➹ Cap. 34
Jenna suspiró preparándose un café mientras pensaba, había hablado de muchas cosas con Elena desde que llegó.
─ ¿Y cuando planeas irte? ─ preguntó Elena mirando a su tía, personalmente le daba gusto de verla aunque sabía que no iba a durar mucho tiempo en Nueva Orleans.
─ En unos días pero antes quisiera saber que aquí estarás bien ─ Elena abrió sus labios para replicar a su tía, entonces Jenna agregó ─ ya se que Klaus te está cuidando de los peligros de éste lugar, pero no solamente se trata de eso, también de tener compañía, mirá la hora que es y ningún Mikaelson está aquí, estarías sola si no estuviera yo ─ le dijo.
─ Cada uno de ellos tiene problemas que resolver, no van a estar todo el tiempo aquí solo por mí ─ aclaró Elena.
─ Por lo menos no deberían dejarte por tanto tiempo sola, sobre todo Klaus quién fue el que te dejó embarazada y te tiene aquí encerrada ─ murmuró Jenna.
Elena suspiró, aunque tampoco le gustaba estar encerrada, sabía que era lo mejor para ella en su situación actual y también era consciente de que si Klaus no estaba la mayor parte del tiempo ahí, era porque tenía un montón de problemas encima los cuáles tenía que resolver.
─ ¿Hablabas de mí? ─ preguntó Klaus de brazos cruzados en la puerta mirando con su ceño fruncido a Jenna al haberla oído hablando mal de él a Elena.
─ Si ─ asintió Jenna.
Elijah aclaró su garganta entrando en la cocina mientras le daba una mirada de reojo a su hermano esperando a que él no hiciera algo inoportuno típico de Klaus.
─ Iré a hablar un momento con Klaus ─ dijo Elena a su tía Jenna.
La doble quería saber que tanto había hecho Klaus con Elijah en todo el tiempo que estuvieron afuera, aunque no estaba involucrada en todo eso, Elena quería estar al tanto de quién había muerto está vez.
─ Bien ─ Jenna suspiró antes de tomar un trago de café.
Elena salió de la cocina al igual que Klaus quién le dio una mala mirada a Jenna.
─ Disculpa a mí hermano, sus modales no son los mejores ─ dijo Elijah acomodándose su traje mientras miraba a Jenna.
─ ¡Es un patán! ─ soltó Jenna sin poder evitarlo, ella seguía sin entender cómo su sobrina se pudo enredar con alguien como Klaus ─ no sé cómo Elena se metió con él.
─ No eres la única en preguntarse eso ─ comentó Elijah mirándola.
Él también tenía la misma pregunta en mente desde que supo que Elena estaba embarazada de Klaus, el hecho de que ella se hubiera metido con la persona que la sacrificó en un ritual, era bastante raro, Elijah incluso llegó a pensar por un momento que Klaus había obligado con la hipnosis a Elena pero afortunadamente ésto no era así.
Jenna miró a Elijah soltando una pequeña risa al escucharlo, él le caía mucho mejor que Klaus aunque claramente no confiaba del todo en él al saber que era un vampiro.
─ ¿Siempre es así? ─ preguntó Jenna.
─ ¿Así cómo? ─ Elijah la miró un poco confundido al no entender su pregunta.
─ Temperamental y violento ─ aclaró Jenna.
A pesar de que Elena le dijo que no se preocupara, era inevitable para Jenna no hacerlo, claramente estaba preocupada al saber con qué persona estaba involucrada Elena, no quería que su sobrina sufriera por causa de una persona violencia como Klaus que para rematar era un inmortal.
─ Siempre fue muy temperamental y violento pero puedes estar tranquila, no le hará nada a Elena ─ dijo Elijah.
─ ¿Por qué estás tan seguro? ─ preguntó Jenna.
─ Porque la quiere ─ respondió él.
Aunque Klaus seguía siendo igual a como recordaba, Elijah había notado la diferencia de cuando su hermano estaba con Elena, esperaba que ella y el bebé pudieran ayudarlo a sobreponerse a lo que era de lo cuál Klaus siempre renegó
─ No sé si eso es bueno o malo ─ dijo Jenna frunciendo el ceño confundida.
─ Es bueno ─ contestó Elijah sonriendo un poco al escucharla.
Jenna lo miró en silencio antes de tomar otro trago del café que se preparó.
Una vez que Klaus entró su habitación con Elena, cerró la puerta detrás de él, gracias a que Freya había hecho un hechizo para evitar que se escuchará lo que dijeran dentro de la habitación, Klaus ahora podía hablar con tranquilidad con Elena sin el temor de que alguien más lo escuchará.
─ ¿Qué pasó? ─ preguntó Elena estando segura de que algo había sucedido.
─ Nada importante, solo maté a las brujas resucitadas de la cosecha, excepto a Davina ─ dijo Klaus.
─ ¿Qué, por qué? ─ Elena se sorprendió al escucharlo.
─ Porque nos darán problemas en el futuro, qué no se te olvide que gracias a ellas terminaste muerta como humana ─ dijo Klaus poniendo ropa en una maleta.
─ ¿Qué estás haciendo? ─ preguntó Elena confundida al ver a Klaus guardando ropa.
─ Me iré ─ respondió él.
─ ¿Qué? ─ Elena quedó en shock por un momento al escucharlo ─ ¿Bromeas?.
Klaus suspiró negando con su cabeza.
─ No, iré por Lucien, lo traeré aquí para hacer todo más rápido con respecto a lo de Inadu, no me voy a arriesgar a qué los malditos ancestros metan sus narices y nos perjudiquen en algo, en cuanto a Tristán y Aurora los mataré, los demás enemigos son inferiores ─ dijo Klaus.
Elena apretó sus labios, no quería que Klaus se fuera, inevitablemente se preocupó por él y por lo que pudiera suceder en su viaje en busca de Lucien.
─ Ir solo es peligroso ─ murmuró Elena.
Klaus la miró, entonces dejó de acomodar su ropa en la maleta, no sabía exactamente cuánto tiempo le iría a tomar encontrarlos pero no sería algo importante.
─ Estaré bien, soy el híbrido original, amor ─ dijo Klaus mirándola.
Elena asintió con su cabeza, tal parecía se quedaría sola aunque hubiera más personas en la mansión, no era lo mismo sin Klaus.
─ ¿Te irás hoy? ─ preguntó Elena.
─ Si, mientras más rápido, mejor ─ dijo Klaus deseando que todo terminará más rápido.
Al principio pensó en dejar que las cosas pasarán de igual manera y que Lucien llegará a Nueva Orleans pero ese día lo había pensado mejor y creyó que debía ir él personalmente a dónde estaba Lucien ya que no confiaba en los ancestros los cuales podían saber la verdad de todo.
Elena tocó su panza de embarazo mientras veía a Klaus terminar de empacar su maleta.
─ ¿Y qué le dirás a los demás? ─ preguntó Elena.
─ Qué estoy en un retiro espiritual ─ dijo él.
─ Estoy preguntando en serio ─ murmuró Elena suspirando al oír su respuesta.
─ Les diré que tengo unos problemas que resolver y volveré pronto, Kol y Freya ya saben la verdad ─ comentó Klaus.
Elena volvió a suspirar, le había hablado tan bien a su tía sobre Klaus diciéndole que no era tan mala persona como todos pensaban, y ahora él se iba de repente justo cuando Jenna estaba en la mansión, Elena estaba casi segura de que Jenna iba a creer que Klaus la abandonó dejándola a su suerte.
Una vez que tuvo su maleta lista en su mano, Klaus se acercó nuevamente a Elena.
Klaus esperaba regresar lo más rápido que pudiera, sólo debía traer a Lucien, y matar a Tristán y Aurora, sus híbridos se encargarían de acabar con los vampiros del linaje de Elijah.
─ Buena suerte ─ deseó Elena.
Klaus sonrió tocando el vientre de Elena, Hope nacería dentro de unos pocos meses.
─ Volveré pronto ─ prometió Klaus.
─ Te esperaré ─ aseguró Elena.
Él se acercó lo suficiente para besarla en sus labios acto que Elena correspondió para luego darle un abrazo como despedida.
¡CAPÍTULO 34!
Hola, aquí les dejo una nueva actualización de Moonlight, espero que les guste.
Klaus se va de Nueva Orleans a buscar a Lucien, Tristán y Aurora.
¿Qué les pareció?
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