➹ Cap. 32
Elena había aceptado dormir en la habitación de Klaus al estar en remodelación la suya.
En ese momento se encontraba en la cama mirando el techo de la habitación en silencio, aunque trató de dormir no pudo ya que tenía demasiadas cosas en su mente.
Aunque las cosas iban por buen rumbo en Nueva Orleans, Elena no podía evitar pensar en su familia, su tía Jenna no la había hablado y Jeremy menos, no insistió en hablar telefónicamente con ellos para darles tiempo pero ya habían pasado unos días desde que ella se fue de Mystic Falls.
─ ¿En qué tanto piensas? ─ preguntó Klaus una vez que entró en la habitación al ver que Elena tenía su mirada fija en el techo.
─ En Jenna y Jeremy ─ contestó Elena.
─ Ya te hablarán ─ murmuró Klaus acostándose a su lado.
Elena se puso de costado en la cama mirando a Klaus.
─ Se que es difícil para ellos ésto, tienen una mala imagen de ti y está familia, tal vez incluso sigan pensando que me hipnotizaste o algo por el estilo ─ dijo Elena.
Klaus suspiró, Elena tenía sus problemas familiares y él también, sobre todo ahora que debía hacer cosas a escondidas y sin hablarlo antes con Elijah ya que su hermano no sabía sobre el futuro, por suerte, tenía la ayuda de Freya de su lado y un poco de Kol.
Ese día había sido un poco agotador pero felizmente pudieron acabar con Celeste matándola sin que pudiera escapar para saltar a otro cuerpo, sin ella en el medio, la cosecha se realizaría como debía ser sin que nadie robe el poder de las brujas, ahora solo faltaba que Davina fuera sacrificada y finalmente volviera de nuevo a la vida como Klaus, Kol y Marcel tenían planeado que sucediera.
Kol ya había hablado de ésto con Davina, ella confió en él ya que meses atrás Marcel habló con ella sobre la relación que tenía con Kol en el futuro, al principio para Davina fue casi imposible de creerle pero cuando él le mostró unos recuerdos en su mente y vio muchas cosas, Davina supo que en el futuro estaría casada con Kol Mikaelson.
Por el momento ella todavía no tenía sentimientos románticos por él, por lo cuál, Kol estaba en plan de conquista, la había enamorado una vez, sabía que podía hacerlo de nuevo.
─ No estarán molestos por siempre ─ habló Klaus luego de unos minutos sacando de sus pensamientos a Elena.
─ Eso espero ─ murmuró Elena.
Klaus posó su mano en la mejilla de Elena mientras la miraba.
─ Tú habitación se quedará en remodelación para siempre ─ dijo Klaus.
Elena se rió entre dientes al escucharlo decir eso, se acercó a él acurrucándose a su lado.
─ ¿Pretendes mantenerme a la fuerza aquí contigo? ─ preguntó Elena con diversión.
─ No necesito usar la fuerza ─ aseguró Klaus bajando su mano a la cintura de Elena.
─ ¿Y cómo lo harás entonces? ─ Elena levantó sus cejas mirándolo fijamente.
─ Seduciendote ─ contestó Klaus riéndose junto al doble de Petrova.
─ Agradece que eres guapo ─ dijo Elena besándolo.
Klaus frunció el entrecejo por un momento al escucharla.
─ ¿Debo sentirme halagado o qué? ─ preguntó Klaus.
─ Si y no ─ respondió el doble con diversión.
Klaus blanqueó sus ojos antes de besarla.
─ Descansa ─ susurró él.
Elena asintió cerrando sus ojos al igual que Klaus. La mañana siguiente sería larga y bastante agotadora como normalmente lo era desde que llegaron a Nueva Orleans a pesar de saber los sucesos del futuro.
La mañana había comenzado bastante movediza para Davina quién se había mostrado en el Barrio Francés haciendo que la atención de las brujas fueran a ella, sobre todo de las hermanas Deveraux quienes pretendían completar el ritual de la cosecha para traer de nuevo a Monique Deveraux.
Davina estaba bastante asustada, aunque Marcel le aseguro que todo estaría bien, no podía evitar sentir miedo ya que tendría que morir para que la magia de la cosecha fluyera y no la tuviera solamente ella.
Llena de nervios por tener que morir en ese día, Davina caminaba de un lado al otro en su habitación en la azotea de la iglesia.
─ Tranquila ─ susurró Kol mirándola.
Él había estado desde la mañana con Davina al saber que ese día sería sacrificada por la anciana del aquelarre de las brujas.
─ Lo dices porque tú no serás sacrificado ─ dijo Davina.
Kol suspiró, la entendía y tenía compasión de ella, Davina era solo una adolescente de dieciséis años que sería sacrificada, con lentitud se acercó a ella lentamente.
─ Todo saldrá bien, lo prometo ─ aseguró Kol poniendo sus manos en sus hombros.
El original se había encargado con sus hermanos y Marcel de que las cosas salieran bien y Davina volviera a la vida nuevamente.
─ No quiero que las brujas del Barrio Francés se salgan con la suya ─ dijo Davina.
Davina las odiaba, no podía evitarlo, le habían mentido descaradamente, sobre todo su madre al entregarla como sacrificio.
Kol sabía bastante bien el por qué del odió de Davina hacía las brujas de Nueva Orleans y la entendía perfectamente bien.
─ Las mataré a todas si eso quieres ─ mencionó Kol seguro de sus palabras.
Kol sabía que no habría problemas con matarlas, dudaba que sus hermanos se enojaran con él por eso, después de todo, cuando las brujas supieran del embarazo de Elena intentarían matarla y Klaus tendría que acabar con ellas de igual manera tarde o temprano.
─ ¿Harías eso por mí? ─ preguntó Davina sorprendida.
─ Haría cualquier cosa por tí ─ dijo Kol mirándola detenidamente.
Para Kol era bastante difícil que su perfecta vida con su esposa hubiera cambiado completamente de un día para el otro y ahora tuviera que empezar todo de nuevo.
Davina tragó saliva al escuchar las palabras del que se suponía era su futuro esposo.
─ Cuando Agnes me sacrifique en el ritual quiero que ella muera después de mí ─ pidió Davina ─ promete que lo harás.
Agnes era de las brujas que más detestaba, gracias a ella, Davina había tenido que estar encerrada varios meses en la azotea de la iglesia por miedo de lo que le pudiera hacer.
─ Lo prometo ─ juró Kol tomando sus manos.
Davina suspiró aliviada, cuando estuvo a punto de hablar de nuevo, un ruido en la puerta llamó la atención de ambos.
─ Ya es tiempo ¿Estás lista? ─ Marcel entró en la habitación mirándola con diferentes emociones en su cara.
Por segunda vez, Marcel tendría que ver morir a Davina en el ritual de la cosecha pero está vez sería un poco diferente.
─ Si ─ respondió Davina al escucharlo.
Los tres salieron de la iglesia con rumbo al cementerio de Nueva Orleans donde las brujas esperaban su llegada.
Los Mikaelson decidieron ser espectadores en el ritual que se realizaría, Elena como era Elena también quiso ir y Klaus no pudo negarse, a diferencia de la primera vez, Elena esperaba tener el gozo de ver a Davina volver de nuevo a la vida en ese mismo día.
─ ¿Por qué razón ustedes están aquí? ─ preguntó Agnes sin poder evitarlo luego de unos minutos de ver a los Mikaelson.
─ Agnes… ─ Sophie la miró al escucharla.
Ella y su hermana habían invitado a los Mikaelson al estar un poco agradecida con Klaus ya que según lo que el híbrido les dijo, había convencido a Marcel de entregar a Davina.
Sophie aún no tenía idea del por qué del favor de Klaus pero eso no le importó por el momento, sino el ritual para traer de nuevo a su sobrina.
─ Porque nos encanta ver eventos trágicos como esté ─ respondió Klaus a Agnes.
Agnes miró en dirección de las hermanas Deveraux al saber que ellas invitaron a los originales ahí.
─ Niklaus… ─ Elijah miró a su hermano con seriedad, sabía que si Agnes seguía con esa actitud, Klaus le seguiría la pelea.
Klaus blanqueó sus ojos al escuchar a su hermano, no dijo nada ya que justamente Marcel y Kol aparecieron junto a Davina.
─ Davina ─ Agnes la miró fijamente al verla tan de cerca después de tantos meses buscándola.
Las hermanas Deveraux se miraron mutuamente al ver a Davina ahí, en ese momento las esperanzas de tener nuevamente a Monique con ellos regresó.
─ Terminemos con ésto ─ dijo Davina mirando a las brujas.
Las brujas asintieron, Agnes al ser la anciana del aquelarre dió un paso al frente, Davina por otra parte caminó acercándose a ella.
Por fin después de varios meses de esconderse de las brujas, Davina sería sacrificada ante la mirada de los Mikaelson, Elena y el resto de las brujas.
¡CAPÍTULO 32!
Aquí les dejo un nuevo capítulo de está historia, ojalá les guste.
Elena extraña a Jenna y Jeremy.
Davina completará el ritual de la cosecha.
¿Qué les pareció?
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