de la siguiente temporada!

Quiero agradecer profundamente a todos aquellos que le dieron una oportunidad a mí historia. ¡En serio muchas gracias! Con gusto seguiré la historia. Espero que la disfruten. Kisses.

'°•* Travesura realizada o alguien podría leerlo *•°'.