
II. Capítulo 13. Final
Dejar el hogar no es fácil
El día siguiente había transcurrido con completa normalidad, aunque no suene real. La cena estaba servida en las mesas de las casas y los estudiantes comían pacíficamente.
-¡Bienvenido sir Nicolas!-saludó _____, al fantasma.
-Gracias-sonrío el mismo.
El espectro continuo saludando a alumnos hasta llegar a la salida donde se detuvo al observar una pequeña preparándose para entrar.
-¡Hermione! ¡Bienvenida!-pronunció Nicolas frente a ella.
-¡Gracias Sir Nicolas!-agradeció la castaña.
El ultimo asintió y salió del lugar mientras Herms volvía su vista a la mesa de Gryffindor, dudando si acercarse o no. Antes de que tomara una decisión, Neville notó su presencia y sonrientemente miro a los gemelos.
-¡Harry, _____! ¡Es Hermione!-les indicó mirando a Granger.
Los Potter dirigieron su vista a donde su amigo observaba. Y tenía razón, la castaña estaba parada observándolos y cuando se dio cuenta que la estaban contemplando sonrió. Harry, Ron y _____ imitaron el gesto con gran entusiasmo, mientras Hermione corría a su encuentro.
Los tres se pararon emocionados con los brazos abiertos. La castaña llegó frente a los gemelos y los envolvió en un fuerte abrazo, del cual aceptaron gustosos sin dejar de sonreír. Al separarse, la pequeña estaba por abrazar a Ron y el haría lo mismo. Los dos se detuvieron incómodos al notar lo que estaban por hacer. El pelirrojo sonó su garganta algo nervioso, para luego tender su mano que fue estrechada por la castaña.
-Bueno...bienvenida Hermione-dijo el Weasley sonriéndole.
-¡Estoy de vuelta!-exclamó entusiasmada-¡Felicidades, pudieron resolver esto!-los felicitó.
-Bueno, tu ayudaste también-anunció la azabache y los muchachos asintieron.
-Sin ti era imposible-imitó su gemelo.
-Gracias...-asintió Hermione con un ligero rubor.
Un ruido los sacó de su burbuja de amistad, Minerva había golpeado ligeramente su tenedor contra su copa de metal para llamar la atención de todos.
-¡Presten atención por favor!-llamó la maestra y los cuatro tomaron sus asientos. El director se enderezó de su asiento.
-Antes de comenzar el festín, démosle un fuerte aplauso a la profesora Sprout y a Madame Pomfreycuya pócima de mandrágora fue tan exitosamente administrada a todos los que estaban petrificados-divulgó el profesor.
Unos fuertes aplausos y alaridos se escucharon felicitándolas, la profesora y la enfermera agradecían sonrientes.
-Y dados los recientes acontecimientos, y como regalo...¡Todos los exámenes serán cancelados!-anunció el maestro.
Todos aplaudieron y festejaron entusiasmados, a excepción claro, de Hermione y _____ que soltaron un pequeño "Oh, no" algo decepcionadas. El alboroto se detuvo al escucharse la puerta del gran comedor siendo abierta. Un hombre super alto, con cabellera y barba largas por igual, ingresó a la habitación.
-Siento la demora-se disculpó el individuo. El rostro de los hermanos resplandecieron de felicidad al notar de quien se trataba-La lechuza que enviaron con mi liberación ¡No llego! se perdió. Una atolondrada ave llamada Errol-informó caminando entre las mesas de Gryffindor y Hufflepuf.
Ron bajo la cabeza apenado y luego miró al director con una mueca, este asintió indicándole que no se preocupara. El gigante cesó su andar junto al reencontrado cuarteto de oro, y estos lo observaron sonrientes.
-Solo quiero decirles...que de no ser por ustedes ______, Harry, Ron y...Hermione claro, yo seguiría...ustedes saben donde. Así que solo les diré, gracias-gratificó el gigante al borde de las lágrimas.
Los cuatro se sonrieron, para que luego los Potter se levantaran frente a Hagrid sin dejar de sonreírle.
-Howarts no es lo mismo sin ti-admitieron a la vez.
El gigante suspiro halagado, y sin que lo notara los azabaches ya se encontraban rodeándolo con sus pequeños brazos demostrando un gran afecto hacia el. Rubeus acarició sus cabezas encantado. Miró brevemente la sonrisa que le entregaban Ron y Hermione, pero la ultima acompañaba el gesto con algunas lágrimas en sus ojos.
Un solo aplauso se escuchó, transformándose en dos, luego en tres, y finalmente toda la sala se inundó de ovaciones y de alumnos levantándose para observar al gigante. Seguidamente los gemelos se unieron chocando sus palmas emocionados. Un Slytherin intentó levantarse de su asiento para seguir a sus compañeros, pero fue detenido por el pequeño rubio que le lanzó una mirada amenazadora. El pequeño volvió a su lugar aterrado.
El platinado observó aquellos ojos avellana que llamaban su atención, estos brillaban por la emoción que sentía en esos momentos. Una sonrisa escapó de sus labios al verla, de alguna forma le alegraba verla así.
-Draqui ¿Estás bien?-le preguntó preocupada Pansy, o como el la llamaba "la abrumadora, Parkinson".
-No molestes Parkinson-se quejó Malfoy, alejando su vista de la Gryffindor.
La sangre de la pelinegra hirvió de la ira al notar a quién estaba contemplando el ojigrís, para que luego se alejara evitando explotar de celos.
Los ojos de Hagrid soltaron al fin las lágrimas que había estado reteniendo, mientras todos seguían adulándolo.
-Ya empecé a llorar-se apenó el gigante.
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El día que nadie esperaba con ansias había llegado, todos debían volver a sus hogares. Todos tenían sus pertenencias empacadas y listas para el regreso. Los gemelos caminaban algo tristes por los pasillos con dirección a la salida del enorme castillo.
-Otro año más que pasó volando-suspiró ______.
-¿Enserio "volando"? _____ luchamos con una serpiente gigante, estuve al borde de la muerte, casi nos expulsan, Hermione fue petrificada ¿Quieres que siga?-dijo Harry el sarcástico.
-Oh, y también te quebraste el brazo y yo la pierna-respondió su gemela del mismo modo.
El ojiazul negó riendo al igual que ella. De pronto algo vino a la mente de la pequeñas ¿Cómo podría haberlo olvidado?
-¡Rayos!-exclamó frustrada-Harry olvide algo en mi habitación, iré por el no tardo-le informó tomando su maleta.
-Está bien, te espero en la estación-
Apenas recibió respuesta, la ojos avellana inició su corrida hacia la casa de Gryffindor. Al llegar subió rápidamente las escaleras e ingresó a su alcoba. Arriba en la mesa junto a su cama yacía una foto de una pelirroja y un azabache, los dos reían por algo que había dicho el mismo. _____ contemplo la imagen conmovida por lo lindos que se veían su hermano y su, ahora, mejor amiga.
Salió de aquel transe al recordar que el ojiazul la esperaba para subir al tren. Guardó la fotografía en su túnica, y comenzó su trayecto hacía la estación. Estaba pasando por un largo pasillo, cuando una mano se estrecho en su brazo. La azabache volteó su vista asustada, pero esta cambió a una mueca al notar de quién se trataba.
-¿Acaso estás sola Potter?-
-Suéltame Higgs-le ordenó seriamente.
-Veo que si ¿Por qué no vas conmigo?-susurró tomándola de la cintura.
-Dijo que la soltaras-exclamó con furia una voz cerca de ellos.
Los dos volvieron su vistas a su al rededor, estas se detuvieron en una cabellera rubia junto a ellos.
-Piérdete Malfoy-pronunció Terence.
-No hasta que la sueltes-respondió Draco, pero el mayor no se movió ni un centímetro-Si así lo haremos...-
-¿Hacer q...?-
Higgs fue interrumpido por el inesperado puñetazo que el pequeño le propinó en su mejilla, obligándolo a separarse de la azabache.
-¡Estás muerto mocoso!-gritó Terence abalanzándose sobre el platinado
Malfoy terminó recostado en el piso con Higgs encima de el. El mayor estaba a punto de golpearlo cuando de repente cayó inconsciente junto al pequeño. Draco se enderezó confundido, para luego observar a la azabache apuntando con su varita al herido.
-Hechizo no verbal-respondió antes que preguntara-Por cierto, gracias-
-No es nada, y gracias también por...-señaló a Terence-eso..-
-No hay de que...creo que sería una buena idea irnos antes de que despierte-soltó ______
-Tienes razón, vámonos-asintió Draco entrelazando su mano con la de la azabache.
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Al llegar a la parada del tren cada quién se dirigió con sus respectivas casas. La Potter divisó a su hermano y amigos junto a los gemelos Weasley.
-¡Chicos por aquí!-gritó la ojos avellana llamando su atención.
-Hola _____-saludaron los cinco a la vez.
-_____ tenemos que hablar-pidió Fred tomándola de los hombros.
-Solo era una broma, no tienes que evitarnos por dos meses. Ya aprendimos nuestra lección-imitó George acercándose.
-Está bien...-asintió la azabache-¡Pero si vuelven a...!-
-Si volvemos a molestarlos, nos golpearás-respondió uno de los colorados.
-Lo sabemos-finalizó su copia.
-¿Y por que no se disculpan conmigo?-preguntó Harry ofendido.
-Por que no te tienen miedo Harry-contestó Ron. El ojiazul abrió su boca dispuesto a hablar pero su hermana lo interrumpió.
-No lo intentes, eres muy tierno para eso-
-¡No soy tierno!-exclamó el azabache furioso.
-Si lo eres-respondieron los cinco restantes, para luego subir al tren.
El Potter rodó los ojos molestó, y siguió a los demás.
Una vez que ya estaban juntos se dispusieron a encaminarse hasta los vagones. Fred y George se despidieron para luego separarse de ellos, mientras los menores seguían con su trayecto.
-Por cierto _____ ¿Cómo es que sabías cosas sobre Lockhart? ¿No lo odiabas?-indagó su hermano extrañado.
-Harry, porque lo odie no significa que no pueda haber leído sus libros-respondió la castaña.
—Y, ahí está tu respuesta—siguió la azabache abrazando a su amiga.
Uno de los cubículos llamó la atención de los gemelos, un pequeño rubio con su cámara estaba sentado cabizbajo. Se lo pensaron unos instantes, y luego abrieron la puerta del compartimiento.
-Oye Colin-lo llamó el ojiazul, y el pequeño levantó su cabeza.
-¿La propuesta de tomarnos una foto, sigue en pie?-preguntó ____ sonriendo.
El pequeño sonrió ampliamente y se paró en un solo movimiento.
-¡Claro que si! Oye Neville ¿Podrías tomarnos una foto?-le pidió el rubio al muchacho junto a su vagón.
-Claro-respondió amigablemente tomando la cámara de Colin.
Los tres se posicionaron juntos abrazándose.
-¡Digan queso!-comentó el menor.
-¡Queso!-exclamaron los tres juntos.
El flash indicó que la foto había sido tomada. Colin se separó de los Potter y le arrebató entusiasmado su artefacto de las manos del Longbotton.
-¡Gracias chicos! Les enviaré una copia en las vacaciones-les indicó-¡Tengo una foto con Harry y _____ Potter!-gritó el pequeño emocionado corriendo por el pasillo.
Los tres negaron riendo, para que luego se despidieran de Neville y siguieran su camino para ir con sus amigos. Al llegar al compartimiento donde los esperaban Ron y Hermione, la azabache giró su rostro con dirección a la entrada de "el cubículo de los Slytherin". Así lo llamaban todo el mundo puesto a que solo eran alumnos de Slytherin los que residían ahí.
Sus ojos conectaron con otros que ella conocía muy bien. Los dos sonrieron con un leve rubor en sus pómulos.
-_____...¿Vas a entrar?-la volvió a la realidad, su amigo colorado.
-Oh, claro-respondió apenada.
Volvió su vista al platinado y lo saludó disimuladamente con la mano, Draco imitó su gesto. Luego de la respuesta, _____ ingresó al cubículo con una enorme sonrisa.
-Hermione dime las diferencias entre mi cabello y las mejillas de _____-bromeó Ron.
-Creo que ninguna Ron-
-Ay cállense-respondió la gemela ofendida.
El enojo no duro mucho, y todos estallaron en carcajadas. Sin dudas ese año había sido muy agitado. Acosadores, nuevas amistades, el secreto de Riddle, más amor, pero sobre todo...el gran lazo que había crecido entre los cuatro, el cual no se rompería con nada...
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*toma aire* POR MERLÍN, NO ME CREO QUE YA ES EL CAPÍTULO FINAL ¡Gracias, enserio, muchas gracias por todo! :''''') No saben lo agradecida que estoy con ustedes por todo el apoyo que está recibiendo la historia (se que soy muy densa con el tema pero es cierto UnU). Por ahora no podré subir la siguiente temporada ¡Lo haré! Pero no por ahora por toda la tarea que debo hacer :(.
ᴛᴇᴍᴘᴏʀᴀᴅᴀ ғɪɴᴀʟɪᴢᴀᴅᴀ
Espero que les haya gustado. Los amo 💕 ¡No olviden votar! Kisses <3
°•*' Travesura realizada o alguien podría leerlo '*•°.
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