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➯𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐨𝐧𝐜𝐞

➤𝐕𝐢𝐬𝐢𝐭𝐚
        ᴋɪᴍ ᴛᴀᴇʜʏᴜɴɢ

El domingo estoy agotado.

Quiero olvidarme de seung, pero todavía me duelen los músculos de mi ano y nalgas,sus gloriosas embestidas y eso me recuerda continuamente lo ocurrido el día anterior. Me parece horrible. Aún no he asumido que una mujer jugara con mi sexo ante él.

A las once y cuarto me levanto de la cama y lo primero que hago es hablar con mi padre. Lo hago todos los domingos por la mañana. Además, hoy es la final de la Eurocopa de fútbol y me imagino que estará como loco. Si a alguien le gusta el deporte, ése es mi padre.

teléfono da dos pitidos y oigo:

-Hola, mi niño.

-Hola, papá.

Tras hablar durante diez minutos sobre  yeontan y las premiaciones de mis cantantes, mi padre y yo compartimos los mismos gustos por eso se me es fácil compartir y hablar con el libremente, mi padre cambia el tema de conversación.

-¿Estás bien, mi niño? Te noto apagado.

-Estoy bien, papá. Es sólo que estoy cansado. Tiene razón. Mis vacaciones comienzan el 15 de julio y el hecho de recordarlo me hace alegrarme.

-niño-intenta alegrarme-, te quedan dos semanas para tener las vacaciones, ¿verdad?

-Exacto, papá. Pero es que las veo tan cerca que no puedo evitar impacientarme.

Lo oigo sonreír. Eso me hace feliz.

Papá lo pasó mal cuando mamá murió hace 3 años y sentir que está bien me reconforta.

-¿Vas a venir unos días a casa? Ya sabes que aquí en el pueblo hace calor, pero puse la piscina para que vosotros lo disfruten cuando vengan.

-Por supuesto, papá. Eso no lo dudes.

-Ah... el otro día el señor Jam, Jeon y yo fuimos a hacer la inscripción para lo de las carreras. Los vas a machacar.

Al pensar en ello, me animo. A mi padre y a sus dos amigos del alma les encanta que todos los años vayamos a ese evento y ni quiero, ni puedo negárselo. Es algo que hacemos desde que era un niño. Se pasan todo el año hablando de ello y, en cuanto me ven llegar a Busan en verano, la adrenalina les sube por las venas.

-Perfecto, papá. Allí estaremos.

-Por cierto, ayer hablé con tu hermana.

-¡¡Y!!.

-No sé, hijo. La noté muy desanimada. ¿Tú sabes qué le pasa?

Con fingido disimulo respondo:

-Que yo sepa nada, papá. Ya sabes cómo es de histérica para todo e intentando desviar el tema de conversación digo-: ¿Adónde vas a ver las premiaciones?

-En casa. ¿Y tú?

-He quedado con lia y unos amigos en un bar. -Sonrio al pensarlo.

-¿Algún amigo especial, mi niño?

-No, papá, Ninguno.

-Ojú, hijo, me alegra saberlo. Porque otro novio como ese que tuviste con un pendiente en la nariz y otro en la ceja me repugnaría.

-Papáaaaaaaaaaaa... -digo, mientras me río a carcajadas.

Recordar cómo miraba a taeyan, un ex, cuando lo conoció todavía me resulta divertido.

Mi padre es muy tradicional para muchas cosas y más para los novios. Consigo cambiar de tema y finalmente regresamos a las premiaciones.

-Pues yo, hija, he organizado una barbacoa en el patio trasero. Como imaginarás, vendrán los amigos de siempre y nos hincharemos a gritar. Por cierto, hace un par de días el señor Jeon me dijo que hyunjin  llegará dentro de poco a Seúl.¡Ah!, y creo que hoy está por Jeonju y te visitará.

¡Ya empezamos con hyunjin !

Mi padre y el señor Jeon llevan toda la vida intentando que hyunjin  y yo seamos novios formales.

hyunjin me desvirgó cuando yo tenía dieciocho años. Fue mi primera relación con un hombre y, siempre que lo recuerdo, Me hace sonreír. Qué nervioso  estaba y qué atento fue él. Es dulce y pausado en la cama y, aunque con él lo paso bien, he estado con otros hombres que me han hecho vibrar más.

Tras hablar un rato sobre hyunjin, su maravilloso trabajo de policia en Busan y lo excelente chico que es, cambio de tema y regreso a las premiaciones. Mi padre se emociona con ese tema y yo disfruto. Imaginar a mi padre y a los amigos de toda la vida cantando divertidos eso de «Gee-gee-gee-gee, baby, baby, baby>> me encanta.

Cinco minutos después, me despido de él y cuelgo el teléfono. Miro a yeontan, que está tumbado en el suelo, y lo subo al sofá.

Respira con dificultad y eso me encoge el corazón. Hace dos meses, el veterinario me dijo que su vida se estaba apagando y que, cada día que pasa, va a más. Está viejito y, a pesar de la medicación, poco más se puede hacer por él salvo mimarlo y quererlo mucho.

Suena mi móvil. Un mensaje.

¡hyunjin!

<<Estoy en Seúl. ¿Paso a buscarte y vemos el mundial?>>

Le mando un <<¡De acuerdo!»> y me tiro en el sillón.

Sobre las dos y media de la tarde decido prepararme un ramen instantáneo. No me apetece cocinar. No estoy de humor.

Después de comer, me tumbo en el sillón y en seguida viene a visitarme Morfeo, hasta que el sonido de mi móvil me despierta. Mi hermana.

-Hola, enano,¿qué haces?

Me desperezo y contesto:

-Durmiendo, hasta que tú me has despertado.

-¿Saliste ayer de juerga?

Al pensar en el día anterior, asiento.

-Si. Se puede decir que sí.

-¿Con quién?

-Con alguien que tú no conoces.

-¿Algo serio?-curiosea.

Al escuchar aquello sonrio.

-No. Nada importante-respondo, moviendo la cabeza.

Durante media hora me tiene al teléfono.

Qué pesadita es eunji. No pasan dos días sin que hablemos. Yo soy más despegado. Menos mal que ella siempre hace por verme, porque si fuera por mí, ya la habría perdido como hermana. Como siempre, su conversación se centra en su desastrosa vida marital.

Cuando por fin cuelgo yeontan sigue en el sillón. No se ha movido. Me acerco a él y veo que sus ojos me miran. Le beso la lágrimas, le digo cosas cariñosas y después me levanto a por una Coca-Cola. La necesito.

Cuando regreso al salón cojo el portátil, lo enciendo y me conecto a Kakao Talk. Enseguida coincido con alguno de mis amigos virtuales y nos echamos unas risas.

El correo me parpadea y decido mirarlo. Quince mensajes. Varios son de amigas y amigos proponiéndome viajes para el verano finalmente; veo una dirección que me deja atónita. Es seung.

¿Cómo ha encontrado mi correo privado?

De: lee seung

Fecha: 1 de julio de 2012 04:23

Para: Kim taehyung

Asunto: Confirmación de proposición

Querido secretario Kim:

Siento mucho si le desagradó mi compañía hace unas horas y todo lo que ello implica. Pero debemos ser profesionales, así que recuerde, necesito una respuesta en referencia a la proposición que le hice.

Atentamente, lee seung.

Boquiabierto, vuelvo a leer el mensaje.

¡Tendrá descaro este chico...!Estoy por dar al «eliminar>> y borrar definitivamente el mensaje. Pero mi impulsividad me hace responder:

De: Kim taehyung

Fecha: 1 de julio de 2012 16:30

Para: lee seung

Asunto: Re: Confirmación de proposición

Querido señor lee:

Como usted dice, seamos profesionales. Mi respuesta a su proposición es NO.

Atentamente, Kim taehyung.

Envío el mensaje y un extraño regocijo se apodera de mí.

¡Le di su merecido!

Pero dos segundos después, ese regocijo desaparece para dar paso a un dolor de estómago cuando veo que su respuesta llega de inmediato.

De: lee seung

Fecha: 1 de julio de 2012 16:31

Para: Kim taehyung

Asunto: Sea profesional y piense en ello.

Querido secretario Kim:

En ocasiones, las precipitaciones no son buenas. Piénselo. Mi oferta seguirá en pie hasta el martes. Espero que disfrute su domingo.

Atentamente, lee seung.

Miro la pantalla, bloqueada.

¿Por qué no puede aceptar mi respuesta?

Estoy tentada de escribirle un e-mail poniéndolo a caer de un burro, pero me niego. Dar más explicaciones a alguien para quien soy sólo sexo, no merece la pena.

Enfadado, cierro el portátil y decido poner una lavadora. Al sacar la ropa sucia del cesto me encuentro con las bragas rotas que lee seung me arrancó. Cierro los ojos y suspiro. Recordar lo que hicimos en mi habitación me pone cardíaco.

Abro los ojos, me levanto y camino hacia mi dormitorio. Rodeo la cama y abro el cajón. Ante mí se encuentran los regalos que él me hizo: los vibradores.

Los miro durante unos segundos y cierro el cajón con fuerza. Regreso hasta la lavadora. La abro y comienzo a meter la ropa. Echo el detergente, el suavizante y la programo.

La lavadora comienza a funcionar y diez minutos después sigo mirando cómo el tambor de la ropa da vueltas tan rápidamente como mi cabeza. Mi respiración se acelera y grito de frustración:

-Te odio, lee seung.

Mis pies se dan la vuelta y me dirijo de nuevo hasta mi habitación. Vuelvo a abrir el cajón y me quedo mirando el vibrador con mando a distancia que él usó conmigo.

Mi entrepierna me pide a gritos jugar.

¡Me niego!

Hasta yo misma utilizo la palabra «<jugar>>.

Finalmente e incapaz de quitarme a seung de la cabeza y menos de mi entrepierna, me deshago de los pantalones, las bragas y me siento en la cama con el vibrador en la mano.

Toco la ruleta, lo pongo al 1 y la vibración comienza.

Después al 2, al 3, al 4 y el máximo es el 5.

Muevo el vibrador en mi mano mientras mi ano y, en especial, mi pene gritan porque sea allí donde lo roce. Me tumbo en la cama. Apago el vibrador y lo paseo por mi glande.

¡seung!

El pequeño vibrador se resbala por mis labios. Estoy húmedo y abierto. Lista para recibirlo. Lo pongo al 1. La vibración comienza y cierro los ojos. Subo la potencia al 2. Con mis dedos me abro los labios de mi ano y dejo que me masajee la zona que está junto a los testículos

                                      .......

A las siete y media, hyunjin llega a mi casa.

Como siempre está feliz y sonriente. Me da un piquito en los labios y yo me dejo. Es un amor. A las ocho llegamos al bar donde he quedado con mis amigos para ver la final del partido de Corea vs Iran. Tenemos que ganar.

La juerga nos rodea y comienzo a cantar y a divertirme.

Aparece jaekyun, un amigo tatuador. Es mi confidente. Tenemos una amistad muy especial y nos lo contamos todo. Cuando ve a hyunjin se ríe. Sabe la relación que tengo con él y le hace gracia. No entiende cómo éste sigue detrás de mí tras todos los desplantes que le hago.

A las nueve menos cuarto, el partido da comienzo. Estamos nerviosos, ya que el equipo de corea no es uno de los mejores y que haya clasificado a la final de la copo mundial, rusia 2018, es un milagro.

¡¡¡No hay dos sin tres!!!

En el minuto 14, Jung Seung-hyun mete un golazo que nos hace saltar de emoción. Hyunjin me abraza y yo lo abrazo. Estamos felices. El ataque de Iran se endurece pero Jung Seung-hyun, en el minuto 41, mete otro golazo que nos hace volver a gritar como descosidos. Hyunjin me besa en el cuello y yo, feliz, se lo permito. Llega el descanso y hyunjin ya me tiene sujeta por la cintura.

El segundo tiempo comienza y yo grito que saquen a Park Joo-ho.

¡Que lo saquen!

Y cuando veo que calienta y que el entrenador An Ik-soo le dice que salga, grito, aplaudo y salto encantado. Hyunjin aprovecha la situación y me sienta entre sus piernas. Yo me dejo. Pero mi gozo se completa cuando en el minuto 84, Hong Chul, ¡mi Chul, mete el tercer gol. ¡Bien! ¡Bien...!

Hyunjin, al verme tan entregada a la causa, me aúpa entre sus brazos y de la felicidad, me planta un besazo de campeonato. Después me suelta y, cuando, en el minuto 55, Mata mete un golazo tras un pedazo de pase de mi Chul, creo morir, pero ¡de gusto! Y esta vez soy yo el que se lanza a sus brazos y lo besa con brusquedad.

Cuando el partido termina, mis amigos y yo lo celebramos a lo grande.

Hyunjin no se separa y, en un momento de calentón, nos metemos en el baño de caballeros. Durante unos minutos dejo que me bese y que me toque.

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