Suelto un suspiro al estar parada en la entrada de la escuela.

¿Me recuerdan otra vez por qué estoy aquí?

Oh, ya recuerdo, para estudiar y tener mi trabajo y mi futuro.

Yixing me llevó a mi casa esta mañna después de dormirme en sus brazos. Me siento felíz que mi abuelo haya aprobado lo de nosotros. No pensaba que él lo iba aceptar e iba cortar toda conexión que tenemos ahora mismo. Al parecer conoce a Yixing demasiado.

De lo que no me siento tan felíz es que esta mañana Yixing estaba más frío conmigo que nunca. Si nos comunicamos diez palabras fue mucho. Supongo que tuvo un problema en su empresa.

Salgo de mis pensamientos y camino hasta el interior del edificio.

Enseguida que coloqué mi pie en el interior de ese lugar, las miradas empezaron a dirigirse en mi dirección.

Vaya, no me sorprende que ya se entraron de lo que sucedió. Decidí ignorar los murmullos y los susurros mientras caminaba a mi casillero.

Saqué mis libros y coloqué mi mochila para cerrarlo. Pero justo cuando cierro mi casillero, una mano aparece en el casillero de al lado. Suelto un suspiro y cierro los ojos por varios segundos.

Debe de haber otra razón para que yo haya nacido que no sea de estar a un segundo de matar a Jongin.

— ¿Qué quieres Jongin? — Me volteo para encontrarme con su figura tapando la mia casi completamente.

El chico es alto y yo soy la alcaldesa de la pitufialdea, no me culpen.

Está molesto y su respiración está más rápida. — ¿Sucede algo? — Le pregunto en un tono aburrido.

— ¿Es cierto que el nuevo maestro trató de propasarse contigo? — Trato de no soltar las lágrimas y que los recuerdos no me afecten mucho. Necesito calmarme y recolectarme. Trago saliva y sin dejar de mirar sus pupilas marrones le contesto;

— Sí. Es cierto. — Mi corazón dio un vuelco del susto cuando la mano que él tenía en el casillero de al lado la cerró en un puño y le dio al metal. Miro sus ojos alarmada.

— ¡¿Qué diablos te pasa Jongin?! ¡¿Por qué hiciste eso?! — Sujeto su mano y veo que tiene sangre en sus nudillos. ¡¿Está loco?!

— Mira como tienes esos nudillos. Ve a la enfermería. — Conecto con sus ojos y veo que me están observando intensamente. ¿Por qué me mira así? ¿Tengo algo en el rostro?

— ¿Qué sucede, por qué me miras así?— Suelta su mano de mi agarre bruscamente y se acerca más acorralandome completamente en los casilleros. 

— No iré a la enfermería.

Mi enojo empieza aparecer en todo mi cuerpo. Ya entiendo lo que hace. Lo empujo haciendo que me mire sorprendido. — Pues no vayas y deja que se infecte. Lo hice por cortesía pero veo que no sabes de eso.

Me voy dejándolo en mis casilleros. ¿Qué se cree él? ¿Que le voy a rogar como una de sus compañeras de sexo? Está muy equivocado.

Yo no le ruego a nadie....

Bueno sí, pero fue por que él no quería. ¿Quién no se tira una foto con la torre de París? Y más la vista que tenía esa habitación.

Suena el timbre y voy a la sala de clases. Enseguida que entré, empezaron los murmullos.

Suelto un pequeño suspiro y me voy a mi asiento. Necesito calmarme antes de cometer un homicidio aquí.

Mi móvil vibra indicando que me llegó un mensaje y lo desbloqueo.

Te estaré esperando en mi apartamento.

Y así es como todo mi enojo se va en cuestión de dos segundos señoras y señores.

Está bien. ❤

Apago mi móvil cuando veo el maestro entrar por la puerta.

— Siento la demora chicos.

Deberían de mandarle un aviso a los padres de los maestros cuando lleguen tarde como hacen con los estudiantes.

Pero no. Este mundo tiene preferencias.

— Bien chicos, empecemos la clase.

•••

Estaba caminando por el patio de la escuela. Es mediodía y ya terminé de almorzar pero quedan veinte minutos para que empiece el próximo periodo.

Suelto un pequeño suspiro y me siento en uno de los bancos que estaba debajo de un árbol.

¿Qué estará haciendo Yixing? ¿Tendrá demasiado trabajo? Últimamente está frío y serio conmigo. Ni me da un beso en los labios. ¿Será que ya no le parezco bonita? Pero si las palabras que me dijo en el baño fueron muy conmovedoras. ¿Lo dijo por pena?

Salgo de mis pensamientos cuando siento algo chocar con mi pierna izquierda. Miro y veo una pelota de fútbol.

— ¡Hana! ¡¿Me puedes pasar eso?! — Veo a uno de los amigos de mi hermano a la distancia. Una sonrisa se forma en mis labios al pensar como mi hermano y yo jugábamos fútbol cuando éramos pequeños. No lo llegamos a jugar mucho pero lo suficiente para saber algunos trucos.

Me coloco de pie y le doy una patada a la pelota haciendo que llegue a los amigos de mi hermano quienes estaban sorprendidos.

— ¡Se dice gracias idiotas! — Les grito con mis puños cerrados.

— ¡G-gracias Hana! — Suelto una pequeña risa y cojo asiento de nuevo en la banca.

— Así que tu nombre es Hana. — Volteo a la dirección de donde proviene la voz y la sangre se congeló en mi cuerpo.

— Youngjo.

Shit.

Se me había olvidado que tenía que hablar con él. ¡¿Por qué soy tan olvidadiza?! No dejo la cabeza por ahí por que Dios fue bueno en pegarmela.

— H-hola. — Él toma asiento al lado mío. — Hola. — Me da una linda sonrisa. ¿Por qué es tan tierno? No se merecía que yo no le hubiese dicho mi verdadero nombre.

— ¿Cómo haz estado después de lo que pasó ayer?

Desconecto con su mirada y empiezo a mirar mis dedos. Tomo un pequeño suspiro y lo miro de nuevo. — He estado bien. ¿Y tú?

— Bien.

Después de eso todo se volvió en un silencio incómodo para mi. Debo decirle lo que sucede en toda esta situación.

— Youngjo. Debo de decirte algo.

— Dime. — Tomo un pequeño suspiro y conecto con su mirada. — Lo siento por haberte mentido sobre mi nombre. No podía hablar de nada. — Solté un suspiro cuando no escuché ninguna palabra de él.

— Conocí a Yixing en un viaje que mi escuela habia realizado. Nos seguimos viendo a escondidas y hasta fuimos de viaje juntos sin que nadie lo supiera. Ahí fue donde te conocí. Yixing no quería que nadie de los que estaban presente buscara quien soy, por eso tuve que mentir sobre mi nombre en la cena. Me caiste demasiado bien, hasta pensé en un momento en decirte mi nombre, pero no podía arriesgar nada para Yixing. De verdad, lo siento demasiado.

Miro apenada a Youngjo y después bajo la mirada. Escucho que suelta una pequeña risa y alzo mi mirada confundida. ¿De qué se rie?

— Eres de tan buen corazón Hana. No estoy molesto, claro me sorprendió que mintieras sobre tu nombre pero no estoy molesto. No le des tanta cabeza a eso, entiendo por qué lo hiciste y tienes todo el derecho por mentir sobre tu nombre, son tus decisiones no mías.

Técnicamente Yixing fue el que mintió sobre mi nombre pero no vayamos a esa parte.

Suelto una pequeña sonrisa y miro todo el patio. Siento un pequeño peso salirse de encima al contarle esto.

— Y te prometo que no le contaré a nadie sobre tu relación con Yixing. — Él alza su dedo meñique por lo que me hace reír. Conecto mi meñique con el de él y le doy una sonrisa.

— ¿Lo prometes?

— Lo prometo. 

•••

Estoy acostada en el sofá que está en la oficina de Yixing mirando mis redes sociales mientras él está trabajando con unos documentos.

Cuando llegué a su apartamento, él me recibió con un beso en la frente. Lo que me dejó un poco triste, quería un beso en mis labios. ¿Será que no le gustan mis besos? No es mi culpa, mi primer beso fue hace unos meses atrás y nunca he estado en una relación.

Necesito hablar con él.

Apago mi celular y me incorporo para mirar a Yixing por unos segundos. Me levanto y camino hasta llegar al frente de su escritorio y cruzar mis brazos. Su mirada pasa del documento que tenía en su mano a mí y por unos segundos se me olvida por qué estoy alfrente de su escritorio.

Concentrate Hana, deja tus sentimientos a un lado.

— ¿Necesitas algo? — Trato de poner mi semblante más serio. — Necesito hablar contigo. — Hice una pequeña celebración mental al lograr usar mi tono más frío.

Él se levanta de su silla y enseguida todos mis sentidos se derriten. ¿Por qué se tiene que levantar? Quiero mantener mi semblante frío y quiero mantener el control en esto.

Empieza a caminar, bordeando el escritorio hasta que está alfrente mío. Su gran figura literalmente tapa toda la mía. Me aclaro la garganta y trato de aguantar los nervios que tengo al tenerlo tan cerca, trato de mirar a cualquier parte que no sea sus ojos tan profundos.

— ¿De qué quieres hablar?

¿Ahora cómo le digo mi incomodidad? Debí prepararme antes de levantarme de ese sofá. Piensa Hana, piensa que le dirás....

Espera.

Ya lo sé.

Conecto con sus ojos y trato de ignorar mi corazón latiendo fuertemente.

— Bésame.

Al parecer eso le sorprendió por que sus ojos se abrieron un poco. — ¿Qué?

— Quiero que me beses.

Mi vergüenza se está arrepintiendo en mil idiomas de haber estado en mi desde que nací.

Su mandíbula se tensa levemente y da un paso hacia mi.

Oh.

Me va a besar de verdad.

No me esperaba eso.

Coloca su mano en mi mejilla y mi corazón da un vuelco. Todo en mi cerebro se detiene en ese momento mientras que las cosquillas en mi estómago son cada vez más fuertes.

Cierro los ojos cuando siento su respiración chocando con la mia y espero el beso.

Pero lo que pasó después me dejó atónita.

Abro los ojos y lo veo alejarse un paso de mi.

Me dio un beso en la frente.

Mis sospechas se confirmaron. No me quiere besar. 

Me quedo mirándolo con la boca abierta sorprendida mientras que él trata de mirar a todos lados menos mis ojos.

— Yixing..... ¿Por qué no me quieres besar?

— No es nada Hana.

Me río de mala gana y lo cruzo mis brazos alfrente de mi pecho. — ¿No es por nada? Yixing, hace días no me quieres besar, si me tocas es como si yo me fuera a romper de momento. Y no entiendo por que....

Algo en mi cerebro se prendió cuando entendí lo de ayer. Un picor aparece en mis ojos, sé lo que es, mis lágrimas están apunto de salir.

— ¿Dijiste todo eso en el baño ayer pero no lo sentías verdad?

— ¿Qué? No Hana, todo lo que dije ayer lo sentía. No pienses cosas que no son reales.

— ¡¿Y por qué no me besas?! ¡¿Por qué te detienes?!

— Hana....

— ¡¿Por qué no me abrazas?! ¡¿Por qué no me besas?! ¡¿Por qué no me tocas?!

Parezco una necesitada pero a estas alturas no me importa. Quiero respuestas. Él se voltea dándome la espalda y mi enojo empieza a subir más.

— Hana por favor no quiero hablar de esto...

— Yixing, me tendrás que dar contestaciones por que no voy a cambiar de tema. ¿Qué está sucediendo?

— Hana no voy hablar de es...

— ¡Yixing! ¡No me des excusas y contesta mis....!

De repente se voltea de golpe haciendo que yo de un paso hacia atrás.

— ¡Está bien! ¡¿Quieres saber por qué?! ¡Bien, te diré Hana!

Me quedo mirándolo y doy otro paso atrás cuando él da un paso hacia alfrente.

— ¡¿Te das cuenta en lo que estamos metidos?! ¡Hana soy siete años mayor que tú. Eres menor de edad! ¡¿Sabes en lo que estamos metidos?! ¡Todo lo que tengo se puede ir a la borda en un chasquido. Tú pierdes tu oportunidad de entrar a la Universidad!

Ya a este paso yo había dado tres pasos más y él también. Decido no abrir mi boca y esperar a que él termine.

— ¡Al principio no me preocupaba mucho, pero cuando por poco nos descubren una tarde cuando yo te iba a buscar, todos mis sentidos se alarmaron! ¡Y ahora cada vez que te beso o cada vez que coloco un dedo en tu cuerpo, siento como si todo va a salir a la luz! — Caminó dos pasos hacia el frente mientras que yo iba a dar tres pasos hacia atrás pero da la mala suerte que mi espalda chocó con la pared. Coloca sus manos a los lados de mi cabeza bruscamente haciendo que yo de un pequeño salto.

— ¡Siento como si fuera un error! — Al escuchar esas palabras, todo mi cuerpo se detuvo. Un sentimiento terrible se instala dentro de mí mientras que observo sus enfadados ojos.

Mi vista se hace nublada cuando lo veo respirar rápido. Mis lágrimas están apunto de salir pero no me importa. Mi corazón está muy débil para jugar al papel de fuerte. Trato de no soltar un sollozo cuando conecto de nuevo con sus ojos.

— ¿Piensas que besarme, o colocarme un dedo, es un error? —  Dije en un susurro. Noté que sus facciones se suavizaron cuando cayó en tiempo con lo que dijo. Una pequeña lágrima cayó por mi mejilla cuando desconecté con su vista. ¿En realidad él siente todo eso? ¿Y por qué lo guardó todo este tiempo?

— No.... Hana no quería decir eso....

Lo empujo para que se aleje de mí y lo miro molesta. Aunque mis lágrimas estén bajando por mis mejillas no puedo evitar sentir enfado mezclado con tristeza.

— ¡Pero lo dijiste Yixing! ¡Piensas que besarme es un error! ¡¿Sabes cuantas veces me pregunté que pasaba?! ¡¿Si era por lo que me sucedió ayer?! ¡Pero después pensé, y llevabas varios días así con tu actitud fría y distante. Lo dejé pasar pensando que era el trabajo, pero mis sospechas se hicieron más grandes! ¡Te dije que me besaras hace unos minutos para comprobar mis sospecha y adivina qué Yixing, adivina!

Tragué saliva cuando lo miré en silencio por unos segundos. — No me besaste, por que pensaste que era un error..... ¿Crees que no estoy pensando esa situación de que todo salga a la luz? Yixing, ese pensamiento lo tengo día a día, ya es parte de mi rutina daría. Yo también se las consecuencias en las que entré, el caos que puede pasar. ¿Pero sabes qué? No me importa, por que disfruto cada momento contigo.

Él se voltea y pasa una mano por su cabello. Mis lágrimas son un desastre, no me quiero imaginar mi rostro. Mi corazón está latiendo a toda velocidad esperando por su respuesta.

Cuando noto que no hace nada, pienso en qué decirle.

— Yixing.

— ¿Mm?

— Bésame. — Enseguida que solté esa palabra, él suspira veo sus hombros caerse. — Hana....

— Si no querías decir esas palabras, bésame. Pero si todo lo que dices es verdad, no hagas nada y sólo dime que me vaya.

Me duele decir esto pero no puedo dejar ninguna duda en mi cabeza. Yixing se voltea y me da una mirada pero no puedo descifrar su emoción ahora. Su rostro está neutral.

— ¿Yixing?

Da tres zancadas sujetando mis mejillas y empujando mi cuerpo hasta que choco con la pared lo que me hace soltar un pequeño chillido. Su rostro está tan cerca mío que siento su respiración mezclarse con la mía. Él mira mis labios por unos segundos y luego mira mis ojos. Todo pasó tan rápido que apenas proceso sus acciones.

Por otra parte tengo todo mi sistema descontrolado. Mi pecho duele de tan fuerte que son mis latidos.

Yixing se separa de mi, por lo que me hace mirarlo un poco confundida.

— ¿Quieres que te bese? — Siento mis mejillas arder y miro mis dedos que están jugando con el borde de mi falda escolar. Asiento levemente con la cabeza sin atreverme a conectar con sus profundos ojos.

— Contestame Hana. Y mira mis ojos.

Trago saliva.

— Sí. — Digo mientras conecto con sus ojos. Yixing se acerca a mi rápidamente y sujeta mis mejillas bruscamente mientras acerca sus labios apresuradamente. Yo cierro mis ojos esperando sus labios.

Pero nunca llegaron

Por que un sonido de un móvil frizó a ambos.

Abro mis ojos y miro el rostro de Yixing. Él suelta un suspiro mientras sus dedos acarician mis mejillas y no pude evitar pasar mi atención a su mandíbula tensarse.

Se aleja de mi para ver quien está llamando. Siento un poco de enojo hacia esa persona. Tantos minutos que tiene el día y decide llamar ahora. Llamenme dramática o ignorante pero quería mi beso.

— Me envías los documentos... Está bien. Nos vemos. — Salgo de mis pensamientos cuando veo a Yixing soltar su móvil en el escritorio.

Camina hacia mi hasta que queda a unos pasos.

Nos quedamos mirando por varios segundos sin decirnos una palabra. El silencio empezó a convertirse en un silencio incómodo y decidí romperlo.

— Yixing...

No pude terminar mis palabras por que me acorrala contra la pared y estampa sus labios contra los míos en un beso furioso.

Suelto un pequeño gemido por la rapidez en la que me besa, apenas puedo seguir su ritmo. Él aire en mis pulmones se está desapareciendo y mi corazón está apunto de salirse de su lugar. Coloco mis manos en su sedoso cabello y lo acaricio suavemente recibiendo un pequeño gruñido por parte de Yixing.

Sus manos dejan mis mejillas para pasar por mi espalda hasta llegar hasta mis caderas que las aprieta levemente. Sus labios son tan suaves y tan adictivos. Por una parte me siento felíz en hacer que me bese.

Siento sus manos pasar por mi trasero y lo aprieta levemente sacandome un jadeo de sorpresa, cosa que usó para explorar mi boca con su lengua. Aprieto levemente su cabello y suelta otro pequeño gruñido.

Sus manos pasan a la parte de atrás de mis muslos y me alza haciendo que mis piernas se enredaran en su pelvis.

Arqueo mi espalda al sentir desprevenidamente la suave superficie del sofá. Se acomoda bien entre mis piernas y deja mi boca para empezar a dar pequeños besos en mi mejilla y en mi mandíbula para dejar profundos besos en mi cuello haciendo que yo suelte un pequeño gemido.

Su mano acaricia levemente mi muslo mientras que la otra se desaparece por dentro de mi polo, acariciando mi estómago haciendome cosquillas. Mi mente empieza a nublarse debido al placer que me dan sus besos y acaricias.

Aprieto levemente su cabello cuando sus labios en el punto débil de mi cuello. Su mano empieza a desabrochar los primeros botones de mi polo hasta llegar al centro de mi pecho, dejando mi clavícula al descubierto.

Ya para estas alturas mi cerebro no funcionaba y mi sistema nervioso era un desastre.

Sus labios bajaron a mi clavícula dejando suaves y pequeños besos, lo que me hacia reír.

— Yixing.... Me hace cosquillas... — Siento una sonrisa en mi piel, lo que me hace un poco confundida. Me arrepentí de mis palabras cuando sus suaves y tiernos besos cambian a unos besos profundos y húmedos por toda mi clavícula.

Suelto un pequeño jadeo al sentir sus dedos jugar con el borde de mi falda escolar. Paso mis manos de su cabello a su gran espalda, sintiendo sus músculos por la tela de su ropa y luego subir y acariciar su nuca.

Cuando sus dedos iban a bajar mi falda pero un sonido hizo que yo diera un pequeño salto.

Era mi móvil sonando.

Suelto un gruñido mentalmente de molestia. Tantas horas que tiene el día. No. Tienen que llamar ahora. En ese preciso momento. Pero el pensamiento de que puede ser mi hermano llamando cambia toda mi molestia.

Trato de separar a Yixing pero es casi imposible. — E-espera Y-Yixing. — Él sigue besándome mientras que yo trato de separarlo de mí. — Yixing espera un.... — Selló mis labios con los suyos dándome un gran beso. — Mmm... Yixing, me están llamando.— Murmuro en sus labios, posando mis manos en su pecho tratando de separarlo de mí. Pero es casi imposible. ¿De qué está hecho este hombre? ¿De concreto?

— No. No vas a contestar. — El dice en un tono grueso, lo que me hizo tragar saliva al ver el efecto que tuvo en mi. El móvil dejó de sonar y yo solté un pequeño suspiro.

— Pero Yixing... — Él detiene mis palabras con sus labios, dándome un beso profundo, robándome un pequeño gemido.

Mi móvil empieza a sonar otra vez y yo trato de separarme de Yixing. — Espera.... Y-Yixing, necesito contestar. — Sus labios pasaron a mi cuello dejando más besos de los que él ya había dejado.

— Yixing.

— Que esperen, estás ocupada.

Gruño mentalmente al saber que Yixing no se va a quitar encima de mi cuerpo. Hasta que se me ocurrió algo.

— Yixing tu contestaste tu llamada, ahora permite que yo conteste la mía. — Sus labios se detienen y por varios segundos lo único que siento es su respiración.

Suelta un gruñido no complacido pero se levanta. Yo me incorporo y agarro mi móvil.

Llamada entrante:

"TaTa❤"

Contesto la llamada mientras vuelvo a mi posición de hace unos segundo en el sofá. — ¿Hola?

— ¿Almendras, por qué no contestabas el móvil?

Miro por unos segundos a Yixing quien estaba sentado en el otro sofá con sus ojos cerrados. — Umm.... Estaba haciendo una tarea. ¿Qué sucede?

— Mañana mi novia vendrá a la casa, quiere conocerte. Es para avisarte que hagas comida.

— ¿Y quien tu crees que soy? ¿Cenicienta? Haz comida tú.

— Por favor Hana. Sabes que no sé cocinar, necesito que me ayudes mañana. — Lo pienso por varios segundos y suelto un suspiro.

— Está bien Taehyung, te haré comida. Pero tú tienes que traer un postre. — Escucho una risa por parte de él que hace que una sonrisa se plante en mis labios.

— ¡Gracias Almendras! ¡Recuerdame cuando llegue a casa llenarte de besos!

— Y recuerdame cuando llegues a casa, llenarte de golpes idiota.

— Siempre eres mala conmigo.... Bueno nos vemos mañana conejito. Llegaremos al mediodía.  ¡No duermas tarde! ¡Hasta mañana!

— Nos vemos Tata.

La llamada se cae y yo suelto una sonrisa. Mi hermano es un caso perdido.

Escucho un pequeño carraspeo y miro a Yixing quien ya tenía sus ojos en mí. — ¿Ese era tu hermano?

— Sí, quiere presentarme a su novia mañana y me está pidiendo que haga la comida ya que él no sabe cocinar. — Me incorporo hasta quedar sentada en el sofá, justamente en el frente de Yixing.

— ¿Tiene novia?

— Es complicado. Se gustan pero no entiendo cómo ellos no están juntos. Me frustran.

Nos quedamos en un silencio mirándonos fijamente. Suelto una pequeña risa al recordar todo lo que pasó en estas últimas horas. Mientras que él se le forma una sonrisa.

Escondo mi cabeza llena de vergüenza y él se empieza a reír.

Qué día.

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¡Hola!

Regresé bro. Con otro capítulo.

¡Yey!

Wattpad me envió la parte del especial a borradores. Me enfadan. 😤✋🏻

Anygays.

Gracias por los mensajes que recibí en lo del temblor. Me hicieron sentir muy felíz. Tuve que borrar el aviso por que los temblores habían bajado. Pero muchas gracias. :'( ♡

Espero que les haya gustado el capítulo y dejen comentarios o voten. :3

¡Hasta la próxima! :D

Yo al enterarme que mi crush sabe que me gusta:

Mi vida es un desmadre.

¡Adiós! :D

•Perdón por errores.•